[Shun]
¡Lo logré!, acabe con Andromeda malvada y para ser honesta fue una buena pelea, sin embargo, creo que soy la única que sigue de pie.

Seiya, Hyoga y Shiryu no están...
Todo depende de mi ahora, no los defruadare, se los juro.

Dragón negro me observaba, lanzó la última pieza restante de las armaduras ya que Seiya dejó las que el había recuperado junto a la pieza que yo tenía.

—No estuvo mal, pero de nada va servir enfrentarte a mi Andromeda, no creo que tus cadenas estén preparas para sentir el verdadero dolor — tenía razón, a pesar de haber ganado no me encontraba en buenas condiciones, pero no iba a rendirme sin haberle hecho frente, estaba decidida a luchar hasta mi último aliento.

Mis cadenas reaccionaron de inmediato advirtiendome que alguien estaba cerca, mire a mis alrededores y de pronto un fuerte destello se hizo presente... ¡No podía creelo!, acaso es...

—Shun, vete de aquí. Yo me encargaré de él.

—Shi...¡¡Shiryu!!, en verdad eres tú... ¡Que alivio! — increíble, me alegra saber que Shiryu aún vive... Genial.

—Veo que haz hecho un buen trabajo pequeña, pero ahora me toca a mí — me dice esto guiñandome el ojo. —Ve y deten a Ikki.

—Pero Shiryu, Seiya ha caído al acantilado y no podemos dejarlo. Pegaso negro lo dejo muy mal herido con el meteoro negro, ya no le queda tiempo de vida— le decía mientras observaba aquel acantilado preocupada por Seiya.

—¿Que dices? ¿Seiya está a punto de morir? — asentí.

—¡Tengo que ayudarlo!

Nuestra platica fue interrumpida por Dragón negro quien se ubicó en medio de nosotros, tanto él como Shiryu se observaron de pies a cabeza admirando el potencial que cada uno derrochaba con sus poderes. Mis cadenas nuevamente se movían sin control, parecían indicarme que Dragón negro no era el enemigo a atacar, no obstante debía salvar a Seiya de aquel acantilado.

—Muy bien, me encargaré de Seiya, tu evita que Dragón negro te ataque con su peor ataque... "El Dragón oculto" — ate mis cadenas a una roca y me dispuse a bajar al vacío dejando a Shiryu para que el mantuviera el control de la situación.

[Shiryu]

—Espera... ¡Shun!

Lo que me dijo Shun me ha dejado un poco desapercibido, jamás había escuchado acerca de esa técnica, Dragón negro parecía burlarse de lo que estaba sucediendo.

—Tontos, cómo pueden saber si pegaso aún sigue con vida...es lo más ridículo que he visto.

—Pueda que tu lo veas de esa manera, pero nuestra amistad dice todo lo contrario — contesté.

—¿Amistad?, Nunca había escuchado sobre eso. Pero de lo que estoy tan seguro es que por eso vas a ser el siguiente en morir.

Esa risa burlona apareció de nuevo, Dragón negro se oculto y todo el lugar se tornó muy oscuro lo cual me complicaba ver hacia dónde se pudo haber ido. Intenté ocultarme pero desafortunadamente pudo darme un buen puñetazo el cual me hizo caer.

Y eso no era todo, me dio un fuerte golpe en mi estómago sin necesidad de mostrarse frente a mí, estaba en completa desventaja...sus ataques eran muy rápidos y certeros.

—¡Maldita sea!, cómo es que puede atacarme a oscuras — me cuestionaba a mi mismo.

—Vamos, tienes todo el derecho para atacarme, así que no pierdas más tu tiempo y lucha.

Un golpe por aquí, un golpe por allá, por más que quise frenar su ataque era imposible, Dragón negro me lo impedía, era como si estuviese ciego...

Un momento... ¡Ciego!
Su voz ni siquiera se oye de cerca, es como si... Me atacará desde lejos, ahora ya entiendo... A esto se refería Shun con ese ataque... sería difícil poder atinarle un golpe, de esto trata el dragón oculto.

Dragón negro me dejó tumbado en el suelo, me encontraba demasiado lastimando como para poder estar de pie.

—¿Eso es todo lo que tiene el famoso Shiryu de dragón? ¿Tantos años entrenando para nada?, Que desperdicio... Ahora te mataré.

—No cantes victoria aún, no hasta que acabe contigo. Pensaste que no ibas a atacarte sin recibir ni un solo golpe — poco a poco me iba poniendo de pie.

—Es imposible que me des un golpe, ya rindete.

—Quizas a ti no, pero a este otro si.

—¿Qué?

Bajo tan rápido la guardia y logré darle un fuerte golpe en su rostro, justamente lo que pensaba, habían dos dragones negros atacandome al mismo tiempo, menuda trampa.

—¡Hermano! — Dragón negro quedó atónito al ver a su gemelo caer derrotado al suelo.

—Como lo imaginaba, tú hermano era tus ojos en medio de la oscuridad, para así poder facilitarte el trabajo — Dragón negro no dijo ni una sola palabra. —Las cadenas de Shun le advirtieron del peligro que acechaba este lugar, tu y tu hermano planeaban una emboscada — me sorprende que mi armadura no había sufrido daño alguno por los ataques de dragón negro... Gracias Mu, por traer a la vida mi armadura.

—Muy bien Shiryu, esto solo fue el calentamiento... Ahora definiremos quién merece ser llamado Dragón — Dragón negro estaba dispuesto a darme guerra.

—¿Crees que vas a poder tú solo?

—No siempre vas a necesitar de alguien más — me responde mientras levantó su dedo anular. —Fíjate bien, con un simple dedo podré acabar contigo.

—No creo que tu hermano piense lo mismo.

—Eso a mi no me importa, ni siquiera tengo afecto hacia las personas — me sobresalte por su respuesta.

—¿Tan insensible eres?

—De todas formas solo servimos como máquinas de lucha, no tenemos confianza en nadie más que en nosotros mismos, ser confiado te hace vulnerable ante cualquiera que intente hacerte daño.

—¿Prefieres luchar contra mi por tu propia cuenta?

—No tengo miedo pillo, ¡vas a morir!

No me quedo de otra más que aceptar su desafío, di el primer golpe en su pecho, no obstante Dragón negro no sufrió ningún daño y eso me puso en alerta, me dio una patada en el rostro que me hizo caer de nuevo. Detrás de él varias réplicas me acorralaron dentro de un círculo haciendo más complicada la tarea de acabar con él.

Tan confundido estaba que no me fije para nada, solo usó su dedo el cual me lanzó hasta la parte superior de la cueva y terminé impactando contra el suelo.