La fiesta era un descontrol, mas allá de la seguridad que había para evitar problemas mayores, lo era. Al ser una fiesta conocida, muchos adolescentes de distintas partes decidieron asistir. Esperaba que la policía llegara en cualquier momento, pero según me entere, la misma fue aprobada por las autoridades. Los organizadores de la fiesta tenían todo bajo control.

En ningún momento solté la mano de Heather, no es que quería ser un total posesivo, solo se que si la perdía entre la multitud iba a ser muy difícil encontrarla. De todas formas, a ella no parecía incomodarle que este agarrando su mano.

Ben, y Connor bailaban arriba de dos sillas, mientras que Andrew los controlaba como un padre. Digamos que Andrew hoy fue el padre de todos. Cuando queríamos algo para beber, él era el encargado de buscar la bebida y asegurarse de que nadie le ponga algo raro. Y demás esta decir que mucho no nos dejo beber, pero no hubo problema con ello. Nadie planeo embriagarse hoy. Aunque cabe aclarar que Ben y Connor parecían estarlo. Sus bailes eran raros, y se reían entre ellos, solo entre ellos. Nadie entendía sus chistes. 

- ¿Estas seguro que en su bebida no había nada raro? -le pregunto a Andrew casi gritando por encima de la musica. Andrew me mira y  me asiente con la cabeza. Luego vuelve su atención a Ben que estaba hablando sobre los aliens, y Connor lo escuchaba atentamente.

- Bueno, Ben esta hablando sobre sus amigos. No veo nada raro allí -dice Heather y con Andrew nos reímos. 

Ben se baja de la silla seguido de Connor, luego se abrazan y se vuelven a reír.

- Este tipo me agrada -dice Ben- Me gusta para ti -se dirige a Andrew, y él sonríe- Y tu... -ahora se dirige a Heather- Al principio no me gustabas. Y lo siento por eso, pero te conocí y supe que eres genial. Cuida de mi amigo.

Me abraza y Heather mira a Ben con el ceño fruncido, pero de forma divertida.

- ¿Cuanto has bebido? -miro a Connor que le sonreía a la nada- Bueno, ¿Cuanto han bebido? 

Ambos se encogen de hombros y se ríen. 

- Ya tuvieron suficiente -dice Andrew con autoridad sacándoles los vasos de sus manos.

- ¡Aguafiestas! -se queja Ben.

- ¿Que pasa, bebe? ¿Quieres diversión?

Connor se acerca a Andrew y lo abraza. Andrew niega con la cabeza y sostiene a Connor.

- En serio, vayamos a sentarnos.

- Bien ¿donde?

Pregunta Heather. Buena pregunta, no había lugar alguno para hacerlo. Los asientos estaban ocupados por parejas, y otras personas con los mismos problemas que Ben y Connor.

- Vayamos al auto un poco -dice Andrew y todos los seguimos. Tuve que sostener a Ben para que no se tropezara, hasta al fin llegar a donde Andrew estaciono el auto. Un poco alejado del lugar de la fiesta, para así evitar daños. Sentamos a Connor y Ben en el asiento trasero, y ambos se pusieron a ver las estrellas y a hablar de las mismas.

Con Andrew y Heather los observábamos, Andrew negaba con la cabeza desaprobando su borrachera, mientras que con Heather nos reíamos de la situación.

- ¿Estoy viejo? -pregunta Andrew y lo miro- Siento que tengo a dos hijos que controlar.

Con Heather nos reímos.

- Si planeas ir a mas con Connor, tendrás un novio-hijo.

- Estoy jodido -dice él con una sonrisa mientras miraba a Connor. Andrew quería ir a mas con él, y a mi eso me agradaba.

- ¿E.T existirá? -pregunta Ben mirando al cielo nocturno.

- ¿Y Wall-e? -pregunta Connor.

- No, Wall-e no.

- ¿Por que no?

- Wall-e es patético.

- Es tierno. E.T es feo.

Connor y Ben se ponen a discutir sobre Wall-e y E.T. Andrew, Heather y yo los miramos, y nos miramos entre nosotros. Finalmente el padre del grupo asiente con la cabeza, y con Heather nos damos cuenta de que la fiesta ha llegado a su fin.

- Es mejor que vayamos a casa.

- ¿Que hacemos con ellos? No podemos dejar que los padres de Ben lo vean en este estado, y Connor...

- Irán a casa conmigo -me interrumpe Andrew- No habrá problema con ello. Mis padres vieron a Ben en esta situación ya. Y... no habrá problema con Connor. Además, una vez que toquen la cama los perdimos.

Asiento dándole la razón y nos subimos al auto. Deje que Heather se sentara en el asiento del copiloto, mientras que yo me sentaba en el medio de mis amigos borrachos. Ambos me abrazaron y se pelaban por quien me quería mas. 

Andrew nos dejo en mi casa, ya que la misma estaba sola y alguien tenia que cuidarla. Lizzie estaba en la casa de unas tías, y mi madre en el hospital. Ben y Connor estaban dormidos ya. Definitivamente Andrew era como el padre de esos dos. Entramos a mi casa y subimos a mi habitación. 

- Al fin solos -rodeo a Heather con mis brazos y me sonríe. Poso mis labios en los suyos antes de que hablara y la beso. Ella me sigue el beso, y estuvimos así unos largos segundos. Hasta que me alejo y le sonrío- Eres...

- No lo digas.

- Si lo diré. Eres hermosa -Heather suspira- Quiero que me sonrías cuando lo digo, no que suspires como si no fuera así, y estuvieras harta de mi -me mira alzando una ceja- No puede ser ¡Estas harta de mi! -me alejo y Heather se ríe. La observo con los brazos cruzados fingiendo estar dolido.

- No estoy harta de ti. Solo no me acostumbro a los halagos.

- Estando conmigo no te va a quedar otra que hacerlo. Y como fácilmente de mi no te vas a deshacer, es mejor que te vayas acostumbrando -me acerco a ella una vez mas y pongo mis manos en su cintura. Aun se podía sentir su delgadez, pero saber que Heather esta mejorando me tranquiliza- Eres hermosa -ella me mira a los ojos y alzo ambas cejas esperando su sonrisa. Heather niega con la cabeza y me sonríe, de forma natural- Te amo -le sonrío y le doy un corto beso en los labios- Iré a ducharme para quitarme el olor a fiesta -digo cuando me alejo de ella- Ponte cómoda, y tu también puedes ducharte si quieres. Conmigo -juego con ella y cuando noto un leve rubor sonrío. Antes de que me responda, salgo de mi habitación y entro al baño. Abro el grifo del agua y la regulo para que este tibia.

Comienzo a desvestirme mientras tarareo una canción que se me quedo pegada de la fiesta. Estaba a punto de sacarme el jean, cuando unos golpes en la puerta llaman y sonrío. 

- ¿Heather quiere ducharse con... -abro la puerta y detengo mi pregunta cuando la veo a los ojos. Tenia mi celular en sus manos y estaba temblando. Sus ojos estaban llenos de terror.

- Es tu padre.

Heather no tuvo que decir mas, entre al baño para volver a vestirme con cierta rapidez. Una vez que estuve listo, con Heather salimos corriendo y nos subimos a mi motocicleta. El miedo me invadió, comenzaba a temblar y a sentir un profundo dolor en el pecho.

Mientras conduje hasta el hospital, olvide por completo que Heather estaba también en mi motocicleta, abrazándome mas fuerte de lo normal a causa de mi velocidad.

Solo quería llegar, y que me digan que iba a estar bien. Que sea lo que sea que le paso, él lo iba a superar.

Llegamos al hospital, y una vez que estaciono la motocicleta, ambos entramos corriendo y nos dirigimos al sector donde estaba mi padre. Pero él no estaba en su habitación, tampoco estaba mi madre. Solo había una enfermera allí.

Por favor no me digas algo malo.

- Dis... discul... disculpe -digo con voz temblorosa y ella me mira.

- ¿Eres Elliot Cox? -asiento- Tu madre dijo que vendrías.

- ¿Donde... donde...

- Sufrió un ataque. Lo llevaron de urgencias a....

No tuvo que terminar de contestar. Se a donde se lo llevaron, así que corro hacia ese sector. Al sector donde se llevaban a las personas que sufrían ataques al corazón e intentaban revivirlos. Al sector donde cada familia salia de allí llorando, ese jodido sector que al estar allí sentías miedo como si estuvieras en una película de terror.

Por favor que él este bien.

Mi madre estaba sentada frente a una sala de operaciones. Sus manos estaban temblando, y en silencio estaba rezando.

- ¡Mamá! -corro hacia ella y mi madre al escuchar mi voz se levanta dispuesta a recibir mi abrazo. La rodeo con mis brazos y todo su cuerpo estaba temblando, ¿O era yo él que temblaba? 

El miedo se estaba apoderando de mi.

Heather se queda a un lado parada en silencio, observándonos, con una mirada de dolor.

- Él... él estaba durmiendo bien. Pero tuvo un ataque, no podía respirar, luego... luego... no hizo movimiento alguno y...

- Ya mamá -la miro y seco sus lágrimas. No quería que me contara por lo que paso. Quería que me dijeran, que nos dijeran que él iba a estar bien.

- Lo trajeron aquí, y no se nada de él. Los médicos salen y entran corriendo, pero nadie me dice nada. Tengo mucho miedo, hijo.

No fui capaz de responderle. Quería tranquilizarla, pero ¿quien me tranquilizaba a mi?

Yo también tenia miedo.

Nos sentamos y esperamos a que alguien nos dijera algo. Mamá tenia razón, entraban y salían corriendo de esa jodida sala. Nadie nos decía nada, pese a ser familiares nos ignoraban. O simplemente nos decían que estaban haciendo lo posible.

Y eso me lleno aun mas de miedo ¿Haciendo lo posible?

Mi mente se inundo en esas palabras, y el miedo crecía mas. Sentía un dolor en el pecho que no me dejaba respirar bien. Heather sostenía mi mano, y yo sostenía la mano de mi madre. Pese a ser una cadena de fuerza, el dolor y el miedo, crecían mas.

Estamos haciendo lo posible.

Dijo esa mujer y se metió corriendo a la sala. Sus palabras no dejaban de resonar en mi cabeza. Pensar en ello me llevo a los recuerdos vividos con mi padre.

"Entre enojado a la casa de mi abuela. Una vez mas, ella no me dejaba ver Dragon Ball Z. Decía que ver eso me hacia mal, no me hacia mal. Yo quería ser como Goku y mi abuela no me dejaba.

- Elliot, ¿Has visto la dentadura de tu abuela? -me pregunta el abuelo y escondo mis manos en mis bolsillos. Niego con la cabeza y salgo corriendo a la sala mientras que todos buscaban la dentadura de la abuela.

Mi padre me observo escapar, así que me sigue. Me siento en el sofá y él se sienta a mi lado.

- ¿Hacemos nuestro saludo? -me pregunta él. Habíamos practicado un saludo muy divertido, pero ahora no podía hacerlo, tenia las manos sucias. Me olvide de lavarlas, y se iba a dar cuenta de que fui yo. Le niego con la cabeza y mi padre frunce el ceño- Vale, ¿me pasas esa revista? 

Me señala una revista de la mesa de café de los abuelos, y vuelvo a negar con la cabeza. Mi padre se ríe y yo no entiendo por que.

- Se que fuiste tu. Déjame ver tus manos.

- ¿Fui yo? ¿De que hablas? -Él alza ambas cejas y suspiro. Saco mis manos y al verlas, mi padre se rie. Mientras que la abuela esta histérica por no encontrar su dentadura- No me retes. Reta a la abuela, ella no me deja ser Goku ¿Por que la abuela no quiere que yo sea Goku?

- No lo se.  Tal vez piensa que no eres lo suficientemente fuerte para ser Goku.

- ¡Si que soy fuerte! -me pongo de pie y le muestro mi brazo. Era muy pequeño, pero yo me sentía fuerte- Yo puedo ser como Goku.

Mi padre me mira sonriendo.

- Claro que puedes -sonrío feliz- Solo tienes que devolverle la dentadura a tu abuela.

- Si lo hago ¿ella me dejara ver la televisión tranquilo? Ella quiere que yo vea La tortuga Franklin ¡Pero no me gusta La tortuga Franklin!

Mi padre se ríe ante mi enojo y niega con la cabeza.

- Hablare con ella para que te deje ver lo que quieras. Solo le vas a devolver lo que es de ella, y le vas a pedir disculpas.

Suspiro.

- Esta bien"

Me perdí en ese recuerdo, el cual me llevo a sonreír. Luego volví a la realidad, volví a estar en el mismo lugar. Sin saber nada de él.

Hasta que el médico que trataba con mi padre sale de la sala. Su cara no me gustaba. Nos ponemos todos de pie para reunirnos con él.

- Harry sufrió una recaída. Y... lo siento. Hicimos todo lo posible para salvarlo, pero su corazón no pudo resistirlo. La enfermedad avanzo mas de lo esperado. Lo siento mucho.

Él nos deja a solas.

Mi madre lloraba a mi lado.

Heather me sostenía la mano fuertemente. Yo estaba congelado.

Heather me suelta la mano para consolar a mi madre.

El miedo se esfumo para darle paso al dolor. Me dolía el pecho. Crecía allí como un enorme agujero negro.

- No... él... no, no, no -me agarra el ataque y llevo mis manos a mi cabeza- No, por favor. El no pudo, no... -las lágrimas ardían en mis ojos y cuando parpadeo, las mismas salen con furia. No podía respirar, así como tampoco podía mantenerme en pie. Me dejo caer al suelo con las manos en mi cabeza aun y lloro.

Heather seguía abrazando a mi madre, y lo preferí así.   Mi madre lloraba en sus brazos, Heather me observaba con dolor en sus ojos.

Tuve un poco de respiro, para sentirme ahogado por la tristeza una vez mas.

- No, no... que alguien me diga que no es así.

La palabra "no" era lo único que salia de mis labios.  Las lágrimas seguían cayendo, mojando mi rostro. El dolor me rodeo por completo. Solo veía oscuridad.

Acabo de perder a mi padre.

Acabo de perder a mi amigo.