[POV tn:🎭]

Estaba llorando, no mucho pero estaba llorando, maldiciendo mentalmente a Yuma e incluso, me regañaba a mi misma por verme débil...  Lo se, una completa estupidez.

Pero un golpe muy fuerte, sumado a la apertura repentina de la puerta se oyó, haciendome dar un pequeño salto.

También una gran preocupación y nerviosismo crecieron rápidamente dentro de mi.

Rápidamente me limpié las lágrimas y me escondí debajo de la cama para que no vean mi cara por la vergüenza que sentía, la cuál era mucha por cierto, mientras me abanicaba la cara con las manos para que se me valla lo mas rápido posible ese color rojo intenso que tenían mis mejillas, pero al parecer no tenia intenciones de irse.

De verdad odiaba que me viesen llorar, es una de las cosas que más odio ¡Y para colmo no vi quién fue el desgraciado que entró sin permiso!

¡ARGH ESTE DÍA NO SE PODRÍA PONER PEOR! Quisiera que me tragara la tierra o algo parecido.

—¡¿QUIÉN MIERDA ENTRÓ Y POR QUÉ NO TOCASTÉ LA MALDITA PUERTA?! ¡POR ALGO EXTISTE!—

[POV Yuma.🍎]

Rodé los ojos y me acerqué a la cama. ¿En serio es tan estúpida para esconderse y rebelarme prácticamente su ubicación a los dos segundos? Vaya que sí lo es.

Alcé la cama y la volteé hacia otra parte que no vi bien. Mi vista desde un principio se había centrado en ella.

—Oe, cerda, necesito hablar contigo.—  Le dije sin rodeo alguno, mirándola fijamente de forma severa.

Claro, tengo que decir que ese "arrepentimiento" estaba desapareciendo, esas ganas de matarla y dejarla seca se estaban apoderando de mí nuevamente.

Tengo qué controlarme, si la mato mis hermanos dejarían llover millones de regaños sobre mi, en especial Ruki. Agh. Qué molesto es a veces...

Nuevamente la detallé y noté que estaba roja. ¿En serio humana? ¿En serio? Vaya que si puede ser mucho más estúpida que la cerda-rubia. De todas formas, todas las humanas son iguales. 

-Arreglado