Capítulo catorce
Nada más despertarme a la mañana siguiente, noté un cosquilleo sobre mi órgano viril. Efectivamente, me encontraba sin boxer y estaba succionando esa zona. Con tan solo pensar que le hizo lo mismo a ese cabronazo, sentía náuseas.
—Despiértate niño, despiértate ya que como despierte la loba sin pene te dejará —cantó la muy desgraciada.
Me incorporé de golpe, la tumbé a un lado bruscamente y me puse encima.
—Cómo me encantas así de bruto. Has tardado en reaccionar pero que sabrosa esa manera —me mordió el labio.
Le metí mi pene con tal fuerza que hasta gritó con furia —y sabía que en el interior le había hecho daño. Ni me había molestado en ponerme el preservativo—. Hasta los besos sabía que eran ásperos y groseros.
—Pues prepárate, que esto no ha hecho nada más que empezar.
Le hice el «amor» tan salvajemente y severo que solo me bastaron veinte minutos para que llegase al punto G. Nuestros corazones nos iban a salir por la boca y ella aulló de lo que había provocado.
—¿Ya se terminó el tenderete*[1]? —me miró con ganas de más—. ¿Cómo has tardado tanto? Si llego a saber que sacas esa rudeza dentro de ti te hubiese provocado mucho antes. Sigue, por favor te lo pido.
Aún encima le aparté la melena de la cara y la obligué a mirarme.
—Dime que me amas, aunque sea mentira —le susurré.
—Te amo —me mintió a la cara y a mi solo me vino a la mente una canción de Ana Mena feat RK.«Te amo bebe, mentira. Te he sido fiel, mentira. No te engañé, mentira. Óyeme baby, si te rascas más te pica». Mejor no le podía ir.
https://youtu.be/w1e1nneGrjA
—¿Por qué eres así? —objeté para ver por donde salía.
—Así... ¿cómo?
—Escúchame atentamente porque te voy a hacer una pregunta que no te voy a repetir ni una sola vez más —dije con firmeza.
—Adelante —me besó la mejilla y me miró.
—¿Qué sientes por mí? —puso los ojos en blanco puesto a que no se lo esperaba por nada del mundo, ni yo me esperaba ser tan directo en esa circunstancias.
—Muchas cosas.
—¿Qué cosas? —quise saber y la presioné—. ¿Amor?
—Me atraes, me divierto mucho contigo y bueno se pasa rico... pero, ¿a qué viene todo esto? —«Un juguete más, eso fui para ella. Solo pretendía pasarlo rico y el muy estúpido de mí, acabó enamorándose de ella».
https://youtu.be/AygqDlUGHLg
—¿Nada de amor? —repetí.
—Nada. ¿Esa era la pregunta? —me preguntó ella—. ¿A caso tu si?
—No, es otra —le dije—. Yo si estoy enamorado de ti —dolía confesarlo, y mucho.
Me acarició la cara y yo me aparté,
—No sientas lástima por mí, sino eres tú será otra —relaté desde la rabia. Esto último sabía que no le haría ni pizca de gracia pero, menos me hizo verla a mí la noche anterior.
—No, lo siento... ¿qué es lo otro?
—¿Quieres ser mi novia? —le propuse sin importarme las consecuencias—. A pesar de que no me ames.
—Esto no se iba a formalizar en ningún momento, pero sí. ¿Qué pasaría si lo intentamos? Pasaríamos a ser pareja pero con el mismo contrato de siempre —dijo sin más, como si no significase nada. «Estaba de tanto contrato hasta los mismísimos huevos».
—Que ahora paso de ser tu pareja, ¿sabes porqué? no quiero un amor a medias. Sabías perfectamente lo que significas para mi y no te importó lo más mínimo —me quejé enfadado.
—Tu también significas mucho para mi y claro que me importas. Solamente... no me lo esperaba. Te tengo mucho cariño y estamos muy agusto, ¿o me equivoco? —me acarició la mandíbula y yo la apreté—. Pero...
Me quité de encima y me vestí.
—No digas más, no quiero saber más —le exigí y ella se levantó detrás de mí.
—¿Pero que... carajo...?
—Tengo que irme, nos vemos —sacudí con la mano y la besé en los labios. No le di tiempo a más, porque cogí las llaves de mi coche y desaparecí. Dejándomela con la duda.
Lenguaje canario
*[1] Tenderete se refiere a una fiesta, juerga o diversión bulliciosa en que se come, se bebe, se charla y se canta.
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