Kim Taehyung despertó con un dolor agudo que amenazaba con perforar su cabeza. Abrió sus ojos un instante en el que sintió un terrible mareo y unas náuseas horribles, los volvió a cerrar apretándolos con fuerza.

¡¿Qué diablos pasó anoche?!

Se gritaba internamente, no recordaba más allá de los besos que compartía con algunos omegas... ¿O eran betas? No estaba seguro, pero fuera de ahí, su mente estaba en blanco.

Después de unos minutos en los que sentía que todo a su alrededor giraba, tomó valor y abrió los ojos, la poca luz que entraba en la habitación le calaba.

-¿En dónde estoy? -se preguntó en un susurro.

Trató de levantarse, pero un brazo se aferraba a su cintura. Un escalofrío recorrió su espalda y girando levemente volteo hacia la persona que lo mantenía cerca.

-¡Mierda! -gritó saltando de la cama, un dolor en su espalda baja le hizo caer al suelo, el corazón le latía como loco esperando que su compañero de cama terminara de despertarse.

-¿Cómo te atreves a despertarme de esa manera? -le preguntó el peli negro con la voz ronca (y sexy), mientras se tallaba los ojos con pereza- Después de lo de anoche, un beso de buenos días es lo mínimo que podrías hacer.

Taehyung abría y cerraba la boca, las palabras no salían, estaba impresionado y su estúpida mente seguía en blanco.

-¡¿Tú me violaste?! -acusó cuando por fin las palabras llegaron, señalaba a Jungkook con un puchero- ¡Somos alfas! ¿Cómo pudiste hacerlo?

-Espera azulito -dijo el peli negro con molestia mientras se ponía de pie demostrando su desnudez sin ningún pudor- ¡No te sonrojes, idiota! Anoche hice más que enseñarte mi cuerpo.

El peliazul se sonrojó aún más en respuesta y desvío la mirada hacia el escritorio que se encontraba en una esquina de la habitación, fue entonces que reaccionó ante su propia desnudez, con pánico se metió a la cama de nuevo y se tapó con las cobijas.

-¿Realmente eras virgen, eh? -se burlaba el menor- mira pitufo de mierda, anoche te salvé el culo, la policía llegó a la fiesta y tu estabas más intoxicado que nada, y yo bondadosamente pensé en traerte conmigo y no llevarte a tu casa en ese estado pensando en lo decepcionados que estarían Nam Hyung y Jin Hyung, entonces de la nada entraste en celo y te pusiste todo cachondo conmigo.

-¿Y no se te ocurrió darme un supresor, conejo estúpido? -preguntó ofendido.

-Claro que no, idiota, por ti no pude llevarme alguna chica linda a la cama, así que aprovechando tu situación, tuve que aceptar pasar el celo contigo.

-¿Es que acaso sólo te interesa el sexo? ¡Somos alfas! -insistió- Dos alfas no pueden aparearse.

-Lindo, mientras tenga un hoyo, el apareamiento puede lograrse -explicó con una sonrisa coqueta mientras se adentraba al baño- tomaré una ducha, ¿me quieres acompañar?

Cerró la puerta del baño antes de que la almohada que Kim le había lanzado se impactara en su rostro.

Taehyung quería llorar, se sentía del asco tanto física como mentalmente.

Podría ser alguien que le gustaba experimentar todo tipo de cosas para mantenerse entretenido, sin embargo, siempre había tenido en mente que las relaciones sexuales eran algo muy íntimo y personal, su papá Jin siempre le había dicho que su primera vez debía ser con alguien especial.

No una calentura provocada por el celo que ni siquiera recordaba. También le preocupaba que hubiese sido con Jungkook, ¿siquiera habían usado preservativo? Sabía que el chico gozaba del sexo como un dios del Olimpo, temía contagiarse de alguna cosa. También se sentía desanimado, Min era la clase de chico que tenía sexo solo por lo carnal, sin sentimientos.

Suspiró y, tragándose el nudo en su garganta, se levantó con algo de dificultad de la cama y comenzó a vestirse.

En ese momento Jungkook salió de baño con una toalla cubriendo su cintura, mientras que con otra se secaba el cabello.

-Si fuera tu, mejor tomaba un baño y tomabas mi ropa prestada, tus padres no estarán nada felices.

-De esta ya no me salvo, para esta hora ya deben de haberse dado cuenta que no pasé la noche en casa -contestó desanimado. Una alarma en su cabeza se encendió y miró al peli negro con pánico- -¿Y Lisa?

-¿Tu amiga rubia? - preguntó, el otro asintió- yo no la vi, te encontré en los baños mientras casi te daba una sobredosis.

-La perdí de vista desde antes de eso -preocupado sacó el celular del bolsillo de su pantalón a medio subir y le marcó a su amiga pero lo mandó directo a buzón- ¡Rayos!

Un suave golpe en la puerta hizo que ambos se tensaran.

Jungkook tragó hondo y comenzó a formular mil excusas en su mente para que su hermano no le fastidiara por el resto de su vida, abrió solo la mitad de la puerta.

-¿Qué hay hermano? -preguntó parándose entre el espacio de la puerta, tratando de que su hermano no mirara al invitado en su habitación.

-Solo venía a avisarles que el almuerzo está listo -informó con una ceja alzada- dile a Taehyung que sus padres ya saben que está aquí, después del almuerzo iré a dejarlo.

Yoongi trataba de controlarse para no lanzar una carcajada al ver la cara de, ¿asombro?, ¿pánico?, bueno, no tenía idea qué clase de cara estaba haciendo el menor, pero le parecía muy gracioso, sin embargo, continuó en su papel.

-Tienen 10 minutos o no almuerzan -decretó alejándose por el pasillo hacia la cocina.

Jungkook cerró la puerta y pegó la frente en ella, sabía el infierno de burlas que se le vendría encima en cuanto Taehyung se fuera.

-Estoy muerto -susurraron ambos a la vez, se miraron con asombro y sin saber por qué, se soltaron a carcajadas.

-Anda, pitufo, va a darte un baño, apestas a arrepentimiento, alcohol y mucha María*, siquiera ponte presentable para el infierno que se te viene encima.

Taehyung bufó ante la burla del chico, sin contestar se metió al baño y tomó una ducha rápida, al salir, Jungkook ya no se encontraba en la habitación, miró la ropa que le dejó en la cama junto con una botella de agua y dos supresores, suspiró.

Jungkook era un poco más alto que él, sin embargo, la complexión de ambos era parecida.

Los pantalones deportivos eran cómodos y las mangas del hoddie le quedaban algo grandes, sin embargo, estaba agradecido de poder ponerse algo limpio. Dobló su ropa, tomó las píldoras y salió de la habitación.

No fue hasta que estuvo frente al mayor de los Min que la vergüenza lo invadió. Obviamente Yoongi sabía lo que había pasado en la habitación de Jungkook, y lo confirmó cuando él más pálido le sonrió divertido.

-Buenos días Taehyung, ¿cómo dormiste?

Jungkook, quien bebía un vaso de jugo, no pudo evitar reír y escupir algo de la bebida.

-Basta, no es gracioso -regaño ofendido al menor- y, dormí lo mejor que pude en mi situación, Yoongi Hyung.

-Me alegro, como sea, come algo, te espera el regaño de tu vida.

Taehyung tembló un poco, sus padres jamás lo habían regañado.

-Hum, ¿existirá alguna manera de librarme del regaño?

-De Nam, tal vez -contestó el mayor sirviendo dos hot cakes en el plato del peliazul- pero con Jin ya estas condenado, me sorprendería que se ablandara el corazón, pero tienes que entenderlo, anoche me llamaron muy preocupados por que no sabían en dónde estabas, Namjoon Hyung estaba a punto de colgar panfletos con tu rostro. Ellos te adoran Taehyung, piensa en eso mientras te regañen.

El mencionado no contestó y comenzó a comer, se dio cuenta que tenía mucha hambre, también muchísima sed.

Cuando terminaron, él se ofreció a lavar los platos como agradecimiento por la comida, Yoongi lo dejó y subió a su habitación por las llaves de su coche.

Taehyung miraba de reojo al menor quien se encontraba mirando su celular en silencio. Dudaba en preguntar lo que se había pasado pensando durante el almuerzo.

-Jungkook -llamó tratando de no demostrar tanto interés, el menor hizo un ruido desde su garganta dándole a entender que lo escuchaba- Bueno... Yo... yo quería saber, quién, ya sabes.

-¿Qué cosa? - preguntó confundió el menor ahora si levantando la mirada del aparato hacia él.

-¿Quiénestuvoarriba? -preguntó con rapidez aprovechando el poco valor que le quedaba.

-Oh... -el peli negro sonrió de lado con burla- hablas sobre quién penetró a quién - Taehyung asintió con las mejillas sonrojadas, Jungkook soltó una risita y se acercó al chico- ¿Tu quién crees, azulito?

El mayor estuvo a punto de responder pero una palmada en su nalga izquierda le hizo brincar en su lugar sintiendo algo del dolor que había presentado esa mañana en su espalda baja.

-¿Eso responde a tu pregunta?

Mierda...

Apretó la manija de la puerta y soltó el aire que estuvo conteniendo.

-Tranquilo, no eres el primer chico que se escapa a una fiesta y no llega a dormir -le animaba el peli negro mayor- ahora, sé un adulto y enfrenta tus errores.

Taehyung asintió y le agradeció en un susurro, los tres bajaron del auto y se adentraron a la casa en silencio cuando Taehyung abrió con sus propias llaves. Siguiendo el murmullo que se escuchaba se dirigieron a la sala.

-Papá Jin, papá Nam -habló cohibido el menor de los Kim.

Ambos se encontraban sentados en el sillón más grande, estaba tomados de la mano y Namjoon acariciaba la espalda del mayor. Los dos lo voltearon a ver en seguida y contrario a lo que Taehyung se esperaba, Jin se levantó apresurado y lo envolvió en un abrazo.

-Gracias a la Luna estás bien -susurró besando la frente del menor.

-Gracias por traerlo Yoongi -dijo Nam acercándose a los Min- y perdón por las molestias, por ahora queremos hablar en privado con nuestro hijo.

-No hay problema -Yoongi se acercó aún más al más alto- no se molesten tanto con él, realmente está arrepentido, además, es la edad, ¿recuerdas? -dijo en un susurro.

-Lo sé, pero esto va más allá de una simple salida a escondidas, luego te explico.

-Disculpa Nam Hyung, Jin Hyung -dijo el menor de todos en voz alta para que ambos mencionados lo miraran- Yo fui quien cometió el error de no traer a Taehyung a casa, estábamos ebrios y como sabía que ustedes no estaban en casa creí que era buena idea llevarlo conmigo.

-Gracias Jungkook -Dijo Nam con una sonrisa que no le llegó a los ojos.

-Bien, nos vemos luego - se despidió Yoongi saliendo siendo seguido por su hermano.

El silencio reinó en la casa de los Kim después de la partida de los Min, Jin suspiró y se sentó en el lugar en el que había estado antes. Taehyung observó a sus padres con culpa, ambos tenían las ojeras muy marcadas, sus rostros aún mostraban preocupación y Jin aún no se había ni quitado la bata del hospital.

-Yo... -murmuró sin saber exactamente qué decir- Lo siento.

-¿Qué es lo que sientes exactamente? -preguntó Jin cruzando una pierna sobre la otra y doblando los brazos al nivel del pecho- ¿Sientes haberle mentido a tu padre con lo de tu celo? ¿O sientes haberme mentido a mi diciendo que era porque no querías acompañarlo a acampar, cuando realmente tu plan era largarte a esa estúpida fiesta?

El peliazul miró el piso apenado.

-¿Sientes haberme sacado el susto de mi vida al ver a tu amiga en urgencias por una posible sobredosis y descubrir que tu no estas en casa? ¿Qué querías que pensara Taehyung? Por un momento me volví loco pensando en que tu estabas en esa misma situación en algún lugar.

El chico se tensó al escuchar lo de su amiga, y miró a su padre con pánico.

-Ella está bien, con la jaqueca de su vida, pero salió de esta -informó aún con la voz neutra, el menor suspiró aliviado, sin embargo el nudo en su garganta cada vez se hacía más grande- mi pregunta ahora es, ¿desde cuándo consumen drogas?

-Solo le he hecho de vez en cuando, desde hace algunos meses -confesó con la voz entre cortada- solo lo hacía por diversión, papá, lo siento, no pensé que se me saldría de las manos.

-Pues se salió de tus manos Taehyung, nos viste la cara -las primeras lágrimas comenzaron a caer por las mejillas del menor y Jin dudó en seguir con el regaño, sin embargo tomó aire y continuó- estas castigado.

Su hijo asintió.

-También volverás a terapia.

Volvió a asentir.

-Y dile adiós a tu play.

El menor lo miró con pánico, sin embargo se tragó sus palabras y asintió una vez más.

-Ve a tu habitación, no saldrás más que para ir a la escuela, fuera tinte, regresaras a tu color natural y tirarlas toda la hierba que hay en tu habitación.

Un puchero involuntario se formó en los labios del menor, aun así no se atrevió a reprocharle nada a su padre.

-¿Algo que quieras agregar, Namjoon?

-Creo que es suficiente -murmuró- tu quieres decir algo, hijo.

-Solo quiero decir que de verdad lo siento, solo iba a ser una pequeña escapada, Lisa y yo queríamos divertirnos, pero consumimos algo que no debíamos, si Jungkook no hubiera estado ahí, probablemente todo acabaría mal. Yo me arrepiento de haberles mentido -el chico comenzó a derramar más lágrimas- no merezco todo lo que me han dado.

Por más que Jin y Namjoon trataron de reprimirse, ver a su hijo en ese estado les caló, ambos se acercaron y lo envolvieron en un abrazo que el menor correspondió en seguida.

-Espero que aprendas de esta experiencia Taehyung, el mundo no es tan bueno como parece, tampoco es así de fácil, más que molestos, seguimos asustados de lo que te pudo haber pasado -explicó el Moreno- te amamos, es por eso que nos preocupa todo lo que pase en tu vida.

-Entonces, ¿me perdonan? -preguntó una vez que dejó de llorar.

-Con una condición -dijo su papá Jin limpiandose las lágrimas que también había derramado.

-Las que quieras -contestó el chico con entusiasmo.

-Bien, entonces tu papá Nam también pondrá una condición.

-Perfecto, mi condición es que ya no pondrás más excusas para acompañarme a los días de acampar.

Taehyung aceptó enseguida.

-La mía es sencilla, tu harás la cena a partir de mañana.

-Pero yo soy el encargado de lavar los platos de la cena -se quejó.

-Pues ahora lavaras  los platos y harás la cena.

Bonito fin de semanaaaa♥