Esto era inaudito, inaceptable y un insulto a mi persona.

—¡Un doctor!— Yoongi a mi lado grita desesperado, haciéndome avergonzar por lo exagerado que es— ¡Está sangrando!

Bueno, tal vez no estaba sobreactuando, no del todo.

Era nuestro último día en el llamado servicio militar al que espero de todo corazón jamás volver, estaba muy emocionado celebrando con mis compañeros el hecho de que finalmente podría dejar de usar este uniforme cuyo color no me favorece en absoluto, es más, estoy seguro de que en mi vida volveré a usar verde.

—¡Usted no entiende!— me señala, la recepcionista me observa sin mucho interés— ¡Tiene una bala en el brazo! Esta es la sala de emergencias ¿Dónde están los médicos disponibles? Por favor-

—En vista de que su amigo está de pie y consciente, creo que puede esperar a que algún miembro de nuestro personal lo atienda— tal vez no se note, pero estoy por desmayarme— le pido que coopere con nosotros, tenemos muchos pacientes en estado de gravedad.

En fin, estábamos celebrando y a decir verdad me embriagué, solo un poco, estaba totalmente consciente de la situación pero, este sujeto del cuál solo puedo recordar su apellido; Im, desafortunadamente enloqueció y se ahogó en trago, tanto así, que vió muy divertido empezar a jugar con el armamento.

Y pues, me disparó sin querer.

—Yoongi, está bien— me las arreglo para intentar calmar a la bestia pálida— podemos esperar.

—¡No podemos esperar!— traga, yo me sostengo el trapo en la herida, primera vez que experimento un dolor como este— llamaré a Sejin, los de seguridad están esperándonos afuera, seguramente también están haciendo llamados.

—Parece que la idea de salir sin avisar y en plan incógnito no se completó con éxito— me da esa mirada de ojos feos y enojados— vale, no es tiempo para bromas.

Me tambaleo un poco, asustandolo aún más y aunque no es mi intención hacerlo, el olor de la sangre me marea, además de que no exagero cuando digo que me duele. Yoongi vuelve a su disputa con la chica de recepción.

—Si pudiera ir a otro hospital lo haría— se acomodó la gorra— ¿Cómo puede faltarles personal? Somos-

—Yoongi, no, esa carta no— suspiro— esperaremos a-

—¿Qué sucede aquí?

Mis ojos que a punto de cerrarse están, alcanzan a ver a la que parece ser mi salvación, una muy bien peinada y de bata azul... ¿Porqué es azul? Debería ser blanca.

Es muy bonita.

—¿Usted es doctora?— me recargo en Yoongi, ash, el olor es enserio insoportable, me sostiene como puede— ¿Puede ayudarlo? Por favor.

No pude escuchar más, pues soy un ser humano débil que no soporta el olor a sangre, de todas formas, si no me jodia el olor, lo haría la perdida de sangre o el dolor...

Pero, que doctora más hermosa, soy afortunado.

*c muere*

Ah decir verdad estoy muy emocionada porque ustedes lean esta historia, pues de toda la saga es mi favorita ¡El quinto libro de la saga está aquí! Espero ver su apoyo como siempre.

—Redkuin