Capítulo 8
—Y eso fue lo que hicimos, caminar un rato por el parque—resumí. Mi madre sonrió por eso, se mostraba aliviada, terminaba de guardar su almuerzo para irse al trabajo—JungKook dice que podemos pasar la navidad en su casa. Ellos no hacen muchos planes así que...
— Hablaré con tu padre sobre eso—mamá me miró—Me alegra mucho que ese chico esté cumpliendo su palabra.
Fruncí el ceño sin entender mucho.
— ¿Qué quieres decir?
— Me refiero a que realmente está funcionando, luces un poco más cómoda con él, mira lo que ha hecho, conociste a dos de sus amigos...
— Mamá, JungKook sólo me hace compañía, nada más.
— No importa, estar mucho tiempo en la soledad no es bueno—recogió su bolso—Las personas se acostumbran a ello. ¿Vendrá hoy?
— Supongo—me encogí de hombros. El chico nunca me avisaba si vendría—Que tengas buen día.
— Tú igual, cielo.
Coloqué algo de música en la sala, usé mis canciones favoritas mientras me preparaba el desayuno cantando las partes que me sabía. La canción que JungKook me había enviado la escuché por horas anoche, me había quedado dormida con ella. Pensé unos minutos en lo que había dicho, ¿Qué pienso hacer para el próximo año?
Antes de darle un bocado a mi pan tostado, el timbre se escuchó. Acomodé algunos mechones de mi cabello dirigiéndome a la puerta, ahí estaba él sonriendo como siempre. Traía un bolso en su hombro y lucía cansado.
— ¿Dormiste bien? —cerré la puerta al dejarle entrar. Se deshizo de su chaqueta dejándola en el perchero.
— Un poco, tengo un examen mañana y estuve estudiando, pero olvidé hacer los deberes de esta noche...
— ¿Quieres que te ayude? —ofrecí— ¿Tienes hambre?
— Te escuchas como mi madre.
— Oye—tomé su brazo llevándolo a la cocina—Iba a desayunar, pero puedes tomar mi plato prepararé otro, en cuanto termine me coloco a ayudarte.
JungKook fruncía el ceño adorablemente, sus lentes lo hacían ver más tierno y resistí el impulso de tomarle una foto. Según él los usaba siempre que debía leer o escribir, mordió su labio varias veces arrugando la nariz. Sonreí de lado negando con la cabeza mientras la música acompañaba la ocasión.
— Me gustó tu canción, ¿Cuándo la hiciste?
— Se me ocurrió en clase, llegué a mi casa y la grabé—comentó sin verme.
— Es muy bonita, tienes un gran talento, JungKook.
— Gracias.
Hice una leve mueca de desagrado. El chico no me estaba colocando atención, me levanté pensando en algo.
— Tomaré tu celular para colocar algo de música.
— Claro—siguió escribiendo. Llevé el aparato al equipo de sonido, desconecté mi móvil colocando el suyo, su lista de canciones eran casi dos mil, en otra lista tenía las suyas con sus amigos, subí todo el volumen antes de colocarla y cuando ésta comenzó a sonar me causó gracia que JungKook tuviera una canción así. En minutos el chico estaba a mi lado bajándole volumen— ¿Qué crees que haces?
— Espera, espera, era tu parte—le quité el celular repitiendo el inicio. Primero comenzaba Jimin o eso me parecía y entonces venía él, debía decir que me gustaba como se escuchaba su voz— ¿Hace cuánto fue esto?
— Un año—el chico se mostró divertido por mi actitud.
— ¿No es algo...intensa?
— ¿Seductora quieres decir? —lo miré de pies a cabeza. Tenía unos Jeans negros, botas cafés y camisa negra, levantó una de sus cejas ante eso— ¿Qué sucede?
— No te imagino siendo seductor.
— ¿Disculpa?
— Admítelo, eres muy...—me sonrojé—Tierno.
— Mira quien lo dice—se mostró ofendido—Tengo mi lado oscuro también, jovencita—reí ante eso. Incluso diciéndolo era gracioso— ¿Quieres verlo?
— ¿Vas a seducirme? —una parte de mí moría por verlo.
— No es necesario, quiero que intentes hacer estos pasos con sensualidad.
— No voy a...
— Lo harás o te besaré—advirtió dejándome atónita. Repitió la canción indicándome uno que otro paso simple, al juntarlos noté que estaba equivocada, JungKook si podía verse adorable y seductor al mismo tiempo. Descaradamente miraba cuando llevaba sus manos a su cinturón moviendo su cintura al mismo tiempo y no pude evitar sonrojarme. Jamás podría verme tan...así.
Cuando fue mi turno el chico tuvo la delicadeza de corregirme, sentirlo tan cerca no me colocaba tensa, pero sentirlo moverse mientras me indicaba como hacerlo si era...algo inusual. Al cabo de una hora había aprendido más de lo que quería.
— Quiero verte ahora.
— ¿Siendo seductora? —bromeé.
— Debes estar un poco más seria y haz esto—mordió su labio. Imité el gesto riéndome sin evitarlo—Colocaré la canción y te mantendrás al frente de mí, así veremos los pasos del otro, ¿Lista?
— No creo que no pueda reírme.
— Danbi—reprochó divertido.
— Es que si haces eso con tu labio es adorable todavía.
— Voy a enojarme si sigues diciéndome así.
La canción se reinició y fue que me olvidé de las risas. JungKook estaba serio, sus ojos miraban fijamente los míos, había memorizado la mayoría de los pasos, cuando me tocó imitar el gesto de las manos en el cinturón mordí mi labio para no sonreír.
Las piernas del chico eran mucho más largas que las mías, pero sorprendentemente le dejé en claro que podía moverme tan bien como él, quizás también sea por el hecho de querer jugar seductoramente también. En toda la canción ninguno dijo nada, pero en el coro se me complicó esos saltos y movimientos, la coleta se me cayó por completo, pero JungKook advirtió con la mirada que no podía detenerme.
Perdí todo rastro de seducción porque reía a veces y me sentía como una loca, pero al terminar. JungKook se unió a mi risa, me gustó escucharlo así y no verlo tan serio como antes.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro