¿Quién es ella?
Primer día de clases luego de las vacaciones de verano. Lo único que quería era volver a la playa con mis amigos y disfrutar cada chica linda que pasara.
Luego de la ruptura con mi novia, después de encontrarla besándose con un tipo, solo quería dejar de pensar en eso y distraerme. Lo bueno es que ella está en otra clase.
Arreglé todas mis cosas, me despedí de mis padres y antes de salir de casa tomé una manzana de la cocina junto las llaves de mi auto.
Como de costumbre no demoré en llegar al instituto y mi mejor amigo me esperaba en la puerta con sus audífonos puestos. No nos vimos mucho ya que él se fue de viaje con su familia.
-¡Hey viejo!.- exclamó cuando llegué a su lado y le di medio abrazo para después hacer nuestro saludo.
-Pensé que me pedirías que fuera por ti.- lo miré detenidamente y sonrió.
-Es que... .- rascó su nuca. Sabía que ese gesto significaba algo... y ese algo era una chica.- digamos que...
-¿Cómo se llama?.- pregunté y su cara de puso toda roja.
-Se llama Alya y es... .- tomó su rostro .- hermosísima.- exclamó y solté una carcajada.- fui por ella y estudia aquí mismo.
Luego de que me diera a detalle toda su historia con esa chica que conoció en las vacaciones, ya que curiosamente ella fue a vacacionar al mismo lugar donde fue Nino. Nos quedamos afuera esperando a que sonara la campana.
-¿Y que hiciste?, ¿cómo sigues después de lo de Lila?.- me encogí de hombros y me miró con preocupación.
-No pongas esa cara.- golpeé su brazo levemente.- sabes que hace bastante igual que no era lo mismo entre nosotros. Me siento mucho más tranquilo ahora.
-Ya se... era toda una loca de los celos, que hipocresía, amigo.- habló rodando los ojos.- celandote a ti mientras ella...
-Prefiero no hablar de eso.- desvié el tema.
Que nosotros termináramos y que no me afectara tanto estar sin ella, no quiere decir que no se sienta horrible ser engañado de ese modo.
El sonido de la campana nos hizo reaccionar y nos miramos un momento antes de entrar corriendo haciendo carreras. Lo sé... podíamos parecer unos críos para ya ser casi mayores de edad, pero hay cosas que jamás cambiarán entre Nino y yo.
○○○
El día se hizo eterno y la maestra de física no hizo más que darnos mucha tarea sin descanso alguno.
Escribía sin ganas todo lo que ella anotaba en la pizarra. Podía oír los quejidos de Kim y de vez en cuando miraba de reojo a Nathaniel quien dibujaba con el mínimo interés en la lección.
Max (el más listo del salón) se veía fascinado con la clase. ¡¿Que clase de extraterrestre es Max?!
-Hey, Nino.- llamé la atención de mi amigo pero este estaba tan dormido que ni se inmutó.
Todos se veían exactamente igual que hace dos meses atrás, todos completamente aburridos. ¿Ni siquiera conversarán algo?, ¿se quedarán sintiéndose miserables como todo adolescente en la escuela?, ¡vamos Alix entretieneme con alguna tontería!
Alix solo miraba hacia afuera... ¡este será un largo día para mi!
○○○
¡Libertad al fin!
El día en la cárcel acabó y sin duda aún quedaba tarde para disfrutar.
-¡Adrien!.- la voz de Kim me hizo voltear mientras sacaba las cosas de mi casillero.
-Hey, ¿qué pasa?
-Hoy fiesta en mi casa. Supe que estas soltero ahora, es momento de divertirte.- me guiñó el ojo y yo por mi parte cerré la puerta de mi casilla.
-Cuenta con eso.- respondí al momento en que vi a Lila detrás de él conversando con Chloe.
Sus ojos me vieron fijamente y con mayor razón acepté.
-Irán todos. La mejor música por Nino, cervezas, piscina y las mejores chicas de todo el instituto. Nos vemos allá.
-Claro.- chocamos puños y se fue. Me dispuse a acomodar mi bolso en mi hombro para irme a casa.
Vi como Lila se despedía de Chloe y se acercaba a donde yo estaba. Por mi parte saqué rápidamente mi celular y mis auriculares, pero antes de poder ignorarla ella frunció el ceño cruzándose de brazos.
-¿Irás a la fiesta de Kim?.- cuestionó y alcé una ceja en su dirección.
-¿Por qué la pregunta?.- cuestioné viéndola fijamente.
-Porque habrán chicas ahí y...
-Lila.- la interrumpí al instante.- lo que yo haga o no haga a ti no te incumbe en lo absoluto. Nosotros.- nos señalé.- ya no estamos juntos.- le sonreí falsamente y se acercó a mi posando sus manos en mi pecho.
-Adrien, ya te dije que lo que viste fue un malentendido. Yo te quiero a ti y...
-Aunque lo fuese.- sujeté sus muñecas y quité sus manos de mi.- yo no quiero una relación ahora.
-Pero...
-Puedes hacer lo que quieras, con quien quieras.- animé y le guiñé un ojo pasando de ella.- nos vemos.
Me fui antes de que me detuviera otra vez. Para empezar... ella fue la que me pidió que saliéramos y fuéramos novios, yo solo acepté por aceptar.
No estaba enamorado de Lila, pero la pasábamos bien... en un principio. Eramos buenos amigos y ella era divertida, si le tomé bastante cariño, pero traicionó mi confianza y esas cosas no se recuperan con "un error lo comete cualquiera".
Estaba bajando las escaleras de la entrada cuando oí nuevamente la voz de Lila llamarme. Fruncí el ceño ignorándola, pero sentí como tomaba mi brazo.
-Otra vez no... .- cuando hacia eso, era normal que me hiciera una de sus escenas en público y ya no éramos nada como para estar aguantando eso.
-No me dejes con las palabras en la boca, Adrien.- alegó subiendo el tono de su voz y pasé mi mano por mi rostro.
-¿Quieres calmarte?.- pregunté sereno y por la forma en la que me miraba, sabía que no lo haría.
-¡Me importa un cuerno!.- exclamó alzando las manos y varios estudiantes comenzaron a observarnos.
Lila se hizo hacia atrás y chocó con alguien. Enseguida se giró molesta y yo recé internamente por la pobre alma que interrumpió su berrinche.
-¡¿Quieres fijarte?!.- alzó nuevamente la voz hacia aquella persona.
Era una chica de baja estatura,me llegaba a los hombros y abrazaba un cuaderno rosa con fuerza. Tenía puesta una capucha y podía notar su piel blanca, a la vez que su cabello negro se asomaba un poco en su frente. Veía el suelo todo el tiempo.
-Tu fuiste la que chocó conmigo.- respondió sin emoción alguna y parpadeé un par de veces al oírla.
¿Acaso ella quiere provocar una guerra?
-¿Disculpa?.- cuestionó Lila amenazante y ella la ignoró pasando por un lado.
-Deberías controlar un poco a tu novia.- la oí por lo bajo cuando se iba alejando.
-Ella no es mi novia.- respondí por lo bajo.
-Que suerte entonces.- siguió caminando y la quedé mirando perplejo. No la había visto antes en la escuela, ¿o sí?
¿Quién es ella?
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