Capítulo 06.
Los días habían transcurrido con rápidez a partir de ese momento, adaptándose a un nuevo ritmo de vida entre su trabajo y el crecimiento de su pequeña bebé. El ambiente laboral cada día se hacía mejor, contando ya con un pequeño círculo social con sus compañeros y compartiendo los almuerzos con ellos; a la hora de salida, lograba disfrutar de la emoción de recoger a su bebé de la guardería de la empresa y luego subir de su auto para dirigirse a casa. Había momentos que aún tenía altibajos, pero si de algo había aprendido en esas semanas era que no se encontraba solo y en cada uno de esos momentos su animado y divertido vecino del 511 lo había ayudado.
Kim Taehyung había llegado para mejorar sus días.
Por ello, había tomado el impulso de invitarlo a su departamento cuando había ahorrado un poco y, terminando de instalarse por fin, hacerle una pequeña fiesta a su hija por cumplir dos meses. No había podido hacerle nada en el primer mes, pero la recompensaría con una pequeña reunión con sus seres queridos en este segundo mes de vida, esperando que en los próximos también tener la oportunidad de celebrarla.
—¡Voy!—Gritó cuando escuchó el timbre de la puerta, comprobando que Lía estuviera segura en su portabebés mientras él terminaba de preparar el pastel. Limpió sus manos en el delantal que llevaba y abrió la puerta, sonriendo al ver llegar a sus compañeros de trabajo.—Hola, me alegro que hayan podido venir.
Sus compañeros, y ahora amigos del trabajo, Kim Seokjin y Park Jimin, se encontraban frente suyo con respectivas bolsas de regalo con colores llamativos. Entraron saludando y se encaminaron a la cocina para saludar a la pequeña anfitriona de la reunión, la cual les sonrió cuando le hicieron gestos divertidos para llamar su atención.
Jeon miró el reloj y se preguntó si Taehyung iría a su pequeña fiesta improvisada. Tenía emoción de poder presentarle a sus amigos del trabajo y a ellos poder presentarle a su vecino, además que su hermana y familia no tardarían en llegar y con ellos cerraría la lista de invitados de aquella noche. Apagó la estufa cuando probó por última vez la comida y guió a sus invitados al comedor, empezando a acomodar los respectivos lugares con los platos y vasos, mientras Seokjin cargaba a Lía entre sus brazos y Jimin se encontraba detrás suyo haciendo sonreír a la bebé.
Taehyung se miró al espejo una última vez y frunció el ceño, poco convencido con su atuendo del día. Estaba llegando un par de minutos tarde, pero de todas maneras sabía que era a una puerta de distancia, así que estaba menos presionado con ello, excepto por la mirada de Hoseok en su rostro sobre el espejo.
—Vamos, Taehyung. ¿Por qué te estás esmerando en lucir tan bien? Solo es el cumple-mes de su bebé, no es como si fuera un evento de gala o formal.—Sonrió divertido cuando lo vió quitarse la chamarra y lanzarla al piso, junto al resto del montón de ropa.
—¿Crees que estoy exagerando el asunto?—Se volteó a verlo con las dos cejas arqueadas, casi indignado por su comentario.
—Sí, son vecinos y realmente no estás saliendo de aquí, solo tienes que ir a tocar su puerta a lado y ya llegaste, inclusive podrías ir en pijama.—Habló con desinterés, levantándose de la cama.
Taehyung casi lloró de frustración, acuclillándose en el montón de ropa mientras sufría de un colapso. ¿Por qué le estaba costando tanto salir de su departamento? Hoseok tenía razón, le estaba dando tantas vueltas al asunto de la ropa que ya no creía que solo fuera eso. Sabía que Jungkook había invitado a más personas, sentía la necesidad de quedar bien frente a todos ellos, pero también le estaba costando la tranquilidad que dejó de sentir desde que la tarde inició y un mensaje entró a su celular preguntando si asistiría.
—Levántate, es hora de irse.—Lo tomó por los hombros y lo obligó a levantarse, tomando la primera chaqueta que miró y con la bolsa de regalo en mano, se los tendió.—Se te está haciendo tarde, tienes que irte ahora.
Taehyung asintió, tomando las cosas con pesar se encaminó por el pasillo fuera de la habitación, devolviéndose a la cocina para tomar una pequeña caja entre sus manos y, con la ayuda de Hoseok, le abrió la puerta al salir del departamento y con una sonrisa en su rostro, le animó a ir.
Con un suspiro, acomodó las cosas sobre sus manos antes de tocar la puerta, esperando aún ser recibido aunque llegara tarde. ¿Cómo podría llegar tan tarde si tan solo vive a una puerta de distancia? No tenía ninguna excusa, todo parecía demasiado ridículo.
Todo pensamiento se esfumó cuando la puerta fue abierta, y contrario de lo que esperaba, en lugar de ser recibido por Jungkook, fue recibido por una mujer.
—Hola, ¿En qué te puedo ayudar?—Cuestionó la mujer con una sonrisa en su rostro, pareciendo amable.
—Hola, uh, yo...—No terminó cuando pudo ver sobre la cabeza de la mujer a una silueta conocida asomarse, sonriéndole al reconocerlo.
—¡Taehyung! Pensé que no vendrías.—Jungkook se aproximó, alejando a la mujer de la puerta.—Está bien, Heejin, es mi vecino.
—Hola, traje esto.—Taehyung saludó de forma robótica y le tendió la bolsa de regalo junto la caja que contenía un par de cupcakes que él mismo había preparado.
—Oh, Tae.—Miró las cosas con una pequeña risa, asintiendo.—No era necesario, pero te lo agradezco mucho. Entra, estamos a punto de comer, Lía se encuentra muy risueña el día de hoy. Supongo que está muy emocionada por toda la atención que está recibiendo, está tratando de agarrar las bolsas cuando Jin la acercó a la mesa, mi bebé tiene más fuerza de lo que pensaba.
Taehyung entró, sonriendo ante lo dicho.—Lía es muy impresionante desde el primer momento que la conocí, no subestimes a tu hija.
Jungkook frunció la nariz, reteniendo una carcajada mientras lo guiaba al comer. Dejó las cosas sobre el mostrador de la cocina y varios pares de ojos se posaron en ellos curiosos.—Taehyung, ellos son mi hermana Heejin y mi cuñado, Doyun. Sus dos hijos por allá, Minji y Haewon. Por acá están mis amigos del trabajo, Seokjin y Jimin; y él es Taehyung, mi vecino del departamento 511, también quien suele ayudarme en muchas ocasiones cuando no puedo con Lía, me salvó ya muchas veces.
Todos compartieron un saludo entre sí, tomando lugar en sus respectivos lugares. La cena estaba siendo servida cuando Taehyung sintió una mirada en él; se trataba de la pequeña Lía, la cual no despegaba sus grandes ojos de Taehyung y sonrió en cuanto captó su atención, siendo cuestión de segundos antes de que la cargara y la colocara sobre su regazo, jugando con sus manitas.
Jungkook terminó de servir la cena y se sentó en la silla que quedaba a un lado de Taehyung, sonriéndole a su hija cuando lo miró al sentir su presencia. Con una última mirada, todos comenzaron a comer mientras compartían una animada charla durante la cena, siendo todos integrados hasta que la comida en sus platos terminó y una ansiosa Lía miraba a su alrededor.
—Creo que es el momento del pastel y abrir los regalos, alguien está ansiosa de poder verlos.—Jungkook tomó en sus brazos a Lía, levantándose de su asiento.
—Te acompaño a traer las cosas.—Taehyung se levantó de la misma manera, recogiendo los platos mientras se encaminaban a la cocina por el pastel.
Dejando los platos sucios sobre el fregadero, se limpió rápidamente las manos mientras Jungkook maniobraba para levantar el plato donde el pastel reposaba.Taehyung se acercó rápidamente y se lo quitó de las manos.
—Yo lo llevaré, ¿Quieres que lleve también los regalos?
—No, puedo con ello.
Con un gesto afirmativo, se encaminaron nuevamente al comedor donde todos esperaban por ellos, sonriéndoles mientras se preparaban para cantarle a la bebé un feliz "cumple-mes" y ver como eran abiertos los regalos. Para cuando la canción fue terminada, los aplausos resonaron en el lugar y Jungkook se inclinó un poco para que Lía pudiera pasar un dedo sobre el glaseado del pastel, todos rieron cuando padre e hija terminaron embarrados con el glaseado mientras Taehyung buscaba las servilletas, riendo en el momento.
Los regalos fueron abiertos, Jungkook agradeciendo a cada uno de ellos por sus detalles hasta que dió por concluida la pequeña fiesta. Los primeros en irse fueron su hermana y su cuñado, viviendo un tanto retirados de ahí y teniendo que emprender un largo camino, decidieron despedirse primero y deseando aún que siguieran disfrutando de la noche. Los siguientes fueon Seokjin y Jimin, no viviendo tan lejos, pero al día siguiente tendrían que trabajar así que era mejor irse antes de que se hiciera más tarde.
Todos intentaron ayudar en la limpieza, pero Jungkook se negó rotundamente en ser ayudado, despidiéndolos. Taehyung fue el último en quedarse, observando como Lía se encontraba dormitando en su pequeña cuna antes de salir, viendo como Jungkook fregaba los platos en la cocina.
—¿Guardarás esto en el refrigerador?—Señaló un par de cosas sobre el mostrador, ofreciendo ayudarle.
Asintió.—Te agradecería si me ayudas a guardarlo, se me olvidó hacerlo con tantas cosas en mente.
—Realmente le hiciste una buena fiesta, nunca la ví tan feliz como hoy, inclusive dejó que todos la cargaran.
Soltó una carcajada, de acuerdo con su comentario.—Ella sabía que era su día, debía de mostrar una buena imagen frente a todos.
—¿En qué más te ayudo? Creo que me ganaste de aquí a que podía dejar de ver a Lía dormir.—Sonrió enternecido al recordar la imagen, Lía siempre le provocaba ternura.
—Esto es todo, de todas maneras gracias por venir y ayudarme, por un momento pensé que no lo harías cuando pasó de la hora.
Taehyung sintió un leve rubor sobre sus mejillas.—Me puse un tanto nervioso de venir.
Cerró la llave, quitándose los guantes al terminar de fregar.—¿Por qué? Ya habías entrado antes.
—Lo sé, solo que pensar que tendrías invitados... Me sentí un poco cohibido al respecto, no sabía que tenía que decir o cómo actuar.
Se giró en su dirección, observándolo.—Solo es necesario ser tú mismo para poder caerles bien a todos, Tae. Nunca debes de acomplejarte por ello, apuesto que le caíste bien, mi hermana se despidió diciéndome que le agradabas, que te diera las gracias de su parte porque sabe cuánto me has ayudado en todo este tiempo, no debes de dudar por tu persona.
Asintió ante sus palabras, bajando la mirada sintiendo de repente un tanto sensible. No sabía que le ocurría ese día para sentirse tan desorientado con sus emociones, pero trató de calmarse, era momento de irse a su departamento.
—Muchas gracias por la invitación, la pasé muy bien hoy. Es hora de irme, mañana trabajamos así que es mejor ir a descansar, buenas noches, koo.—Se encaminó a la puerta, sintiendo su presencia a la par.
—Gracias a ti por venir, me gustó presentarse a mi familia y amigos, gracias por todo.—Quitó el seguro a la puerta, abriéndola. Sin esperar que, al momento que Taehyung se dispuso a salir, se detuvo para inclinarse y depositar un casto beso sobre su mejilla antes de salir de ahí, alejándose ante la repentina acción.
Se quedó con la puerta abierta mientras aún procesaba la acción, mientras Taehyung azotaba su puerta y corría a su habitación con la intención de esconderse.
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