Capítulo 4
Capítulo 4: Flashbacks: Eran los tristes momentos en los que un ser querido está por partir hacia su Descanso Eterno, hacia la Otra Vida y a aquella persona recostada en su cama, rodeada de su "nieta" Saori Kido y del Mayordomo Tatsumi Tokumaru, quien había estado siempre al lado de la Familia Kido por muchos años, ahora acompañaban al anciano para despedirlo en su viaje hacia el Paraíso.
Saori, envuelta en lágrimas, no soltaba la mano de su abuelo por ningún momento.
- Abuelo, Abuelo. Decía la pequeña niña de cabellos lila al Anciano, quien a pesar de estar débil, aún conservaba un poco de fuerza para poder decirle toda la verdad a la chica.
- Calma, Saori; tú eres la Diosa Athena. [Pedía con aquel tono paternal a la niña que lloraba y le contaba toda la verdad] Algún día, Poderosos Guerreros van a acompañarte, tú serás quien los guiará para combatir contra el Mal que asola al Mundo. No tengas miedo. Le daba aquellos ánimos para la moral caída de la chica, mientras que acariciaba, por última vez, los largos cabellos de ella.
- ¿Yo? ¿Pelear contra la Maldad? Preguntó ella.
- La Voluntad de ese Santo de Oro seguirá contigo, aquel hombre que te salvó de las garras de la Maldad para confiarte a mí cuando aún eras una bebe. Reveló el día, en el que un joven Mitsumasa Kido, quien estaba de viaje por las Antiguas Ruinas de Grecia, halló a aquel joven Caballero Dorado de Sagitario, quien llevaba a la pequeña Athena y la Pandora Box, estando herido pero con sus últimas fuerzas logró pedirle que cuidara de ella y cumplió el hombre su palabra.
Fin del Flashbacks: Y ahora, aquella Pandora Box, el Cofre que contenía la Armadura Dorada de Sagitario había aparecido durante la Batalla de la Mansión Kido, ante los ojos de la sorprendida Atë, quien era cegada por el brillo de aquel artefacto.
- Es una Armadura Dorada, una de las más poderosas que poseen los Santos. ¡¿Qué hace una Armadura Dorada aquí?!. Quiso saber ella aquellas respuestas que le mantenían sorprendida.
- Ya veo, tú también viniste aquí. Dijo Saori, también asombrada.
- ¿Qué es esta Caja Dorada?. Además, sintió distinta a Saori, siento una sensación cálida y una gran impotencia. Preguntó Twilight ante todas esas sorpresas en una sola noche.
La Pandora Box de Sagitario siguió emitiendo una gran cantidad de energía, aumentando más el poder.
- Su Cosmos se vuelve más intenso, como si estuviera respondiendo. ¡¿Qué significa esto?!. Volvió a preguntar Atë, pero ya las sorpresas pasaron a ser de miedo.
- Atë, quizás tengas razón, quizá aún no esté completa, pero...¡No voy a perder de ninguna manera en este lugar. No mientras los Santos arriesguen su vida por mí!. Sentenció Saori y detrás de ella, brillando con un intenso Cosmos Dorado, apareció la figura del Caballero Dorado Aiorios de Sagitario, quien tenía su Arco y Flecha listos para ser disparados.
Atë no podía creerlo, pero en ese momento, el proyectil fue disparado directo a su pecho, hacia el corazón de la Driade, siendo observada por Twilight, Cadence y Rainbow Dash.
- ¡MALIGNO ESPÍRITU, ABANDONA ESTE LUGAR!. Ordenó Saori, mientras que la Flecha Dorada aumentaba su brillo y dejaba cegada a Atë
- ¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH! [Gritó, presa del pánico] ¡UH, DESGRACIADA, NO VAS A SALIRTE CON LA TUYA!. Juró la Agente de la Diosa Eris, quien fue preparando una ofensiva.
- ¿Uh?. Se preguntó Saori.
- ¡Señorita Saori!. Gritó Twilight, pero de golpe, las raíces volvieron a emerger, el ataque de Atë habia sido lanzado junto con la Manzana Dorada, la cual estaba elevada en el aire y la trampa cayó sobre la chica.
- ¡Twilight, Twilight!. Gritó Cadence, aterrada.
- ¡Observen! Ha llegado el Gran Día de la Resurrección. Anunció Atë a todas ellas, mientras que las raíces se elevaban y formaban una especie de "Torre", la cual iba hacia una gran luz blanca.
- ¡Twilight!. Volvió a gritar Cadence, quien vio a su hermana caer en la Oscuridad.
Todo el ambiente empezaba a cambiar, una densa Oscuridad cayó sobre Twilight, quien fue cerrando los ojos.
- "...? Ya solo veo Oscuridad. ¿Dónde estoy...? Esto es..." Se preguntaba ella, perdida en ese gran mar.
- ¡Twilight, vuelve, Twilight!. Pedía Cadence, tratando de llamarla para que volviera a la luz.
De repente, llegaron unas visiones de la infancia:
- ¡No! ¡Eres demasiado malvada, ya no quiero saber nada contigo! ¡No haces otra cosa que pensar en ti!. Gritó una pequeña Twilight a su hermana mayor, mientras que se iba corriendo de allí.
- ¡Twilight, te equivocas! ¡TWILIGHT!. Pidió Cadence de que no escapara, pero era tarde.
- "Nuestra infancia, mi hermana y yo". Recordó Twilight en aquellos momentos, cuando se escapó hacia un árbol en las colinas, donde se hallaba ella llorando.
En medio de la tristeza, sintiéndose triste, una misteriosa figura encapuchada, una Bruja, se iba acercando hacia ella.
- Vaya, ¿Qué tenemos aquí?. [Preguntó aquella misteriosa Bruja joven, la cual apareció detrás de ella, asustando a la joven niña] Si algo te entristece, ¿por qué no me cuentas lo que te pasa?. Quiso saber la joven, viendo a la niña llorar y empapar con sus lágrimas las Flores y el césped del lugar.
- Mi hermana mayor ya no quiere jugar conmigo como antes, me prometió que íbamos a entrenar juntas este Domingo, pero al final tiene cosas más importantes que hacer. Le contó todo lo ocurrido.
- Ya veo. Pobrecita, así que terminaste odiando a tu hermana. Dijo la encapuchada.
- ¡Ah! No, para nada. Dijo Twilight.
- Jeje, ¿eso crees?. [Preguntó la Bruja, mientras que aparecía aquella Manzana Dorada en sus manos.] Toma, come esto, va a ponerte de buen humor y hacerte olvidar las preocupaciones. Extendió aquel artefacto.
- ¡No, Twilight!. Intervino Cadence.
- ¿Cadence?. Preguntó la chica..
- ¡No tomes esa Manzana! MIRA CON ATENCIÓN. Pidió ella que observara el cambio que estaba ocurriendo.
- ¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHH! Gritó Twilight aterrada, mientras que su hermana le tomaba de la mano y escapaban de allí.
- ¡Volvamos, Twilight!. Pidió su hermana y escaparon de allí.
- Maldita, ¿cómo pudo entrar alguien más a este Paraíso de Oscuridad? Así que quieres huir. Espera. Dijo la encapuchada y detrás de las niñas, aparecieron cientos de raíces.
-¡CUIDADO, TWILIGHT!. Le alertó su hermana.
- Esto es...Dijo la chica doble color en sus cabellos.
Cadence fue atrapada por las raíces.
- ¡Cadence!. Gritó su hermana menor.
- ¡TWILIGHT, VETE DE AQUÍ, DATE PRISA!. Ordenó la Saintia, pero la joven estaba petrificada.
- "Esto es el sueño que siempre tuve". Pensó Twilight, quien también fue atrapada.
- ¡TWILIGHT!. Volvió a gritar su hermana mayor.
De golpe, en aquella pesadilla, una familiar esfera de Luz Dorada apareció en ese sitio maldito, destruyendo las raíces y liberando a las dos niñas prisioneras, mientras que la misteriosa joven encapuchada desaparecía.
- ¡Twilight, abre los ojos! [Pidió desesperada Cadence].
- Solo se desmayó por la conmoción. Dijo el misterioso Caballero Dorado.
- ¿Quién eres tú? Preguntó Cadence al personaje.
Allí estaba su Salvador, un Caballero Dorado alto, de tez blanca, cabellos largo y semiondulado de color rubio y ojos azul verdosos.
- Soy un Santo de Athena: Milo de Escorpio. Me enteré que una Diosa Maligna estaba por renacer, así que vine a impedirlo. Se presentó el joven Caballero de la Casa de Escorpio.
- ¿Qué acabas de decir?. Preguntó Cadence, sorprendida.
- ¿Hermanas? Se podría decir que nacieron bajo la Estrella de un cruel destino. [Observó Milo a las hermanas muy serio] Aunque yo podría encargarme y cortar de este problema. [Cadence protegió a su hermana] Je, someterte al destino o pelear, eso va a depender de la vida que elijas. Dentro de poco, estás cosas volverán a repetirse. Si quieres oponerte a esto, entonces vuélvete fuerte, haz arder la Llama de tu vida y pelea con todas tus fuerzas. Los Mortales tenemos el poder de cambiar nuestro destino. Dijo Milo, quien se fue retirando, dejando a ambas niñas solas y poco después, Twilight despertó.
- Entonces, ¿algún día volveré a estar en la mira? No lo voy a permitir. Santos, los Guerreros con el poder de cambiar el destino. [Juró Cadence y miró a su hermana menor] Twilight, entonces nosotras seguiremos juntas. "Twilight, voy a ponerme más fuerte, tanto como para protegerte...y para cambiar ese destino.". Prometió ella, mientras que su voz se hacía lejana y los recuerdos de cuando ella partió hacia sus entrenamientos, fueron solo viejos momentos que desaparecieron para siempre.
Pronto, Twilight fue despertando, saliendo de aquella Oscuridad:
- Twilight. Dijo su hermana mayor.
- ¿Cadence?. Preguntó ella.
- Ah, pude hacerlo a tiempo, una vez más. Dijo ella, mientras que, para terror de su hermana menor, Cadence de Caballo Menor había recibido el impacto de la ofensiva de Atë.
- ¡CADENCE!. Gritó su hermana aterrada y llorando por lo que acababa de ver.
- ¡¿Qué?! ¡¿ACABA DE CAMBIAR EL RECIPIENTE?! [Se preguntó sorprendida y furiosa la Driade] "Ya veo...tú eres la mocosa de antes, tu Estrella está vinculada a la de la Señorita Eris y tu corazón es rebosante de energía vital". ¡Jajaja! ¡La Señorita Eris por fin tendrá un cuerpo! ¡Va a tener lugar una Nueva Era con el aroma de la Sangre de los Combates! ¡Miren, estas "Flores del Desastre" cantan a pura felicidad!. Exclamó orgullosa y burlándose de sus rivales, mientras que ahora Cadence se convertía en la huésped de Eris.
- ¡CADENCE!. Gritaron Twilight, Rainbow Dash y Saori.
- "La Luz desaparece como un Cometa Fugaz surcando el Firmamento, dejando lugar a la Noche. El Cielo Nocturno fue teñido por el Rojo del Desastre como una Mezcla entre la Sangre y la Oscuridad. El Mal Presagio en el Firmamento predice un Combate Sangriento y prueba la Resurrección de esta Temible Diosa." Dijo el Narrador, mientras que todo volvía a la calma, el más puro de los Silencios había caído sobre la Mansión de la Familia Kido, una baja en las filas de Athena, las más triste de todas: Cadence de Caballo Menor se había sacrificado para proteger a su hermana menor, Twilight, siendo arrastrada por el poder de Atë y pasaba a convertirse en la Futura Huésped de la Diosa Eris de la Discordia.
La Batalla de la Mansión Kido había terminado, la Driade Atë se había escapado con Cadence. Afuera de la misma, se hallaba Twilight, arrodillada ante la Armadura de Eqquleus Menor, la cual había sido su hermana la Portadora, mientras que Saori y Rainbow Dash la miraban tristes.
- Twilight, ¿te encuentras bien? [Preguntó Saori] Seguramente Cadence no esté dominada completamente, te prometo que volveremos a tenerla de vuelta entre nosotros. Va a tomar un poco de tiempo, pero ten paciencia. Le pidió Saori a la chica, la cual no decía nada.
- No necesito una promesa así. ¿No podrías hacerme un favor, Saori Kido?. Pidió Twilight con los ojos humedecidos por las lágrimas.
- Por supuesto, en tanto sea capaz. Respondió Saori.
La chica se levantó.
- "Twilight, todo va a estar bien". Prometió Cadence a ella.
- Yo...Yo quiero hacer el mismo entrenamiento que mi hermana. Voy a cambiar nuestro destino. Esta vez voy a ser yo quien la salve. Yo...¡voy a volverme un Santo!. Juró Twilight, quien dejó de llorar, se puso firme, levantándose del suelo y sintiendo que su moral se volvía a rearmar, prometió que iba a entrenar mucho y así poder salvar a Cadence de las garras de Eris.
Una nueva Saintia estaba por nacer, el Reloj empezó a correr y con ello, la misión de rescatar a Cadence de la Diosa de la Discordia había comenzado.
No había tiempo que perder ahora.
Los entrenamientos para Twilight estaban por comenzar.
La tensión se siente en el ambiente, ¿no?, jeje, Cadence de Eqquleus Menor se sacrificó para salvar a su hermana menor Twilight, ¿Qué pasará ahora? ¿Logrará salvar ella a su hermana mayor antes de la Resurrección de Eris?. No se lo vayan a perder :3.
Mando saludos, agradecimientos y fuertes abrazos para FreedomGundam96, aletuki01, lady-saintiasailor, PoLucy y Fairy of The Moon 1999 :D. Cuídense, Camaradas y que tengan un excelente día Viernes y un buen comienzo de Fin de Semana para todos ustedes :D.
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