Narra narradora:

Había amanecido después del incidente de ayer con seiya, todo parecia en total normalidad en aquel lugar, claro, si podia haber algo normal.

La pobre mino atendiendo a los pacientes mas dificiles.

Death coqueteando con todo lo que tenga sombra

Aioros y hyoga hablandole a la pared

Saga siendo mas bipolar que mujer con regla y que no ha dormido en 2 dias

Aioria siendo regañado por atacar a alguien... otra vez

Ikki en clases de auto control.... atacando al psicologo

Shiryu ayudando a evitar que ikki atacara al psicologo

Milo siendo regañado por camus por atacar a un enfermero

Shun atendiendo a los pacientes

Seiya medio deprimido conteniendo el hambre

Shura regañando a aioros por hablar con la pared

Aiacos vendando al enfermero que su hermano ataco.

Y todos los demas haciendo las cosas que siempre hacian, en fin, eso era lo más cercano a un día normal que tenian en aquel hospital, días como ese lo valoraban, porque habian días que simplemente el lugar se volvia un infierno, como por ejemplo el día de las vacunas, pero bueno, todos los días ahi podian ser una bomba de sorpresas.

Pero aun así, aun en los dias de locuras, el hospital psiquiatrico más que sentirse como un lugar donde las familias desechan a sus miembros "anormales" al igual que todos los demas hospitales de ese tipo, se sentia como una familia, una bastante unida, en la que todos los días los miembros de esta estaban unidos de alguna manera.

Y eso era algo que Saori, la heredera del hospital que su tatarabuela Sasha fundo, valoraba sobre todas las cosas.

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Sí señores, no me he olvidado de esta historia, ya extrañaba actualizarla, y alfin tuve inspiracion para hacerlo

Alex: aunque tus padres te mataran por estar escribiendo esto a las 12:37 de la madrugada cuando deberias estar durmiendo....

Yo: y que lo digas :'v