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capitulo 55.

Sheila

Estaba en mi cama mirando la pantalla de mi telefono, Michael no me ha llamado aun como lo prometió en la madrugada y mi cuerpo duele como si mil animales hubieran caido sobre mi, creo que un poco de cardio al despertar no me ha hecho bien.

Mi telefono comenzó a sonar y lo atendí con emoción, espero que sea Michael, de todos modos no vi la pantalla o el nombre del contacto.

- ¿Mike? -dije emocionada.

- Soy Javon, ojala me atendieras asi... -rió.

- Hola, ¿que pasa?

- Ay, que seca eres.

- Lo siento, ¿como estas, querido amigo?

- Asi esta mejor, bueno llamaba para decirte que pasado mañana es el cumpleaños de Blanket y Michael me dijo que te avisara.

- Lo sabía, igual gracias por repetirlo. - reí. - ¿Crees que podrían venir por mi? no quiero ir en motocicleta.

- Esta bien, te avisaré despues o quizas tu amor.. "Michael" - rió. - cuidate.

- Igual tu, tonto.

Corté la llamada y dejé el telefono en mi mesita, otra vez. A los segundos me decidí dormir Michael no me llamará esta noche.. por algo envió a Javon.

Michael

- ¿Entonces una pequeña dosis de esto y podré dormir? - pregunté mirando el medicamento.

- Claro que si, usted dormirá como un bebé.. y cada vez que se le acabe puede llamarme. - estiró su mano. - un placer servirle.

- Muchas gracias a usted. - le dije estrechando su mano.

- Llameme por cualquier emergencia. - el asintió. - lo acompaño a la salida.

El asintió y fui detrás, me di la vuelta y subí a mi habitacion luego de que el se fue. Dejé los medicamentos sobre mi mesita de noche y me senté en la cama, eran las dos de la madrugada y habia prometido hablar con Sheila pero no pude. Mañana me espera un largo dia y no quiero estar somnoliento pordoquier.

Salí al pasillo y me encontré a Javon preparando café.

-¿Hablaste con ella? - le pregunté mientras sacaba un par de frutas de la heladera.

- Hablé con ella, me contestó con tanta emoción pensando que era usted. - sonrió. - No sé que se llevan entre manos pero yo creo que son pareja.

- Lo somos. - le confirmé. - Sheila, es mi chica ahora. - sonreí.

- ¿En serio?, Hombre, debes disfrutarla. - dijo golpeando mi hombro. - ella es una muñeca, es preciosa.

- No es una muñeca, es una mujer y la trataré como tal. - dije y comencé a comer. - Estoy intentando comer algo, Sheila me ha amenazado.

- Creo que ha hecho lo mejor, no es por ser grosero pero hombre, estas muy flaco.. tal vez deberias hacer musculo en el gimnasio con Sheila. - tocó mi espalda.

- Javon, estoy completamente bien y no voy a ir al gimnasio porque no me gusta hacer ejercicio, estoy acostumbrado a bailar y ese es mi unico ejercicio. - tomé un poco de agua.

- Esta bien.. solo fue un comentario, ¿que tal es la vida en pareja?, a mi, mi mujer me tiene cansado e insiste que tengo que decirle para quien trabajo. - suspiró.

No me agradaba que ellos tuvieran que mentirles a sus familias, los quiero mucho y son mas que mis empleados y no me gustaría que ellos perdieran a sus familias por algo tan tonto como no decir que trabajan para mi.

- Puedes decirle para quien trabajas, mientras que ella no lo hable con todos. - dije tocando su hombro. - no quiero que esten mal con sus parejas.

- Lo sé, pero de todos modos dudo en que quiera creerme. - lamió su labio. - Viejo, ¿quieres ir por unas cervezas? oí que sales con Sheila a donde te lleve. - sonrió.

- No puedo, es muy tarde y mañana es el cumpleaños de mi bebé. - sonreí. - el tiempo pasa tan rapido, no puedo creer que esta por cumplir seis años.

- ¡Es todo un hombrecito! - rió. - Blanket es el hombre, es mas serio y dominante que Prince y eso que el es el mayor. - tomó de su cafe.

- Lo sé, me encanta su forma de ser.. es un niño especial y distinto a mi, probablemente haya salido a su madre. - encogí mis hombros.

- ¿Usted conoce a su madre?

- Claro que la conozco, ella fue el vientre de alquiler. - lamí mis labios. - No le daría una tarea tan importante a un desconocido.

- ¿Y como se llamaba ella?

- No puedo decirlo, pero su nombre empieza con C. - sonreí.

Sabia que dejaria al hombre pensando un buen rato, tomé mi tazón de frutas y me despedí de el.

- ¿Hoy podrá dormir? - preguntó curioso.

- Espero que si. - sonreí y asentí.

- El señor Murray me dijo que revisara que estuviera respirando correctamente, ese hombre me da miedo. - dijo mientras iba hacia el jardin por la puerta trasera.

Yo solo suspiré y subí a mi habitación, otra vez.  Al recostarme luego de tomar el medicamento comencé a sentirme un poco cansado, creo que está haciendo efecto.. ahora espero no despertarme a las tres de la madrugada como con otros medicamentos.

Le eché un vistazo a mi telefono que estaba a un lado de mi mesita de noche y vi la hora, eran las tres de la madrugada, me tendría que levantar temprano en la mañana para prepararle un desayuno a Blanket y a mis hijos, y tambien tendría que pedirle a Javon que vaya por Sheila, me estresé bastante pero aun asi pude consciliar el sueño.

*5 horas despúes*

Mi alarma comenzó a sonar y suspiré, abrí con pesadez mis ojos y lo apagué con mi mano. No estaba tan mal despues de todo, creo que no he dormido tanto despues nunca.

- Cumpleaños numero seis de.. Blanket. - escribí en la nota y la puse sobre mi espejo.

Ahí anotaba mis pendientes y tambien uno que otro poema, podria decirse que mi habitación ahora parecía la de un loco, llena de fotos y notas pordoquier. Entré a la ducha y luego de un rato salí sintiendome un jovencito, Maria, iba a venir hoy pero no se lo permití ya que queria preparar todo yo para mi hijo.

- Buenos dias, papi. - dijo Prince saliendo de un habitación de puntillas.

- Hijo, ¿Blanket está dormido? - el asintió. - Bien, deberías ir por Paris y me ayudan a preparar el desayuno.

- Claro. - dijo y yo bajé para ir a la cocina.

- Señor Jackson, buenos dias. - dijo Bill en la cocina.

- Bill, Buenos dias, ¿y Javon se fue?

- Tenía que ducharse, pero vendrá mas tarde. - asentí.

Alguien cubrió mis ojos y por su aroma me di cuenta de quien se trataba.

- Que agradable sorpresa. - dije sonriendo.

- Lo sé, me tuve que despertar a la siete de la mañana para venir aquí y preparé un pastel, espero que tenga el mismo sabor que tenia cuando lo hice por ultima vez. - me abrazó y besó mi mejilla.

La miré bien y sentí como si estuviera viendo un angel, sus dos trenzas colgaban a los lados de sus mejillas y un vestido floreado la adornaba, ella se veía muy hermosa hoy.

- Necesitaré relleno de chocolate, crema, fresas y confetti comestible, tambien seis velitas. - dijo dandome una lista. -  usted irá conmigo al supermercado en un rato luego del desayuno.

- Esta bien, entonces creo que deberia preparar el cereal de blanket y los chocolates. - sonreí.

- A el le gusta el helado para el desayuno.. no seas aburrido y dale, al menos por hoy. - acarició mi mejilla.

Podria perderme en esos ojos marrones oscuros y no quisiera que alguien me encontrara.

- Papi... - dijo Prince bajando las escaleras y nos miró. - ¿que pasa?

- Nada, solo estabamos planeando unas cosas.. - solté la mano de Sheila. - Hoy habrá helado de desayuno, para todos. - sonreí.

- ¡Bien! - dijo Paris bajando detras de el.

Sonreí, no sé en que momento me he puesto tan estricto con los niños.. aunque sé que no es saludable comer helado en la mañana por la azucar, no quiero que estropeen sus dientes con eso y me asusto por mis restricciones.

- Mira. - dijo Sheila sacando un tazón con cuatro bochas de helado.

Lo había bañado en crema de chocolate y tenía una cereza en la punta, en el centro de su preparación estaba el numero seis hecho con una pequeña cantidad de chocolates.

- Eres genial, ¿podrias llevar eso y esperenme fuerte a su puerta, debo ir por su regalo a mi habitación. - ellos asintieron.

Todos subimos y yo entré a mi habitación, le compré a Blanket una camiseta con todos los superheroes de Marvel, en el centro spiderman, sé lo mucho que le encanta ese personaje y Hulk, estaba feliz con el diseño ya que fue personalizado por mi. Por otra parte tenia una figura mia, es decir un muñeco y estaba vestido como en black or white, a el le encantaban mis figuras de acción y espero no haber hecho mal pero espero que esto le guste.

- Listo. - dije emocionado.

Todos nos preparamos en la puerta y cuando estabamos por abrir nos encontramos con mi pequeño, el abrió antes que nosotros y nos miraba con el ceño fruncido, tipico de mi pequeño.

- ¿Por que vienen a despertarme? - dijo el resfregando sus ojos.

- ¡Feliz cumpleaños! - dijo Sheila mostrandole el helado.

- Esperen, ¿hoy es mi cumpleaños? - preguntó comenzando a entender. - ¡Voy a desayunar con helado! - dijo emocionado.

- Claro que si, debes darle las gracias a tu papá. - sonrió ella.

- ¡Papi!, ¿por que no me dijiste que era mi cumpleaños? - preguntó sonriendome.

- Bebé, creí que lo sabias. - sonreí y me puse a su altura. - este es mi regalo y el de tus hermanos. - le di el paquete.

- ¡Gracias! - dije sonriendo.

Abrió el regalo y me miró con sus ojos muy abiertos, comenzó a saltar y luego me abrazó, mi corazon se llenó de amor.

- ¡Gracias, papi! - dijo y me besó la mejilla. - ¿me ayudas a ponerme la camiseta?, me encanta.

- Nosotros tambien trajimos regalos. - dijo Javon poniendose a un lado de mi.

- No tendrian que haberlo hecho, yo solo queria tener a Frozonne y a la roca en mi cumpleaños.

Todos nos reimos, esos apodos fueron los que yo les puse, soy un grosero al haberlo hecho pero no pude evitarlo y mis niños los amaron.

- Eres muy amable, pequeñin. - dijo Bill y le entregó una cajita. - espero que te guste.

Cuando Blanket la abrió vi adentro una linda pulsera hecha a mano y era en rojo y negro, sonreí al ver la emoción en la cara de mi hijo y Bill tambien recibió un abrazo.

- Quiero ponermela ahora. - dijo estirando su mano.

- Aqui tienes otro mas. - dijo Javon y al darselo y vi que era un muñeco de spiderman, todos estabamos conscientes de que a Blanket le gustaba.

- Muchas gracias a los dos, son muy amables.

Al escucharlo decir eso me sentí conforme con mi trabajo para educarlos, he dado todo lo que sé para que ellos se conviertan en niños buenos y respetuosos y ver que eso funciona me llena el alma.

- ¡Feliz cumpleaños, hermanito! - dijeron Paris y Prince. - apesar de que aveces no quieras estar con nosotros te queremos mucho, y juramos que nunca te vamos a dejar solo.. te amamos. - ellos lo abrazaron y yo decidí tomar una foto con mi telefono.

Mis niños estan unidos y son felices, eso me hace darme cuenta de que no todo esta perdido.

- Yo he preparado algo, no es algo material pero es algo que me costó hacer. - dijo Sheila poniendose a su altura.

- ¡Eres mi favorita! - le dijo y la abrazó. - muchas gracias por el helado. - sonrió y tomó su copa de helado.

- Antes de eso, vamos a cambiarte. - le dije sonriendo y lo cargué. - ponlo en la heladera, por favor. - le dije a Sheila.

- Claro que si, los estaremos esperando. - sonrió.

Asentí y ella solo hizo lo mismo, no me gusta estar de esta forma con ella.. me encantaría que mis hijos se enteraran que somos pareja pero debemos ir con calma, de igual forma me encantaría que sea un momento especial y que ambos nos sentemos a hablar y aclarar cosas con ellos.

- Me encantaría invitar a tus amigos, hijo, pero creo que no tienen tiempo.. - dije algo triste.

- No me importa, quiero que esten solo ustedes. - estiró sus brazos y pasé la camiseta por ellos. - ademas será mas divertido, todos mis amigos son un poco tontos.

- No debes decir eso. - le dije sonriendo. - pero me alegra que pienses que solo nos necesitas a nosotros. - peiné un poco su cabello. - tienes seis años de vida y yo no puedo creerlo. - lo abracé. - eras un bebé pequeñito.

- ¿Muy pequeñito? - preguntó mirandome.

- Demasiado, pero igualmente sigues siendo mi pequeño bebé. - sonreí y acaricié su mejilla. - me dejé el cabello suelto en honor a ti. - reí.

- Somos iguales. - dijo viendose al espejo. - ¿Podemos ir a comer helado?

- Claro. - dije y le tomé la mano.

Me llegaba a la altura de la cintura, era tan pequeño que no lo podia creer.. solía tenerlo en mis brazos al igual que a sus hermanos, les di el biberon, cambié sus pañales y tambien estuve ahí para todo, verlos crecer sanos y fuertes es algo que me hace sentir un padre orgulloso, mis hijos son todo lo que importa.

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Espero que lo disfruten.

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