No sé exactamente cuántas fotos había traído JungKook, pero eran muchas y no había una que no me gustara. Sonreí de lado por esas donde SuHye salía sonriendo o riendo, levanté la mirada al chico que dejaba las ventanas entreabiertas para que entrara la brisa. Habíamos venido al hotel donde él se estaba quedando, no quería volver a casa.

— Cuando te conocí, solías decir que no querías hijos—comentó al llegar junto a mí. Sonreía dulcemente mirando las fotos—Decías que ser madre no era lo tuyo.

— JungKookie...—susurré— ¿Por qué dices que odiaba al mundo? ¿Era muy mala?

— Si eso fuera cierto, los chicos no se preocuparían por ti en primer lugar—señaló—Cuando te conocí estabas pasando por un mal momento, de no ser por mí habrías muerto desangrada en el baño del hospital.

— ¿Estaba herida? —me sorprendí— ¿Quién lo hizo?

— Tú misma.

Fruncí el ceño intentando entender.

— ¿Disculpa?

— Tenías depresión y ansiedad, cuando todo eso se mezclaba perdías el control—apartó algunos mechones de cabello de mi cuello—Prometimos no hacerlo más, nos...."curamos" de cierta forma, pero...seguimos corriendo el riesgo de caer.

Mis padres claramente habían omitido eso y lo agradecía porque estaba horrorizada imaginando la escena. ¿Había sido capaz de eso? Entonces caí en cuenta de sus palabras y no dudé en decir...

— Tú también te lastimabas.

— ¿Lo recuerdas? —apoyó sus brazos en sus muslos inclinándose hacia adelante.

— No, sólo...pensé en lo que dijiste—miré sus ojos ansiando recordarlo— ¿También tenías depresión?

— De alguna forma, sí, en ocasiones no me controlaba y solías decirme que te lastimaba cuando tomaba muy fuerte tus brazos—suspiró—Enfrentaste a Kai porque querías hacerle pagar por casi asesinarme...

— ¿Kai?

JungKook tuvo que explicarme quien era y cómo había aparecido en nuestra historia. Me sorprendí un montón escuchando con atención cada cosa que decía, no me contó todo, pero si lo necesario, era como un resumen. Él y yo habíamos pasado por mucho.

♥♥♥

Desperté acurrucada con la manta que JungKook me había dado, había dormido en el sofá de la habitación y él por terquedad durmió en el sillón negándose a descansar en la cama si yo no lo hacía.

No pensé que hablara enserio.

Estaba enrollado por completo con unas cobijas, formaba un puchero con sus labios que me recordó a SuHye, el pensar en ella me hizo buscar mi celular, no tenía mensajes de mamá o de papá.

"De seguro creen que estoy con YuGyeom, deben suponer que pasé la noche en su departamento"

Suspiré dejándolo en la mesa junto al sofá y me levanté, me acerqué al chico acariciando su cabello, tuve una extraña, pero familiar sensación, como si ese gesto fuera algo natural en mí. Hice un gesto con la boca sentándome a su lado, ¿Por qué incluso al escuchar su historia y la mía no podía recordarlo? Las fotos estaban en la mesa también, suspiré cerrando mis ojos acabando con mi cabeza apoyada en mis manos.

"¿Qué voy a hacer?"

Mi celular vibró en la mesa y me estiré un poco tomándolo.

YuGyeom:
Buenos días, Danbi. ¿Podríamos vernos? Quisiera hablar contigo.

 — Danbi—miré al castaño despertar. Bloqueé la pantalla de mi móvil sonriendo por obligación— ¿Qué pasó?

— Buenos días, no debiste dormir en el suelo, JungKook~ah...

— Sí—le restó importancia levantándose hasta quedar sentado. Miró alrededor somnoliento deteniéndose en mí— ¿Tienes hambre?

Sonreí esta vez muriendo de ternura, sus ojos pequeños más de lo normal, su cabello despeinado, sus mejillas algo rojas...lucía muy tierno. Esta vez por decisión propia di un corto beso a sus labios sorprendiéndolo.

— Te prometo que haré mi mejor esfuerzo por recordarte—susurré acariciando su mejilla— ¿Podrías tenerme paciencia?

— La que quieras—asintió abrazándome— ¿Cancelarás la boda?

Suspiré rodeándolo con mis brazos también.

— Es posible, vamos poco a poco.

— Puedes traer a SuHye siempre que quieras—susurró en mi oído. Cerré mis ojos escondiendo mi rostro en su cuello, me aferré con más fuerza sintiendo sus caricias en mi espalda— ¿Danbi?

— ¿Qué tienen tus abrazos que me hacen sentir segura? Eres tan...cómodo.

— Son gratis así que cuando quieras uno...

— Nunca dejes de hacerlo—pedí—Nunca me dejes.

♥♥♥

— ¿Saldrás de nuevo? —papá me miraba extrañado con una ropa diferente y el cabello mojado, además, SuHye estaba en mi cama ya lista para irnos, jugaba con sus manitos teniendo su chupón en su boquita.

— Sí, quiero...caminar un rato—mentí.

— Necesitas descansar, Danbi.

"Que triste saber que papá no quiere al hombre que es el padre biológico de mi hija"

— Estoy bien.

— Estás muy estresada con la boda, tal vez ahora que llegó YuGyeom pueda ayudarte...

— Papá, enserio, estoy bien—me acerqué a él—Estoy bien—repetí.

Tomó mis brazos acariciándolos y apretándolos ligeramente. Sonrió en medio de un suspiro mirándome algo preocupado.

— Si algo aprendí es que siempre que dices eso nada está bien—recordé lo que JungKook me había contado de mis heridas en las muñecas. Según él, yo solía decir eso todo el tiempo—Quiero que confíes en nosotros.

— Lo sé.

— Ten cuidado, tú y SuHye son importantes no sólo para mí, también para tu madre—me abrazó.

Guardé silencio mirando a la niña jugar en mi cama.

♥♥♥

— Cuando crezcas, SuHye, hazme el favor de no enamorarte—besé su cabecita caminando por la acera—Bueno, es inevitable, es obvio que en un futuro crecerás y querrás hacer tu vida...—me interrumpí a mí misma—JungKook es alguien bueno y tenemos un pasado, pero YuGyeom...—chasqueé la lengua—Él me gusta y creo que podríamos tener un futuro.

SuHye jugaba distraída con un botón de mi blusa. La pobre ya estaba aburrida de escuchar a su madre, lo que hiciera debía pensar en ella y en mí. No puedo casarme con JungKook porque él debe arreglar su situación con su esposa y su hijo, además de su padre, no puedo cancelar la boda porque...no lo sé.

Sería muy feo cortarle las alas a YuGyeom.

Pero sería el doble de feo si sigo alimentando sus esperanzas.

— El amor es muy complicado, más sencillo sería que recuperara mis recuerdos y así no dudaría tanto en dejarlo.

Me detuve en el acto sintiendo un fuerte dolor de cabeza. Cerré mis ojos llevando mi mano a la frente, me apresuré en llegar al restaurante para beber mi píldora, SuHye se mantuvo sentada en mis piernas jugando con los cubiertos, YuGyeom llegó poco después tomando asiento y cargando a la niña quien se alegró de verlo. Ella también lo quería mucho porque era la única figura paterna que conocía...hasta ahora.

SuHye estaba muy pequeña para explicarle todo, pero era inteligente, debía hacer lo correcto por ella.

— ¿Durmieron bien? —me miró. Parpadeé varias veces asintiendo algo seria—No pensé que la traerías, quería hablar contigo...

— Sobre lo que dijiste de JungKook.

— ¿Cómo...?

— ¿Por qué otra razón me pedirías vernos? —tomé la copa de agua bebiendo un poco de ella—No quiero tocar el tema, por favor.

— Danbi, no quiero que peleemos.

— Yo tampoco.

— Y no quiero perderte—lo miré—Ni a ti ni a SuHye, las amo a ambas—asentí—Lamento...

— Enserio, YuGyeom, no quiero nombrar a JungKook ahora—negué con la cabeza inclinándome atrás en el respaldar de la silla—Nosotros...creo que...debemos ver si esto funcionará...

— ¿Viniste a terminar conmigo?

— Vine a decirte que con tantas cosas que estoy pasando quisiera tomarme un momento para aclarar mi mente—corregí—Me gustas, me gustas mucho y....eres muy bueno conmigo y con la niña, ella te quiere también, eso es importante.

— ¿Pero...?

— Pero con JungKook tenía una historia y quiero ver si esa historia debe seguir o no—fui honesta.

— ¿Le estás dando una oportunidad?

Le quité el tenedor y el cuchillo a SuHye ya que era peligroso para ella. Lo dejé sobre la mesa, pero más lejos.

— Estoy siendo justa.

— Justa—repitió con ironía.

— El destino nunca actúa en nuestra contra, él volvió y si volvió es por mí, merece que lo deje intentarlo—defendí—Así como esta vez el destino te ha dejado ser mi prometido y novio, así como también hemos dormido en la misma cama—ataqué.

YuGyeom guardó silencio no muy convencido, se le notaba, pero comenzó a jugar con SuHye y sólo me dediqué a mirarlos.

¿Enserio voy a escoger entre ellos dos? Esto era muy cliché, ¿Debía considerarlo un triángulo amoroso?