― ¿Estás bien?

El peli negro separa sus labios y deja salir el humo de sus pulmones bajo la mirada de su novia. Arquea una ceja y la mira extrañado.

― ¿Por qué preguntas, linda?

― Te noto distraído. ― Hace una mueca preocupada y pasa sus manos por su cintura para abrazarlo, pegando su mejilla en su chaqueta de cuero.

Gguk acaricia su espalda con cariño, dejando su cigarrillo de lado. ― Estoy bien, ¿Okey? No te preocupes por nada, solo tengo la mente en otro lado.

Jane se separa del contacto y mantiene sus manos en su cintura, lo mira atentamente desde abajo. ― Puedes contarme lo que sea.

― Lo sé, niña. ― Sonríe de lado y besa sus cabellos naranjas. ― Estoy preocupado por mi hermano, por sus mierdas, mi trabajo y tu padre. ― Borra su expresión animada al recordar las razones del porqué está tan preocupado.

Se separan por iniciativa de Gguk quien gira el cuerpo y apoya los codos en el balcón en un suspiro cansado. Siente el cuerpo tenso y esa extraña sensación en el pecho desde hace días, ese mal presentimiento acerca de todo lo que está pasando, sobre todo acerca de su hermano.

― Tengo este mal presentimiento... ― Aprieta los labios y niega. ― Olvídalo, es una mierda. ― Pasa una mano por su rostro.

Jane hace una mueca con los labios y toma la mano de Gguk sobre el balcón logrando obtener su mirada gris.

― También tengo un mal presentimiento, muchas cosas están cambiando en muy poco tiempo. Hasta hace menos de un año éramos de las familias más importantes de Corea y ahora estamos resurgiendo de la mierda gracias a mi padre y Jungkook, pero siento que no durará mucho esta paz.

Como si fuera una fachada.

― Con todo lo que me contaste de Jungkook...

― Nada de esto puede acabar bien. ― Entrelaza sus dedos y alza su mano para depositar un beso en el dorso de su mano, viéndola a los ojos con la latente preocupación en su mirada. ― Hablando de esto, quería hablar contigo.

― Te escucho. ― Le hace saber.

― Verás... ― Se coloca frente a ella y la toma de la otra mano también, con cuidado, uno frente al otro. ― Ambos sabemos lo inestable que es la situación ahora mismo para todos nosotros. ― Jane entrecierra los ojos, sabiendo a dónde va la conversación, pero aún así decide quedarse callada. ― Lo mejor, sería irnos lejos de aquí.

Jane cierra los ojos con un suspiro cansado y retira sus manos para cruzarse de brazos. Abre los ojos y dirige una mirada cansada hacia su novio. ― Ya hablamos de esto, no puedo dejar a mi familia en momentos críticos como estos.

― Lo sé, sé que es difícil por nuestras familias. Mi hermano está del carajo y mi único sobrino está en medio del posible divorcio de sus padres. ― Enumera con sus dedos antes de acercarse a Jane para explicarle a detalle. ― Pero eso no debería impedirnos tratar de estar a salvo, de todas formas, esto no depende de nosotros.

― Sé que no podemos hacer nada, pero no podemos dejarlos sin más... ― Trata de hacerlo razonar.

Gguk la toma con cuidado por los brazos y acaricia su piel tatuada, le sonríe un poco. ― ¿No quieres vivir en un lugar lejos de aquí? ¿Tener una vida tranquila? ¿Poder ser libres de tu padre y poder ser una pareja sin tener que escondernos como ahora? ― Jane baja los hombros y asiente.

― Suena genial poder estar a tu lado lejos de todo este caos, ¿Pero irnos ahora? ¿No te parece muy apresurado? ― Coloca sus manos en su pecho y ahí descansa su frente.

Acaricia sus cabellos en silencio, indeciso de exteriorizar aquel pensamiento que ha rondado mucho su cabeza, pero finalmente decide abrirse a su novia.

― Yo solo no quiero que terminemos como JiMin y Jungkook... Ellos decidieron quedarse en este mundo y mira como acabaron, consumidos por esta vida caótica y a punto de divorciarse. ― Jane se separa lo suficiente para ver su rostro.

― Yo tampoco quiero terminar consumida por toda esta mierda de la mafia.

Ggukno suele ser un hombre muy positivo o soñador, pero si se trata de vivir una vida tranquila al lado de la mujer que más ama en este mundo, entonces quiere permitirse a sí mismo el soñar con un futuro diferente y mejor.

― ¿Entonces porqué no nos vamos un tiempo? No tiene que ser toda la vida, solo unos meses, o años quizás. ― Trata de alentarla a la idea, y parece lograrlo cuando la ve dudar seriamente por unos momentos. ― ¿Entonces? ¿Qué piensas, linda?

― No suena mal... ― Alza un poco las comisuras de sus labios. ― Podríamos intentarlo por un tiempo, luego volveríamos para verificar que nuestras familias estén bien, ¿Verdad? ― Gguk asiente.

Jane sonríe mostrando los dientes. Ella podría negarse ahora mismo y Gguk se rendiría como otras veces ha pasado cuando le plantea la idea de irse, pero ahora mismo, viéndolo de otra manera no quiere cerrarse a lo que podría ser un nuevo comienzo para ambos.

Una mejor vida, al menos por un tiempo.

Sus ojos grises parecen brillar y sonríe. ― Entonces hagámoslo.

― Escapemos un tiempo. ― Ríe un poco disfrutando de su cercanía.

El hombre toma su rostro con cuidado y se encorva para lograr juntar sus labios con los de su novia, disfrutando de la calma que llena su cuerpo al saber que hay una oportunidad para ambos, para un futuro juntos más allá de la oscuridad, el dolor y la mafia.

Ser protagonistas de un final más colorido, tal vez.

Enjaulados en su pequeña burbuja de ilusión extraña en sus corazones, siendo ignorantes a la mirada de cierta chica que los miraba atónita desde la puerta entreabierta de la habitación, habiendo escuchado todo y teniendo un nudo en la garganta. Salió disparada a las escaleras, arrepentida de haber escuchado a escondidas, pero ahora sabiendo algo que no debía, y no podría quedarse callada.

― Los escuché, quieren escaparse juntos mamá...

― ¿Mamá?

JiMin vuelve del jardín con su bebé en brazos, mira extrañado a su madre y hermana más joven a tan solo pasos más adelante, ambas se toman de las manos y se ven preocupadas por algo que él no entiende.

― ¿Qué ocurre? ¿Quienes quieren escapar? ― Pregunta preocupado.

― Querido, baja la voz. ― Su madre suelta las manos de su hija y se acerca a él haciendo sonar sus tacones bajos color beige, con la menor siguiéndola detrás. ― Sunhye afirma que Gguk y Jane están en una relación, y que planean escapar juntos.

JiMin frunce ligeramente el ceño y mira a su hermana menor quien acomoda sus lentes rosas y evita su mirada, escondiéndose disimuladamente detrás de su mamá.

― Sunhye, no deberías espiar, pensé que habías dejado de hacerlo. ― La adolescente se tensa y baja la mirada, JiMin maldice en su cabeza y acomoda al bebé en sus brazos, soltando un suspiro.

Azami asiente volteando para tomar a su hija por los hombros. ― ¿Es todo lo que escuchaste?

― Sí... ― Pasa saliva y limpia sus lágrimas. ― Sé que no debí espiar, yo solo buscaba hablar con Jane.

― Está bien, tranquila. ― La atrae a su pecho para abrazarla. ― Luego hablaré con tu hermana, primero centremonos en Ami y su cumpleaños. ― Separa a Sunhye para poder mirar a sus dos hijos. ― No se lo comenten a nadie, ¿Escucharon? Mucho menos a su padre, él no debe saberlo.

JiMin está de acuerdo, su madre podría encargarse del problema sin generar disputas o peleas, pero su padre era un cuento muy distinto, él sería capaz de separarlos por completo y no permitiría que se vieran por un largo tiempo. Además, sabe que su padre jamás aprobaría que una de sus hijas se involucre con otro de los Jeon, suficiente tiene con Jungkook.

― Si papá se entera se volverá loco...

― Muy tarde, cariño.

JiMin se tensa y tanto su madre como su hermana voltean a verlo con los ojos bien abiertos. No esperaban verlo ahí, detrás suyo.

¿En qué momento...?

Nadie escuchó sus pasos, ni su presencia, debieron haber revisado antes de haber hablado sobre el problema. Woong se ha enterado de su relación y su plan de escape, definitivamente esto no podría llevar a nada bueno, al menos no para Gguk.

― Woong... ― Azami lo llama cuando ve sus ojos púrpuras volverse más intensos y apretar con furia el teléfono en su mano. ― No hagas de esto un problema más grande, por favor. ― Es firme al hablar esperando detenr a su esposo antes de que cree un conflicto en la familia. ― Yo puedo encargarme de esto, hablaré con ellos.

Trata de calmarlo, pero parece ser inútil, Woong no cambia la dura expresión en su rostro ni destensa los músculos de la cara. Azami lo conoce bien, si no lo detiene ahora podría empeorar la situación, por lo que se desespera y se acerca a él para tomarlo de la muñeca.

― Woong. ― Advierte.

Retira la mano de su esposa con cuidado y da un paso a un lado. ― Sé que puedes encargarte, pero se trata de un Jeon y me voy a encargar yo. ― No era una pregunta, era un aviso y no iba a recibir negativa alguna que lo haga cambiar de parecer.

― ¿Qué pasa? ― El característico perfume de Ami inunda el lugar, se acerca animada hasta ellos vistiendo un vestido amarillo hasta las rodillas. La sonrisa en su rostro desvanece al caer en cuenta de la tensión y los rostros preocupados de los presentes. ― ¿Qué ocurre? ― Vuelve a preguntar con preocupación.

JiMin se mantuvo al margen desde que se percataron de la presencia de su padre, pero rompe su silencio acercándose a su hermana menor para tranquilizarla. No debían arruinar su cumpleaños.

― No ocurre nada. ― Finge una pequeña sonrisa y con cuidado la aleja de la escena. ― Sabes que papá siempre está discutiendo por nada. ― Le resta importancia, dando una última mirada atrás, viendo a su padre subir las escaleras y a su madre seguirlo detrás mientras Sunhye se quedaba parada en el inicio de las escaleras sin saber qué hacer. ― No te preocupes, ¿De acuerdo?

Ami asiente no muy convencida y caminan juntos hasta la sala principal donde Marilyn jugaba en el suelo mientras Taehyung y Jackson conservaban. Ami platica con su esposo mientras JiMin se sienta al lado de Taehyung, este toma a Seiji en brazos para entretenerlo un momento, a lo que JiMin recarga su cabeza en su hombro buscando un poco de tranquilidad.

― ¿Cómo te fue con Woong? ― Pregunta curioso.

Exhala con pesar. ― Una mierda, pero no salió tan mal como esperaba. ― Rie un poco.

No dice nada más, desde su lugar puede ver a lo lejos a Sunhye alejarse de las escaleras hacia el jardín, seguramente a pensar sobre lo sucedido. JiMin piensa que ella no tiene idea de lo que provocó, solo espera que no sea un problema muy grande en el futuro.

¡Hola! Este capítulo quedó un poco corto, lo sé pero desde ahora los capítulos serán algo así, cosa que actualizo más seguido aprovechando que estoy de vacaciones jeje

Lo que se viene lo cocinaré a fuego lento, todo se va a ir construyendo poco a poco hasta que llegue la verdadera tormenta y el final ;)

- Mgg.