-¡Ey! ¡Mirad!-advirtió Patch- Ese es el tío que estaba con nosotros en el cuarto de la pirada, el que estaba tan blanco que parecía que no había ido nunca a la playa.
-Ya lo veo-dijo Peeta.
-Hola, soy Edward ¿Os acordáis de mí?
-Sí, eres ese que estaba en la habitación de la nena que quiere violar a Peeta, que no paraba de pelearse con un tal Jacob, casi me explota la cabeza de tanto escucharos insultándoos. Me recordáis a un "amigo" vampiro y su novia loba, ellos también discutían antes de ser pareja.-responde Jace.
-¿¡Perdona!? A mí no me van las estacas, yo soy más de llenar agujeros, pero no de lobas. Son una raza idiota.
-Ja, subterráneos, siempre combatiendo entre vosotros como inútiles, se nota que poseeis sangre demoníaca.
-¿Qué has querido decir con eso?-pregunta Patch indignado.
-Pues que sois una plaga de seres anti-evolución, no servís para nada, solo sabéis destruir lo que los cazadores construimos, sin razón coherente alguna.
-¿¡A qué no te atreves a repetir eso delante de todos mis amigos caídos!? ¡Qué tienes unos huevos* más artificiales que tu pelo!
-¡Disculpa pero esto es natural!-se señala la cabellera-¡Y ahora te vas a enterar de lo verdaderas que son mis pelotas*!
Acto seguido, el asesino de Idris saca una espada sujeta a su espalda y se lanza en ataque contra el diablo.
-¡Ahhh!-grita el panadero huyendo.
-Ja,ja-se carcajea Edward-.Se ha cagado con tu arma.
-Es que es un blandengue, no como yo, que ni me he inmutado con su espadita de juguete, no se cuando hace más gracia, si sacando esa o la de los calzoncillos. Son las dos tan pequeñas- se burla Patch mientras Jace se aleja-. Encima ahora se ha acobardado el niñito. Ja,ja.
-Es que tienes un lobo gigante detrás.-le avisa Jace.
-¡Ahhhh, socorro! ¡Suegro, por favor! ¡Deje de azotar a su novia y venga a salvarme con su látigo!-chilla el angelito sin alas.
-Solo es Jacob-informa el chico colmillos meándose de risa en el suelo-. Pobrecita, la niñita se asustó al ver al perrito.
-¡Socorro!-pide auxilio al transformarse de nuevo en humano- Estábamos el chico de las gafas y yo en el parque, cuando ha llegado la adolescente descerebrada y se ha dirigido hacia él, yo rápidamente he soltado su rico y sabroso palo para largarme de allí, pero no sé si me ha seguido.
*Testículos

¡Actualicé! Y más pronto de lo que tenía pensado. Muchas gracias a todas por los leídos. Al principio no he conseguido que tenga mucha gracia el capítulo, pero la parte final me ha salido mejor. Votad y comentad lo que os ha parecido por favor.
Saludos.
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