En el estudio estaban NamJoon y YoonGi, esos dos pasaban mucho tiempo allí, sabía lo mucho que se esforzaban, había escuchado las canciones de Suga, ese chico era realmente un genio con sus letras y su música. Lo admiraba enserio.

— ¿Qué sucede? —pregunté mirándolos.

— Danbi, Suga y yo hemos pensado desde hace unos días en hacer una canción diferente a lo que solemos hacer, no te preocupes, no tienes que escribir nada porque nos encargaríamos de ello—explicó Nam mientras el pelinegro se sentaba frente a la pantalla tocando de nuevo algunos botones—Sólo queremos...o quisiéramos pedirte...

— Queremos que cante una canción con uno de nosotros—resumió YoonGi—Algo diferente caería bien para el disco, nuestro productor nos aconsejó esto, Nam tiene todavía el audio que grabó cuando cantaste el día de tu cumpleaños el año pasado—explicó mirándome. Que él lo dijera de forma fría y como si nada me hizo un nudo en la garganta—Lo escuchó y le gustó tu voz.

— ¿Quieren que cante? Saben que sigo dudando sobre eso...

— Danbi—Nam tomó mi mano—Por favor, hazlo por el aprecio que tienes a nuestro trabajo.

— ¿Y si no sale como lo esperan?

— Querida, si escribo una canción obvio que será lo que espero y más—bufó Suga como si estuviera ofendido con ese comentario— ¿Con quién crees que hablas?

— Esto es...—respiré profundo rodeando los ojos. Nam tenía unos adorables hoyuelos a la vista y no podía decirle que no—Prométanme que no le dirán de esto a nadie.

— Trato.

♥♥♥

Quería llegar a casa, estaba agotada, tenía hambre, sueño, trabajo por hacer, mi vida realmente estaba tornándose un asco por completo. Bajé del taxi en cuanto el vehículo se detuvo frente a mi casa, las luces estaban encendidas, cerré la puerta quedándome de piedra al identificar cierto chico de cabello castaño esperar de pie en la acera, tenía sus manos metidas en los bolsillos de su chaqueta y al percatarse de mí avancé con un rostro serio. La noche era fría por lo cual no pude evitar sentirme en parte algo mal de que JungKook soportara ese frío.

— ¿Tienes mucho rato aquí?

— Unas dos horas.

— ¿Mis padres te vieron? —miré a la casa y luego a él quien seguía mirándome, bajo sus ojos había ciertas ojeras, ¿Él tampoco podía dormir? ¿Tan tarde se da cuenta que hizo mal?

— No.

— Ya veo—caminé hacia la puerta buscando mis llaves, pero el chico me detuvo—Escucha, deberías ir a casa, es obvio que no es buena idea el que estés aquí...

— No me respondiste el mensaje—deslizó su mano por mi brazo hasta detenerse en mi muñeca.

— Te escribí en la tarde.

— No me diste una respuesta clara.

— JungKook—reproché.

— Sé que estuvo mal, sé que fui un idiota y sé que fue cruel jugar contigo de esa forma, no puedo esperar que de la nada apareceré y te diré eso como si todo fuera normal—miré sus ojos recordando la llamada que le hizo a TaeHyung, se inclinó un poco más susurrando—Dame una oportunidad, ¿Sí?

— No tiene importancia.

— Claro que la tiene, Danbi—acarició mi mejilla. Quise retroceder, pero no pude, bajé la mirada a los botones de su camisa—Oye...

— Vas a regresar a Tokyo con Jimin, seguirás tus estudios, te casarás con esa chica y salvarás a tu padre de quedar en la calle...

— No me digas eso, por favor—intentó buscar mi mirada. Incluso cuando tomó mi mentón cerré mis ojos, si lo veía terminaría aceptando y no quiero. Yo...no lo sé, sigo sin saber que quiero, ¿Por qué me lastima si lo quiero al mismo tiempo? —Danbi, mírame.

— Necesito pensar...

— ¿Quieres que me arrodille?

— No hagas eso—abrí mis ojos sabiendo que era capaz de hacerlo.

— Ven conmigo el fin de semana.

— ¿A dónde?

— Lejos de la ciudad, solo nosotros.

— Esto es...

— Hazlo.

— Tengo miedo de lo que pueda pasar, vas a ilusionarme y no voy a soportarlo—negué con la cabeza. Contuve las lágrimas retrocediendo, mi corazón se hizo pedazos cuando JungKook cayó de rodillas con la cabeza baja, intenté levantarlo, pero fue peor porque sus brazos se aferraron a mi cintura, miré alrededor agradeciendo que no hubiera nadie cerca para ver eso, no porque tuviera vergüenza, sino porque no quería que lo vieran así—JungKook, por favor.

— No vayas a dejarme tampoco—pidió. Me quedé quieta escuchándolo-Sé que eso hice hace un año, pero...no lo hagas ahora, por favor, incluso si lo merezco...—su voz se quebró. Recordé la llamada sintiendo una punzada de dolor, las náuseas estaban regresando—Dijiste que el antiguo JungKook hablaría con la verdad y créeme cuando te digo que quiero hacerlo, pero no puedo, mi padre es capaz de no hablarme, mamá estaría decepcionada de mí, no lo dice, pero lo sé...—me agaché escuchándolo—Fuiste la única que pudo entenderme en un principio, ¿Podrías entenderme ahora, por favor?

— Necesito que me entiendas también.

— Y lo hago, lo intento, lo juro.

Acaricié su cabello conteniendo las ganas de besarlo allí. Me limité a abrazarlo fuertemente, sentí sus brazos fuertes rodearme, por unos minutos me sentí segura y firme, por unos escasos minutos.

♥♥♥

— ¿Crees que sea buena idea? —preguntó mi madre cuando ya tenía un gran bolso colgado en mi espalda.

— No pienses dos veces en llamarnos—pidió papá. Él fue el primero en oponerse a este viaje de fin de semana.

— Es mejor ir de una vez y aclarar todo, ¿No? —fingí una sonrisa.

JungKook esperaba afuera en un auto muy conocido para mí, no era de su padre por supuesto, era de NamJoon, me despedí de mis padres antes de salir, no sabía exactamente para qué era ese viaje, pero estar fuera de la ciudad quizás calmaría la ansiedad y el estrés de toda esta semana, necesito calmar los nervios o me volveré loca, no quiero que la antigua yo regrese, esa que no pensaba dos veces en lastimarse. En el auto guardé silencio al igual que él, ninguno de los dos dijo nada en todo el camino, pero en mi celular llegaron algunos mensajes de Jennie y TaeHyung esperando que me fuera bien este fin de semana y que se solucionara al menos una parte del drama.