Capítulo 49
Mi celular estaba vibrando en la mesa de noche, recién me había acostado para ir a dormir después de tomar una ducha, preocupada al creer que sería JungKook respondí sin siquiera mirar el número.
— ¿Hola?
— Hola, Danbi, disculpa que te llame a esta hora—esa voz... ¿Qué demonios hace llamándome? — ¿Estabas durmiendo?
— Iba a hacerlo, ¿Ahora me llamas para que seamos amigas? —fui cruel. Escuché un suspiro de su parte, estaba molesta con ella aún. No me importa lo que Kookie diga.
— No soy tu enemiga, sé que después de esto me agradecerás—hizo una pausa—Kai acaba de llamarme hace minutos.
— ¿Qué? ¿Por qué?
— Estuve escribiéndole todo el día, le pedí que me respondiera, que sólo quería hablar con él y....se escuchó nervioso.
— ¿Dónde está?
— En un hostal, tengo la dirección anotada, le mentí al decirle que quería verlo...
— Yo sí quiero verlo.
— Danbi...
— Quiero verlo antes de entregarlo porque me encantaría decirle un par de cosas.
— ¿Sabes que eso es peligroso, cierto?
— ¿Entonces para qué me llamas? Avisa a la policía.
— Ese es el problema, no quiero avisarles creo que...podemos...hacerle entrar...en razón—vaciló con sus palabras. Miré a un punto ciego de mi habitación, ¿IU realmente creía eso? ¡¿Me estaba hablando enserio?!—Sí, lo sé, entiendo que JungKook estuvo a punto de morir, sé que estuvimos preocupados por él durante casi tres días, pero...conozco a Kai más tiempo que tú, él...
— Sabías que odiaba al chico, si te hubieses preocupado por Kookie hubieras dicho algo.
— ¿Preocuparme por él? Pero si te molesta que lo haga.
— Mira—suspiré—Siendo honesta, no confío en ti y nunca me has agradado, no entiendo porque me avisas sobre Kai cuando puedes llamar a la policía, pero si intentas encubrirlo no dudaré dos veces en culparte y no me importa si...
— Él me gusta.
— ¿Qué? —su voz había sido casi un susurro.
— Te avisé porque no tengo a nadie más quien decirle esto y siento que me vuelvo loca—suspiró. Sonaba cansada además de triste—Me gusta Kai, ¿Sí? Cuando intenté decírselo él sólo me echaba en cara que Kookie esto y Kookie lo otro...—volvió a suspirar—Nunca conversábamos de algo que no fuera él, cuando te conocí en el cine me había propuesto a contarle, pero...
— Espera—intenté asimilar lo que decía— ¿JungKook sabe algo de esto?
— ¡No! ¡Claro que no! Se enojaría conmigo y más si sabe que Kai me llamó después de lo que pasó—guardé silencio. Eso no me convencía—Sé qué crees que sigue gustándome o que Kookie puede engañarte conmigo, pero déjame decirte que estás mal, JungKook te ama realmente, Danbi, no dudes de eso.
Recordé los mensajes de audio que había escuchado en su celular. Me dejé caer en la cama de nuevo mirando el techo, entonces, ¿Si JungKook no lo sabía por qué me lo estaba contando a mí? A la novia de su ex.
— Sigo sin entender, ¿Por qué...?
— ¿Por qué seguiste con Kookie cuando supiste de sus defectos? —interrumpió— ¿Por qué lo querías, cierto? Sentías que podías ayudarlo a cambiar...
— Kai no cambiará, IU—aclaré siendo algo más dulce—Intentó asesinar a una persona, ¿Qué mente cambia después de eso?
— Está pasando por momentos difíciles...
— Enserio que estás ciega por él.
— Quiero que vayas conmigo.
— Estás loca.
— Danbi...
— Si veo a ese chico no dudaré dos veces en golpearlo por lo que hizo a JungKookie—advertí—Saldrá corriendo si me ve o puede lastimarte incluso.
— Kai jamás me haría daño.
— Suenas estúpida hablando así.
— Te pido que me apoyes, si Kai no cambia de opinión...
— Lo entregarás.
— Lo entregaremos—sentenció—Por favor, ve conmigo mañana.
— Te escribiré por la mañana—rodeé los ojos. Ni loca la acompañaría.
En unos días tendríamos una galería en el salón del edificio, sería una exposición de todos los dibujos que hemos hecho, por eso, la profesora quería todo en orden y quería que organizáramos nuestros trabajos desde el mejor hasta el menos convincente, quería que se notara el cambio del comienzo al final, tendría mi propio espacio en el salón, me encontraba calculando en mi mente cuanto usaría en la pared, tenía mi cuaderno en mis piernas junto a un lápiz entre mis dedos, escuchaba a la profesora dar algunos datos, su voz hacía eco en el salón, mi celular vibró y miré dos mensajes.
El primero era de IU.
¡Hola! Supongo que se te olvidó lo de anoche, ¿Te animarás? ¿Nos vemos en la tarde? Por favor.
Y luego estaba uno de JungKook.
Sé que estás en clase, pero estoy aburrido aquí en mi habitación. Además, no descansé muy bien anoche. ¿Quieres que pase a recogerte? Podríamos ir a ver una película.
Sonreí de lado, Kookie había dejado su curso lo cual me dolió al principio ya que él me animó a esto, pero seguía asistiendo a sus clases en la universidad. Suspiré mordiendo mi labio, no dejaría de verlo para ir con IU.
Cuando la clase acabó, recogí mis cosas saliendo del salón. La chica volvió a escribirme, terminé aceptando, pero con una condición, ella esperaría a que le avisara que iba saliendo de casa. La realidad era que quería ver a JungKook, si no había descansado necesitaba ayuda.
Llegué a su casa una hora después, su padre se encontraba trabajando como siempre mientras que su madre había ido a casa de una amiga. El chico tenía una mirada cansada y esas ojeras resaltaban más, su habitación estaba por primera vez desordenada, su cama estaba hecha un desastre con las sábanas, su escritorio estaba asqueroso, la ropa estaba tirada por todos lados, en la mesa de noche noté los frascos de medicina. Dejé mi bolso en la silla girándome para verlo.
— ¿Qué pasó aquí?
— He estado algo inquieto—sonrió nervioso. Me acerqué tomando su mano sentándolo en su cama—No quise preocuparte...
— Tus pupilas están muy dilatadas—señalé. Al pasar mis dedos por su cabello estaba enredado además de algo sucio— ¿JungKook te has duchado siquiera?
— Estoy bien—colocó sus manos en mi cintura, pero sus dedos jugaron con mi blusa, lo detuve mirando la medicina y luego a él.
— ¿Tomaste una de esas?
— Sí, hace unos minutos, tengo anotado en mi celular el horario de cada una.
— ¿Por qué tienes tantas? —quise saber acercándome a ellas. Tenían nombres extraños junto a un récipe del hospital, fruncí el ceño notando que en el papel habían anotado dos nombres y frente a mí se encontraban cinco frascos. JungKook me rodeó con sus brazos depositando dulces besos en mi cuello, mi mente estaba sospechando de algo por lo cual no coloqué atención a sus besos— ¿Quieres decirme algo?
— Sí, te amo mucho—mordió mi mejilla. Lo detuve girándome para enfrentarlo.
— ¿JungKook, te estás automedicando?
— ¿Qué?
— Tu doctor te mandó dos medicinas, una para el dolor y otra para la inflamación, aquí tienes tres frascos de más-los tomé mirando los nombres sin entender—Mírame—llamé su atención— ¿Para qué son estas?
— Yo las compré.
— ¿Para qué?
— Esta es para dormir—explicó sentándose. Lo notaba muy inquieto, se movía de más al hablar como si estuviera nervioso o ansioso—Esta también y ésta igual.
— ¿Por qué tienes tres frascos con diferentes nombres? —levanté una ceja.
— No puedo dormir.
— Entonces puedo arrojar estas...
— ¡No! —me detuvo.
— Mira cómo estás, apenas y dejas de temblar, tus pupilas están realmente dilatadas, esto es un desastre y esas ojeras no dejan nada bueno—señalé. JungKook bajó la cabeza, me agaché frente a él queriendo saber la verdad—Oye, no voy a enojarme, sé sincero, ¿Para qué son estas medicinas?
— Esta me la dio Tae, dijo que lo ayudaba a dormir cuando tenía problemas para conciliar el sueño—señaló—Esas dos las compré yo, el de la farmacia no quiso dármelas al principio, dice que son calmantes muy fuertes, pero he notado que sólo me dan ansiedad.
— Por eso estás así—entendí— ¿Las tomaste anoche?
— Dupliqué la dosis creyendo que me ayudaría, pero fue mala idea...
— ¡¿Duplicaste la dosis?!—el chico guardó silencio—Dios mío, JungKook, no hagas eso, no sabes cómo reaccionará tu cuerpo, si lo que te dio Tae no funciona mejor pregunta y no te automediques...
— Tengo sueño, pero no quiero dormir.
— Claro porque tienes esto en tu cuerpo...
— No, no es eso, es que tengo pesadillas—explicó sonrojado—Me despierto creyendo que estoy atado todavía y la ansiedad me hace querer beber las píldoras—sus ojos me parecieron que se volvieron cristalinos—Lo siento.
— Shh, shh—lo abracé con cuidado sin soltar los frascos, acaricié su espalda besando su mejilla—Tranquilo, es normal estar así, no lo vuelvas a hacer, no es bueno para ti—me separé mirándolo—Haremos esto, irás a tomar un baño y yo me desharé de estas píldoras, te dejaré las que te envió el doctor, me encargaré de tu habitación, quiero que duermas, JungKook, ¿Has comido algo?
— No, yo...
— Te prepararé algo.
— Danbi...
— Nada, ve a ducharte, comenzaré a limpiar esto—di un corto beso a sus labios. IU tendría que esperar.
************************
El próximo capítulo será el antepenúltimo 😊 Gracias de nuevo por las 1k lecturas, para ser mi primera historia de BTS no pensé que llegaría tan lejos (para las que aman a Jimin quiero avisar que tengo un fic en mi perfil de él llamado "Ángel Caído")
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro