Jaehyun acababa de dar su pequeña conferencia de prensa. Tiffany estaba a su lado, generando más revuelo, pero ella insistió en estar porque..¡Es su hijo!

Sarang estaba mirando la pequeña entrevista por televisión, mordiendo sus uñas y siendo acompañada por Soojin.

--- no debiste venir, má..- susurró mientras acomodaba su camisa blanca - se volvieron locos.

Ya estaban en el piso donde se hallaba la oficina del CEO. Jaehyun le regaló una suave sonrisa a Sarang apenas sus miradas se cruzaron.

--- vengo cuando quiero, Yunho.

La chica frunció por unos instantes el ceño, siendo raro para ella escuchar otro nombre.

--- bien, ya está. - Jay palmeó el hombro de su madre - no te enojes.

--- ¡Es que..! - pisoteo el suelo con su tacón - ¿Cómo van a decir esas cosas de Sarang? ¡Y tú que solo niegas cómo una persona normal! ¡¡Debes defender!!

Entraron a la oficina, seguidos de Soojin y Sarang. Jaehyun atrapó a la castaña entre sus brazos y apretó el abrazo con delicadeza.

--- prefiero cerrar la boca y que el mundo vea las fotos de la bonita novia que tengo en todas las revistas de chismentos, ¿Uhm?

--- igual que tu padre, pacifista. -bufó - Sarang, cariño, lamento eso..¡Son unos idiotas! No debes hacerles caso, tú eres preciosa y no importa lo que ellos digan.

Eso sirvió. Sarang estaba en blanco pero se sentía algo mal por aquellos comentarios, los escuchó apenas pero se relajó cuando Jaehyun contestó ante ellos: para mí es hermosa, ¿Acaso necesito pedirle permiso a las mejores modelos o a ustedes para salir con ella? Es ridículo.

--- Sarang-Ssi..- Jaehyun sonrió emocionado - pedí unos cupcakes con dulce, de los que te gustan.

Oh, si. Esa era la debilidad de Sarang.

--- yo quiero. - Soojin comentó.

--- a ti no te invité.

Y así como terminó de responder, recibió un golpe en la nuca de su madre.

--- puedes comer los que quieras, Soojinnie.

Eso le sacó una pequeña carcajada a Sarang, quien seguía mirando con gracia al chico que se quejaba del golpe.

Al ver la sonrisa en Sarang, Jaehyun se contagió, también riendo antes de darle un pequeño beso en su mejilla.

--- ¡Okay! ¡Al trabajo! - Soojin tomo el brazo de Tiffany - ¿Por qué no me acompaña? Podemos ir por un cafe o..

--- sí, pensaba en un pedazo de tarta que vi en el buffet..

Y así se quedaron solos, causando timidez en la chica.

Timidez que rápidamente se alejó por estar distraída besando los rosados labios de Jaehyun.

Pudo sentir como las manos de él le tomaban por la cintura y rápidamente la llevó a un sofá cómodo que había en la misma habitación.

--- saldremos a dónde y cuando queramos. ¿Bien? - volvió a besar sus labios, sonriendo de por medio - Sarangie, ten la confianza de decirme todos tus problemas, te ayudaré de una u otra forma.

Sus ojos se abrieron sorprendidos cuando ella le besó, sujetandose de su cuello y uniendo con cuidado sus labios.

Al apoyar en su cintura una de sus manos, Sarang abrió un poco sus labios, decidiendo separarse cuando Jaehyun ya comenzó a hacerle cosquillas.

--- Yunho-Ssi. - tomó sus manos con fuerza, mirándole directamente a los ojos en aquella ráfaga de confianza imprevista - n-no, cosquillas no.

Jeong abultó sus labios, luciendo algo triste antes de comenzar a dejar pequeños besos en el cuello de su secretaria.

--- me gusta tu perfume. - acurrucó mejor su nariz en la curvatura de su hombro - muchísimo.

Jaehyun estaba medio recostado sobre el pequeño cuerpo de Sarang, causando una risa tonta que salió de su enamorada.

--- también me gusta tu perfume.

--- ¿En serio? - salió de su escondite, mostrando sus hoyuelos al sonreír - es nuevo. Lo compré en Italia, ¿Recuerdas? Dijiste que te gustaba..

Ahí estaba la cara de cachorro torpe y alegre que tenía el 90% del día, cambiando solo cuando se trataba a de trabajo.

--- y si me gusta.

--- me alegra. Voy a usarlo todos los días. - volvió a esconderse, abrazando con cuidado el torso de Sarang - ¿Vamos a almorzar juntos?

--- supongo...

--- eso es un sí. - rió - pensaba en..¿Helado? ¿Quieres helado? No hay nada mejor que el helado en invierno.

🍰

Pasaron tres meses de aquel suceso y la televisión y medios se olvidaron de aquella noticia. Simplemente les dejaban vivir tranquilos, lo que resultaba muy raro después de ser perseguidos por un mes, pero lo agradecían.

Ahora; Sarang estaba por primera vez en el departamento de Jaehyun, obteniendo un bonito housetour por parte del dueño.

--- deja tus cosas ahí, voy por el helado. - salió disparado a lo que parecía ser la cocina, pero su cabeza volvió a asomarse con una sonrisa - ¿Quieres que te preste ropa? Hace calor y..

Sus orejas se tiñeron de rojo rápidamente

--- o puedes ir a tu casa y cambiarte..

Apenas llegaban de la empresa, eran cerca de las diez, pero acordaron ver una película juntos.

--- Uhm, Byul ya esta durmiendo...

Ella sabía cuánta ilusión le hacía a Jaehyun prestarle su ropa. Siempre insistía en darle su abrigo o permitirle usar las pantuflas que llevaba al trabajo para estar lejos de los zapatos de cuero, siempre estaba allí para darle algo suyo. Desde un collar hasta un dulce, lo que sea.

Jaehyun tardó en entender aquello y cuando lo hizo, casi se cae por enderezarse al ir a hablar con ella.

--- ¿Si quieres usar algo mi-mío?

--- ¿Por qué no?

Ouhh, a Jeong le encantaba esa faceta confiada de Sarang. Cada vez mostraba más su verdadera personalidad y eso le enamoraba una y otra vez.  

Y más se enamoró cuando vio a Sarang bajar por las escaleras con una de sus remeras de pijama y un pantalón que tapaba apenas sus muslos.

Ella sostenía los pantalones mientras luchaba con ajustarlos a su medida, hasta que aquel príncipe con complejo de Golden, fue a su rescate.

Hizo un nudo en el ajuste y después mordió su labio inferior con emoción, mirando con ilusión lo pequeña que se veía a su lado.

Sarang carraspeó, ya algo tímida por tanta atención en tan poco tiempo.

--- ci-cierto, ¡La película! - se alejó algo sonrojado - y-yo..iré a cambiarme. Tú elije la película y comienza, yo vuelvo en un segundo.

Y con torpeza subió las escaleras, luciendo estúpidamente tierno a los ojos de Sarang.

Después de acomodarse y luchar con el control, logró poner una película que aparecía como recomendada.

Tal vez fue el largo día o lo cómodo que era el sillón, pero el sueño le atacó suelo de aquel suspiro.

Jaehyun volvió con su pijama puesto, su cabello húmedo y rostro algo pálido por haberlo lavado.

--- permiso..- canturreó mientras se recostaba a su lado, abrazando su abdomen y sonriendo inocente cuando ella le miró mal - ¿Qué..?

--- hace calor.

--- ¿Y?

--- si me abrazas hace más calor.

--- no quieres mis abrazos, eso estás diciendo.

--- no dije eso, Jae-

--- ¡No quieres mis abrazos! - se alejó mientras cubría su rostro y se dejaba caer del otro lado, sollozando dramáticamente - ¡Dilo! ¡Dí que no te gustan!

La película continuaba y Jaehyun seguía con su acting, luciendo ofendido cada que Sarang le miraba por curiosidad. Con sus brazos cruzados y rostro serio, eso le sacó algunas carcajadas a ella.

Pero no duró mucho. Porque Sarang gritó del susto cuando la habitación se apagó y quedaron a oscuras.

¿Es buen momento de decir que estaban viendo una película de suspenso y Sarang es la cosita más miedosa del mundo?

Jaehyun dejó de lado el drama y se acercó, rodeando con sus brazos los hombros de Sarang.

--- ya volverá la luz, tranquila. - susurró mientras besaba su cabeza - no pasará nada.

Pero era tarde. Las sirenas de la policía comenzaron a sonar en la calle y eso asustó aún más a la chica. Sarang se acurrucó más cerca de Jaehyun y, si bien él estaría revolcándose en su cama mientras gritaba de emoción, ahora sabía que no era momento de jugar.

--- de seguro fue un accidente, tranquila. - fue recostandose de costado en el sofá, dejándola descansar sobre su pecho - aprovecha para dormir un ratito, no dejaré que el cuco te tire de las patas apenas duer..-

--- ¡Jaehyun!

--- ¡Bueno, perdón!

😈