Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

PRÓLOGO

(Para entender, vean el capítulo de Saiyajin no Zero, Persuasiones)

La maga peli rosa Louise Valiere, estaba mirando la habitación donde estaba alguien especial para ella, era Kenichi quien estaba sollozando y frente a él estaba un artefacto que no existía en el mundo de magia, una computadora portátil, segundos después, ella cierra con cuidado la puerta y mira al profesor.

Louise: ¿Qué fue lo que le pasó? – su maestro procede contarle parte de lo sucedido aunque algo afectado.

Colbert: Usted ya conoce el dispositivo que Kenichi había traído a este mundo. – ella da un asentimiento. – Según sé, eso es capaz de enviar y recibir cartas de un método distinto.

Louise: Cartas... Acaso...- abre los ojos al recordar cuando el papa Vittorio abrió la puerta del mundo y con eso pudo recibir señal. – Di-Disculpe ¿Podría saber quién le mandó la carta?

Colbert: Fue su madre. Después de mucho tiempo, pudo verla, aunque sea por unos momentos.

Louise: Ya veo... - mira la habitación por unos segundos y estaba a punto de tomar la perilla, pero se detiene justo cuando lo iba a tocar y su cabello cubría los ojos. – Ha-Hay que dejarlo asimilar por el momento, ya después, hablaré con él.

Colbert: Cla-Claro. – dijo algo inseguro pero procede a retirarse del lugar, mientras que la peli rosa se apoya en la puerta y se tapa la cara, pero las lágrimas estaban saliendo mientras se apoya en la pared.

//==//==//==//==//==//

Ya era un nuevo día, el sol estaba saliendo y los rayos impactaban al rostro del pelirrojo con puntas negras, haciéndolo despertar.

Kenichi: ¿Eh? ¿Dónde estoy? – sus brazos estaban algo adormecidos, había colocado su cabeza ahí todo el tiempo y le incomodaba. – Oh carajo, me quedé dormido en la habitación de Colbert.

Mira a su alrededor pero sólo estaba su computadora, apagada, lo había dejado prendido toda la noche, así que supuso que se le acabó la batería, en eso recuerda el mensaje de su madre.

Kenichi: Tranquila mamá, pronto nos reuniremos, pero antes tengo que lidiar con algunos asuntos. – cierra la tapa de su computadora y mira el cielo por unos minutos. – No sé qué habrá pasado, pero se conectó temporalmente ¿Será que estaban probando el portal? No sería raro ya que hasta un tanque de mi hogar estaba ahí. Bueno, sólo el tiempo lo dirá. – Toca sus ojos. – Vaya sí que lloré como nunca, leer esa carta me dio una sensación muy nostálgica. – sale de su habitación. – Casi se me olvida, la ceremonia de la coronación del Papa, realmente es muy obstinado o tonto para llamar la atención de esa forma.

El pelirrojo mueve la cabeza en negación.

Kenichi: Debo dejar de dudar, titubear en estos momentos, sólo pondría en peligro la operación, además que preocuparía a Louise.

Estaba caminando por los pasillos del lugar, topándose con Indra.

Indra: Hey Kenichi.

Kenichi: Buenos días Indra.

Indra: ¿Qué pasó? Creí que estarías con Louise.

Kenichi: Oh, me quedé dormido en la habitación de Colbert.

Indra: Ah con razón, bueno yo iré a preparar al escuadrón, tal vez mañana sea la coronación, pero quiero que estén listos para eso.

Kenichi: Je, ya veo, entonces ve, de ahí nos vemos. – extiende el puño siendo correspondido por Indra.

Indra: Nos vemos amigo. – sigue con su camino, mientras que el pelirrojo sigue caminando hacia su habitación designada.

El pelirrojo seguía caminando por un rato más hasta llegar a su habitación.

Kenichi: Hola Louise, lo siento por no haber regresado ayer. Estaba bebiendo con el profesor Colbert en su habitación pero me había quedado dormido. – dijo con una leve sonrisa, creyendo que se creyó eso, pero no sabía que ella ya sabía la verdadera razón.

Louise: No te preocupes Kenichi, al menos ya estás aquí. – el pelirrojo abre los ojos al notar a la peli rosa con una ropa distinta a la de su uniforme. – ¿Qué tal?

Kenichi: -levemente sonrojado. - ¿A qué viene ese cambio de atuendo?

Louise: ¿Esto? Me lo había comprado ayer. – llevaba una blusa blanco, con una falda azul y una cinta roja.

Kenichi: Pu-Pues, te ves bonita. Creo que es por la ceremonia que será mañana ¿No es así? – ella asiente. – Pero ¿Está bien que lo uses ahora? – ella sólo sonríe.

Louise: Hoy quiero ir a la ciudad contigo. – el pelirrojo ladea un poco la cabeza. – Es que hay un festival para celebrar el tercer aniversario de Su Santidad, incluso los nobles disfrutamos de estos eventos ¿Sabes? Así que, me gustaría ir contigo.

Kenichi: Bueno, diría que hay que prepararnos, pero una salida no está mal.

Louise: Si, además, no habría mucha diferencia en el resultado y es bueno tomarse un descanso. – toma las manos del pelirrojo mientras le dedica una sonrisa al pelirrojo. - ¿Nos vamos?

El pelirrojo sólo asiente y proceden a salir del lugar, pero algo en su interior le daba una sensación de inquietud.

Kenichi: Louise.

Louise: Dime.

Kenichi: ¿Qué tramas? – ella sólo ríe y le dedica una sonrisa mientras se apegaba al brazo del pelirrojo.

Louise: No estoy tramando nada. – el pelirrojo no estaba seguro. – Sólo quiero dar un paseo contigo en la ciudad, es todo. – le dedica otra sonrisa.

El pelirrojo no estaba muy convencido, además que la sonrisa, por más auténtica que se vea, podría notarse un leve temblor en los labios. Le daba la sensación de que estaba ocultando algo.

Louise: Y dado que es un día especial, haré cualquier cosa que me pidas.

Kenichi: ¿Lo dices en serio?

Louise: Sí, lo digo en serio, así que trátame bien ¿Si? – dijo con una mirada adorable y una sonrisa tierna, haciendo que el pelirrojo baje la guardia.

Kenichi: Es-Está bien. – se rasca la mejilla y siguen caminando.

Y tal como ella lo dijo, fueron a caminar por casi todo el lugar y ella correspondía cada petición del Uzumaki, ya sea comer algo pequeño, o a tomar un descanso, ella correspondía con una sonrisa.

Louise: Ummm Kenichi. – él la mira. - ¿Qué tal si vamos a un lugar...apartado?

El pelirrojo estaba sonrojado mientras poco a poco bajaba la guardia y asiente mientras que ella se lo lleva a una zona solitaria.

En un conveniente bosque que será usado debido a la desesperación carnal que esta pareja de cabellos rojizos siente, es que empezaron con besos cálidos y amorosos algo subidos de tono solo por el gusto de sentirse. Al menos así es como debía ser, lo cierto es que Louise no se sentía cómoda con esto, debería hacer más por él pero solo actúa como si fuera una chica normal a pesar de todo lo que prácticamente le debe al chico, pero no por algo que haya pasado, si no por lo que pasará, aquello que le depara a esta joven pareja que es incierto pero posiblemente trágico.

Louise actuaba más en respuesta a lo que hacía que Kenichi, notando este último que estaba tomando toda la iniciativa en sus acciones ya que la peli rosa no estaba yendo a por más besos, pero creyó que solo se hacía la difícil con él por jugar un poco o quizás algo más atrevido, por lo que siguió esa corriente.

¡ALERTA DE LEMON!

El pelirrojo con mechas negras se dejó caer con cuidado contra un árbol con Louise apegado a él aún besándose y abrazándose, en pocas palabras dándose amor continuamente a pesar de que el bosque es cercano a un festival, pero poco importaba ya que una vez empiezan, no hay quien los detenga.

Kenichi empezó a deshacer el nudo del listón y desabrochar la camisa mientras bajaba los tirantes de la falda de su amada hasta caer tras quitar todos los botones descansando en sus codos, pero seguía abrazando a Kenichi y acariciándolo con sus pequeñas manos en una forma de no dejar toda la demostración de afecto en sus manos, pero para nuestro protagonista pelirrojo esas caricias eran una señal de que iba bien, como si estuviera evaluándolo y por lo tanto no detuvo su ritmo.

Pegó sus labios al fino cuello de la maga lamiendo y chupando para dejar roja esa área como si la enmarcara, pero no tuvo suficiente con esto lo cual se notó en el momento en el que bajó hasta su pecho, específicamente sobre el derecho para repetir el proceso mientras que Louise gruñía ligeramente en reacción a los estímulos en su cuerpo ligero y pequeño, pero no lo iba a detener, solo se sujetaba de el apretando sus hombros principalmente ya que no tiene su cuerpo muy relajado como para poder dejarlo pasar todo como si no pasara nada.

El cuerpo de la pequeña tsundere era más honesto que su propia mentalidad que no quería hacer esto por todo el daño que causaría, pero no podía oponerse del todo únicamente porque se trata de Kenichi que le está dando de su amor y cariño.

Aunque le hubiera gustado mucho poder seguirle el ritmo no sentía la capacidad o el derecho de hacer eso, la culpa no la dejaba a pesar de que estaba a punto de relacionarse sexualmente con su hombre. Kenichi por otro lado dejaba los impulsos de su cuerpo actuar sobre el de Louise que era más de estar atenta a sus "ataques" que causaban ligeras vibraciones en su cuerpo que trataba de relajarse del todo y no estaba muy sensible, aún tenía la tensión del remordimiento afectando a su cuerpo, pero no por eso le decía que pare, al contrario, sus reacciones lo estimulaban a continuar.

La calma de Kenichi en estas ocasiones se podía convertir en desesperación por su deseo carnal, siendo que eso lo llevó a rápidamente quitarle toda la ropa a la peli rosa y lanzarla lejos, le era muy irrelevante y su desesperación era suficiente para hacer rápidos los juegos previos.

Ahora le chupaba los pezones con ganas y deseo, parecía querer leche saliendo de estos, pero aunque no fuera a salir, no daba tregua a sus pechos planos que se estiraban flexiblemente por cada succión del pelirrojo, mordiéndole los pezones con fiereza mientras la miraba hacia arriba y la peli rosa cada vez más excitada le devolvía la mirada enamorada pero con dolor que se podía malinterpretar con el de sus pezones mordisqueados.

La Valiere se sentía indefensa ya que su novio tomaba las riendas por completo del asunto al tenerla abrazada para que no se aleje mientras se amamantaba por si solo, sus brazos estaban levantados a un lado ya que aunque los moviera no haría nada, estaba a merced del Uzumaki como si fuera su muñeca sexual o su concubina.

Louise: Mmmh~ Ke~Kenichi -una de sus manos al final terminó cediendo a acariciar su cabello mientras le apegaba la cabeza-

Como un depredador salvaje Kenichi la dominó contra el suelo sujetándole las muñecas mientras la besaba como queriendo lograr un orgasmo con ese beso y lo cierto es que no era tan alejado de la realidad, empujando profundamente su lengua contra ella haciendo retroceder a la suya que no podía oponer resistencia mientras su boca era completamente recorrida. Las delgadas piernas de la Valière estaban imposibilitadas al quedar sobre las de Kenichi que estaban dobladas y cerca de ella para presionar su virilidad contra su entrada que estaba húmeda y pegajosa de fluidos, aunque no le gustara hacerlo por lo que pasaría después, su cuerpo no podía evitar reaccionar a su único Alfa existente como una perra en celo.

Lo único que tenía para hacer Louise era abrazarle y apegarse a su cuerpo, lo cual fue demostrado al abrazarlo con sus piernas, siendo que era lo único que podía hacer realmente en cuanto a algo físico, todo lo demás lo hacía Kenichi teniéndola para su gusto como una simple víctima.

Besando su cuello y babeando esas áreas ligeramente al acariciar con su lengua, causando ligeras corrientes en Louise, esa sensación era especial, la marcaba como suya, como un alfa marcando lo que es de su propiedad y de echo Kenichi si es bastante posesivo con quienes ama, pero no de forma tóxica, jamás dejará de pensar en lo que siente y en amarla.

Louise: Kenichi~ Ahhh~ máaaaash~ -era un poco difícil que modulara cuando está excitada y además siendo manoseada-

Kenichi: Tus deseos son órdenes -quedó sobre ella viéndola dominante a pesar de que está acatando una petición con gusto.

Su mano fue hasta la boca baja de Louise para insertarle un dedo, suavecito y con calma hasta que pasó de la altura de la uña ya que desde ahí fue directamente hasta el fondo con violencia sacándole un gemido a Louise que retuvo con su mano, pero el dedo dentro de ella se retorcía y movía sin cuartel. Con la mano libre que tenía aunque era pequeña a comparación de las fuertes y entrenadas de Kenichi, le sostuvo el brazo como una súplica de que se contuviera mientras tenía una mirada de súplica, aunque para nuestro héroe folla lolis y tsunderes eso era señal de que quería más, por lo que además de empujar adentro y afuera su dedo, insertó otro a la vez que con el resto de su mano le presionaba y acariciaba su botón rosa.

Con pura fuerza le tomó la mano sobre su boca y la quitó, siendo superior pero no agresivo en eso ya que dolería, especialmente no podía dañarla ahora que estaba experimentando tanto placer demostrado en sus fuertes gemidos que ahora si podían resonar, especialmente porque el tomate de Kenichi no estaba procesando de que están a una distancia no muy prudente de un festival como para estar cogiendo al aire y libre y especialmente a viva voz, pero a la mierda esas cosas, primero el deber y luego los otros deberes, luego de eso seguir teniendo placer- que diga, hacer deberes importantes.

Se volvió a recostar contra el árbol mientras abrazaba a Louise esta vez estando de espalda disfrutando que la penetraran con dos dedos en su pequeña vagina que quedaba algo pequeña por proporciones corporales. Ese placer era como un fruto prohibido, no debía tenerlo, no se lo merecía o eso pensaba ella, razón por la que tiene sensibilidad a llorar en estos momentos teniendo lágrimas juntas en sus ojos, pero no iba a decir la razón real y el pelirrojo ya a experimentado situaciones lujuriosas con ella antes, por lo que solo asume que se trata de éxtasis.

Sin importar lo que quisiera, solo los gemidos escapaban de su boca, Kenichi le sujetó de las mejillas para mantenerle la boca abierta aún más y hacer que le viera para besarla hambriento de ella, aunque en vez de un beso era una danza abierta de lenguas, con Louise sin oposición de resistencia ante eso, hasta sacó su lengua inmediatamente para recibirlo y darle también algo de placer ya que todo lo está haciendo su novio, siendo que a este no le molesta ser el activo y tenerla de pasiva se sentía indebido, era lo menos que podía hacer.

Le lamió los labios antes de pegar los suyos para ahora si besarla más convencionalmente... convencionalmente si es que tu novia está completamente sensible e indefensa a cualquiera de tus "ataques" y tú llegas a parecer sexópata por como dominas amaestradamente la situación sexual, aunque el caso no es tan extremo de todos modos. Mientras la besaba y manoseaba abajo, acomodó sus piernas para abrirlas y aprisionarlas con las propias, flectándolas para evitar que Louise las quitara ya que no tiene la suficiente flexibilidad como para hacerlo por si misma, especialmente cuando sus fuerzas las tiene para mantenerse a la defensiva.

No iba a estar satisfecho con solo hacer esto, pero era obvio que su testosterona y ego aumentaban proporcionalmente, siendo que mientras más dominara a esta mujer para hacerla suya ¿Cuál es el punto de decir todo esto? Que cuando hizo que se corriera con nada más que estas acciones se sentía más hombre de cierta forma y además tuvo una fuerte erección que si la dejaba estar le iba a doler, por lo que se levantó y se bajó los pantalones, levantó a Louise y como el caballero que nunca dejará de ser con su novia, primero pidió permiso.

Kenichi: Louise, por favor~ déjame meterlo -estaba duro y unas venas se marcaban, mantenerla se veía algo doloroso-

Louise: Te portas irrespetuoso~... con tu ama~ y aún así... ¿Tienes el descaro de preguntar si puedes hacerlo? - era parte de un juego sexual, pero estaba de cara contra el árbol y Kenichi detrás de ella, por lo que no tuvo el valor de dar la cara siendo que no le tiene bonitos planes, aunque estos eran más que bonitos para Kenichi ya que con sus dedos separó sus labios vaginales en señal de darle paso- Con mi vagina~ castigaré tu cuerpo irrespe~ ¡HYYAAAAAA!

Una sola estocada bastó para hacer que dejara todo el roleplay. Aunque tenía mejor resistencia como para no pausarse tanto al hablar debido a que un orgasmo le es agotador, era adrenalínico tener una aventura al aire libre y con el misterio de si los descubrirán o no, dando paso a más energía y tensión que hacía de esta situación todavía mejor, por lo que el pelirrojo no pudo contenerse lo suficiente.

Louise se tomó su tiempo para respirar y apegarse al árbol ya que de la sorpresa casi se da de cara contra este, pero otra estocada fuerte que dio hasta el fondo detuvo su descanso.

Louise: ¿Qué no puede~? ¡HYA! ¿Contener~? ¡HYA! ¿No pue~? ¡HYA! -estaba claro que hablar en estos momentos no iría a ningún lado-

Aunque la Valiere no lo reconociera, tampoco quería conversar, por lo que la mejor solución es un poco de amor rudo, nunca mejor aplicado.

Tomando un ritmo más preciso de su vaivén, Kenichi empezó a llenar constantemente con su miembro el espacio dentro de su cuerpo, aunque pronto es posible que ese espacio se encuentre en el corazón de Louise, aunque su juicio se ve nublado, pero las lágrimas y saliva no dejaban de manchar su sombra en el árbol mientras su trasero era golpeado por la pelvis del Uzumaki que sujetaba con firmeza sus caderas, eso tal vez deje marca.

Como a la peli rosa no le alcanzaba con solo sus manos, se sujetaba con los brazos, además de amortiguar al pegar su cabeza, probablemente ya tendría una contusión de no haberlo hecho, afortunadamente Kenichi aún no está yendo en serio en cuanto a cogérsela, lo cual era bastante bueno.

De la misma forma que con los dedos, Louise apretaba inconscientemente el miembro de Kenichi, pero eso solo hacía que el placer mutuo aumentara aún más.

Sus manos se fueron deslizando por sus delgadas caderas hasta poder llegar a sus delgados glúteos que estrujó unos segundos y luego condujo sus manos hacia sus labios vaginales para estirarlos con sus pulgares, tirándola con fuerza para chocar y empujar con su pelvis, pero en el proceso soltó su vagina para ahora sujetar su pierna izquierda y levantarla.

Al estar reacomodados en esa posición, Kenichi se acercó y en cuanto Louise se giró lo suficiente para verlo, este forzosamente la besó presa del fuerte calor y la excitación del momento, sin darle tiempo a responder, aunque sentía que no tenía ese derecho, pero en cuanto la hombría de Kenichi presionó su punto G mandó esos pensamientos a la mierda por unos momentos para lanzarse a besarlo ella misma antes de que se escapara, lo cual causó una ligera sensación de asfixia que aumentó el nivel del vaivén por desesperación, aunque no era algo malo para ellos, eso está demás mencionarlo. Por sí solo, ese único momento fue suficiente para hacer que Kenichi se corriera, aunque Louise llevaba tantas que no podía ni contarlas, pero en su opinión eso ya habría sido suficiente con respecto a lo que se merece por lo que hará.

Louise: Ke~Kenichi ¿Po~podemos descansar? - le había bajado la pierna y se sujetaba del árbol, ni siquiera estaba mirándolo, quizás por la posibilidad de que su lasciva y excitada expresión haga que Kenichi ignore por completo a la razón.

Kenichi: ¿Tan pronto Louise? - normalmente lo hacían por más tiempo que esto.

Louise: Ve~venía algo cansada, lo siento por eso~ -si lo hacían más no podría soltarlo en un buen tiempo.

Kenichi: Está bien - primero están los deseos de su amada, aunque generalmente es su deseo lo que mueve sus horas de sexo y por eso la penetra bastante, pero de cualquier modo no escucha que se queje.

FIN DEL LEMON.

Se sentó en el árbol y recostó a Louise sobre él, colocando su ropa como manta para no tomarse la molestia de vestirse y tardarse, ya que un abrazo a piel desnuda no es algo malo y pueden prevenir (muy ligeramente) un resfriado al cubrirse usándolas como sábana.

Una vez se habían recuperado, Louise terminó por cambiarse y trataba de mantenerse con una sonrisa, pero el pelirrojo dudaba más, algo no andaba bien, pero por el momento seguiría la corriente.

Nuevamente regresaron al evento, muchas personas iban de un lado para otro, comprando rosarios, preparándose para la bendición del Papa, aunque claro, notaban a sus compañeros disfrutar del evento.

Kenichi: Oh, ahí va Tiffa, Kirche y Tabitha con Colbert ¿Los saludamos?

Louise: Lo haremos más adelante, quisiera disfrutar de este día contigo ¿Si? – decía con una sonrisa.

Kenichi: Es-Está bien. – se van por otro lado aunque estaba extrañado.

Louise: Ven aquí. – lo toma de las mejillas y lo besa, dejándolo levemente sorprendido. - ¿Mejor? – el pelirrojo sólo asiente aunque seguía dudando. – Entonces disfrutemos del día.

La duda seguía aumentando más y más en el Uzumaki, él sabe cuándo Louise sonríe y a él le enamora esa sonrisa, sin embargo, las sonrisas que está mostrando el día de hoy, son distintas y no sabe por qué, sin embargo, así que se aseguraría en saber lo que está pasando.

Kenichi: ¿Quieres una bufanda? Yo te la compro sin problemas, así que elige el que más te guste.

Louise: ¿Eh? Oh...Gracias...- mira con detalle y elige una con un color negro con bordes rojos, lo que más le agradaba era que no tenía un borde fijo, sino como si fueran líneas.

Kenichi: Te ves hermosa. – dijo con una sonrisa sincera y ella se sonroja.

Louise: S-Sí, es bonito, además, es como tu cabello y como tú comprarás este, entonces yo te consigo este. – Le da una bufanda con los colores invertidos, además que toma uno con un color blanco. – Este es para ti.

Kenichi: Pero...

Louise: Es para ti, tómalo. – dijo con una sonrisa, por lo que el pelirrojo sólo se resigna y acepta.

Luego de comprar, siguieron caminando hasta que se llegaron a una plaza en donde varias personas bailaban, al pelirrojo le agradaba estas cosas, por lo que Louise lo toma de la mano y lo lleva al centro.

Louise: Bailemos. – el pelirrojo sólo esboza una sonrisa y empiezan a moverse alrededor del lugar, siendo animados por los aplausos por los espectadores, aunque no sabía de cómo se disfrutan estas festividades, le sigue los pasos a la peli rosa.

Después de haber bailado por un buen tiempo, ingresaron a la taberna en donde se habían atrincherado durante el rumor falso. El tabernero vio a la pareja y sonríe.

Hey, ha pasado tiempo desde ese día. – les da una sonrisa a ambos.

Kenichi: Sí y me alegra mucho que se haya arreglado. – se sienta y la peli rosa se coloca a su lado. – Deme lo mejor por favor.

Será un placer. – se retira a la cocina mientras que Louise estaba con una sonrisa, minutos después llega una sopa y antes de que el pelirrojo se sirva, Louise toma la cuchara y le ofrece.

Kenichi: ¿Eh?

Louise: Di Ahhhhh.... – esto no se lo vio venir y le preocupaba, son novios, pero que se ponga así, no era normal, para nada normal, por lo que decide atacar.

Kenichi: Louise, sé sincera, no me enojaré ¿Te pasa algo para que me animes, porque si es por lo del incidente de la academia ya pasó, al igual que el caza que tengo ya lo deshabilité de forma permanente porque está muy dañado?

Louise: Nada de eso, sólo quería ser una gran novia para ti este día. Y quiero que lo atesores, ya que estaremos en momentos de crisis. Créeme, esa es la razón. – al pelirrojo sólo le causaba más inseguridad.

Tras finalizar la comida, ellos siguen recorriendo las calles, el pelirrojo disfrutaba de los eventos que se realizaban, cuando Louise nuevamente lo toma de la mano.

Louise: Ven un rato. – el pelirrojo estaba confundido pero es arrastrado a un callejón, en donde lo besa con pasión, sorprendiendo al pelirrojo, ya que iba muy profundo y cuando se separaron, un gran hilo de saliva salía de sus labios.

Kenichi iba a decir algo pero Louise lo calla con otro beso, dejándose llevar poco a poco, sin notar que a la peli rosa le salía una lágrima, pero se lo limpió antes de que se diera cuenta. Luego del beso, ella volvió a sonreír, eso ya no le gustaba al pelirrojo, ama la sonrisa de su novia, pero sabía que había algo malo.

Y no se equivocó, minutos después siguieron caminando y ella lo nota, por lo que le da otra sonrisa, dejándolo rojo porque fue una linda sonrisa. El pelirrojo sólo se mantenía callado hasta que se le vino el recuerdo de su madre, la última le pareció nostálgica, dándole un poco de dolor.

Louise: ¿Pasa algo?

Kenichi: Descuida, no pasa nada. – ahora él sonríe, pero se notó un poco lo forzado.

La noche ya llegó, ellos habían regresado a su habitación en silencio, ni siquiera pasaron a saludar a Indra o a los demás. El pelirrojo estaba meditando lo sucedido hasta que Louise se acerca con un vaso.

Louise: Ten un poco de agua, debes estar agotado, hemos hecho mucho el día de hoy. – dijo con una sonrisa, el pelirrojo sólo lo toma en silencio, se lo devuelve y ella sigue sonriendo, cosa que ya no pudo esperar más y empieza a hablar.

Kenichi: Louise.

Louise: ¿Sí? – da otra sonrisa.

Kenichi: En serio, has estado sonriendo demasiado ¿Por qué?

Louise: Acaso ¿No puedo? – decía con una sonrisa dulce.

Kenichi: E-Es que es muy raro. Porque según recuerdo, tus sonrisas son constantes pero no tan seguidas y hoy día, calculo que lo hiciste 100 veces.

https://youtu.be/CjtFqXEGmog

Louise: Me hace muy feliz que contaras cada una de mis sonrisas. Te lo agradezco de corazón. – dijo con una sonrisa más. Una sonrisa angelical. – Me prometí que iba a sonreír las veces que pueda en estos últimos momentos.

Kenichi: ¿Últimos momentos? ¿De qué estás hablando?

Louise: Te digo de corazón, que atesoré cada momento que pasamos juntos, tanto buenos y malos, me sacaste muchas sonrisas en un solo año, realmente hubiera deseado que lo hicieras por varios años.... – tenía la misma sonrisa pero las lágrimas estaban saliendo. – Realmente...lo deseaba...

Kenichi: Louise, habla de una vez ¿Qué hiciste?

Louise: Perdón por lo que voy a hacer, esto hará que deje de sonreír por el resto de mi vida. – la sonrisa empezaba a quebrarse mientras más lágrimas caían.

Kenichi: ¿Lo-Louise?

Louise: Te vi llorando, te vi con ese aparato, cuando Colbert me contó, resultó que viste a tu madre... - aprieta el dobladillo de su falda. – Me dolió mucho verte así, sé que me amas, pero debes volver con tu familia.

Kenichi: No....

Louise: Te traje a la fuerza....te alejé de tu familia....He sido cruel contigo....soy alguien mala por lastimarte....pero....sniff....esta es la forma para remediar...al menos algo de lo que hice...sniff... Pero....yo....realmente...apreciaré cada momento en mi corazón....

Kenichi: N-No.... ¡No! ¡Louise! – la toma del brazo y hace que la mire a los ojos. - ¡No me digas que...! - sentía sus fuerzas caer. - ¿Qué?

Louise: Si te lo hubiera dicho....estaba segura que te negarías... sniff...

Kenichi: Lo-Louise...Tú....la bebida...te-te... - ya no pudo más y cae de rodillas mientras que sus ojos se cerraban, antes de que caiga de espaldas, Louise lo atrapa, lo toma del rostro y lo besa, eso fue lo último que sintió antes de terminar inconsciente.

Tal como lo había sospechado, algo andaba mal, ella ocultó algo en toda esa cita y la bebida contenía un potente somnífero, por lo que ya fue demasiado tarde cuando se dio cuenta.

Louise: Adiós...mi amado familiar, novio, caballero...adiós Son Kenichi Uzumaki... te amo...realmente te amo y te deseo lo mejor... - sólo se escuchaban los sollozos.

Pasaron unos minutos y ella deja de abrazarlo, lo acuesta en la cama, le da un último beso y se pone de pie.

Louise: Entra... - dijo con la mirada ensombrecida. – un momento después la puerta se abrió...Julio estaba ahí con su típica sonrisa.

Julio: ¿Estás segura de esto? – ella simplemente asiente.

Louise: Sí, él hizo mucho por mí, ahora es momento de que regrese a casa.

Julio: Entonces, por el bien de tu amor...

Louise: Haz lo que te digo y tendrás mi cooperación en esa misión. No importa si es capturar a Sheffield o recuperar la Tierra Santa... No sólo eso. Por el bien de los ideales de Halkeginia, daré mi vida, mi habilidad con el Vacío y mi condición de noble. – él simplemente asiente.

Julio: Finalmente ha nacido un santo. Es momento de irnos, te diré con detalle los planes, y no te preocupes, él ya no estará aquí. – se retira mientras que Louise voltea y mira al Uzumaki, las lágrimas seguían mientras un recuerdo llegó a su mente, pero ella se limpia las lágrimas y susurra.

Louise: Hasta siempre, mi amado Kenichi y perdóname. – se retira de ahí.

//==//==//==//==//==//

Antioch, capital de Aiur.

Gine estaba ingresando a las instalaciones donde estaban llevando a cabo el portal, estaba feliz y con esperanzas después de ver a su hijo.

Bardock: Oh, Gine, no esperaba que vinieras.

Gine: Lo ví, llegué a verlo. – el peli negro abre los ojos.

Bardock: ¿Hablas de...?

Gine: Sí, tuve contacto con él, por unos minutos, pude hablar con mi hijo. – dijo mientras le salían algunas lágrimas.

Bardock: Debió de pasar algo para que se conecten con el mundo donde está.

Bulma: ¡Buenas noticias! El portal ya está finalizado. – la esperanza en los presentes aumentó más.

Shun: ¡Por fin!

Enju: ¡Podré ver a mi hermano nuevamente! - dijo con una sonrisa.

Takao: Eso es perfecto, podremos encontrarnos con Indra y Kenichi.

Bulma: Sólo queda ver quiénes irán, ya que tienen que armarlo desde el otro lado, una vez se active, el sensor mostrará una luz, tardará unas horas en que se conecte con el nuestro pero cuando se activen ambos, se hará como un puente.

Takao: Yo lo haré. – dijo con la mano levantada. – Sinceramente me preocupa.

Gine: ¿Takao?

Takao: ¿Te acuerdas cuando le hice la transfusión de sangre cuando quedó herido en una misión que tuvimos? – la madre asiente. – La asimilación está a un 90%, por lo que podría despertarlo con un sentimiento fuerte y si no voy, posiblemente pueda ocurrir una desgracia.

Gine: Oh...- se preocupó.

Takao: Es por eso que quiero ir, al igual que Satoshi, si tenemos un problema, entonces nos defenderemos bien.

Bardock: Claro, ustedes forman el triángulo maldito, sería bueno.

Shun: ¿Estás seguro padre? – el peli negro asiente.

Bardock: Ante una situación así, entonces será mejor que ellos vayan, sé que también quieren ir, pero será mejor ir pocos y no llamar tanto la atención, ten en cuenta que es un nuevo lugar. – el pelinegro con mechón rojo comprende y no dice más. – Decidido, Takao y Satoshi serán quienes vayan a ese mundo.

Bulma: Entonces preparen sus cosas, tendré listo las cápsulas de suministro y la de la casa. – ambos asienten y se retiran.

Takao: Volveremos antes de que amanezca. – Bulma da un asentimiento.

Gine: Pronte te veré, hijo mío. – dijo con una sonrisa esperanzada.

FIN DEL PRÓLOGO.

ESPERO LES HAYA GUSTADO....

https://youtu.be/ht6HidxKYnQ

NO OLVIDEN DEJAR SU COMENTARIO Y ESTRELLITA, SIN MÁS QUE DECIR, HASTA LA PRÓXIMA.

GRACIAS AshuraKure

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro