Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo 3: ¡Naruto es el ganador!

[Al final contiene una pequeña escena de sexo]

Entre comillas oficialmente el horario de trabajo del Hokage es de 7 a.m a 7 p.m pero Shikamaru estaba indignado cuando entró a una Oficina del Hokage bastante ordenada pero sin Hokage. 

No sabía qué pensar, era un poco más de las cinco y Naruto no aparecía por ningún lado del edificio hasta que Sai, que estaba ayudando a Shikamaru, encontró una nota en la silla del despacho. 

Para Shikamaru o las demás personas que trabajaban ahí no era raro que Naruto se fuera por tiempo indeterminado por su familia, por comida o simplemente a dar un paseo, y siempre tenían que salir a buscarlo, pues no estaba bien desaparecer en medio del trabajo pero esta nota decía... 

Lo siento, Shikamaru! Pero se me ocurrió una idea para sacar a las niños de la casa por un par de horas o hasta días, me encanta mi trabajo pero también me encanta Sasuke, nos vemos mañana o pasado, ¡tal vez en una semana con suerte! 

Naruto (づ ̄ ³ ̄)づ

—¡Qué fastidio! ¡Ahora que hago con todo el trabajo atrasado!— Grito Shikamaru cuando recibió la nota de las manos de Sai. 

Mientras tanto en otro lado de la aldea, nos encontramos con Naruto que estaba llevando a cabo su plan "alejar niños de su amor" por poder tener sexo todo el día, comenzaba. 

Lo primero fue ir hablar con Mitsuki para convencerlo de ayudarlo con Boruto, después pasar por el centro de la ciudad y después de buscar por seis tiendas distintas encontró aquello que convencerla a los mellizos más jóvenes, ahora venía lo más difícil, Sarada. 

¿Cómo iba a convencer a su hija mayor de dejar a su padre omega solo? Eso iba a ser un rato pero reto pero después de un par de horas pensando, lo descubrió, algo tan simple que iba a poder encontrar en su casa. 

Ya eran las siete cuando llegó a casa y fue recibido por Boruto, este preparaba la cena por lo que vio el mayor. 

—Tadaima.. — Susurro Naruto y dejó las dos bolsas en un costado de la entrada. 

—¡Okaeri!— Grito Boruto desde la cocina como respuesta. 

—¿Sabes una cosa? Me encontré con Mitsuki este tarde mientras salía del trabajo—

—¿De verdad?— Murmuró Boruto y se sonrojó un poquito. 

—Si, me dijo que quería que vayas a su departamento ahora mismo o ¿que se iba a terminar la crema batida? ¿Tal vez por casualidad dijo algo así?—

—¡Papá! ¡No digas ese tipo de cosas!— Gritó Boruto avergonzado —Pero estoy cuidando a mamá, no pudo ir—

—Sarada se va a quedar y prometo terminar de cocinar la cena por ti— Dijo Naruto muy amable, después de sacarse las sandalias ninja y sentarse en la mesa. 

—No lo sé, mamá me necesita y no se si esta bien irme—

—Niño, te estoy dejando ir a su departamento a hacer cosas que ni me quiero imaginar, ¡aprovecha!, igual está Sarada y los mellizos en el piso de arriba— Dijo Naruto y Boruto lo pensó, se sonrojó y aceptó. 

—Bueno, tienes razón— Dijo Boruto —Sarada puede sola pero promete que no le vas a ser nada a Mitsuki como la última vez—

—Nada de nada, ahora ve y diviértete— Dijo Naruto y le sonrió a su hijo, Boruto terminó de cocinar la cena, se cambió y salió al departamento de su novio. 

—Uno menos, faltan tres más— Dijo Naruto y se acercó a la mesada de la cocina donde su hijo dejó la comida y por "accidente" tiró uno de los platos. 

—¿Estas bien Boruto? ¡Escuche un ruido fuerte! ¿Te cortaste?— Las pisadas de Sarada se escuchaban mientras bajaba la escalera. 

—Ah.. Eres tu— Dijo Sarada —¿Y Boruto?—

—Se fue... — Respondió Naruto y comenzó a recoger el plato, cuando Sasuke esté con todos sus sentidos lo iba a matar por romper un plato a propósito pero todo riesgo valía la pena si al final lograba su objetivo. 

—¿Por que tiraste el plato?— Dijo Sarada y se acomodo sus lentes —No soy tan tonta como mi hermano para creer algo que salga de tu boca—

—¿Por qué no hacemos un trato?— Propuso Naruto —Yo te doy algo que quieres y tu te vas de casa hasta las diez—

—¿Y que sería ese algo?— Preguntó interesada Sarada. 

—Esto... — Dijo Naruto y sacó tres novelas autografiadas. 

—Ah.. — Sarada se sonrojó profundamente y se mordió el labio, eran los tres libros escritos por el sensei de papá, Jiraiya. ICHA ICHA Paradaisu, ICHA ICHA Baiorensu y ICHA ICHA Takutikusu. 

—Convencí a Kakashi-sensei de prestarlos hasta mañana, están autografiados y en hermosas condiciones, te los doy si te vas unas horas de casa— Dijo Naruto y sostuve los tres libros mostrandoselos a su hija. 

—Pe-pero mamá dijo que no podía leerlos hasta que fuera mayor de edad— Susurro Sarada, Boruto y ella estuvieron días buscando esos libros y cuando los encontraron en casa, mamá les prendió fuego con un Amaterasu. 

—Mamá no lo va a saber— Fue lo único que dijo Naruto y acercó los tres libros aún más cerca a su hija, casi que podía oler el olor a nuevo que desprendían —¿No tienes intriga? Son novelas muy interesantes— 

—Está bien, voy al parque pero ni se te ocurra ir a la habitación y los gemelos necesitan cenar en media hora— Dijo Sarada y casi que le arrancó los libros de la mano, se puso las sandalias y salió corriendo sonrojada de la casa. 

—Dos menos, faltan otros dos—

Después de levantar el plato roto y la comida del piso, se acercó a las dos bolsas que dejó en la entrada escondidas con anterioridad y sacó dos cajas iguales. 

Subió las escaleras hasta la habitación y se detuvo por unos minutos a oler el increíble aroma que desprendía Sasuke, mientras que los niños olían tomates (cosa que Naruto jamás entendió), para él, Sasuke tiene un fuerte aroma a restaurante, más específico a ramen casero y dulces. 

Tocó varias veces la puerta y dos cabecitas abrieron un poquito la puerta. 

—¿Si, papi?— Dijo Menma. 

—Hoy salí temprano del trabajo y mientras caminaba de regreso a casa encontré estos en una tienda y los compre por que se lo mucho que los desean— Dijo Naruto y les acercó las dos cajas, obvio era una mentira, estuvo como dos horas recorriendo el centro hasta encontrar una tienda que los vendía. 

—¡Esos son kuramas!— gritaron al mismo tiempo los dos niños. 

—¿Estas bien chicos?— Se escucho la voz de Sasuke desde la habitación y Naruto estaba tentado a contestar pero no lo hizo. 

—Si, mami— Dijo Menma. 

—Son dos Kuramas originales, si les van cariño al huevo se rompe y tienen un peluche de kurama para cuidar, darle amor y alimentar, ¿que les parece?— Propuso Naruto y les acerco las cajas para que vean. 

—¡Sisi! — Grito Menma y ya quería agarrar la caja. 

—Un minuto... — Dijo Naruto y alejó la caja —Solo se los doy, se van a comer afuera con Kakashi y Iruka por unas horas, solos tres horas—

—¿Y mamá? ¿Se va a sentir mal si la dejamos solo?— Preguntó Hima.

—Tienes razón, Sarada nos dijo que si nos vamos le va a doler— Dijo Menma. 

—Ustedes creen que yo dejaría que a mamá le pase algo, yo lo amo— Dijo Naruto —Ustedes vayan con ellos a cenar y yo lo cuido hasta que vuelvan, les aseguró que no va a dolerle nada cuando vuelvan, lo juro—

—No lo se— Susurro Menma sintiéndose culpable y queriendo volver a los brazos de mamá. 

—Les doy yo el dinero, vayan a comer ramen— Dijo Naruto. 

—¿Ramen?— Dijo interesado Menma —¿Al nuevo restaurante de lujo que abrir en la ciudad?—

—Donde ustedes quieran— Respondió enseguida Naruto, sin pensar en como Sasuke después lo iba a ser picadillo por el dinero gastado. 

—¿Seguro que vas a cuidar a mamá?— Preguntó Hima triste. 

—Segurisimo, les cuento un secreto, cuando estoy cerca de su madre todos sus dólares desaparecen— Dijo Naruto sonando fantástico. 

—Está bien, creo— Dijo Hima y Menma asintió a las palabras de su hermano. 

—¿Mi kurama?— Pregunto Menma con voz inocente y Naruto le vio una caja a cada uno. 

—Tienen cinco minutos, cambie su ropa y nos vemos en la entrada— Dijo Naruto y arrastró a sus hijos a sus habitación para cambiar su pijama por ropa más formal. 

Una vez cambiados les ayuda a ponerse las sandalias ninja y casi que corriendo fueron a las afueras de la mansión del hokage, donde Kakashi e Iruka estaban esperando. 

—Gracias por hacerme el favor, diviértanse y no vuelvan hasta las diez— Dijo Naruto y le dio un beso en la cabeza a cada uno de sus hijos y dinero a Kakashi para la cena. 

—Abuelo/Sexto, mira mi kurama— Dijeron los dos niños al mismo tiempo mostrando lo que aún era el huevo de kurama. 

—Naruto les compró ese juguete al final— Dijo Iruka. 

—Si para que saliéramos de la habitación de mamá... — Dijo Hima. 

—Boruto dijo que mamá está en celo pero dejamos a papá cuidando de mamá— Terminó por decir Menma. 

—Por eso me pidió los libros— Dijo Kakashi entendiendo todo y solo se rio junto a su novio, Iruka. 

—Vamos a cenar niños— Dijo Iruka. 

Apenas Naruto entró a la casa, corrió hasta la habitación donde se encontraba Sasuke y cuando abrió lo encontró completamente desnudo en la cama con tres de sus dedos dentro de él, el lubricante natural que todos los omegas poseen se deslizaba de la entrada de Sasuke hasta sus muslos y las sabanas de la cama. 

Mientras Sasuke estaba en cuatro mostrando esta hermosa vista a su marido, Naruto se quitaba, desesperado, la ropa para acompañar a su compañero en su celo. 

—¡Ah! Am.. ¡Ah! Naruto-kun— Gimio Sasuke repetidamente, la única persona con la que usaba honoríficos y solo en la "cama". 

—Me siento tan vacío, ¡llename! ¡Follame!— Gemio Sasuke y Naruto se apresuró al lado de su pareja, se posicionó al lado de la entrada de Sasuke. 

—Condón, usa condón— Dijo Sasuke claramente, por muy celo en el que está, un niño como resultado era imposible. 

—Ya me lo puse, tranquilo— Dijo Naruto y puso sus manos en las caderas de Sasuke y de un solo movimiento entró todo el miembro de Naruto y el cuerpo de Sasuke se estiró como un gatito. 

—¡SI! ¡Más rápido! ¡Más fuerte! Naruto-kun— Gimio Sasuke y rápidamente la habitación se llenó de gemidos y sonidos húmedos. 

El ruido de la cama contra la pared de las duras embestidas de Naruto a su esposo, de los jadeos de Naruto al penetrar a su esposo y de los gritos y gemidos de Sasuke al recibir a su esposo dentro de él. 

Naruto comenzó a masturbar el miembro de Sasuke también y a dar besos por todo la espalda de Sasuke. 

—¡Nudo! ¡Haz un nudo! ¡Criame! ¡Embarazame!— Grito el omega de Sasuke, Naruto sabía que si llegaba a embarazar a su esposo probablemente esté lo castre con sus propias manos apenas reciba la noticia. 

—Voy a anudar a mi hermoso omega, ruega por mi nudo, ¡pídelo puta!— Dijo Naruto y comenzó a retirar completamente su pene y volverlo a meter de golpe. 

—¡Soy toda tuya! ¡Tuya! ¡Anuda en mi alfa! ¡Por favor! ¡Anuda en mi! ¡Criame!— Gritaba Sasuke en cada embestida, sus manos agarraban el cabezal de la cama muy fuerte. 

—Eres bueno gimiendo, di que solo eres mi perra— Dijo Naruto y le pegó en el redondo trasero de su esposo y muslos tan carnosos. 

—¡Solo soy tu perra! ¡Solo tuya, Nanadaime Hokage!— Con esas palabras Naruto terminó de anudar en Sasuke. 

Nudo que hizo gritar y perder fuerte a Sasuke para terminar con la cara contra el colchón, el nudo llenaba la entrada de Sasuke y tenía el propósito de producir una quemadura mucho mayor para aliviar el celo y evitar que el semen salga del cuerpo. 

Naruto lentamente se movió al costado de Sasuke para quedar a su lado. 

—Después de seis meses esto es reconfortante— Susurro Naruto aún preso del placer. 

—Aún puedo sentir el condón llenarse dobe— Susurro Sasuke —Tienes que masturbarte más seguido cuando no estoy—

—Eres mi esposo, no deberías decirme eso— Dijo sonriendo Naruto. 

—¿Y los niños?— Preguntó Sasuke de repente y su cara se torno de pánico por unos segundos —¿¡No me digas que están en la casa?!—

—No, Boruto esta con Mitsuki y Sarada fue a leer al parque y los niños salieron a comer con Kakashi-sensei y Iruka-sensei— Explicó Naruto y Sasuke se relajo. 

—Apenas se deshaga el nudo, ve a buscar unos supresores, creo que en el baño de abajo ahí algunos— Dijo Sasuke. 

—Faltan dos horas y media para que vuelvan los niños, hay que divertirnos como nunca— Dijo Naruto y movió un poco sus cadenas haciendo gemir a Sasuke. 

—Solo un poco— Susurro apenado Sasuke. 

A las diez en punto los cuatro chicos se toparon en la puerta de entrada y se miraron con los ojos redondos entre sí. 

—¡Maldito papá!— gritaron los cuatro a la vez. 

Fin. 

Espero que les haya gustado, es una pequeña historia de 5.715 palabras más o menos pero es uno de los primeros fanfic del mundo de Naruto que escribo, espero que les haya gustado.

En mi perfil se puede encontrar otra historia un poquito parecido llamada el amor es ciego...

Gracias por leer!

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro