⚝ Capítulo 05
Un mal sueño
✥——————✥—————✥
— ¡Jungkook! —Gritó con todas sus fuerzas. No era suficiente, Jungkook no respondía, al contrario, los cables tiraban de él con más fuerza de la que empleaba para volver a la nave. Jimin comenzó a temblar, sollozando en silencio y con los cristales del traje espacial empañados por su respiración ante los gritos que emitía al menor—. ¡Vu-Vuelve! ¡Por fa-favor! —Gritaba a voz rota, sin poder hacer nada. El reflejo de Jungkook cada vez más lejos se podía observar en su cristal, pero no importaba nada más que Jeon en ese momento. No le escuchaba, aun así, veía y casi podía sentir los desgarradores gritos amortiguados del ojiazul—. ¡Tira del ca-cable! —Volvió a repetir, una y otra vez, sus ojos llenos de angustia y su corazón latiendo frenéticamente—. ¡No pu-puedes dejarme solo! ¡Debemos volver ju-juntos, era una pro-promesa! —Sollozó. Deslumbró al menor cerrando sus ojos y cayó de rodillas frente al desastre, derrotado y decaído—. No pu-puedo... no puedo ha-hacerlo sin ti...
Y dicho eso, desconectó el oxígeno y saltó.
El estruendoso sonido de alarma de su teléfono logró sacarle de su pesadilla. Una que le había hecho sudar frío y temblar sobre sus sábanas. Jadeó angustiado y tocó su frente para asegurar que todo estaba bien, tras eso suspiró tomando oxígeno y quedó sentado en la cama intentando creer que solo fue una pesadilla.
Un mal sueño.
Nada más.
— Maldita sea. —Sobó su adolorida cabeza y se acercó hasta la cocina para rebuscar en los cajones alguna pastilla que aliviara el dolor en su cerebelo.
Minutos después, se encontraba totalmente preparado para la prueba de las cámaras criogenizadoras y se miró al espejo una última vez antes de darse el visto bueno y salir de su dormitorio.
Había sido un total milagro que hubiese llegado a escuchar el sonido de la alarma, pues estaba tan ensimismado por su mal sueño que realmente pensaba que no lo lograría y perdería la prueba.
Comenzó a caminar en dirección al garaje, donde se encontraban algunas máquinas de prácticas, naves y equipamiento, y llegó en un par de minutos, impaciente y nervioso por el día que se le venía encima.
Tan solo cinco minutos después de él, Jungkook apareció adormilado y con marcas de la sábana en su rostro, saludándole con un asentimiento de su cabeza y colocándose a un lado, en espera del señor Feith. Éste llegó en poco tiempo acompañado de los especialistas y, tras ellos, las máquinas que transportaban una cámara cada una.
Jimin tembló, pero no se dejó impresionar. Colocó su rostro bajo y miró al suelo, respirando sonoramente los primeros segundos.
Parecía que Jungkook había estado pendiente a él, porque no hizo falta decir más cuando éste ya permanecía más cerca brindándole apoyo y colocando una mano en su hombro.
No le merecía como compañero.
Parecía que el menor llevaba un radar en todo momento que le decía como el rubio se sentía, sus pensamientos o emociones, y eso le aterraba muy en el fondo. Si él se concentrase en saber lo que Jungkook sentía en cualquier momento, tal vez su mente se dispersaría y acabaría recitando frases de alguna serie estadounidense.
— Buenos días, mis estrellas. —Saludó Numn—. Ellos son Max y Eliot. —Presentó a los hombres que llevaban la maquinaría—. Son los encargados de controlar las cámaras y llevar vuestro seguimiento en el espacio, cediéndolo en cuanto pasen los años. No teman, son profesionales en ello. —Sonrió de forma reconfortante, se volteó hacia los hombres y señaló a los chicos—. Sus nombres son Jimin Parker y Jeon Jungkook, respectivamente.
Cada quien asintió y comenzaron a presentarse uno por uno bajo la atenta mirada de los astronautas.
— Yo soy Max Struth, como dijo el señor Feith, y seré el responsable de la cámara de JJK. —Miró a Jungkook—. Supongo que son tus iniciales. Encantado de conocerle, señor Jeon.
— Lo mismo digo. —Se inclinó ante él—. Tiene toda mi confianza, mi vida en sus manos, prácticamente.
Jimin rió incómodo ante eso y suspiró.
— Mi nombre es Eliot Warn y seré el responsable de la cámara de JMP. —Repitió al igual que su compañero—. Encantado de conocerle igual, señor Park.
— Parker. —Corrigió, miró a Jungkook y se inclinó ante él al igual que el menor anteriormente—. Mi vida también la dejo en sus manos.
— Una vez hechas las presentaciones, pueden pasar al área V1. —Comunicó Feith, haciendo referencia a los vestidores—. Les esperaremos, colóquense solo la maya inferior, no todo el traje.
Lo sabían, el traje podía pesar en la Tierra perfectamente cerca de los cien kilogramos y eso no sería viable ante unos cuerpos de apenas setenta.
Ambos asintieron a las órdenes de Numn y se acercaron a los vestidores, cada uno en el suyo para salir tras unos minutos ya preparados. Jungkook le dio un vistazo bastante decente a Jimin y éste le miró con una ceja alzada.
— ¿Qué miras?
— ¿Te has operado el trasero? —Preguntó curioso y de manera descarada, sin dejar de mirarle. Jimin quiso esconderse ahí mismo, tratando de ocultarlo con sus manos.
— ¡Cállate! —Comentó sonrojado, la vergüenza dominándole—. Es na-natural.
El de pelo negro rió.
— Sí, claro. —Murmuró por lo bajo—. Se te ve apretado en ese traje, ¿de veras no quieres una talla más?
— Deja de decir tonterías. —Su ceño seguía fruncido, mirando al suelo y caminando rápido para salir de ahí cuanto antes—. ¡A ti se te nota tu microscópica parte masculina y no te digo nada! —Casi gritó saliendo—. ¡Y los pezones!
Jeon paró de andar en ese mismo momento y se miró de arriba a abajo, haciendo hincapié en su entrepierna.
— ¿Acabas de decir que tengo el pene pequeño? —Parpadeó confundido, siguiendo al rubio—. ¿Quieres ver que tan microscópico es, uhm?
Jimin tapó sus oídos para dejar de escuchar y llegar cuanto antes a donde estaba y esperaba el señor Feith junto a Max y Eliot. El primero de ellos alzó sus cejas y le miró confundido ante el gran sonrojo que éste poseía, luego creyó entender lo que pasaba al ver como Jungkook llegaba observando su propia entrepierna con total descaro.
— Bien, alístense, entrarán en las cámaras. —Ordenó rodando los ojos.
El rubio suspiró y Jeon fue el primero en subir los tres escalones hasta llegar a la máquina que disponía de la cámara, sentándose a espera de Jimin. Éste siguió sus pasos y pasó por su lado, chocando su mano con el de pelo negro una vez la vio tendida hacia su dirección. Relamió sus labios y dejó que Jungkook no apartara la mirada de él hasta que se sentase correctamente en la cámara.
— Colóquense tendidos, boca arriba y brazos en cruz sobre vuestro pecho. —Comenzó Eliot—. Tomaréis ahora el auricular a vuestra izquierda y lo llevaréis a esa misma oreja.
— ¿Me escuchas, Jungkook? —Habló Max una vez éste lo hizo, el chico asintió y alzó su pulgar en confirmación—. Necesito que estés calmado, respira profundamente y a tu lado encontrarás una máscara de gas, tómala y colócala en tu rostro, que quede por la nariz y bajo el mentón.
Pocos segundos después, Jungkook hizo lo que el agente le decía. Jimin permanecía expectante.
— Haremos primero la prueba a Jungkook y luego a ti, Jimin. —Le comentó Eliot acercándose a él, asintió poco convencido.
— Jungkook, ¿hiciste lo que te dije?
— Sí. —Se escuchó difuso gracias a la máquina, sin embargo, Max podía escucharle perfectamente por su propio auricular.
— Está bien, ahora cuenta hasta diez y cierra tus ojos. Piensa en las estrellas e imagina que puedes alcanzar una de ellas.
Era la parte más difícil. Aunque Jungkook trató de tomarlo con calma y asintió a sus palabras antes de suspirar y comenzar a contar mentalmente. Max revisó que todo estuviese en orden y la máscara controlase su temperatura y temperamento sanguíneo, junto con los latidos de su corazón por sus cables cerca del cuello. Una vez dado el visto bueno, Max bajó la palanca de su placa de acciones y la cámara se cerró, luciendo completamente gris en pocos segundos.
— Oficialmente, Jeon Jungkook ha sido criogenizado con éxito. —Habló Max contento por el resultado—. Estará diez minutos en ese estado para que luego comprobemos su salud y su presión arterial en busca de fallos tempranos. Si todo sale bien, Jungkook tiene el aprobado para volar mañana.
Parker miraba todo con ojitos soñadores y asustados, lamiendo sus labios y con su corazón muy agitado. Notaba la vena de su cuello palpitar con fuerza y sus propios latidos incrementando.
No podía aguantar, era demasiado para él y para su salud mental, Jungkook tenía que salir bien de ahí.
Apenas pasaron un par de minutos cuando el rubio ya mordía sus uñas nervioso y no apartaba la mirada de la cámara del menor. Tragó saliva con pesadez y miró a Max.
— ¿Cuánto tiempo lleva?
— Dos minutos y treinta y siete segundos. —Dijo fijándose en el pequeño reloj de la placa—. Es pronto, no presenta problemas y lo está tomando bien, es genial cómo reacciona su cuerpo y mente. Parece muerto por completo pero su actividad cerebral es bastante alta.
— Literalmente nos matan para hacernos volver a la vida en cientos de años. —Comentó Jimin con una mueca en sus labios—. Me da miedo eso.
— A todos les da miedo algo. —Se unió Feith—. El universo es tan inmenso que... que el sólo pensar en él causa estragos en nuestro sistema. Pone los vellos de punta con una mirada.
Parker asintió concentrado en las palabras de su superior y mordió su labio inferior una vez más, como señal de nerviosismo y temor.
Ni siquiera se dio cuenta cuando fue que pasaron los ocho minutos restantes y Max comenzó a intentar contactar con Jungkook, parando la criogenización en primer lugar y abriendo despacio la cámara en segundo.
Un viento helado salió rápidamente de ella, Jimin juntó sus cejas esperando ansioso por ver algún movimiento que saliese dentro de ella, más no encontró nada.
— ¿Él está bien? —Preguntó con temor, Max asintió.
— Está despertando de la siesta más rara de su vida. —Rió, tomando el auricular para comenzar a comunicarse con el nombrado—. Jungkook, ¿me escuchas?
No hubo respuesta.
— Jungkook, soy Max, ¿puedes escucharme?
Tampoco la hubo, en cambio, una mano se alzó entre la nube de hielo, pulgar arriba y luego palma abierta.
— Tendrá la boca seca, tráiganle agua. —Ordenó Feith, algunos de los estudiantes en prácticas que se encontraban por la zona se encargaron de hacerlo—. ¿Todo bien? —Miró a Max, éste asintió.
— Todo bien. Nueve sobre diez.
— ¿Jungkook? —Preguntó Jimin con miedo.
— Si-Sigo vi-vivo. —Se escuchó una voz gruesa y desgastada, la nube desapareció con el tiempo y Jungkook apareció tumbado como cuando dejó de verse.
Él mismo se desconectó y apartó la máscara de su rostro antes de sentarse correctamente y llevar su cabeza hacia abajo, mirando al suelo.
— Wow. —Murmuró.
— Bienvenido al planeta Tierra de muevo, Jeon. —Rió Numn—. Felicidades, eres diez minutos más joven que todos nosotros.
Jungkook soltó una risa ronca ante sus palabras, asintiendo y tomando la botella de agua que un estudiante le ofrecía, bebiendo instantáneamente.
— Tengo frío. —Rió—. Pareciese como si hubiera pasado mis vacaciones en el Polo Norte junto a Claus.
Feith rodó los ojos, Jimin permanecía mirándole en silencio, notando que todo estaba bien. El de pelo negro, al notar su mirada, se levantó con cuidado y se acercó a él, agachándose para estar a su altura.
— No te preocupes, ha sido una bonita experiencia. —Alzó sus cejas, tratando de tranquilizar al contrario—. No me ha pasado nada, ¿ves? Estoy entero y tú lo estarás igual.
— Lo veo. —Asintió, tragando saliva—. Pero sigo teniendo miedo.
— No hay de qué tenerlo. —Sonrió—. Sabes que no dejaría... no dejaríamos que te pasase nada.
Asintió de nuevo con mirada inexplicable, fijándose en Jungkook y riendo al ver como un pequeño copo de nieve, o hielo, había quedado en su cabello.
Acercó su mano con una sonrisa y lo tomó para luego soplar y hacerlo desaparecer.
— Olaf. —Rió, Jungkook frunció el ceño divertido.
— ¿Quién es ese?
— Es un personaje animado de una película de dos mil... ¿dieciséis? No recuerdo.
— ¿Por qué te gusta ver películas antiguas? —Murmuró pensativo.
— Porque es cultura... y me hacen ver inteligente al saber de ellas.
Jeon rodó los ojos y negó con la cabeza, se levantó y despeinó los cabellos del rubio antes de bajar de la plataforma y colocarse al lado de Feith.
— ¿Listo, Parker? —Habló Eliot, Jimin negó.
— No.
«Definitivamente iba a volverme loco...»
• . * ˗ ˏˋ S A T U R N O ˎˊ˗ * . •
Capítulo de borrador ^^ pronto nuevos
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro