📅 18 de septiembre, 2024
📍Casa de Danielle, EE.UU.

Después de haber dicho que sí a confrontar al novio de Internet por sus palabras, Danielle se arrepintió. No recordaba qué palabras usar, pero luego de reflexionar como por cinco minutos y escuchar música a toda volumen, decidió que, mediante un en vivo en Instagram, respondería aquellos ataques.

Transcripción del en vivo de Danielle Bale: Hoooola, sí, he vuelto por un pequeño rato, ¿cómo están? ¿Cómo les está tratando la vida? Yo, la verdad sorprendida. He escuchado que hace poco alguien ha hablado sobre mí. No quiero decir nombres aún, pero se dice que cierto chico... perdón, hombre, que es súper conocido tuvo una conversación con Variety donde hicieron mención de mi nombre en el instante en el que le preguntaron sobre su vida amorosa. ¿Que quién es? Pues lo llaman «el novio de Internet» en este momento. Sí, creo que ya saben de quién estoy hablando, ¿cierto? ¿Ah, no? Bueno, yo sé los diré: El famosisímo y guapísimo Rafe Cameron, Drew Starkey. Oh, ya veo que sí lo conocen, porque estoy segura que esos corazones que dan a la pantalla no son todos para mí, y lo entiendo [risas]. Pues él ha hablado de mí. Dijo... No, esperen, esta canción me trae recuerdos y no son nada buenos [la pista de audio de fondo cambió de coffee de Miguel a Locked Out Of Heaven de Bruno Mars]. Listo. Sí, seguíamos. El actor afirmó que "le encantaría conocerme para afirmar que nuestra relación no va a funcionar porque su ex lo persigue". Y no sé cómo ustedes lo vean, pero ¿acaso me está retando o algo parecido? Espero que no. Aun así, déjenme decirles que claro que funcionaría, pero solo si él me conociera mejor y fuese menos idiota [bailó cuando el verso «you made me I've been locked out of heaven» se repitió y se escuchó con más fuerza]. En serio, no lo duden, la situación sería diferente conmigo. Pero es una lástima, porque es probable que mi ex lo hostigue a él [risas]. Mentira. No se lo tomen en serio. Nos vemos en un siguiente en vivo. Bye [agitó las manos y formó un corazón].

El vídeo en directo ha finalizado.
189k de espectadores.

No era bastante común que hiciera ese tipo de cosas. Bueno, sí que lo hacía. Su primera relación falsa había sido porque ella había hecho una apuesta con un tipo del que ya no recordaba su nombre pero que había aceptado por la mera fama que ella empezaba a generar. Luego, cuando inició su relación con el piloto español de GP1, Maverick, las cosas habían cambiado solo un poco. Danielle simplemente lo había invitado a seguirle el juego y él había aceptado porque, de alguna manera, la idea no le parecía tan horrible como lo habían pintado algunas otras celebridades; incluso ella se atrevería a decir que él había hecho que su conexión fuese más real y honesta en todos los aspectos. Pero esta vez sentía que era diferente.

Danielle no era un persona que atribuía todo a una razón que iba más allá de su entendimiento. Ella creía en lo que sus abuelos le habían hecho creer con mucho amor: Dios; y ella estaba segura con todas sus fuerzas que solo él sabía con quién uniría su vida en el camino que estaba formando. Mas había algo —a saber si bueno o malo— que le decía que su relación con el actor sería algo más que un simple intercambio de palabras. Pero ella se preguntaba ¿qué era ese algo? ¿Unos cuantos mensajes donde él le pediría que no lo respondiera aquellas cosas para no hacer un espacio a cosas que se saldrían de su alcance? ¿O quizás un encuentro para conocerse y darse cuenta que de ese pequeño error podría surgir una amistad?

La curiosidad la incitó a querer enviarle un mensaje a Elizabeth para preguntarle si ya había conseguido hablar con el agente de él, pero estaba segura que si lo hacía ella preguntaría si tan rápido se dejaría llevar, otra vez, por una situación y un hombre, hecho que no le gustó en absoluto porque esta vez no quería que fuera así. No quería volver a ser ella encendiera esa chispa y quien terminara recogiendo sus cosas con el corazón roto por ese pequeño grupo que se había encariñado con la pareja y entre miles de miradas que se sentían como golpes físicos. Ella ya sabía todo sobre el molesto juego de lágrimas. Sin embargo, una parte de sí misma que mantenía la emoción le pedía que le diera una oportunidad.

«No será tan malo.»

«Juega con el espectador y arrepiéntete después, cuando la situación haya terminado.»

«No lo hará, no te responderá. Cierra el asunto por aquí, por favor, y prepárate para tu siguiente álbum que estamos yendo bien con eso.»

La última oración que su cabeza había formulado hubiera sido la única que se hubiera propuesto a seguir si las notificaciones sobre su repuesta no se hubieran amontonado en su celular de emergencias junto al mensaje de Elizabeth diciéndole:

«Oh, adivina quién quiere hablar contigo, amiga».

Me emocioné con esto, perdón. Espero que compartan el sentimiento 💕