Para Sarang tampoco era un tema fácil de tocar. Nunca se atrevió a dejarse llevar por sus sentimientos, no después de encontrar cierta estabilidad en la empresa.

Pero ahora, parecía como si todo el mundo estuviese patas para arriba. Era diferente y no sabía bien como controlar aquel cosquilleo en su estómago cuando su jefe, si leyeron bien, y su jefe actuaba más lindo de lo normal.

Porque no era ciega. Sarang podía entender porqué la gente se interesaba tanto en Jeong Jaehyun y no solo por su físico (que ya de por sí es despampanante), también por su inteligencia y simpatía, además de su agilidad para realizar tan importantes negocios a una edad temprana.

Entonces, Sarang se cuestionaba realmente quien era ella para recibir tanta atención de alguien tan atractivo como Jeong. Ella no tenía nada de especial..¿Que era lo que tanto llamaba la atención de su jefe?

Porque no llegaba a comprender si era amabilidad o algo más..no es normal concentrarse tanto en alguien. Y Jeong Jaehyun hacia eso, siempre preocupándose por ella y..es raro.

No tenía una certeza con respecto a sus sentimientos, porque genuinamente no comprendía, pero eso no evitaba que su corazón latiera cómo desquiciado cuando Jaehyun tenía actos bonitos con ella o momentos en los que caía en lo atractivo que era su jefe.

¡Era una humana común y corriente! ¿Quien no apreciaría la belleza ajena?

el punto culmine fué aquel sueño, dónde Jaehyun era el protagonista y atinaba a robarle un beso, beso que la despertó alterada y sorprendiendose del lugar.

Todavía el sol no salía por completo, pero algunos edificios ya tenían sus luces encendidas y ella estaba durmiendo plácidamente sobre una superficie bastante dura y a la vez comoda.

Rápidamente reconoció el lugar, porque sus ojos captaron que se encontraba en los brazos de alguien y ese alguien era nada más ni nada menos que Jeong Jaehyun.

Casi pone el grito en el cielo al caer en cuenta de eso, pero él estaba dormido y bastante cómodo con aquella posición.

Pero ella estaba nerviosa y le dolía mucho la espalda. No era una posición cómoda para dormir, aunque el sofá fuese uno grande, no era cama y no quería imaginar lo incómodo que sería dormir sentado, justo como está Jaehyun.

Esto estaba mal, muy mal.

¿Por qué no fue a dormir a su cuarto en vez de quedarse aquí? Que imbécil.

Pero mientras ella estaba teniendo alguna discusión interna, Jaehyun parecía quejarse de la falta de manta.

---- uhum..- tanteó en su regazo, chocando con el muslo de Sarang y tomándolo para tirarlo más sobre él. Ella soltó un pequeño grito que despertó por completo a Jeong, logrando que abra los ojos inmediatamente - Oh..

El rostro pálido de Jaehyun se pintó con mejillas y orejas rojas, mirando con sorpresa a su secretaria completamente paniqueada por la situación.

---- Sa-Sarang-Ssi..

No le dió tiempo alguno, pues ella ya había saltado del sofá y corrido a su cuarto, cerrando con fuerza la puerta.

Era tan..ridículo.

Sarang estaba afirmada en la puerta, sosteniendo su pecho mientras intentaba recuperar su respiración. Sentía el ataque de ansiedad a la vuelta de la esquina, no podría controlarlo por más tiempo.

Y es que sintió tanta vergüenza, vergüenza que venía colectando con cada cosita nueva  que hacía Jeong por ella, sintiéndose rara por ello, pero relativamente acostumbrándose a ello.

Ahora estaba a punto de explotar.

Se sentó en el suelo, llevando sus rodillas hasta su pecho y cerrando los ojos, concentrándose en su respiración y nada más que eso.

Unos suaves toques en su puerta volvieron a poner sus pelos de punta.

---- Hey..

Obviamente era Jaehyun.

---- Oye, no te preocupes.

¿Cómo no hacerlo? Si fuera tan fácil, lo haría.

---- no pienses que estás despedida o algo así, no estoy molesto ni ofendido, estoy..- su voz fue bajando de volumen cada vez más - estoy..no lo sé, solo se que dormí bien aunque me duele el cuello.

Sarang rompería en llanto en cualquier momento.

---- Sarang-Ssi, por favor. - suspiró - no saldrá de nosotros, ¿De acuerdo? No pasó, no lo pienses mucho. Yo no lo recuerdo, tu tampoco, no pasó.

Sintió algo raro en su pecho, no entendía que podía hacerle sentir tan mal si era lo que quería. Mejor olvidarlo.

---- uhum..

---- y-yo..- se afirmó en la pared, aún encarando la puerta - debo irme a una reunión..¿Nos vemos más tarde?

No la presionaría. Sabía que Sarang no querría salir por un buen rato, no hasta calmarse y la idea de salir a almorzar, fue borrada inmediatamente.

Ya tenía suficiente con ser el causante de su pánico. No quería más.

🍰

Y tan mal no estaba, porque Sarang parecía no haber salido de su cuarto, pese a que eran casi las tres de la tarde.

Pero se dió cuenta de algo.

Era una pequeña nota en la heladera, apenas logro verla y le resultó raro ver algo allí cuando ni imanes tenía.

Se acercó, curioso y leyó:

«Hice risotto para el almuerzo. Tu plato está en el microondas, espero que te guste.»

Le resultó tan hogareño y bonito, que no se contuvo en sonreír. Podía imaginarse a Sarang dejando cientos de notas en su departamento recordando pequeñas cosas, pagaría por ello sinceramente.

Revisó el microondas y efectivamente, allí estaba su plato aún tibio. Y agradeció el detalle, porque fueron a un restaurante que no terminó por convencerlo, así que..aún tenía hambre.

Buscó una cuchara grande, porque su estómago rugía y no intentaría hacerse el delicado cuando tenía más hambre que un león.

Terminó el plato, bebiendo un poco de agua antes de suspirar satisfecho.

Podrían poner a un cachorro terminando de tomar leche y al lado a Jaehyun, y no encontrarían diferencias.

Sacó la camisa de dentro de su pantalón de vestir y un suspiro aliviado salió de sus labios cuando aflojó el cinturón.

Ugh..comió muy rápido.

Su mirada se centró en el sofá, abriendo sus ojos con auténtica sorpresa cuando encontró un bulto en él.

Era Sarang durmiendo mientras era tapada por la misma sábana de la noche anterior.

Decidió cerrarle las cortinas, para que su sueño no se viese interrumpido por el frío ni la luz natural y se retiró a su cuarto luego de atenuar las luces y dejarle una nueva nota pero pegada sobre la pantalla de su celular.

«gracias por la comida, Sarang-Ssi ^^»