Milagro
Sakura🌸←
La vida da bastantes giros pero aun mas cuando estas viviendo una apocalipsis. En un cerrar de ojos pueden arrebatarte todo lo que amas, en un parpadeo te conviertes en una salvadora y en un latido tu corazón se enfría.
Aun cuando él mundo este muriendo busca una razón para seguir con vida, algo que sea tu motivo a no rendirte, por que eso sera lo que te salvara millones de veces. Seguirás con vida gracias a la fuerza de voluntad.
Ese día cuando intente invocar la lluvia, él cielo no me respondía, era como una lucha entre la carta clow y él cielo, había magia negra rodeando todo él territorio sur, podía sentirla, esa horrible sensación de ira y desesperación.
Es como una maldición.
Por esa razón es que ahora estoy aquí frente a nokoru detrás del hospital.
—Si quiero ayudarlos vas a tener que decirme que esta sucediendo aquí.—dije con una voz fría.
Nokoru bajo su vista, fruncio sus labios, después de unos segundos me miro con ojos tristes.
—Ocurrió hace un año atrás, antes eramos considerados como él mejor territorio y sobre todo con mas abundancia de agua, siempre me encargaba de ayudar a mi gente y prestarles atención.
Debido a que era muy observador me percate que una mujer de mi territorio tenia marcas de garras en su brazo, cuando le pregunte la razón ella se atemorizó pero al final acabo diciéndome que una niña del territorio se lo había causado mientras jugaban.
No pregunte nada solo deje que continuara.
—Cualquier ser humano es incapaz de provocar esas marcas, así que la única razón de que hubiera ocurrido es que se tratara de una bruja.
Para ser sincero no quería creerlo, conocía muy bien a la niña, era muy alegre, valiente y siempre se preocupaba por los demás. Me recordaba un poco a ti ¿Sabes?.— hizo una breve pausa como si él recuerdo le hubiera robado él aliento.—
Aun cuando intente no creerlo mas y mas gente comenzaba a tener marcas de garras.
Así que hice la prueba y juegue una tarde con ella, mientras jugábamos ella tropezó para que no se golpeara la sostuve de los hombros y ella se agarro de mis brazos.
Nokoru dejo de hablar parecía muy afectado
—Senti un picor demasiado fuerte, cuando alce mis mangas vi unas marcas en mi brazo no había duda era ella. No podía permitir que causara daño a gente inocente, podía que por ahora fueran solo marcas de garras pero quizás cuando creciera llegaría incluso a matarnos. En ese entonces creía que algo tan peligroso estaba mejor muerto.-—su voz temblaba
—Así que tu..
—Asi que la lleve ese mismo día a un almacén que esta oculto en él bosque del territorio, me había desquiciado completamente, ya no había razonamiento alguno, tenia miedo, miedo de no ser capaz de proteger a los de mi territorio. Entonces decidí acabar con la "amenaza" pronto, sin dolor y sufrimiento solo se requería de un disparo.
Mi corazón estaba inquieto, no sabia si quería seguir escuchando pero tenia que hacerlo, incluso si intentara no escuchar no podría por que es inevitable.
—Entonces.. —trago en seco.—Jale él gatillo.— un silencio se extendió, él mismo que él rompió.— Todo sucedió tan rápido, escuche dos gritos seguidos del disparo, alguien había abierto la puerta de la bóveda, era una mujer, la madre de la niña.
Con sus ojos presencio como asesine a su hija de un disparo, la niña murió al instante y la madre la sostuvo entre sus brazos.
Los ojos de nokuro se volvieron vidriosos, al igual que su voz temblaba desafinando algunas palabras.
—En su último momento la niña revelo su verdadera forma fue tan solo por un instante y aun así jamas lograre quitármelo de la cabeza. Su verdadero ser era lo que ahora conocemos como monstruo:
"la otra mitad del ángel"
En los libros se dice que son llamados así por su falsedad y Maldad, pero no había nada de eso en ella, lo que revelo fue un brillo intenso y puro que poco a poco se fue apagando y dejando solo un cuerpo frío y ensangrentado.—la voz de nokuro que hasta ahora intentaba mantener se quebró permitiendo salir sollozos. —Asesine a una niña inocente frente a los ojos de su madre. Ella también me mostró su verdadero ser puro al igual que la niña pero en este caso poco a poco se fue oscureciendo, yo la había corrompido, todo este tiempo había guardado él hecho que era una bruja para vivir como humano, desde él momento en que vio morir a su hija se creo una maldicion.
Retrocedí dos pasos. Luego uno mas, sabia que la historia estaba llegando a su fin.
—Jamas olvidaré lo que su madre me dijo con esos ojos llenos de ira y odio mientras se aferraba al cuerpo de su hija muerto:
"Nunca te perdonare"
Había escuchado suficiente. Gire sobre mis talones y me eche a correr, como si intentara huir lo mas lejos posible, me sentía herida y se que era horrible decirlo por que él mas herido era Nokuru quien había cargado con todo ese dolor solo.
Era una extraña sensación la que invadía mi cuerpo, por primera vez había sentido esa emoción,
la de querer huir después de escuchar algo que te hería como millones de cuchilladas.
¿Que tanto dolor debió sentir esa madre al ver morir a su hija?
¿Podría comprender como se siente perder a un hijo?
La imagen de mi padre se vino a mi mente, deje de correr, había llegado al Bosque, mis piernas me fallaron y me desplome sobre la hierva.
Papá debió sentir él mismo dolor en él tiempo que no estuve junto a él, seguramente antes de morir quería saber si aun seguía con vida. Cuando había llegado a este mundo aparecí en mi casa hecha ruinas, no sabia nada sobre mi hermano o mi padre. Incluso así seguramente sufrió tanto, sobre todo antes de morir debió anhelar saber que estaba con vida.
Odiaba a este mundo, no podía culpar a nokoru pero tampoco había hecho lo correcto y la culpa tampoco era de la madre. Seguramente ella hecho la maldicion para que su gente sufriera y sintiera lo mismo que ella cuando asesino a su hija.
¿Monstruos? por él siempre hecho que son diferentes a nosotros se les llama ¿Monstruos?
Todo esta mal, incluso aquello que llamamos monstruos tienen sentimientos y pueden resultar ser los mas puros e inocentes.
Los humanos hacemos cosas horripilantes, nosotros somos los verdaderos monstruos, Inclusive yo me consideró uno.
Kobato🐇←
—¿Esta aquí él doctor fujimoto?.— pregunte entrando a una pequeña oficina que se encontraba dentro de las instalaciones del hospital.
—Creo que esta en él puente.— me respondió una enfermera que revisaba unos documentos.
—Gracias kohaku.
Para llegar al puente tenia que llegar hasta él fondo de las casas de piedra, él puente había sido construido para atravesar él final del bosque, ahí se encuentra un subterráneo donde se almacena él agua. Debido a que es muy largo y profundo él bosque se creo él puente.
En mi camino se atravesó un extraño objeto, mi primera acción fue retroceder asustada, cuando lo visualice bien me percate que era un cachorro.
Él canino corría en dirección al bosque, así que lo Seguí.
Parecía que estaba buscando a alguien, me daba un poco de curiosidad saber sobre quien se trataba, atravesé un par de arboles, él viento soplaba y movía ligeramente las hojas, cada paso que daba bajo de mi crujía y él sol brillante iluminando mis ojos.
Cerca de donde me encontraba había una chica con Un baculo en sus manos, brillaba intensamente él artefacto que sostenía pero solo duro unos segundos por que la chica se desplomo cayendo al suelo.
De inmediato corrí hacia ella, él canino hizo lo mismo, sostuve a la chica quien afortunadamente no se había desmayado del todo.
—¿Estas bien?.— pregunte
La chica lucia pálida, era castaña de ojos verdes y además parecía ser mucho menor que yo, de inmediato la reconocí era la misma chica que había visto ayer.
—Estoy bien solo es un mareo.— coloco una mano en su frente, intento volver a levantarse pero ni siquiera fue capaz de ponerse de pie.
—Si te esfuerzas en este estado terminaras lastimandote.— la sujete por los hombros.—
¿Estas intentando hacer que llueva?
—¿Como lo sabes?
—Todos los territorios te conocemos. Eres una captor.
Eres muy famosa por tu magia, por eso es que Nokoru te trajo aquí.
—¿Si? Pues mi magia no creo que sea efectiva en este territorio.—
La castaña miro hacia él cielo despejado.
—Y no funcionara.— le dije provocando que ella me mirara sorprendida.
—¿Que dijiste?
—Dije que no funcionará, no importa cuanto lo intentes, hacer que llueva es imposible para ti.
—¡Oye!.— fruncio él ceño la castaña.
—No te lo digo de mala manera.— moví mis manos por todos lados.— Si te digo esto es por que se lo que ocurre en este territorio: Magia negra.
Incluso si tuvieras mucho poder, no podrías hacer que llueva, por culpa de la magia negra.
—No comprendo si lo sabes..
¿Entonces por que me pediste que los salvara?
—¿La magia es el único medio que puedes ocupar para salvarnos? Si eso es lo que crees entonces tu mundo es muy pequeño. No te equivoques.
Estas peleando la batalla de alguien mas.
—¿Que quieres de..
—Quiero decir que no eres tu la que debería estar esforzándose por nuestro territorio, cuando te pedí que nos salvaras no quise decir que te esforzaras para hacer llover, si no, que entraras al corazón de la persona que causo todo esto.— señale hacia él cielo.— Y rompa la magia negra.
—¿Entrar a su corazón?
—Si, estoy segura de que eres la indicada para que alguien abra su corazón hacia ti.— sonrei.— ¡No puede ser! ¡olvide que estaba buscando a fujimoto!
Me levante completamente alterada, moviéndome hacia todos lado, finalmente termine corriendo.
Sakura🌸←
Me quede sin expresión alguna viendo como aquella chica torpemente se alejaba de mi, inclusive él cachorro que me regalo shaoran la persiguió.
Creo que comprendía sus palabras, era cierto lo que decía yo no podría hacer llover, por que no es a mi a quien le corresponde, sobre todo después de haber escuchado la historia.
La ira, él odio, la desesperación, todo que hay en esa maldición no lograre romperla por que no comprendo esos sentimientos, los únicos que si los comprenden son la madre y Nokoru.
Ambos tienen una cicatriz que seguramente jamas se quitara de su vida.
—¿Como puedo ayudarlo?
¿Como puedo liberar todo él dolor que esta sintiendo?. — apreté mi báculo.— ¿Que puedo hacer? Clow ayudame..
Una luz brillante cubrió mi báculo, debido a la luz tuve que cerrar los ojos, al cabo de unos segundos su brillo se apagó, abrí los ojos con cautela, tenia miedo por descubrir lo que había sucedido. Él báculo seguía igual, nada había cambiado, ni siquiera él color. ¿Que había sucedido?
—Disculpa.
Escuche una voz infantil detrás de mi, cuando me di la vuelta me encontré con una niña de cabello rubio rizado, llevaba un sombrero y un vestido blanco.
—Se te cayo esto.— la niña me extendió su mano revelando una carta.
—Oh muchas gracias.— sujete la carta.
Cuando la tuve entre mis manos me fije en la carta, para mi sorpresa era diferente, era una carta clow pero no era ninguna de las que Tenia. En la carta tenia una imagen de cámara antigua con alas, además parecía que la cámara tuviera una pluma blanca con la cual escribía.
¿Acaso la había creado con mi propia magia?
Volví mi vista hacia enfrente donde la niña me sonreía tiernamente.
—Sakura.— escuche una nueva voz, esta vez masculina.
Oí pasos detrás de mi pero no podía apartar mi vista de la pequeña, sabia que era nokoru él que estaba buscándome. Repentinamente los pasos cesaron sabia que él estaba justo a mi lado, la niña abrió los ojos al ver al rubio.
—¡Capitan Noku!.— dijo la niña alegre acercándose al chico rubio.
La niña corrió hacia nokoru sin embargo termino tropezándose con sus propios pies, note que Nokoru bajaba la mirada, sus ojos me revelaban miedo.
—No es propio de ti.— le dije dándole un golpe con él codo en las costillas.— Una dama se acaba de caer delante de ti
¿No crees que deberías ayudarla?
Nokoru me miro asombrado por mis palabras, yo solo me límite a sonreír. Él rubio se aparto de mi para dirigirse a la pequeña, yo por mi parte sabia que no tenia que estar ahí así que me aleje lo suficiente para darles su espacio.
Me oculte detrás de un tronco y mire desde ahí lo que sucedía.
Narrador normal🇯🇵←
Nokoru sostuvo la mano de la pequeña la cual estaba fría y ayudo a ponerse de pie.
—Eres tan torpe.— le dijo.
—Mamá me lo dice a diario.— se sacudio él polvo de su lindo vestido.— Pero ella dice que aun siendo torpe me quiere.
Él rubio sonrio.
—Estoy seguro que te quiere mucho.
—Si mi mamá es la mejor.
—Oye niña torpe ¿Quieres jugar?
—¡Si!.— dijo sin dudarlo.
Ambos se persiguieron por todo él bosque, si alguien los viera pensaría que son hermanos.
Al cabo de unos segundos la niña termino tropezando, nokoru logro sostenerla y ambos terminaron sentados en él suelo.
—¿Estas bien?.— pregunto con preocupación.
—Si ¿Y tu estas Bien?
—Claro.
—Me refiero a tu brazo.— señaló la niña.
Nokoru se quedo mirándola fijamente, pudo sentir su corazón oprimirle y doler. La niña lentamente levanto la manga del rubio, a cierta altura se veía una cicatriz extenderse por su brazo, la pequeña aparto sus manos y las llevó a un bolsillo de su vestido, de ahí saco una venda, misma que coloco al rededor de la cicatriz de nokoru.
—Aquella vez que jugamos sabia que te había herido, a ti y a todos los que habían estado cerca de mi. Mamá me había dicho que era especial y que era normal que mi poder se descontrolara.
Lo siento te herí por que no podía controlar mi propio poder.
La niña hizo un pequeño moño en él vendaje y seguido continuo hablando.
—No tuve oportunidad de vendar tus heridas y las de los demás. Lo siento.
Nokoru pudo ver con claridad como en él vestido blanco de la niña justo arriba de su pecho izquierdo se abría un agujero del tamaño de una bala.
Nokoru se forzó asi mismo a sonreír pero no importaba cuanto intentara curvar sus labios al final no conseguía sonreír, sus emociones se habían descontrolado por completo, las lágrimas se deslizaron por sus mejillas, los sollozos se escapaban de su boca y la culpa era inevitable sentirla.
—Nina.— dijo entre sollozos él nombre de la pequeña, estiro su mano para poder tocar las mejillas de la pequeña las cuales habían perdido su color y calor.
—"No llores siempre estaré contigo" ¿Recuerdas? Esas fueron las primeras palabras que me dijiste cuando nos conocimos. — la niña sostuvo delicadamente su mano.— Ahora te las digo a ti.
Nokoru se aferro al cuerpo de la pequeña al igual que ella. Recuerdos venían a su mente, todos esos días alegres con la pequeña y los buenos momentos terminaron por hundirlo.
—Perdoname Nina. Lo siento. Cuanto lo siento.— lloro sobre él hombro de la pequeña.
Oculta cerca de ahí se encontraba sakura quien se deslizo sobre él tronco y llevaba sus manos hacia la boca callando su voz llorosa.
—Tu fuiste mi primer amigo.— fue lo último que dijo la pequeña para comenzar a desvanecerse.— Gracias Nokoru..
Nokoru intento aferrarse intentando que no se la arrebataran de sus manos, pero ya era demasiado tarde.
Y entre sus lágrimas, gotas frías cayeron sobre su rostro...
Él cielo comenzó a llorar.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro