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Capítulo VIII

—De rodillas. —La orden fue directa y BaekHyun la acató de inmediato.

¿Quién se hubiese imaginado que el prostituto heterosexual Byun BaekHyun terminaría de rodillas a un costado de una piscina temperada mientras chupaba un pene? Mientras fuera ChanYeol, BaekHyun estaba dispuesto a complacerlo todo lo que quisiese, así que solo se rio luego de atragantarse con el miembro de su amante y dejó que después uno de los chicos lo tirase a la piscina en un acto juguetón. No obstante, no le gustó mucho notar que, luego de salir a la superficie, aquel chiquillo se puso de rodillas delante del prostituto, tomando su lugar.

Algo creció a fuego en su interior, algo agrio que nunca había sentido antes. El sentimiento se asemejó a la envidia, quizás, pero se sintió ligeramente distinto, doloroso en cierto aspecto. Por lo mismo, solo desvió la mirada y se dirigió hacia las escaleras de la piscina con la intención de salir del sitio. Una vez que se sujetó de las escaleras sintió una mano sobre su trasero y posteriormente unas manos se apoderados de sus caderas, sumergiéndolo nuevamente en el agua y provocando que se golpease las rodillas con los peldaños de metal recubiertos en goma.

—Siempre te he tenido tantas ganas —susurró ese hombre contra su oído, sujeto que aún no identificaba porque lo tenía de espaldas, con la erección presionando su espalda baja.

—¡Hey! —El grito resonó con tanta fuerza en el espacio cerrado que todos se voltearon a ver a ChanYeol, quien gritó—. Suelta de inmediato a mi chico.

La amenazada fue clara y, por lo mismo, el tipo que lo tenía sujeto elevó ambas manos a al altura de su cabeza para dar a entender que ya no lo tocaba. BaekHyun aprovechó eso para apresurarse y salir de la piscina, aunque por el apuro acabó golpeándose las rodillas nuevamente, sin embargo, no se concentró en ello. Todo el ambiente se volvió tenso gracias a ChanYeol, todos quedaron quietos ante la expectativa y BaekHyun no entendió muy bien por qué hasta que notó que el tenía al prostituto justo delante. El hombre lo rodeó con una toalla y lo abrazó por los hombros.

—Para la próxima que toques a mi novio te partiré los putos dedos —advirtió el prostituto entre dientes, con un enfado tal que BaekHyun tuvo que pellizcar el costado de ChanYeol para que fuese consciente de la situación a su alrededor.

Por suerte, escucharon a Lee reír a la lejanía. Con su mano derecha tocaba el muslo de LuHan, quien estaba de pie a su lado, mientras tenía a otro chico entre las piernas haciéndole una mamada.

—¡No se entrometan con mi pareja favorita! —chilló el hombre con alegría. BaekHyun seguía sin entender cómo podía soltar comentarios así en pleno acto sexual; de seguro el sujeto estaba tan drogado que no se enteraba de nada—. Solo yo decido con quién los pongo.

Eso los hizo fruncir el ceño a ambos, pero ninguno de los dos dijo un comentario más. La música pareció volverse más fuerte y ellos se acercaron a Lee con la intención de avisarle que se retirarían antes. El sujeto solo le hizo un gesto desinteresado con la mano, al parecer más pendiente del orgasmo que estaba recibiendo, cosa lógica. No obstante, fue eso mismo lo que hizo que ChanYeol se concentrase en LuHan. Lee soltó su pierna, así que el chico se alejó un poco del hombre y el prostituto aprovechó ese momento para acercarse.

BaekHyun vio toda la interacción desde lejos. Apreció cómo el pelinegro le entregaba algo al castaño con cierto disimulo, al parecer un papel muy bien doblado que luego, cuando ya estaba aseados y sobre el auto, el hombre le comentó que le pasó el número de teléfono y le pidió que se pusiera en contacto con ellos.

—¿Crees que es así de fácil? —preguntó con aburrimiento mientras empujaba el carrito dentro del supermercado. Ya era necesario hacer la compra para el mes—. Puede que el chico ni siquiera tenga celular.

—Tienes razón. —ChanYeol de inmediato se desanimó y BaekHyun lo observó mientras revisaba los paquetes de fideos—. Fue una idea tonta.

—Debiste consultarme antes —dijo despacio, sin ninguna intención de regañarlo, sino con la razón de que lo considerase para la próxima vez de manera que pudiesen ejecutar un mejor plan.

—Tienes razón. Perdón.

BaekHyun se sintió incómodo con lo desanimado que pareció el otro y solo continuó empujando el carrito mientras agarraba cosas de las estanterías para incluirlas en su compra.

—Pero lo hiciste bien —alentó con una sonrisa mientras escogía leche—. Imagino que ya quieres deshacerte de todo esto —susurró más para sí mientras simulaba leer la etiqueta.

ChanYeol detrás suyo resopló frustrado—. Pienso en LuHan y en lo mal que lo está pasando.

Se giró a mirar al prostituto con una sonrisa suave. Le hubiese gustado conocer a ChanYeol antes, cuando solo era un pequeño niño perdido en la vida, le hubiese gustado sentirse protegido por alguien como él. Quizás, el hombre simplemente era así, preocupado por los demás sin fundamento alguno, quizás no había nada especial en BaekHyun.

Perdió la sonrisa y echó dos grandes cajas de leche al carro. Avanzaron para ir al sector de los congelados.

—De hecho, estuve pensando... —ChanYeol guardó silencio y él lo miró atento mientras sacaba una bolsa de camarones congelados. El pelinegro pareció algo nervioso y temeroso, cosa que lo confundió—. A Lee le gustan las parejas. —Asintió al ver los ojos insistentes del contrario sobre los suyos—. Pensé que quizás... Podría convertirme en la pareja de LuHan.

Confundido pestañeó. Le costó un par de segundos procesas la información y, con ello, sintió la boca seca y su espalda tensa. Abrió la boca con la intención de decir algo, realmente quiso poner sobre la mesa todas las razones por las que eso era una mala idea, pero al final el contrario solo rio nervioso y se apresuró en adelantarle con el diálogo.

—Realmente pensé en esto y creo que tenemos la opción de decirle que terminamos. —ChanYeol se acercó más a él y lo tomó por el antebrazo, quizás para que le prestase atención y no escapase, cosa que BaekHyun quiso hacer—. ¿Qué opinas? —Pensó en su respuesta y abrió la boca, pero el sujeto volvió a hablar, al parecer para dar los justificativos suficientes de por qué su planteamiento era una buena idea—. Lee es apegado a LuHan, pero tampoco parece tener ninguna preferencia por él. No creo que sea inaccesible si le pido hacerlo mi pareja.

—Tiene sentido —susurró solo por responder algo, sin la verdadera intención de que trabajasen en esa idea—. Podrías hablarlo con Lee mientras que yo lo converso con Oh.

—¡Sí! —ChanYeol pareció realmente animado con la idea—. Así, tú saldrías del juego.

Frunció el ceño e inevitablemente algo se encendió en su pecho. Claro, ChanYeol no quería seguir exponiéndolo a toda esa situación, por eso hacía todo eso. Con ese pensamiento en mente no pudo evitar que una sonrisa se asomase por sus labios. Ni siquiera pensó mucho cuando pasó ambos brazos por sobre los hombros del contrario y se acercó hasta este.

—¿Puedo besarte?

El hombre soltó una pequeña risa—. ¿Por qué me preguntas?

Se besaron ahí, junto a los camarones congelados. Fue un beso suave y delicado, casi amoroso que solo duró unos pocos segundos, porque se encontraban en el supermercado después de todo.

Al separarse rieron y ChanYeol esta vez se apoderó del carrito para empujarlo hacia otro pasillo del sitio. BaekHyun se quedó un momento mirando la espalda del contrario y acabó suspirando. Se percató que era tonto esperar algo de ChanYeol, completamente idiota de su parte. ¿Realmente ese hombre se fijaría en él?, ¿realmente le interesaba de alguna manera? El hombre era un prostituto, se acostaba diariamente con hombres para complacerlos a cambio de algo de dinero. Quizás él solo era uno más de ellos, a cambio de que quien pagaba era su jefe y para una situación que le convenía a él. Sin embargo, ¿ese chico lo hubiese mirado alguna vez si no fuese porque Oh los puso juntos en esa mierda de misión? A su vez, ¿él lo hubiese mirado? ¿Hubiese visto algo más en ChanYeol que no fuese un prostituto demasiado desapegado?

—Baek —Pestañeó y enfocó la mirada en ChanYeol, quien tenía el ceño fruncido, pero una sonrisa en los labios—, ¿todo bien?

—Sí, sí.

Se aguantó el suspiro y caminó hasta el contrario para ponerse a su par. A partir de ahí, el pelinegro empujó el carro y se dirigieron hacia otro pasillo con comestibles que BaekHyun ni miró. Más bien, se detuvo a pensar en lo que sucedió en esos últimos tres meses. Él fóbico por la situación, luego ChanYeol alentándolo a sobrellevarlo de alguna manera, después los dos locos en la mansión de Lee, follando como si no hubiese un mañana. A pesar del poco tiempo tuvieron sexo muchas veces, la mayoría con la presencia de Lee, pero muchas otras veces fueron encuentros en la privacidad de su habitación que de seguro no tenía ningún sentido. BaekHyun tenía muchas ganas de preguntarle a ChanYeol que significaba todo lo que vivían, si había algo más en la profundidad de su sentir que tuviese que ver con él. Sin embargo, no tenía la valentía para inmiscuirse en eso, no todavía al menos.

—Oh —llamó con los dientes apretados. Había pasado un tiempo desde que no veía al hombre y no pudo evitar sentir algo agrio dentro de su pecho cuando se encontró con su rostro serio y su inmaculado traje oscuro—, quiero hablar contigo.

—No te transferiré a Pekín. —Rodó los ojos al escuchar la advertencia de su jefe y tomó asiento frente al escritorio del sujeto sin siquiera preocuparse si era bienvenido o no.

—Con todo lo que ha pasado volver a Pekín no es mi primera opción —soltó tajante, tenso como siempre estaba en presencia de Oh.

—¿No? —se burló el contrario—. Me extraña. Conociéndote, me imaginaba que ya estabas configurando algo para escapar, como cuando eras un niño...

—Suelta ya el pasado, Oh —dijo con cierta molestia—. No vengo a hablarte sobre mi vida, sino sobre la puta que te interesa.

—¿LuHan? —La expresión del otro sujeto cambió, provocando que BaekHyun rodase los ojos.

No conocía los motivos reales que movían a su jefe a hacer todo eso, pero jamás se hubiese imaginado que el otro tenía algún tipo de sentimiento por LuHan. De hecho, siempre pensó que tenía que ver por una conveniencia económica, que quizás LuHan tenía un culo de oro, pero jamás pasó por su cabeza que ese niñato realmente pudiese significar algo para SeHun, al menos no hasta que se encontró en esa situación y percibió el tono de hablar del otro, así como sus gestos; el cuerpo contrario se hizo hacia adelante, claramente interesado en lo que tendría por decir.

—No te quedes callado y dime qué encontraste —exigió el otro.

—¡Nada! Que LuHan es una mierda —se burló, pero SeHun golpeó la mesa, haciendo que todo se volviese serio de nuevo. BaekHyun miró sobre su hombro con desinterés, en busca de algo que lo ayudase a encaminar el tema que tenía por delante—. En realidad, a ChanYeol se le ocurrió algo.

—¿A Park? —se mofó nuevamente el contrario—. ¿Ese tipo piensa?

Miró hacia otro lado y se mordió el labio inferior con enfado. Realmente no entendía a Oh, el tipo estaba totalmente trastocado.

—A Lee le gustan las parejas —empezó, recibiendo un gesto de obviedad por parte de SeHun, de seguro porque ese dato se los dio el mismo tipo al principio de todo—. ChanYeol piensa que podría hacerse la pareja de LuHan.

El ceño de Oh se frunció y el corazón de BaekHyun se detuvo, totalmente asustado con la expresión del contrario y con lo tenso que se volvió el ambiente de inmediato. Nunca se imaginó que SeHun podría estar tan serio como en ese momento. Conoció al tipo en muchos momentos críticos, llevaba conociéndolo años, pero muy pocas veces dejaba su mofa de lado, al imbécil le encantaba burlarse de la gente y humillarla. Sin embargo, en esa ocasión solo parecía que quería sacarle la cabeza.

—¿Y por qué Park no está aquí contigo?

—Está hablando con Lee.

—¡Maldición! —Un golpe seco y fuerte llegó contra el escritorio de madera, botando el portalápices—. ¡¿Por qué mierda hacen cosas sin preguntarme?!

—Ambos consideramos que era buena idea —susurró con incomodidad.

—¡¿Buena idea?! —Los dientes de SeHun se apretaron antes de que el tipo se pusiera de pie. Oh se llevó las manos a la cintura y se paseó por la oficina—. ¿Te parece buena idea que Park se folle a LuHan?

Bajó la cabeza, no porque se sintiese aludido por el regaño, sino porque el pensamiento nuevamente le hizo sentir algo agrio en el pecho, aunque decidió no detenerse mucho en ello.

—Puede ser una buena idea. Lo acercaría a LuHan y yo estaría fuera del juego, así...

—¡Imbécil! —Para su sorpresa, SeHun se acercó a él y lo agarró de la camisa, obligándolo a ponerse de pie—. ¡Lee te quiere a ti! —Un empujó sobre el hombro lo hizo irse hacia atrás y trastabillar con la silla, pero logró mantenerse de pie—. Además, no permitiré que el asqueroso de Park se folle a mi chico.

Quedó tan sorprendido por todo que no pudo hacer absolutamente nada cuando vio que SeHun agarró sus cosas —con pistola incluida— y se acercó a la salida. BaekHyun se tardó un poco en volver en sí, pero cuando lo consiguió de inmediato fue detrás de su jefe, quien caminaba rápidamente por los pasillos de Hostel para ir en dirección hacia la salida trasera, donde se encontraban los vehículos de quienes trabajaban ahí.

—¡SeHun! —gritó mientras iba detrás del sujeto. Para su mala suerte, el escándalo llamó la atención de la mayoría de los prostitutos que aún se encontraban tras bambalinas—. ¡Detente, maldición! ¡Ir con Lee sería cagarlo todo!

—¡¿Cagarlo todo?! —Oh se volteó hacia él y no dudó en ponerle la pistola contra la cabeza, golpeándole la sien con el arma—. Eres una maldita mierda, Byun. Siempre has sido una basura asquerosa, pero por alguna razón le gustabas a las chicas como para prostituirte. —El sujeto rio y BaekHyun solo apretó los dientes, sabiendo que Oh estaba dispuesto a soltar toda la mierda necesaria para sentirse satisfecho, especialmente si veía a mucha gente a su alrededor—. Que te trajera a Seúl no fue una jodida suerte, pequeña mierda. —Nuevamente un golpe ligero y burlesco le llegó a la sien, provocando que su cabeza se sacudiese ligeramente y su cabello siempre bien ordenado se desordenase—. Quiero que vayas ahora mismo donde Lee y que arregles toda la mierda que de seguro está dejando Park, de lo contrario lo mataré a él.

—Tranquilízate —pidió entre dientes, conteniendo todos los impulsos para no abofetear a su jefe.

—¿Cómo esperas que me tranquilice, pedazo de mierda? —insultó el otro con una molestia claramente contenida—. Park quiere a LuHan para sí —gruñó su jefe entre dientes, llamando su atención—. A ese prostituto le gusta mi chico, por la mierda. Si me entero que de alguna manera se quedó con él lo mataré, ¿me entiendes?

Un último golpe un poco más fuerte fue sobre su frente lo suficiente para hacer que se inclinase y se sujetase de la pared más cercana para mantenerse de pie, aunque también fue lo necesario para descargar la ira de SeHun y hacer que este se quedase tranquilo, porque eso pareció ser lo suficiente para ir a encerrarse a su oficina nuevamente, esta vez con una furia imposible de omitir.

—Señor Byun, ¿se encuentra bien? —preguntó uno de los prostitutos luego de acercarse a él para ayudarlo a enderezarse.

Él solo asintió y suspiró mientras se alzaba. Sintió una molestia en la frente, pero no consideró que fuese lo suficientemente preocupante, así que solo siguió con su camino hacia el final del edificio para dirigirse a su vehículo. Una vez dentro del auto se detuvo un momento a respirar y apretó los puños sobre sus muslos, conteniendo lanzar golpes al aire y dejarse llevar por la ira que acarreaba toda la situación.

Quiso detenerse un poco más de tiempo para pensar en lo mierda que era todo, pero no tuvo tiempo para ello, así que simplemente encendió el vehículo y se dirigió hacia la finca de Lee, donde sabía que estaba ChanYeol. De hecho, le preocupaba un poco no tener ninguna respuesta del sujeto porque esa era la primera vez que no iban los dos juntos y no sabía cómo reaccionaría Lee con ello, mucho menos ahora que, de alguna forma, Lee parecía quererlo a él.

¿Qué sucedió?, preguntó JongDae a través de un mensaje de texto que iluminó la pantalla de su móvil. Baekhyun no le prestó ni un poco de atención y solo condujo hacia su destino. Se tardó bastante en llegar, por lo que durante el trayecto logró sentir el líquido caliente que cayó sobre su frente. SeHun le rompió la piel con la maldita pistola, por lo que ahora estaba sangrando. No obstante, ¿tenía tiempo para preocuparse por ello? Claro que no, probablemente ChanYeol en ese momento tenía una pistola contra la cabeza y si no la tenía de seguro la tendría por culpa de Oh.

—BaekHyun —saludó alegremente uno de los guardias cuando lo reconoció. De alguna forma, y debido al tiempo, logró hacerse conocido entre el personal de Lee—, tu novio llegó hace un momento. Está en la oficina de señor Lee.

Asintió y tomó aire de forma lenta para que el otro no se diera cuenta del calvario que vivía por dentro.

—¿Puedo pasar?

Una sonrisa se mostró frente a él—. Por supuesto.

Su expresión se enserió de inmediato cuando le dio la espalda al guardia y caminó a lo largo del elegante pasillo para dirigirse a la última habitación, donde se encontraba la oficina de Lee detrás de dos grandes puertas de roble que golpeó con fuerza, pero cierta gentileza.

—Soy BaekHyun —avisó elevando la voz, más urgido por entrar que por cumplir el protocolo que de seguro Lee esperaba de su parte.

La puerta se abrió para él y dentro se encontró con ChanYeol de pie al lado de LuHan mientras que Lee permanecía sentado y del otro lado del gran escritorio con las manos entrelazadas y apoyadas sobre el escritorio. Su corazón se cerró cuando el prostituto miró su hombro y dirigió la mirada hacia él, notó entonces que el labio de ChanYeol estaba ensangrentado y que su mejilla se encontraba muy rojiza. De inmediato no comprendió del todo la situación, porque el ambiente se encontraba tan tranquilo que no se pudo imaginar que anteriormente los otros estuvieron en algún tipo de altercado.

—BaekHyun, que lindo tenerse aquí —saludó Lee con alegría y el sonrió por cortesía. En realidad, estaba más preocupado por averiguar qué mierda le sucedió a ChanYeol, por eso su mirada de inmediato se iba en dirección al chico—. ¿Te da curiosidad ver a tu novio así? —preguntó el mayor y él volvió a dirigir la mirada hacia el hombre—. No sientas mucha pena por él. Se lo merece.

—¿De qué hablas? —preguntó con extrañeza y sonrió con incomodidad.

—Tu novio vino hasta aquí para darme una propuesta, ¿sabes? —se rio Lee con verdadera alegría, confundiéndolo.

El sujeto no esperó que hiciese alguna pregunta y simplemente se puso de pie para llevar las manos hasta sus bolsillos con aire relajado y así emprendió el rumbo por la habitación, rodeándolos con aires divertido y de superioridad.

—Sucede que tu precioso novio vino para decirme que ustedes terminaron. ¿Puedes creer eso —BaekHyun se mordió el labio inferior, nervioso porque el hombre hubiese notado su mentira, pero ninguno logró decir algo al respecto porque Lee continuó con su monólogo—. Y no solo que terminaron, sino que ahora quería hacer a LuHan su pareja.

Una risa salió fuerte de entre los labios de Lee y BaekHyun no entendió nada, así que de inmediato su mirada se dirigió hacia ChanYeol, quien permaneció con un lamentable ceño fruncido que solo denotaba preocupación. Lamentablemente, no pudo mirar por mucho tiempo más la expresión del prostituto, porque Lee se apoderó del cabello pelinegro y obligó a ChanYeol a bajar la cabeza.

—¿Cómo te atreves a dirigirle la mirada, maldito imbécil?

—No... —Tomó un poco de aire y se obligó a hablar para desconcentrar a Lee de alguna manera y hacer que nuevamente la atención del mayor estuviese sobre él—. Nosotros terminamos por acuerdo mutuo —se apresuró en aclarar—. Que quiera estar con LuHan no es asunto mío.

—¿No lo es? —La voz de Lee sonó irónica, cosa que lo confundió.

No tuvo tiempo ni a meditar en lo que dijo porque su atención de inmediato se fue hacia ChanYeol cuando notó que Lee le propinó un golpe en la pierna, provocando que el hombre cayese de rodillas al suelo. Tanto BaekHyun como LuHan se acercaron al prostituto con la intención de sostenerlo y asegurarse de que estuviese medianamente bien.

—¿Realmente no tienes nada que ver con Oh SeHun, BaekHyun?

Su cuerpo se tensó y su mirada se inmediato se dirigió hacia Lee, quien mostró una media sonrisa socarrona que no quitó incluso cuando sacó el arma de la parte inferior de su mueble. El sujeto la recorrió con la mirada y le quitó el seguro.

—¡Responde!

—Yo-o... —Tomó aire, de repente siento que caería en un ataque de pánico de esos que le provocaba la abstinencia de heroína, provocando que sus piernas flaqueasen—. Por favor, déjame explicarlo.

—No te preocupes, pequeño. Estos dos imbéciles ya me lo explicaron.

Lee salió de su posición de detrás de escritorio y se dirigió hacia LuHan, a quien recién le miró el rostro, por lo que notó que el hombre también estaba golpeado y que sangre se deslizaba por su cuello. BaekHyun aún no lograba entender cómo fue que terminaron en esa mierda.

—Sin embargo —Lee golpeó con la boca del arma la mejilla de LuHan antes de dirigirse hacia ChanYeol, rodeándolo con sorna—, me gustaría escuchar tu versión de la historia. —Tomó un poco de aire, sin saber qué debía decir y qué callar. Lee pareció entender su debate interno porque se apoyó la cadera con aire relajado sobre el escritorio y luego apuntó con desinterés a ChanYeol—. Tu novio me dijo que solo vinieron a buscar a LuHan.

Asintió—. Así es. Es nuestro compañero y queremos llevarlo con nosotros.

—¿Sí? —Lee rio—. ¿Crees que a alguien le importa realmente una puta barata? —Sus ojos se dirigieron hacia los del hombre, quien de inmediato supo que mentía—. Dime por qué SeHun los mandó a buscar a LuHan.

—Solo lo quiere de vuelta —respondió ChanYeol de inmediato.

—No, corazón. Tú eres quien lo quiere de vuelta, ¿no? —BaekHyun frunció el ceño al escuchar el comentario del mayor—. Llevas mucho tiempo enamorado de él, ¿no, ChanYeol? —Su cuerpo se tensó y de inmediato sus ojos se dirigieron hacia el pelinegro al recordar que SeHun dijo algo parecido—. Quisiste hacerlo tu novio mientras trabajaban en Hostel, pero el tonto este nunca te prestó atención, ¿no? Es por eso que realmente estás aquí, ¿cierto?

BaekHyun se detuvo a ver los movimientos de los otros dos y no pudo evitar sentir un vacío en su pecho cuando notó que ChanYeol solo agachó la cabeza y LuHan jugó con sus propios dedos. Ellos ya se habían acostado antes de entrar ahí, maldición.

—Te sientes estúpido. ¿Verdad, Baek?

Miró hacia otro lado al escuchar las palabras de Lee. Intentó mantener dentro suyo todas esas emociones que de repente estaban brotando. Lo último que necesitaba en ese momento era preocuparse por lo dolido que se sentía por que los otros le ocultasen información, porque ChanYeol le mintiese.

—No lo sabía —confesó aún con la mirada perdida en alguna parte de la habitación.

—Lo sé, pequeño. —Lee suspiró y sonó tan sincero, como si realmente estuviese preocupado por él, cosa que de inmediato llamó su atención—. Por eso, quiero que me digas cómo debo matar a estos dos.

Sus ojos se abrieron con pánico—. ¿Cómo?

—Haré lo que tú escojas.

—Yo... —Tomó aire e intentó concentrarse en la propuesta de Lee y no en lo incoherente que parecía la actitud del viejo—. Solo déjanos libre, por favor. No creo que LuHan te importe realmente.

—No, claro que no. Es solo una puta de mierda —se burló Lee con una mirada despectiva hacia LuHan, quien solo agachó su cabeza—. Eres tú a quien quiero, BaekHyun.

Su cuerpo se tensó y sus ojos nuevamente se abrieron, sin entender nada de lo que sucedía, pero Lee no le dio tiempo de procesar lo que estaba sucediendo porque de inmediato continuó con su diálogo.

—Seré un poco misericordioso y dejaré que tu amoroso novio escoja. —ChanYeol alzó la cabeza con algo de miedo—. ¿Qué opinas, Park? ¿A quién escoges? ¿BaekHyun o LuHan? —El momento se volvió tenso de inmediato—. A quien sea que escojas dejaré que te lo lleves sin ningún problema.

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¿Qué opinan? ¿Esperaban algo de esto? 👀

¿Tienen teorías respecto al final? Estoy escribiendo el último capítulo y estoy algo bloqueada. Acepto sugerencias. 🤣

Muchas gracias por leer, votar y comentar. ♥️

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