— ¡Danbi! —Jisoo saltó a mi vista de la nada con una radiante sonrisa. Llevaba su cabello recogido en dos trenzas haciéndola lucir más dulce— ¿Recién llegas?

— Sí, iba a escri...

— ¡Hola! —Jennie sonreía cuando se acercó a nosotras. Junto a ella iba otra chica de cabello rojizo y de rasgos finos, pero de rostro redondo—Danbi, ella es...

— Rose—presentó Jisoo—Queríamos presentarlas antes.

— No puedo creer que JungKook realmente tenga novia—llevó sus manos a sus mejillas.

— ¿Por qué todos dicen eso? —me crucé de brazos. Jisoo era la más baja de las cuatro, junto a J-Hope era gracioso verla.

— Kookie es tan...él en ocasiones—resumió Rose.

— Pero es lindo, lindo de tierno—añadió Jennie.

— Los chicos lo cuidan mucho—miré a Jisoo quien me sonrió dulcemente—El muchacho es bueno, Hoseok dice que ha estado más centrado desde que te conoció.

— Ni hablar de Jimin—habló Jennie colocando sus manos en su cintura—Cuando les dijo a los chicos sobre una canción para ti, estaba nervioso y tenso, muchas veces se frustraba por tantas ideas en su cabeza.

— Gracias por decírmelo—susurré algo incómoda. Estas chicas eran muy seguras de sí mismas, me hacían sentir lo contrario— ¿Ahora iremos por los chicos?

— No—Rose sonrió cruzándose de brazos—Queremos tener un momento de chicas y por eso las muchachas te escribieron, podemos ir a la cafetería que queda por aquí cerca.

Jisoo se prendió de mi brazo siguiendo a las muchachas, así que esa Rose era la que ponía de miles formas a Jin. Sin dudar pregunté en voz baja.

— ¿Rose tiene algo con Jin? —la miré.

— ¿Algo? —frunció el ceño—Oh, no, aún no, pero intentamos hacer que pase, ambos se gustan, sólo que son muy tímidos para admitirlo.

— Creí que...—algo me decía que por esa misma razón es que Jin estaba triste ese día. Por no ser capaz de decirlo, yo también quería ayudar, si lo molesté con lo de JungKook esto era lo menos que podía hacer-Si hay algo que pueda hacer, dímelo.

— No te preocupes, lo haré—asintió y señaló mi flequillo—Te luce bien.

— No creo que a Kookie le guste.

— Cierto, le encantará—me guiñó un ojo.

— Así que también cantan—concluí mirándolas— ¿Sus novios las obligaron?

— Eres muy tierna—sonrió Rose apoyando su brazo en mí—Ellos no son los únicos que pueden hacerlo bien, de hecho, no saben que lo hacemos.

— ¿Por qué?

— Jennie tiene miedo escénico, Jisoo y yo a veces hacemos bailes o coreografías de nuestras canciones, pero si una no puede enfrentarlo las demás no podremos avanzar.

— Lo peor es que para la graduación me pidieron que cantara algo—comentó Jennie sonrojada, su cabello caía liso por debajo de sus hombros—No pude decir que no, se veían muy emocionados.

— Pero no puedes obligarte a ti misma.

— Danbi, eso no es obligarse, es querer hacerlo y enfrentarlo—corrigió Rose—Jennie es muy buena, tiene una voz dulce.

— No puedo presentarme sola.

— Te hemos dicho que podemos hacerlo contigo—intervino Jisoo después de dar un sorbo a su café—Incluso Danbi podría venir.

— ¿Qué? —la miré—No, yo no...

— Jimin dijo que bailabas, al menos eso le dijo JungKook—señaló Jennie y las otras dos me miraron curiosas, en especial Jisoo.

— ¿Bailaste con JungKook?

— Él sólo me enseñó unos pasos de una de sus canciones...—me sonrojé. Ese chico había revelado mucho para mi gusto—No canto.

— Lo harás, deberíamos intentarlo.

— ¡Buena idea! Jennie, anímate, Danbi lo hará y dice no hacerlo, pero terminará aceptando.

— Pero yo...—Rose cubrió mi boca con su mano causándome gracia. Estas chicas eran un caos perdido, igual que sus chicos.

Hubo un cambio de planes al final de todo, terminamos esperando a los chicos en el centro comercial, veríamos una película en el cine, Jisoo y Rose eran muy extrovertidas mientras que Jennie intercambiaba algunas palabras conmigo, la veía por mucho rato preguntándome algo, cuando lo notó sonrió de lado.

— ¿Qué? —veía unos conjuntos de ropa en la vitrina de la tienda, las chicas seguían adelante sin percatarse.

— ¿Puedo preguntarte cómo conociste a Jimin? —me crucé de brazos cubriéndome con el suéter.

— Fui a una fiesta con Jisoo, ella y J-Hope habían estado arreglando nuestro encuentro—rodeó los ojos negando con la cabeza—Recuerdo que desde el primer momento me pareció encantador, Jimin me sacaba una sonrisa incluso en momentos difíciles.

— ¿Hace cuánto de eso?

— Dos años—aquello me sorprendió—Muchos creen que Park Jimin es difícil de tratar, se presiona en la mayoría de las cosas, pero no puedo reprocharlo, en sus momentos así lo mejor que puedo hacer es abrazarlo por detrás y recostar mi mejilla en su espalda, eso siempre lo calma.

La imagen tierna vino a mi cabeza, no pude evitar sonreír de lado. Me gustaría llegar a un año tal vez con JungKook, me sentiría completa o quizás quisiera alcanzar más años. Jennie me miró cuando guardé silencio, los chicos venían a lo lejos caminando, reían entre ellos, Jimin y Tae estaban a ambos lados de Kookie quien intentaba abrochar un botón de su camisa.

— Creo que va a encantarle.

— ¿Qué? —regresé a la realidad.

— Tu estilo de hoy, si necesitas consejos o una amiga puedes llamarnos.

— Lo tendré en cuenta—asentí. Hoseok fue directo donde Jisoo abrazándola, Jin se sonrojó por Rose, pero la saludó con un gesto de mano y ésta igual, Jennie fue donde Jimin susurrándole algo. Tae que estaba con JungKook intentaba ayudarlo.

— ¿Qué sucede? ¿No pueden con un botón? —bromeé mirándolos. La expresión en el rostro de Kookie fue inexplicable, sus ojos me recorrieron entera y a pesar de no tener la gran cosa a él pareció gustarle.

— Hola, Danbi—saludó Tae—JungKook tiene un botón atascado, pero no quiere dañar la camisa incluso cuando debe hacerlo.

— Es mi camisa favorita.

— Tienes muchas camisas blancas—fruncí el ceño-Déjame ver-eché un vistazo acercándome un poco más. El chico dejó caer sus brazos rindiéndose, hice un poco de fuerza logrando sacar el botón y volverlo a introducir correctamente—Listo.

RM se había quedado dormido, Jin no dejaba intercambiar opiniones sobre la película con Rose, ambos parecían cómodos con eso, Hoseok y Jisoo lucían concentrados en las escenas ya que guardaron silencio durante horas, Jennie miraba a Jimin cuando sus manos se encontraban entre las palomitas, era adorable verlos, Suga veía su celular en ocasiones bebiendo algo de gaseosa y Tae se encontraba en medio de JungKook y yo.

No lo había visto como molestia hasta ahora, quería estar al lado del chico, pero éste nunca me miró. Hice una leve mueca levantándome, escuché una voz llamarme, pero salí de la sala dirigiéndome al baño.

Al salir de éste, una mano tomó mi muñeca dándome un pequeño susto. El muchacho sonrió con esa típica picardía suya.

— ¿Estás bien?

— Sí—mentí.

— ¿Enserio? —levantó una de sus cejas.

— ¿Para qué me preguntas? Ya sabes la respuesta—me encogí de hombros. Kookie besó la comisura de mis labios y fue interrumpido por otra voz femenina.

— ¿JungKook?

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Foto (de izquierda a derecha) Jisoo, Rose y Jennie 😉