CAPITULO 3: MANOS A LA OBRA
Ya ha pasado 1 semana desde que el plan se empezó a llevar a cabo, tanto Thea como Felicity se han estado divirtiendo como nunca al ver a Iris derretirse por el pobre de Connor, aunque este ultimo también se esta muriendo cada vez que ve a Iris, pero muriendo por salir corriendo, además de que el chico es gay no le agrada para nada Iris, sus palabras exactas fueron "Ya mátame por favor, esa tipa es un grano en el culo". Cosa en la que tiene razón.
No puedo creer que estén a dos meses de cazarse, por que Barry se fijaría en una mujer como Iris, mujer que apenas conoció a Connor y ya se estaba ofreciendo en bandeja de plata. No lo niego, Connor es súper sexy, pero Barry es mucho mejor, él es inocente, tan puro, tan bueno, no existe nadie en el mundo tan limpio y puro como él, cada una de sus pecas, cada poro de su cuerpo grita pureza, no sé como Iris no lo ha podido notar. Por esa razón me cuesta más trabajo creer que ella no se de cuenta de la persona que tiene al lado porque, si yo fuera ella, no lo dejaría ni un segundo; no le sería infiel y toda mi atención le pertenecería., cada segundo del día, por el resto de la eternidad querría pasar demostrándole lo mucho que lo amo.
Pero él, mi niño, mi bebé, mi amor, él no me ha escogido a mi. Barry la escogió y no es justo que yo intenterá separarlos, así que ayer le dije a Felicity y a Thea que detuvieran todo, que Connor desapareciera y que no regresará nunca. Ellas se negaron rotundamente, por lo que yo mismo le dije a Connor que ya había terminado su favor y que era libre de irse cuando él quisiera.
Después fui a ver a Barry a su departamento y le dije todo lo que había pasado, y cuando me pregunto porque, le dije...
- "Quiero salvarte de cometer el error más grande de tu vida"
- ¿Por que? - volvió a preguntar mientras lágrimas escurrían desde sus ojos hasta sus mejillas, lágrimas que me apresuré a quitar.
- No llores Barry, detesto verte llorar - dije mientras lo acercaba a mi pecho, él se aferró a mi y no me soltó en un largo tiempo.
-¿Por qué me hizo esto? - preguntó mi castaño, pero no supe que responder. Después de unos segundos de silencio volvió a preguntar. - ¿me puedo quedar aquí contigo ollie? - al fin alzó la cara y me vio suplicante.
-Claro que si amor, esta es tu casa. - dije limpiando los caminos que se trazaron en la cara de mi bebé debido alas lágrimas.
-Gracias. Te amo, Ollie. - volvió a hacerse un ovillo en mi pecho hasta que se quedo dormido.
Lo subí a la cama y me recosté a su lado sin dejar de abrazarlo, él durmió profundamente. Pero yo no pude dormir esa noche después de lo que él mismo me dijo por primera vez en toda la vida. Te amo, Ollie.
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