Kim TaeHyung y Jeon JungKook llevaban media hora desayunando en silencio.

El primero aún estaba triste por la pelea de la noche anterior con su esposo. De hecho, esa mañana se había levantado antes del amanecer solo para seguir limpiando el lugar que se convertiría en su nueva habitación. Para cuando su amigo había llegado al lugar, su nuevo dormitorio estaba despejado y las cosas que estaban dentro habían sido reubicadas. Armó una cama de donde ni él sabe, pero usó unas cuantas pieles y mantas para que estuviera calentita ya que el invierno estaba cerca.

Todo ese drama en su cabeza solo le hacía revolver la comida con su cubierto y suspirar de vez en cuando.

Por otra parte, JungKook estaba conmovido. Tuvo un sueño muy realista con el omega que había conocido en el río.

Él nunca había tenido esa clase de sueños, pero despertar con la sensación de los labios del omega aún en su boca le hicieron odiar estar despierto. Jeon quería volver a dormir y soñar con él porque ahí pertenecía él.

Ambos suspiraban tontamente a la par, aunque por motivos totalmente diferentes.

--¿Hyung?

--¿Sí?

--¿Qué se siente besar a alguien?

--¿Ah?

--¿Que qué se siente besar a alguien?

--¿Por qué me preguntas eso?

--Me enamoré. Sí, creo que me enamoré a primera vista, hyung. --el alfa volvió a suspirar, apoyando su barbilla en la palma de su mano. Recordó ese sueño nuevamente. Se sintió tan real que lo primero que hizo fue ir al río, se dio un baño en el agua gélida y dejó un par de jabones escondidos y algunas botellas de aceite de castañas y de almendras, para el amor de su vida, futuro esposo y padre gestante de sus cachorros.

--¿Cómo que te enamoraste? --preguntó el rubio realmente interesado.

Un carraspeo interrumpió la conversación, por unos segundos, pero TaeHyung decidió ignorarlo. Sabía que era su esposo, tal vez el idiota ya pensaba que Jeon se le estaba declarando... y justamente eso es lo que el alfa pensaba.

--Pues que me enamoré, hyung. Ayer por la tarde fui a darme un baño al río, porque mi casa no tiene baño propio y-

--¡¿Cómo que ahora tienes casa?! ¡¿Por qué no me lo habías dicho?! No me has contado nada. --exclamó sorprendido el rubio.

--Hyung, eso no es lo importante, lo importante es que ahí lo ví. Era hermoso, ES hermoso. Quiero verlo otra vez, al parecer está casado. Aunque ese es solo un detalle. Todavía ese sopenco se puede morir y dejar libre a mi omega... --soñó.

TaeHyung negó con la cabeza confundido.

--De todos los omegas en la vida, ¿cómo es que te fijas en uno que está casado?

--Mi omega es infeliz, lo vi en sus ojos. Hasta soñé con él. Soñé que lo besaba. Sus labios eran... tan bonitos, rosados y suaves. --confesó el peliplata casi alucinando.

--Pero está casado. --Interrumpió el dueño de casa.

--Sí, lo está. --concedió cabizbajo Jeon. --Señor Alfa Líder Kim. ¿No hay alguna ley que permita la separación matrimonial entre alfa y omega en esta manada? --preguntó dirigiéndose al dueño de casa, quien hasta ese momento había sido ignorado por la pareja de amigos.

--Claro que no. Somos serios. --dijo con autoridad el Líder. JungKook embargó de tristeza el lugar con su aroma. Su amargura era real. TaeHyung se preocupó y extendió su mano para acariciarlo, así que SeokJin interrumpió carraspeando. --A menos que lleve más de un año casado y aún no engendre. Ahí el alfa puede pedir el término del matrimonio. El alfa puede buscar otro omega, o el concejo elegirle uno de entre los que estén solteros y el omega quedaría libre, pero aquí nadie acepta omegas que no sean vírgenes.

--Eso no me importa, si es lo de menos. Si tuviera una oportunidad con él la tomaría, la que fuera. Lo haría feliz, le regalaría flores a diario, le cocinaría y le daría todo de mi. Si ese omega fuera amigo, le haría el amor hasta quedar seco. --confesó.

--¡Jeon JungKook! --regañó TaeHyung sonrojándose por el comentario y SeokJin escondió una sonrisa a duras penas.

--Es que ahora lo entiendo. El alfa NamJoon siempre dice eso cuando ve al beta Jung. --SeokJin escupió su té y tosió con fuerza. ¿Cómo ese mocoso sabía eso? Tal vez NamJoon había fallado en ocultarlo. JungKook prosiguió. --Antes no lo entendía, pero ahora lo entiendo. Es esa necesidad de hacerte uno con él hasta desmayarte de placer y cansancio. Yo quiero eso también, hyung.

--Y lo tendrás, Kookie. Pero cuando llegue un omega acorde y-

--Yo no quiero otro omega, yo lo quiero a él. Mi lobo está vuelto loco. Señor Alfa Líder Kim, Usted me entiende, ¿verdad? --SeokJin abrió sus ojos como platos. --Mi hyung es hermoso, cálido y dulce, estoy seguro que para usted no debe haber otro. ¿Ha sentido lo mismo?

--Esteee...

--Kookie, llevamos muy poco tiempo juntos, es lógico que él no-

--Claro que sí, cachorro. Tu hyung es imposible de ignorar. A veces soy un poco estúpido y no sé cómo actuar con él, no obstante, es el omega más hermoso que he conocido. Él es dulce y tierno pero también es salvaje e imponente. Y sí, no voy a mentir, entiendo perfectamente eso de "hacerle el amor hasta quedar seco" porque no lo había sentido con nadie nunca antes.

--Iug... No quería saber tanto, pero lo comprendo. Y usted hyung, ¿siente lo mismo por su esposo?

--Yo... --TaeHyung miró a SeokJin quien le devolvía la mirada expectante. Quería decirle que sí, que sentía lo mismo, que estaba volviéndose loco por él y de celos por ese omega ofrecido y encimoso, pero su orgullo, su maldito orgullo... --Creo que ya deberíamos irnos. Debo ver cómo sigue el omega Ahn MinSeok. También a los Kang. Además hay otro par que debemos echarles un ojo. Así que andando.

SeokJin se sintió desilusionado. Su lobo agachó las orejas y se hizo un ovillo dentro de él, pero de alguna manera durante la noche comprendió que era su culpa y debía solucionarlo, pero no sabía cómo. Tal vez hablar con NamJoon sería buena idea, aunque ya llevaba cuatro días encerrado con uno de los omegas marginados y lo más probable es que ya había otro par en espera. Ese alfa pervertido. Debía regañarlo, así nunca conquistaría el corazón del beta Jung.

Le daría tiempo a su esposo, era lo mejor.

TaeHyung finalmente llegaba a casa. Ya llevaba un mes viviendo entre la manada de los Lobos de Fuego.

Había mucho, mucho trabajo, pero ya comenzaba a ver frutos y eso le llenaba el corazón, se sentía querido, honrado y respetado entre el pueblo, no así en su propia casa.

Todos los días era el primero en levantarse y salía a visitar a los omegas gestantes, a los que planeaban un embarazo y a los cachorros de hasta dos años. Él y JungKook estaban todo el día en terreno, aconsejando, haciendo revisiones e incluso pronto tendrían su primer parto ahí. Se sentía valorado. Y los días que no habían trabajado con los omegas, fueron hasta la "nueva" casa de JungKook para repararla. Estaban felices, pues, ya eran parte de la comunidad un poco más y podían asistir a las reuniones que hacía el concejo para el pueblo.

Cuando ya terminaba al día, el rubio llegaba a su casa, se daba un baño, comía algo rápido y se dormía. Ni siquiera cruzaba palabras con su esposo y su lobo omega se sentía herido, pero era tan orgulloso como el humano. Además dormían en cuartos separados.

--Gracias por acompañarme, JungKookie, nos vemos mañana.

--Nos vemos mañana, hyungie.

TaeHyung abrió la puerta tratando de encontrar refugio del frío, puesto que ya la nieve había llegado. Se frotó las manos y se dirigió a la cocina. Todas las noches, desde el final del otoño, él llegaba y encendía el fuego para calentarse un poco, puesto que aunque el alfa sí estaba en casa, jamás lo encendía por él. Pero el rubio no iba a pensar mucho en eso. Es lo que él escogió de todas formas.

--Está llegando muy tarde. --se quejó una voz detrás de él. Una voz que casi ya había olvidado como sonaba en esa casa.

--Oh. Es... por la nieve. Hace mucho frío para salir, entonces-

--Entonces no debería salir tanto. No sé qué es lo que hace tanto allá afuera. --se quejó el alfa, cruzándose de brazos en el umbral.

--Lo sabría si me preguntara, pero apenas me dirige la palabra. --respondió cansado del día y del frío.

--No me hable así. --dijo el alfa frunciendo el ceño.

--¿Así cómo, señor? --preguntó el omega sin mirarlo.

--No sea irrespetuoso y míreme cuando le hablo.

--No logro entender en qué momento le he faltado el respeto, señor. Como le decía, si me preguntara, si mostrara un poco de interés en mi persona, tal vez sabría a qué me dedico a diario. --contestó TaeHyung todavía sin mirarlo. Solo se dedicó a revolver un poco el fuego y calentarse las manos que estaban rojas del frío. --Y no puedo hablarle y mirarlo y encender el fuego a la vez.

El alfa negó molesto. --Eso no importa. Soy la burla del pueblo. Mi esposo sale todo el día acompañado de otro alfa, no me atiende. Al menos WooJin sí era preocupado.

Auch.

Eso dolió.

Estúpidas comparaciones.

--Ah, es eso. Su orgullo alfa herido. Señor Kim, ¿qué hace usted durante el día?

--¿Está cuestionándome? --se cruzó de brazos el alfa y alzó una ceja.

--No. Genuinamente quiero saberlo. Conversemos. --dijo tomando asiento y extendiéndole una silla al alfa para que hiciera lo mismo.

--Bue-bueno yo... asisto al concejo a diario. --comenzó, sentándose en la silla ofrecida por el rubio. --Luego de eso hago algunas visitas y reviso que todo esté en orden en la manada.

--¿A qué hora llega a casa? --Insistió el omega prestándole total atención.

--Pues, al atardecer ya estoy aquí. Tomo un baño y como algo de lo que prepara la señora Kwon. --omitió esta vez llamarla "suegra". --Y luego me voy a la cama.

--Tiene un día bastante ajetreado.

--Más de lo que cree. No es fácil llevar a una manada adelante.

--Lo sé. Mi padre siempre estaba ocupado, por años casi no lo ví.

--¿Ahora entiende?, la gente habla de mi, de mi esposo. Usted solo está afuera. Nunca está en casa.

--Es que yo quería, se lo juro. Pero cuando esperé a mi alfa, nunca llegó. Me rechazó y mi lobo es tan orgulloso como yo. Entonces, pude haber sido un esposo hogareño y esperarlo en las comidas, tal vez charlar un momento, reírnos, hacer el amor, ya sabe, cosas que haría un matrimonio común. Pero nosotros no somos un matrimonio común. --TaeHyung dialogó.

--¿Y es necesario que usted vague sin que nadie sepa donde?

--Y eso es lo que me extraña. Que usted no sepa a dónde voy. Llevo semanas visitando familias. Con JungKook vamos de casa en casa, hemos ayudado a varias personas del-

--Por favor, dígame algo que sea creíble. --interrumpió el alfa.

--¿No me cree? Lo que me faltaba.

--¿Cómo espera que crea eso si ya tenemos parteras en la manada?

--¡Las mismas que le han provocado abortos a los omegas, solo omegas varones! --Reclamó TaeHyung alzando su voz. --Pero es lógico que usted no lo sepa. Qué le va a importar a usted, de todas formas, no se preocupa por su esposo, mucho menos por un omega que no es nada suyo-

--¡Basta! --bramó SeokJin con su voz de alfa a la vez que golpeaba la mesa.

Silencio. Solo había silencio que era interrumpido por el crepitar del fuego en la chimenea.

--Así que... --TaeHyung tragó saliva con dificultad. --así se siente... que... un alfa use su voz en un omega. Es... aterrador. Creo que si mi lobo le tenía un poquito de afecto lo acaba de matar definitivamente... --dijo casi en voz baja y con ojos llorosos. --Ah... qué decepción. Le prometí a mi padre que usted no usaría su voz en mi.

--Us-usted no me dejó alternativa. Estaba... cruzando la línea.

--¿Por ser honesto con usted? ¿Por... decir lo que pienso? ¿Quiere... un omega complaciente y sumiso? ¿Uno que solo se queda callado, lo espera en casa y le abre las piernas cuando sienta deseo? Yo nunca le he mentido. No soy así. Jamás lo seré. --TaeHyung se puso en pie tembloroso, aún sintiendo miedo por la voz del alfa en él. Su lobo aterrado se había escondido liberando un aroma amargo. --Mañana después de la reunión del pueblo, le pediré a las familias que le cuenten el trabajo que hemos hecho con Kookie. Seré muchas cosas, señor Kim, pero jamás un mentiroso. --Dio un par de pasos y volvió a hablar. --Si vuelve a usar su voz en mi, tomaré mis cosas y volveré a mis tierras, eso sí que se lo juro.

Taehyung caminó fuera de la cocina dejando atrás al alfa quien no pudo evitar sentirse miserable, ¿qué había hecho?

*Apoya esta historia comentando, votando y compartiéndola 😘.