Capítulo 11: - Viniste, Escorpión. No permitiré que molestes a nuestra Madre que está descansando en el Útero. Soy la Líder de las Dríades: ¡Até de Ruina!. Se presentó aquella bella mujer que estaba a los pies de las escaleras del Templo Superior y con ello estaba Milo, dispuesto a destruir al enemigo.

- Entonces esa fragancia repugnante que percibí emanando desde este Templo era el tuyo, es una pena pero tendrás que dejarme pasar. Dijo Milo con un tono de burla hacia Até, estando dispuesto a abrirse paso por la violencia para llegar y destruir al objetivo.

- Niñito impertinente, ¡te empalaré en nombre de nuestra Madre! [Até tomó posiciones defensivas, extendió los brazos en el aire y se preparó para iniciar la Batalla del Templo Madre] ¡"MILLION HAY THREADS"!. Lanzó ella su ofensiva, sin saber que Milo estaba listo para el contra-ataque y de ahí aparecieron cientos de miles de raíces, las cuales se lanzaron sobre el Caballero de Escorpio.

- ¡Qué aburrido! ["Resopló" el peli violeta ante semejante acto, pero una de las raíces le atrapó su pierna izquierda, causando que Até sonriera malvadamente, para luego ir subiendo por todo su cuerpo].

- Jejeje, te atrapé. [Festejó ella su victoria al comenzar la pelea, ya que tenía al Caballero de Escorpio capturado y bajo su poder] Es inútil, esa Enredadera está imbuida con el Poder de la Señorita Eris, puedo moverla libremente para evitar que la presa escape. Jejeje, he esperado el momento para hacerte pedazos con mis propias manos. Desde hace 9 años, ¡cuando me arrebataste la oportunidad de despertar a nuestra Madre después de toda una Eternidad!. Señaló ella, recordando ese dolor sufrido en el Pasado por no haber podido tener a Eris despierta por la intervención del Santuario.

Al oír esas palabras, Milo quedó sorprendido, ya que pronto comenzaron a llegar los recuerdos a su mente.

- Ah, ya veo, tú eres la Anciana de aquella vez. [Recordó, señalando a aquella bella mujer, la cual mostraba sus afiladas uñas para amenazar con destruirlo] ¿Qué le pasó a tu cuerpo anterior?. Quiso saber Milo.

- Durante 5 años reuní el poder que la sangre derramada por los conflictos humanos proveía a este cuerpo, ¡de esa forma pude renacer con este cuerpo joven y lleno de poder!. Le contó Até su historia, mientras que tomaba asiento en un "Trono" de raíces que se habían formado allí.

- Claro: Athena comprende por qué dejaron ese repugnante aroma de tu fragancia, bajo tu piel hay un cúmulo de sangre podrida. [Resaltó el Caballero de Escorpio, burlándose de su rival, sin importarle el cambio físico que ella había tenido].

En aquel momento, Milo intentó liberarse de las Raíces, pero en ese momento, una de las mismas que estaba en el "Trono" de Até, se lanzó para atacarlo al muchacho.

- Descarado, no permitiré que insultes el cuerpo que me fue brindado por la Señorita Eris. ¡Insecto!. [Até estaba furiosa por las palabras de ofensa de Milo, cosa que provocó que ella defendiera ese derecho que dado por la Diosa de la Maldad] Nosotras, las Dríades, fuimos alguna vez Seres cercanos a los Dioses, ¡lo fuimos hasta que la maldita de Athena selló a nuestra Madre!. Una vez nuestra Madre despierte por completo, hemos de recuperar nuestro poder y florecemos por toda la Eternidad. ¡Para ello, me encargaré de los intrusos de ustedes que se infiltraron en este Paraíso!. Los Humanos son tan miserablemente débiles, deseosos inconmensurables y conflictivos, se apegan a cosas perecederas, su existencia es tan patética. ¡Deberían agradecer que les permitimos vivir como alimento para nuestra Madre!. Se burló ella y mostró su desprecio hacia la Humanidad por los defectos que poseían.

- Jajaja. Río Milo, como si ese discurso fuera un buen chiste para sus oídos.

- ¿Qué es tan gracioso?. Preguntó Até con una mirada severa.

- No, es que yo ya te entendí, a ti en verdad no te importa lo que pasé con Eris, ¿no?. Dirigió ahora Milo su pregunta hacia Até.

- ¿Qué?. [Quiso saber la Líder de las Dríades, sin quitarle los ojos de encima].

- Solo buscas el poder de un Dios para satisfacer tus deseos egoístas, resulta que eres otro monstruo feo y todavía eres tan arrogante como para subestimar a los Humanos ¡ridículo!. Dio Milo en el blanco con su respuesta hacia Até, la cual bajó la mirada hacia el capturado.

- Comprendo, quieres que te haga pedazos tan pronto como pueda, ¿es eso?. Fue la pregunta de la mujer, la cual era una hipótesis.

- Hum, ¿te crees capaz? No te creas tanto, ni siquiera puedo verte como un Guerrero. [Advirtió Milo con esa mirada de burla y fue entonces que el Escorpión logró liberarse del control de las Raíces de Até] ¡JAMÁS PODRÍAS DERROTAR A UN SANTO DE ORO!. Exclamó y preparó su ofensiva.

- ¡IMBÉCIL, APAGARÉ EL BRILLO DE TU SANGRE! ¡MUERE, ESCORPIO! ¡¿QUÉ...?! [Gritó Até, lista para contra-atacar de nuevo, pero se llevó una sorpresa al ver que su defensa era sobrepasada y caía por la embestida de la "Aguja Escarlata" de Milo y ésta comenzaba a acercarse amenazadoramente hacia ella] ¿Qu...Qué? Lanzó su técnica al mismo tiempo que esquivaba la mía, ¿es...es éste el poder de los Humanos?. Quiso saber ella, helada por el terror que le invadía.

- Te diré algo: Las personas se vuelven fuertes cuando encuentran algo que proteger. Es decir, tras 5 años, mi crecimiento prevalece por encima de tus Muñequitas de Lodo. Te rindes o mueres, mi "Aguja Escarlata" permite esa elección a mi enemigo antes de apuntar su quinceno golpe, sin embargo, esa no es una opción para una escoria que es la Reencarnación del Mal, ¡DESAPARECE!. Sentenció Milo, no le iba a tener clemencia a esa mujer, estaba decidido en destruirla.

- Mal...Maldito, ¡NO CREAS QUE YA ME VENCISTE, SI DESCARTO ESTE CUERPO HUMANO, NI SIQUIERA LA HERIDA DE UN AGUIJÓN...! Iba a decirle ella, pero fue tarde.

- ¡"AGUJA ESCARLATA DE ANTARES"!. Lanzó Milo su ofensiva, disparando aquel proyectil letal contra su objetivo.

Mientras tanto, Twilight junto con Rainbow y Sunset se hallaban en camino para salvar a Cadence de las garras de Eris, pero en aquel momento, una intensa explosión se sintió en toda la zona, obligando a detener a las dos primeras Saintias.

- ¡¿Qué fue eso?!. Preguntó Twilight.

- ¡Eso fue el choque de un Cosmos inmenso!. Respondió Rainbow, mirando hacia el Norte.

- "Ugh, debo apresurarme o sino él...alcanzará a Eris, mi hermana!". Pensó la chica de Eqquleus asustada por lo que pasaría si Milo ingresaba en el Templo de la Diosa de la Maldad.

- ¿Qué pasa? ¿Por qué tan pensativa, cabeza hueca? ¿Acaso temes por tu novio?. Preguntó Sunset, quien se burlaba de la posición asustada de la chica.

Twilight la miró seria pero no le iba a responder, sabía que ahora no tenía tiempo para discutir con la chica del Fénix, así que decidió volver a ponerse en marcha con ella y con Rainbow.

Mientras tanto, en el interior del Templo Superior, Eris salía de su recuperación, empapada de pies a cabeza por aquel líquido que la había protegido, podía escuchar la voz de Até, la cual le imploraba ayuda para la batalla.

- "Madre, una vez más dele a Até ¡de su inmenso poder! o a este paso, este Santo va a..." [Imploró ella, pero...]

Afuera del Templo Superior, apareció un conocido rubio rebelde.

- Rigel, maldito. Le insultó Até a su salvador, mientras que era atrapada por las llamas de la explosión provocada por Milo.

- Descuide, yo, Rige, protegeré a la Señora Eris aunque me cueste mi vida. [Juró el muchacho, a pesar de los insultos de su Comandante, para luego mirar a su rival]. Lo supuse, su poder actual no fue suficiente para detener a ese Santo de Oro. No tenía caso que absorbiera más de la fuerza en la herida de la Señorita Eris. Dijo Rigel sin mirar que detrás de él estaba el Caballero de la Casa de Escorpio.

- Aunque me ahorraste el esfuerzo de eliminarla, supongo que eres mi último obstáculo. ¿Problemas internos?. Dijo Milo y luego preguntó con burla hacia el rival.

- Soy un Fantasma que protege a la Señorita Eris, Rigel. Esa Bruja era una amenaza para la Señora Eris, he ahí que decidiera eliminarla. Le explicó el rubio de su deseo verla muerta a Até.

- Ya veo, supongo que ahora dirás que tienes que eliminarme cuanto antes. [Dijo Milo pero su pregunta no fue respondida] ¿Habías dicho Fantasma? Aunque he visto tu rostro antes. Escuché que desapareciste repentinamente del Santuario, pero nunca creí que estuvieras con Eris. ¿Fuiste poseído por el Poder de la Diosa Maligna? Eres alguien familiar que se dice que posee una fuerza similar a la de un Santo de Oro: ¡El Santo de Plata, Rigel de Orión!. Dio Milo a conocer el nombre del traidor a Athena y al Santuario.

- ¿Sabes? Eres un Santo de Oro muy arrogante, Milo de Escorpio. El Alma de la Señorita Eris descansará dentro de la Humana que se convirtió en su Recipiente y dado que no pueden separarse a menos que poseas un Poder Divino. ¿Puedo suponer que vienes a destruir su Recipiente, Humano?. Responde. Ordenó Rigel que respondiera a sus preguntas y que dijera su objetivo.

- Cómo te lo explico. [Dijo Milo con los ojos cerrados, en un tono de burla, para luego abrirlos] ¡Por supuesto que sí! ¡Acabaré con la Raíz de la Maldad aquí mismo!. Respondió a la pregunta de su oponente con un nuevo tono de voz, uno de seriedad.

- Como pensé, ¿está en la Justicia del Santuario?. [Alegó Rigel.] Quieren acabar con la maldad asesinando en nombre de un Dios. No es diferente del resto de los Dioses que quieren destruir la Tierra. Comprendió la diferenciación que había en el frente de guerra.

- Déjame decirte algo: No vine aquí por órdenes del Santuario, ¡vine por voluntad propia!. Si Eres despierta por completo, su poder acabaría con un gran número de vidas. Con tal de prevenir eso hasta un Santo es capaz de asesinar, ¡eso es obvio!. ¡¿No se necesitan explicaciones?!. Respondió Milo hacia su enemigo y dando a conocer su motivo por haber ido a esa misión.

- Hum, así es, los Santos de Athena protegen a la gente de la Tierra, por esa razón ¡CON TAL DE PROTEGER A UNO DE ELLOS, INCLUSO ME ENTREGARÍA A LA MALDAD!. Exclamó Rigel y encendió su Cosmos, el cual lo rodeó y dio por comenzaba la pelea.

- "Llamas Azul pálido cubre su cuerpo, ¿su Cosmos se incrementa?!". Se preguntó el Caballero de Escorpio en ese momento.

- ¡"IGNIS FATUUS"! [¡"FUEGO FATUO"!]. Lanzó Rigel su ofensiva, la cual rodeó al rival.

- ¿Qué es esto? Preguntó Milo.

- "Fuego Fatuo", la temperatura extrema de estas llamas azules son capaces de contrarrestar incluso a una Armadura Dorada. No soy capaz de utilizar el verdadero poder. [Le explicó Rigel la función de su ataque] Jamás aceptaré sacrificar algo a favor de la Justicia, así es porque yo ¡PERO NO DEJARÉ QUE PASES MÁS ALLÁ DE ESTE LUGAR!. Solamente quiero una cosa: ¡Voy a protegerla a toda costa, vivo solo para este propósito!. Hizo Rigel ese juramento, mientras que se veían imágenes suyas del Pasado y un sentimiento de tristeza se podía ver en su rostro.

- "La enorme voluntad que influye a esa Llama es capaz de hacerme retroceder, ¡¿el dominio de Eris es capaz de producir ese poder?! ¡No...eso no tiene nada que ver! Este hombre..." [Pensó Milo y de ahí habló con su rival] Rigel, tú ¡¿en verdad eres capaz de arriesgarlo todo con tal de proteger a esa Huésped?! ¡SI NO VAS A ABANDONAR ESO QUE TÚ LLAMAS JUSTICIA, ENTONCES TENDRÉ QUE DERROTARTE CON MI JUSTICIA COMO UN SANTO! ¡¿ALIADOS DE UNA DIOSA MALIGNA?!. Sentenció Milo, quien estaba listo para pelear y la "Aguja Escarlata" brillaba con toda intensidad.

- ¡NO PASARÁS!. Le advirtió Rigel y ambos comenzaron la batalla.

- ¡Mi hermana debería estar pasando este lugar!. Dijo Twilight, mientras que iban llegando con Sunset y Rainbow hacia el sitio indicado.

- Este césped es...Dijo Rainbow, pero algo las detuvo.

- ¡¿Qué es esto?!. Se preguntó Twilight, viendo que la Batalla del Templo de Eris había comenzado, las escaleras estaban casi destruidas y Milo estaba por atacar a Rigel en aquel momento, mientras que éste protegía el Árbol Sagrado donde descansaba la Diosa Maligna.

- ¡VAMOS!. Gritaron ambos oponentes, Caballero Dorado y Fantasma de la Diosa Eris iban a medir sus fuerzas en aquellos momentos tan tensos y que marcarían solo a un vencedor.

Milo y Rigel están por empezar a pelear, ¿Quién ganará? ¿El Caballero Dorado de Escorpio destruirá a la Diosa Maligna? ¿Twilight llegará a detenerlo? No se lo vayan a perder, el capítulo que viene será muy tenso y solo habrá un ganador :3.

Perdón si me demoré mucho con esta historia, pero es que estoy terminando The Lost Canvas y también Soul of Gold, además de otros proyectos y con la Facultad me queda muy poco tiempo para todo, pero me lo reparto a lo mejor :).

Quiero agradecer a todos los que siguen estos crossovers, en especial FreedomGundam96 (tengo pensado poner a ese personaje que me dijiste, Shining Armor, para que sea el próximo Fantasma de Orión si llega a morir Rigel en la pelea) y también para lady-saintiasailor :D.

Cuídense y que tengan un buen día Domingo para todos ustedes :D.