4 meses después.

"Justu bola de fuego" dije haciendo los símbolos con mis manos y una enorme bola de fuego salió por mi boca en dirección al río. Al terminar volteé a ver a Madara con una gran sonrisa en mi rostro. Sonrisa que el respondió con otra gran sonrisa.

"Bien hecho Kazumi chan", felicitó Madara.

"Arigato", dije haciendo una reverencia y sonriendo.

"Será mejor que te vayas a descansar, entrenaste mucho por hoy", sugirió Madara.

"Tienes razón", asentí.

Sabia que debía retirarme, así Madara se encontraría con Hashirama Senju, como lo ha estado haciendo todos estos días.
Es de mala educación pero ya los había estado espiando, incluso alcance a escuchar sus conversaciones y sabia que eran buenos amigos. Sabia que Hashirama sería quien cambiara todas las erróneas ideas que Madara tenia inculcadas gracias a nuestro clan. Al igual pude percatarme que Tobirama sospecha de su hermano si no es que ya lo sabe, y cada vez que Madara y Hashirama se marchan del río Tobirama llega a inspeccionar el lugar.

Han pasado 4 meses desde que Tobirama me confundió con una Uzumaki, así que he estado encontrando la forma de convertirme en una y finalmente supe cual era. Si quería ser Uzumaki debía cambiar mi color de cabello. Así que hice un aceite con flores, plantas y frutos rojos.

"Así que llego la hora" dije poniendo el aceite en mi cabello y este tomo un color rojo brillante. "Quién diría que a mis 12 años haría esto por un chico", pensé.

Llegue a la orilla del río donde Hashirama y Madara se juntan, no había rastro de ellos. "Tobirama debe llegar en cualquier momento" pensé. Mientras esperaba decidí ver mi cabello a través del reflejo del río, en verdad me veía diferente.

"Vaya, cambie demasiado" dije en voz baja.

"Definitivamente sin lodo sobre todo tu cuerpo luces muy diferente Kazumi".

"Esa voz... Tobirama". Volteo a ver al chico rubio que se encontraba del otro lado del río y en definitivamente era él.

"Tobirama", dije sonriendo. "¿Qué haces aquí?" Pregunte contenta.

"Ultimamente he estado visitando el río", dijo serio. "Nunca te había visto por aquí, ¿de nuevo estas perdida?. Debes tener cuidado, estas cerca de territorio Uchiha" advirtió.

Escucharlo pronunciar el nombre de mi clan hizo que mi pulso se acelerará. "¿Puedes acompañarme al camino de árboles de Sakura?", pregunté. Tratando de alejarme un poco del clan para no levantar sospechas.

"Por supuesto" aceptó.

El camino hacia los arboles de Sakura fue silencioso, aveces veía a Tobirama de reojo siendo cuidadosa para que no me descubriera.

"¿Tengo algo en la cara?" Pregunto divertido.

No pude evitar sentir el calor invadir mi rostro, estaba demasiado sonrojada. ¡Qué vergüenza!, pensé. "No yo solo...no... no tienes nada" dije balbuceando.

"¿Te pasa algo?" Dijo viéndome fijamente. "Pareces un tomate, estas muy roja" dijo acercando su rostro a mi cara.

Yo seguía estando apenada y sonrojada. "Estoy bien" dije volteando mi rostro.

El camino fue largo y el silencio incomodo desaparecía paso con paso, cada vez me animaba a hablar mas con él. Llegamos al camino que se forma con los arboles de Sakura y lo recorrimos una y otra vez. Incluso le conté la historia de mis padres, obviamente cambiando algunos detalles y siendo cuidadosa de no nombrar a mi clan.

La noche cayo sin darme cuenta, sabia que debía volver, aunque me costará despedirme, no quería marcharme. Se que él tampoco, de los dos él ha sido el que mas ha hablado.

"Entonces usando ese jutsu pude ganarle a mi herma..."

"Tobirama" dije interrumpiendolo. "Es hora de que me marche",dije triste.

"Lo entiendo" dijo sonriendo.

"Me alegró que habláramos" dije feliz. "Espero verte pronto...", hice una pausa esperando poder decirle que otro día podía verlo, pero no tuve el valor, no quería sonar desesperada.

"Te parece si te veo aquí dentro de un mes, misma hora y mismo lugar, ¿vale?" Pregunto apenado.

"Me parece perfecto" dije sonriendo.

"¿Te acompaño Kazumi chan?" Pregunto Tobirama.

"No es necesario, yo me puedo ir sola", dije.

"Entiendo" dijo triste. "Entonces hasta dentro de un mes" dijo el rubio y se marcho.

Estaba tan contenta que empece a reírme sola, ¿raro no? Lo sé, pero la felicidad es inmensa. Antes de regresar al clan tenía que regresar al río a lavar mi cabello. No puedo irme con el cabello color negro y regresar pelirroja.

(...)

Al regresar a casa pude notar que tou san no estaba en casa, probablemente estaría en una misión. Pero Emiko se encargo de cumplir su rol y regañarme por llegar tarde. Yo solo pude asentir sonriendo ante sus regaños, mientras ella me miraba molesta y confusa.

Me encerré en mi cuarto, me recosté en mi cama lista para dormir. "Ya quiero que pase el mes" pensé.

_____________________________

Hasta aquí el capítulo.
Espero les haya gustado, me esforcé haciéndolo. Disculpen que tardará en hacerlo. Prometo escribir mas seguido ahora que ya son vacaciones 💃🎉
Dejen sus comentarios!