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𝕋𝕣𝕖𝕤

Capítulo 3
Eres un chico malo

Para todos en la comisaría era emocionante tener a BTS allí, aunque por fuera debían mostrar profesionalismo, más aún en un tema tan delicado como el que exponían ellos. El señor Ahn había sido hallado muerto a orillas de un lago en las afuera de la ciudad, los vecinos de la pequeña urbanización que estaba cerca del área dieron la alarma a la policía, el hombre había sido estrangulado hasta impedirle el respirar dando así la muerte, su cuello tenía marcas del ataque y se deducía que se había defendido, o intentado al menos. Aquel hombre había sido la víctima perfecta al no tener familiares que comprobaran su cadáver, vivía solo y trabajaba como chofer para la agencia Hybe desde hace poco.

—¿Recuerda la hora en la que su amigo subió al vehículo?—el detective Son tomaba creaba el informe en el computador escuchando los testimonios de los chicos y el mánager. La noticia ya se había informado al CEO de la agencia llegando de alguna manera a todo el personal.

—Según me habían informado, el señor Ahn pasaría a las 7:30 de la mañana.

—Sí, aproximadamente a esa hora—Jimin afirmó lo que el mánager decía. Recordaba haber revisado su teléfono cuando subieron a los autos.

—¿Alguno de ustedes llegó a mirar al conductor en ese instante?—los miró.

Los séis miembros hicieron memoria de la mañana. Recordaban que JungKook se sentía un poco raro, como si tuviera un mal presentimiento. Las ventanas de los vehículos eran polarizados, no habrían podido ver a la persona aunque así lo quisieran.

—Creo que no—respondió NamJoon por ellos.

—Detective Son, ayudaremos en todo lo que sea posible—el mánager se inclinó hacia adelante en el escritorio—Ayúdenos a encontrar a JungKook, por favor.

—¿Creen que la persona que asesinó al señor Ahn...sea la misma que se llevó a JungKook?—Hoseok miró a sus compañeros. Los chicos habían regresado al departamento luego de dar la información posible en la policía, su mánager regresaría a la agencia para avisar de todo.

—Tal vez—NamJoon tomó asiento en el mueble cruzándose de brazos.

—¿Por qué un asesino se lo llevaría?—cuestionó Jimin.

—¿Para asesinarlo?

—¡TaeHyung!—SeokJin le reprochó por el comentario—No digas eso, confiemos en que la policía lo encontrará sano y salvo.

—El detective dijo que iniciarían la búsqueda, también conseguirían la orden para echar un vistazo en las cámaras de la agencia—todos asintieron ante las palabras de YoonGi.

—Oigan, chicos—Hoseok subió volumen al televisor. La prensa estaba dando la información de la repentina desaparición del maknae.

Cuando JungKook fue consciente ya era de noche, esta vez si podía moverse y no estaba atado. Lentamente se incorporó restregando sus ojos, lo último que recordaba era a SolAh vistiéndolo luego de haberlo "ayudado" a bañarse, miró la habitación encontrando ésta a oscuras, algunas velas servían de iluminación aunque no lo suficiente, se levantó de la cama caminando hacia la ventana, poco antes de llegar a ella algo jaló de su tobillo, al darse cuenta estaba encadenado a una de las patas de la cama.

—Pero ¿Qué...?—aquello lo desconcertó. No estaba atado, ahora se encontraba encadenado como un perro—Tengo que salir de aquí—intentó estirarse hacia la ventana, sus manos alcanzaron el marco de ésta, la cadena en su tobillo le impedía llegar más allá al ser corta. No podía ver nada porque todo estaba oscuro.

Escuchó unos pasos volviendo a la cama. Hizo el esfuerzo de calmar su corazón fingiendo estar inconsciente todavía. La puerta fue abierta por SolAh, traía otra bandeja con la cena, la dejó en la mesa de noche y JungKook sintió la cama hundirse a su lado, la rubia acarició su cabello con extrema delicadeza.

—Eres perfecto incluso mientras duermes—susurró, sus dedos rozaron su nariz, su mejilla, su mandíbula y finalmente sus labios. El pelinegro en un segundo pensó en el siguiente movimiento actuando por impulso. SolAh quedó debajo de su cuerpo en la cama, el chico la inmovilizó sosteniendo sus muñecas sobre su cabeza, al tener sus piernas a ambos lados de las de ella ejerció presión impidiendo que se moviera—Sabía que estabas despierto, JungKookie.

El pelinegro escuchaba su propio corazón retumbando en sus oídos. ¿Ahora qué?

—Déjame ir.

—¿Por qué?—hizo un puchero.

—Dime lo que quieres, prometo dártelo. Pero tienes que dejarme ir.

—¿Me darás lo que quieras?—se mostró interesada.

—Sólo dímelo.

SolAh no necesitó pensarlo mucho.

—Te quiero a ti, JungKookie, te quiero sólo para mí—le dejó escuchar su risita divertida.

—Si no me dejas ir vendrán por ti, ¿Quieres ir a la cárcel?, ¿Qué dirá tu familia?

—Eres tan lindo preocupándote por mí—se mostró conmovida—Las velas hacen esto más romántico, ¿No te parece?

A JungKook le estaba agotando la paciencia.

—¿Dónde está la llave de la cadena?

—No lo sé—SolAh se quejó sintiendo que presionaba sus muñecas. Sonrió fascinada por aquella experiencia—Eres muy sexy enojado. ¿Acaso te gustó el baño que te di?

El chico se sintió asqueado recordando como lo tocó. Miró la bandeja en la mesa de noche, no había un cuchillo a la vista, ni siquiera un tenedor, sólo una cuchara y dos palillos. La frustración quería tomar control de él, SolAh sonrió sabiendo que estaba consiguiéndolo.

—¿Dónde estoy?

—Ya te lo dije, en mi escondite favorito...

—¡¿Dónde estoy?!—alzó la voz. La imagen de su idol siendo tan dominante le excitaba...y mucho.

—En el pueblo.

—¿Cuál pueblo?

—Donde crecí cuando niña.

Eso no le servía.

—Déjame ir, no lo repetiré de nuevo.

—¿O sino qué?, ¿Me lastimarás?—JungKook no esperó lo siguiente—Adelante, golpéame, me encanta la toxicidad en las relaciones, siempre me pregunté lo que sería tener sexo rudo contigo, ¿Cumplirás mi fantasía, JungKookie?

Esa manera de llamarlo le estaba hartando.

Acabó soltándola retrocediendo en la cama. No era capaz de herirla y no tenía nada que pudiera usar para amenazarla, estaba perdido. Se sentía un cobarde, SolAh colocó la bandeja entre los dos.

—Te traje la cena, JungKookie.

El chico golpeó aquella bandeja arrojándola al suelo.

—¡Deja de llamarme así!

—¿Acabas de arruinar la cena que hice para ti?—chasqueó la lengua—Estás haciendo difícil las cosas—su mirada le dio miedo—Recógelo.

—No. Abre la cadena.

—Recoge la comida, JungKook.

Su voz seria le hizo saber que estaba advirtiéndole. Ahora la enojada era ella, JungKook retrocedió más, SolAh de su espalda sacó el cuchillo que él estaba buscando segundos antes. Debió revisarla antes de soltarla.

—No me lastimarías, ¿No?, soy tu favorito, tú lo dijiste.

—Tu voz está temblando, te dije que fueras bueno conmigo—levantó una de sus cejas—Recoge la maldita comida—miró el cuchillo considerando la posibilidad de...—Si intentas quitármelo no dudaré en lastimarte realmente, anda, recoge la comida.

JungKook obedeció usando la cuchara para recoger partes de la cena colocándolas en el plato. La expresión de SolAh era tan seria e inexpresiva que intimidaba un poco, incluso a alguien grande como el cantante. Uno de los platos pequeños que antes tenía un acompañante para el arroz se había hecho pedazos.

—Disculpate por lo que hiciste—ordenó ella. JungKook apretó sus labios mirando al suelo encontrándose aún de rodillas—Disculpate, te hice la cena y lo menos que merezco es una disculpa, ¿No se supone que eres el chico ideal de muchas?, tienes que ser educado y caballeroso, JungKookie.

—Lo siento—dijo a regañadientes.

SolAh sonrió al escucharlo sosteniendo el cuchillo todavía.

—Ahora cómelo.

—¿Qué?—la miró.

—No podemos desperdiciar la comida. Cuando me comportaba de esa manera mi madre me obligaba comer—ladeó su cabeza—Come.

La comida en el plato se veía menos apetitosa al estar revuelta. El chico sintió unas ligeras náuseas de imaginarlo en su boca.

—¿Quieres envenenarme o algo así?

—¡Claro que no!—vio el horror en sus ojos—Ya te lo dije, debes ser bueno conmigo para que sea buena contigo—sonrió con fingida inocencia—Fuiste un chico malo y este es tu castigo—acercó el cuchillo a su cuello—Sé que quieres quitarme el cuchillo, sé que no lo harás porque no eres tan estúpido.

—SolAh...

—Te dije que comieras. No quiero seguir hablando, por tu culpa estoy de mal humor.

JungKook tomó la cuchara recogiendo algo de aquella..."comida", intentó ignorar el hecho de que había estado en el suelo, masticó despacio sintiendo las arcadas, acabo vomitando frente a la rubia escuchando su risita de fondo.

¿Cómo iba a salir de allí?

._.

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