Después del divorcio de sus padres, ella no lo pasó nada bien y ni se diga de su madre; Jessica Sullivan quedo destrozada por la traición de su esposo.
El hombre con quien había compartido 15 años de su vida, le había sido infiel por dos años y le había pedido el divorció tras descubrir lo.

Fue un golpe duro para ambas, ni ella ni su madre quisieron esa casa, en la tenían tantos recuerdos felices y ahora vacíos... Su padre optó por darles un pent-house en un buen lugar. Deprimidas comenzaron a vivir solas y seguir su vida sin un esposo y padre.

Con el paso de los años, su padre siempre le visitaba en festivales, su cumpleaños, otras celebraciones. Eso hasta cuando cumplió 16 años, él nunca llegó. Sólo recibió un 'seco' mensaje de felicitación.

Anna y Luke (quien era su novio en esos momentos) decidieron sacarla a pasear y llevarla al centro comercial. Pero eso fue el error, su padre caminaba sonriente y feliz de la mano de esa mujer, Sharon Cooper, mejor dicho, Sharon Richardson.

Su padre la vio y corrió a abrazarla. Y toda la discusión se desató, resentida dijo muchas cosas y desde entonces su padre jamás la buscó pero seguía recibiendo el dinero para sus estudios y gastos, y regalos de cumpleaños y Navidad.

Cuando cumplió 18 volvieron reunirse y todo iba bien pero otra vez volvieron a pelear.

Por todo lo que había leído en un mensaje de su padre, escribió:
No sabes cuánto te odió. Eso fue lo último que escribió y jamás recibió un mensaje de su padre.

Arrepentida, llamo a su papá y la mandaba al buzón. Intento ir a su casa y no la recibía, y lo mismo pasaba en la empresa. Entonces tomo una decisión: estudiar finanzas y entrar a trabajar a Richardson Financial.

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Años después, recibió la llamada de Anna; su madre había tenido un accidente. Renunció a su trabajo y tomó el primer vuelo a New York. Al llegar, su madre estaba muy grave.

-Sam. Volviste- susurró llorando.

-oh mamá. Perdonadme por dejarte sola.

-No pidas perdón. Tienes que seguir adelante y ser feliz. En el buró, detrás del espejo.... abre los ojos. Busca a tú padre. Te amo, Samantha... se feliz- una tos la invadió y esas fueron sus últimas palabras.

Deshecha llamo a su padre y nada; a su trabajo y casa, tampoco. Estaba sola. Completamente sola.

A los dos meses de la muerte de su madre, la vacante se abrió en Richardson y esa era su oportunidad. Tras mandar su CV, espero dos semanas y fue agenda para la entrevista con el gerente de recursos humanos, a quién tuvo que ''coquetearle'' para que no preguntará porque hacerse llamar Samantha Sullivan. La entrevista la pasó con rotundo éxito, ahora sólo esperaría a que le confirmara. Esa confirmación llegó un mes después, había conseguido el puesto.

Estuvo preparándose mentalmente para encontrarse con su padre pero eso no sucedió. En cambio se encontró con el hombre con quien había dormido unas noches antes, aquello debió ser una broma y más, porqué fue lo que no quería; la amante, la tercera en discordia por un día.

Detuvo cualquier intento por parte de Morphy pero su corazón se fue enamorando poco a poco de ese hombre a pesar de tener novia. Pues Edward había intentado conquistarla "elegantemente" y estaba funcionando.

Y, entonces llegó el primer encuentro con su padre. Se puso nerviosa al no haberlo visto por tantos años, con miedo termino desviando la mirada pero le dolió que retomará la Junta y la ignorara. Algo que terminó 15 minutos después quedando de verse en su oficina cuando terminara de trabajar... y así lo hizo.

Bajo del elevador y la asistente de su padre ya no estaba. Se escuchaba vals clásico, su favorito cuando era niña.
Tocó la puerta y recibió un "adelanté", con miedo abrió a la puerta.

- Samantha- fue envuelta en un cálido abrazo.

- ... Papi- se soltó a llorar en sus brazos. Necesitaba ese abrazo, siempre lo necesito y más ahora.

- Mira que hermosa estás. Te pareces tanto a Jessica ¿Cómo has estado? ¿Qué haces como asistente? Supe que estabas en Londres trabajando para el banco.

Se sentó al lado de su padre y hablo - Bien... He intentado contactar te pero nunca me recibías... Se que me odias pero...

- No te odio ¿Lo dices por ese mensaje que me enviaste? Nunca entendí ese mensaje. Te di tu espacio esperando que te acercarás a mi pero nunca lo hiciste. Te juro que nunca te he odiado.

- ¿Entonces porque no me recibías? Tú asistente te negó. La casa también, incluso esa bruja.

- Sharon es mi esposa.

- Lo sé - se soltó a llorar al recordar las palabras de su madre.

- Mi asistente o en la casa nunca me dijeron nada. Intenté llamarte pero me manda al buzón. Supongo que cambiaste de número.

- Siempre he tenido el mismo número- sacó el teléfono y le enseñó su número. Marco el número de su papá y se lo paso "El número que usted marco se encuentra fuera de servicio".

- Es imposible- busco su celular y buscó el número de Samantha.

- Es mi número- dijo sorprendida.

- ¿Entonces porqué no podemos llamarnos?- cuestionó enojado.

- Tengo una idea- le quito el teléfono y rápido busco la configuración de llamadas.

- ¿Qué buscas?

- Ese mensaje que te envié fue por todo lo que me escribiste. Te respondí que te odiaba y jamás pude volver a llamar. Supongo que desde entonces no puedes llamarme- vio a su padre asentir - Dijo que nunca entendió ese mensaje. ¿Entonces quien me envió el anterior? Fácil. La misma persona que me bloqueó en tú teléfono papá - se marcó a si misma y su celular sonó. Después de muchos años decía "Papi llamando".

- Pero quién ...

- Tú esposa...

- Sharon nunca lo haría.

- ¿Ella te ama mucho?- pregunto dolida.

- Sí...

- Entonces ¿Por qué te es infiel?

- ¿Qué tonterías dices? Sharon nunca me sería infiel- dijo enojado.

Samantha buscó en su bolso y le entregó el sobre.

George abrió el sobré y había fotos de su esposa saliendo del mismo hotel con diferentes hombres, y otras besándose con ellos - Oh Dios...

- Lo siento...

- Desde cuando las tienes.

- Cuatro meses... Mamá me las dio... dijo que siempre te ha amado. Qué tenías que abrir los ojos- se soltó a llorar.

- Cariño... no llores- la abrazó - Dale las gracias a Jessica.

Samantha no resistió más y se puso peor - Mamá murió.

- ¿Qué?- tomo a su hija de los hombros - Es mentira. No puede ser verdad ¿Cuándo?

- Hace cuatro meses. Me dijo que te entregará ese sobre. Qué tenías que abrir los ojos. Qué siempre te ha amado... Intenté llamarte. Vine aquí y nada. Anna y sus padres también lo intentaron- dijo llorando mientras se aferraba del traje de su padre.

- Perdoname.

Esa noche lloraron juntos en esa solitaria oficina.

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Su padre contrato a Wilson para investigar a su esposa.
Resulto ser que todo fue planeado por Sharon para que se odiarán y no volvieran a verse para poder quedarse con la herencia.

Y no solo eso, desde hacía años le era infiel e incluso le pagaba a sus amantes con el dinero que su padre le daba mensualmente para donaciones a orfanatos y otras fundaciones.

Tras una larga batalla de divorcio, su padre al fin se pudo divorciar. Dejándole la casa en la que vivían ya que su padre no dudo en entregársela por que no quería esa casa. Eso fue lo único que pudo obtener de su padre. Todo lo demás fue llevado a la antigua mansión donde vivían.

Durante ese tiempo su relación con su padre fue de lo mejor. Estaban recuperando el tiempo perdido.

Lo malo eran los rumores que los asediaban en la empresa, y ellos sólo reían de los tontos rumores.

Lo peor, fue que Edward Morphy se atrevió a llamarla puta y acusarla de ser quién interviniera en el matrimonio... y es que eso era verdad. Así que dolida, juro venganza y ayer había pagado.

-¿ Samantha?- llamó la atención de su hija.

- Estaba recordando...

- Vamos. Ánimo. Ya pasó. Gracias a ti y a tú madre, soy un hombre libre- dijo acariciándole el cabello.

- Y apuesto que el más cotizado- agregó Luke.

- Aunque tú no te quedas atrás, Luke... Oh debería decir te quedabas. Esta mañana pasaron un interesante reportaje de cómo Luke Kramer se quedó haciéndole compañía a la hermosa Samantha - Ambos se sonrojaron - ¿Desde cuando están juntos?

- Desde que llegué.

- ¿Pero no te fuiste tras una joven a París?

- papá.... Luke y yo tuvimos unas relaciones no correspondías y decidimos intentarlo.... No te enojes - agregó al ver el gesto de su padre - Sinceramente han sido los mejores días del año al lado de Luke. Lo amo.

-Sam- murmuró sonrojado. Él también la amaba, siempre lo había hecho y esas pocos días le ayudaron a comprender que Samantha era y siempre sería el amor de su vida -Te amo, Samantha.

Samantha rió por la cara de vergüenza de Luke y lo besó. Ahora entendía porque siempre había esperado que Luke regresará a su lado como siempre lo hacía. Cuando se marcho tras aquella chica su corazón quedó roto y lo oculto para no hacer sentir mal a Luke. No tenia que saber que siempre lo seguiría amando, y por eso no tomaba enserio a personas como Edward Morphy.