7 Dic. 2023 15:52...

Los inquietantes e insistentes golpes en la puerta lo ponían de los nervios y podía sentir cómo a su lado su mejor amigo también estaba tenso y asustado. No era de menos, apenas habían logrado escapar de esas cosas y apenas habían logrado esconderse en ese pequeño cuarto cuando se hallaban huyendo por el largo pasillo.

No sabía cuánto tiempo habían estado encerrados ahí, pero sentía que era una eternidad y aún así, esos monstruos seguían escuchandose al otro lado de la puerta. El silencio sepulcral en la habitación era tortuoso, odiaba con todo su ser el silencio y se le estaba haciendo incómodo y hasta cierto punto agobiante, pero no sabía si esas cosas eran capaces de escucharlos y tampoco quería arriesgarse a averiguarlo.

Entonces fue cuando el efecto de la adrenalina en su cuerpo empezó a pasar, llevándolo a ser invadido por aquellas agobiantes ganas de llorar, estaba asustado y no tenía idea de lo que podía hacer, quiso aguantarse el llanto para parecer fuerte pero estaba siendo una tarea imposible.

-¿JiSeok?- la voz suave de su mejor amigo logró sacarlo de sus ansiosos pensamientos, los bichos parecían haberse ido, pues los siseos y gruñidos tras la puerta ya no se oían.

-¿Crees que se hayan ido?- su voz sonó en un tono bajo y casi se podía escuchar quebrada, los ojos ajenos lo vieron con duda y con cuidado el menor se agachó, pegando su mejilla al piso para poder ver por la ranura entre el piso y la puerta si aquellas cosas seguían ahí.

-Pues yo ya no veo nada- vió al menor levantarse y dedicarle una tranquilizadora sonrisa, una que funcionó a medias.

-De todas formas, preferiría no arriesgarnos...- a pesar de querer disimular su miedo, no podía, realmente estaba asustado- por ahora-.

Aquello fue una seguridad, sabía que en cualquier momento tendrían que salir, pero prefería quedarse un poco más, al menos hasta poder tomar algo de valor.

JooYeon solo asintió en silencio, entendía el miedo de su mejor amigo, él también estaba asustado, pero sabía que si salían podían buscar comida o hasta personas que los ayudaran, aún así, no quería obligarlo a salir si no se sentía seguro de aquello.

Las cosas continuaron así por, tal vez, unos 30 minutos, hasta que el pelirrojo se levantó de su lugar en el piso, recibiendo una mirada confundida del menor.

-Creo que deberíamos salir a buscar comida antes de que anochezca- una sonrisa comprensiva se dibujó en el rostro de JooYeon e imitando a su mejor amigo se levantó del piso, ambos se miraron con duda antes de acercarse a la puerta, el menor ya con su mano en el picaporte volteó a ver al pelirrojo buscando un indicio de arrepentimiento o algo que le dijera que aún no estaba listo. Sin embargo, le sorprendió recibir una mirada segura y un asentimiento por parte suya.

-Bien- con cuidado y tratando de ser lo más silencioso posible, Lee al fin abrió la puerta, ambos sacaron la cabeza por el espacio de la puerta abierta y se fijaron en todo el pasillo tratando de ver si había alguno de esos bichos cerca, pero parecía no haber señal de ninguno.

Lentamente y con el mayor cuidado posible, salieron de aquel armario de limpieza, no sin antes haber tomado algo para defenderse -una navaja y un palo de escoba roto-, estando mínimamente armados, salieron al fin de ahí. Con sudor frío bajando por sus sienes y las manos temblando, ya sea por los nervios o por el miedo, ambos lograron avanzar en completo silencio hasta el final del pasillo, dirigiéndose en busca de el elevador.

Una vez frente a las puertas metálicas, ambos se miraron buscando apoyo en el otro, y cuando estuvieron seguros, JooYeon presionó el el botón de bajada.

Ambos estaban tan concentrados, esperando que el elevador funcionase y llegara rápido, que no se dieron cuenta de los siseos a unos metros de ellos. Fue el menor de ambos el que logró escuchar y voltear a tiempo, justo antes de que aquel zombie se lanzara sobre ellos pudo tomar del brazo a JiSeok, apartándose de el rumbo de aquel bicho.

Segundos después, las puertas del elevador se abrieron, dejando salir a dos más de esas cosas, ambos zombies se lanzaron sobre el que estaba fuera en cuanto lo vieron -o percibieron, no tenían claro si esas cosas podían ver- y ellos aprovecharon ese momento para entrar al elevador, tocando desesperadamente los botones para que las puertas se cerrasen antes de que aquellas cosas se dieran cuenta de su presencia, haciéndolo por suerte cuando uno de ellos se levantó del piso con intenciones de ir hacia ellos.

Ambos soltaron el aire que no sabían que estaban reteniendo, y se recostaron en las paredes del pequeño lugar; el elevador era más pequeño que el armario de limpieza en el que estaban antes, pero de alguna manera JiSeok no se sentía tan claustrofóbico como en ese lugar, quizás era porque esta vez no estaban rodeados de gruñidos y siseos de zombies.

El silencio en el pasillo era algo inquietante, si hacían demasiado ruido podían llamar la atención de algún zombie alrededor, al mismo tiempo, tenían miedo de no escuchar nada, pues aquel pasillo dirigía al vestíbulo del edificio y era muy probable que hubieran más de ellos allí. Sin embargo, tenían que salir del edificio lo antes posible, ambos empezaban a tener hambre y les preocupaba que si tardaban demasiado en salir, sería de noche, lo que significaría una desventaja pues habría menos luz -o eso creían, porque ni siquiera sabían si la energía funcionaría como siempre en esa situación-.

Entre más se acercaban al final del pasillo, más claro podían escucharse los siseos de aquellas criaturas, haciendo que los nervios de JiSeok crecieran por cada paso que daban. Al llegar, no se sorprendieron de encontrar a tres de esas cosas rondando cerca de la puerta principal y una detrás del recibidor. JooYeon sintió algo de pena por la chica que claramente había sido infectada, pues al vivir tanto tiempo en ese edificio -y quedándose fuera de su apartamento a causa de olvidar sus llaves en más de tres ocasiones- terminó por crear una agradable amistad con la chica de nombre MinJi, quien ahora se encontraba atrapada entre el recibidor, con las venas de su rostro y brazos marcadas de forma violenta, además de una oscura mordida en su delicada mano.

Un suspiro a su lado fue lo que hizo que el de cabello rubio saliera de sus pensamientos.

-¿Ahora cómo vamos a salir de aquí?- preguntó con frustración- Hay muchas de esas cosas en la entrada y es imposible que pasemos sin llamar su atención- un nuevo suspiro salió de los labios del bajito- Empiezo a creer que no podremos salir de aquí jamás-.

-No digas eso, encontraremos la manera de salir de aquí- una de sus manos fue a para al hombro de JiSeok; él tampoco sabía cómo saldrían de ahí, habiendo tantos zombies en el medio, pero tenía fe en que encontrarían una manera. Después de todo, la esperanza es lo último que se pierde.

Hola tomatitos, desde hace un montón quería actualizar, pero como ya les había comentado (si es que leen mi muro, que para algo está), perdí todos mis separadores y pues los únicos que no tenía guardados en ninguna parte eran precisamente los de Joo y Gaon, así que ayer me harté y dije "sabes qué? Voy a hacer unos nuevos" y me puse a editar en mi computadora.

Y como podrán notar, aproveche para hacer una nueva portada también (ya que la anterior no me gustó como quedó) y esta nueva me fascina jshsj.

Como sea, aquí está al fin la introducción de los Nuggets. Lamento si el capítulo quedó muy corto pero no pude extenderlo más porque quedaba feo kdjd.

En fin, ojalá hayan disfrutado el capítulo y si fue así por favor denle a la estrellita, les juro que no se les cae el dedo por hacerlo.

Los quiere:

Tomate_ConSal™
2024/11/12