II. Capítulo 19
Unos días después
Se suponía que volver a mi rutina ayudaría a mi supuesta recuperación. Eso escuché decir al doctor en el último chequeo, mi cuerpo seguía con los leves moretones que desaparecerían en poco tiempo, de vez en cuando mi cabeza dolía y debía tomar unas píldoras para calmar la molestia en ella.
En la universidad me sentía como en el primer día de clase (aunque no sé cómo haya sido), supongo que no tenía amigos aquí, nadie vino a hablarme ni a preguntarme como estaba, en mi trabajo fue diferente, algunos compañeros se ofrecieron a ayudarme en cualquier cosa, me explicaron lo que hacía, entre otras cosas. Cuando me quedaba sola en la pequeña oficina alguien más llegaba.
— Danbi—suspiré girándome a la puerta. Un chico de cabello oscuro vino directo a abrazarme—No debiste haber venido a trabajar, debes descansar más...
— Ahh...—di palmaditas en su espalda separándome luego—El doctor dijo que sería buena idea, lo siento, ¿Puedes decirme tu nombre?
— Soy YuGyeom, Kim YuGyeom—sonrió de lado—El hijo de tu jefe.
"Es muy lindo para ser el hijo de mi jefe"
♥♥♥
5 meses después
— ¡¿Es enserio?!—chillé en cuanto Jennie acabó admitiéndolo.
— ¿Soy mala amiga? Digo, primero estuve con su amigo y ahora...
— Creo que TaeHyung y tú hacen muy buena pareja—admití sonriendo divertida—No te sientas mal, si las cosas con Jimin no te salían bien...
— Es gracioso porque la antigua Danbi me habría dicho que estaba loca.
Disminuí un poco la sonrisa, había escuchado esas palabras muchas veces, "si la antigua Danbi...", suspiré colocando la excusa de que debía irme. Colgué mirando la habitación del hotel, toqué mi espalda bajando la vista a mi vientre abultado, había aceptado salir de Corea por unas semanas con YuGyeom por simples razones, el chico era muy atento conmigo, nunca intentó sobrepasarse y cuando supo que estaba embarazada me apoyó aún más.
Él era muy lindo.
Acerqué la laptop de la mesa de noche colocándola frente a mí, abrí esa carpeta de imágenes que tenía guardada, en ella aparecía un chico de cabello castaño bebiendo adorablemente una malteada y junto a él salía yo mirándole. Era el mismo chico que vi en la foto que Tae me mostró en el hospital hace unos meses, no sé porque guardaba esa carpeta llena de imágenes, pero me gustaba verlas de vez en cuando.
Justo una semana después de haber comenzado a trabajar y estudiar le pedí ayuda a mi madre para quitar el color rubio a mi cabello regresando al natural. Me gustaba el color castaño que tenía, ya lo tenía mucho más largo.
Unos toques a mi puerta se escucharon.
— Voy—me levanté tardando un poco. Al abrir sonreí al ver quien era.
— ¿Lista para salir a....? —notó mi ropa para estar en casa—Danbi, ¿No te has arreglado?
— Lo siento, estuve hablando con mi amiga y lo olvidé—cerré la puerta cuando entró— ¿Me esperas unos minutos?
— Esperaré, ¿Te has sentido bien? —acarició mi vientre— ¿Cómo está la pequeña SuHye? —sonrió.
— Ha estado muy tranquila—coloqué mi mano sobre la suya. En un comienzo pensé que él podría ser el padre de mi bebé, pero mi sexto sentido decía que no era posible. De todas maneras, no le necesitaba...creo.
♥♥♥
Estuvimos paseando por las calles de París, tomé algunas fotos con mi cámara, la había traído al encontrarla bien guardada en casa, tenía una franja roja en el lente, había descubierto que tomar fotos de cualquier cosa era relajante y divertido. YuGyeom había ido a buscar algo caliente para beber, el frío de esa noche era aceptable, pero para mí era mucho.
Miré las fotos de mi cámara sonriendo satisfecha en las que ambos salíamos juntos. Levanté la vista notando la torre Eiffel a lo lejos, con las luces iluminando la noche apunté mi cámara ahí apreciando aquella vista.
— Es muy hermoso—escuché decir una voz masculina a mi derecha. En aquel puente donde estaba con otras personas noté un chico muy familiar. Él también sostenía una cámara.
— Lo es—asentí apoyando mis brazos en el muro mirando el agua correr de manera lenta bajo nosotros. La segunda vez que pude ver su rostro levanté mis cejas notando que era el mismo de las fotos de mi laptop, pero con un cabello más oscuro—Lo siento, ¿Te conozco?
Sus ojos brillantes se posaron en mí, tenía un rostro muy dulce.
— No lo creo—frunció su ceño— ¿Cuál es tu nombre?
— Yoon Danbi—hice una pequeña reverencia.
— Jeon JungKook—sus ojos bajaron un poco—Oh, felicitaciones, ¿Cuánto tiempo tienes? —señaló mi vientre.
— Cinco meses—lo acaricié sonriendo de lado—En unos meses la tendré en brazos.
"¿Dónde había escuchado su nombre?"
— ¿Tienes su nombre?
— SuHye—asentí—Me gusta cómo suena—volví a mirarlo.
— En unos meses también seré padre así que...creo que entiendo esa ansiedad y ganas de conocerlo—asintió sonriendo.
— Felicitaciones para ti también, ¿Viniste con tu novia?
— Es mi esposa, estamos de vacaciones nada más, ella ama a París—comentó divertido—Tiene cinco meses como tú, tendremos un niño.
— Que tierno—sonreí— ¿De qué parte de Corea son?
— Venimos de Tokyo, yo soy de Corea del Sur, pero ella nació en Japón, aunque sus padres son coreanos—explicó encogiéndose de hombros—Hace cinco meses que nos casamos.
— Espero que su matrimonio dure mucho tiempo—sonreí contenta por él. Recordé que YuGyeom no regresaba, estaba tardando mucho.
— Debo irme, Danbi, mucho gusto—hizo una pequeña reverencia antes de irse. Lo miré alejarse y di un respingo cuando alguien tocó mi brazo.
— Lo siento, había muchas personas en la cafetería—me entregó un chocolate caliente— ¿Todo bien?
— Sí—sonreí mirándole—Todo bien.
♥♥♥
— Espero que hayas disfrutado este día—comentó cuando nos detuvimos en mi puerta.
— Siempre disfruto contigo.
— Intenta descansar, ambas lo merecen.
— Tu también—miré su cabello, sus ojos, su nariz, sus labios...era ahora o nunca—YuGyeom, yo...quiero decirte algo, tal vez me tomes por loca.
— No lo creo—frunció el ceño. Tomé su mano y éste la apretó con suavidad— ¿Todo bien con la bebé?
— Sí, no tiene nada que ver con ella—aseguré siendo valiente al verlo fijamente—Esto tiene que ver conmigo, yo...
— Tú...
— Me gustas—confesé—Sé que eres el hijo de mi jefe, pero también sé que he trabajado contigo y eso es lo que me volvió más cercana a ti—levantó sus cejas claramente sorprendido—Sé que tienes el derecho a decir no, pero...por favor no me rechaces, no tengo la culpa de haber sentido esto.
— Danbi, yo...
— Haré una última cosa antes de que te vayas—lo interrumpí—No necesitas palabras, tu reacción me lo dirá todo.
No apartó sus ojos de mí cuando me coloqué de puntitas alcanzando sus labios. Sus dulces y rosados labios, temía que me alejara o me tratara como si estuviera loca, pero para mí buena suerte no pasó, el chico correspondió el beso haciéndome sonreír en medio de éste. Sin despegarme de él abrí la puerta de mi habitación llevándolo conmigo dentro.
Esto de alguna u otra forma es diferente a lo que suelo colocar en mis historias.
La foto que Danbi dice ver en su computador es esta...
PD. Amo leer sus teorías 😊
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