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Namjoon se había puesto a leer más de ese libro, para despejar su mente de Seokjin. Mientras avanzaba en ese capítulo había entendido qué eran esos famosos “vampiros energéticos” llamados así por su peculiaridad, el cual consistía en absorber el poder de otros seres, seres especiales como su hermano.
Entendiendo así que por el mundo habían más personas con poderes peculiares, pero que también existía un gran peligro para ellos. Pues una vez perdiendo la energía especial que llevan dentro, el cuerpo quedaría como un cascarón vacío y en poco tiempo morirían.
Ahora entendía el por qué sus padres eran tan reservados, pareciendo gente humilde al exterior, con una cafetería sencilla. Mientras que detrás eran un monstruo, con más dinero del que imaginaba la gente y contactos que ni él conocía pero sabía eran poderosos.
Pensó que seguramente en su historia familiar, al menos en el de la rama principal debió haber ocurrido algo para que se vuelvan más sobreprotectores con Tae.
-Llama a tu hermano y al señor Kim para que bajen a almorzar- decía su padre al ingresar a su despacho sacándolo de sus pensamientos
-Tae no está en condiciones- respondía en tono bajo
-Pues ayúdalo a que lo esté, debemos ser buenos anfitriones con nuestro invitado – hablaba levemente enojado cerrando saliendo al instante con paso apresurado haciendo rodar los ojos a Namjoon
“A veces siento que Tae no les interesa en absoluto” – pensaba dirigiéndose arriba en busca de su hermanito
Tocó la puerta suavemente, al no recibir respuesta decidió ingresar con cuidado. Encontrando a su hermano completamente dormido, viendo con preocupación las lágrimas secas que se hallaban en sus mejillas.
“Desearía poder hacer algo para que dejaras de llorar”- pensaba mientras acariciaba el cabello despeinado de Tae
-Despierta pequeño, es hora de almorzar – decía en tono suave
Tae al sentir un calor en su mejilla se removía inquieto soltando un - unos minutitos más Hyung- con su voz rasposa haciendo un puchero
-Vamos debes alimentarte lo dijo el doctor – destapaba de golpe el cuerpo de Tae haciendo que este se haga bolita en la cama tratando taparse con algo invisible, pareciéndole demasiada tierna la escena a su hermano.
-Además tenemos a un invitado especial- recalcaba con dolor en el alma pero con una sonrisa por fuera
-No me interesa – respondía secamente dando la espalda a su hermano sin levantarse aún de la cama.
- Pues debería… es … quien te ayudará con …- no pudo terminar de hablar pues Tae lo interrumpió.
-QUE?! YA ESTÁ AQUÍ?!! – giraba de golpe claramente afectado por la noticia – No estoy listo, ¿por qué tan pronto? ¿No sé supone que es mañana la ceremonia? –
-Nuestros padres creyeron que era mejor que llegaste antes para que puedan conocerse mejor y puedan … puedan – Namjoon simplemente no podía terminar la frase, pese a que sabía que sólo sería una vez, algo dentro de él no lo dejaba tranquilo y dolía, malditamente dolía demasiado.
-Para que me pueda coger? – decía Tae con algo de asco en sus palabras.
-No seas vulgar – reprochaba.
-Pues es lo que hará, y no pienso adornar mis palabras, acaso no entienden que no quiero? – se ponía a llorar otra vez.
-Sabes que es por tu bien-
-Lo sé!!! … Pero… pero… me da miedo – confesaba, si antes le causaba miedo estar con alguien desconocido, ahora le causaba pavor debido a lo que pasó con Jimin, si alguien que conocía lo había tocado de esa manera y había sentido asco y temor, no podía imaginar lo que sentiría si un desconocido lo iba a tocar de esa misma forma y quizás hasta peor.
-Es normal sentir miedo, más cuando será la primera vez, pero te aseguro que no te pasará nada malo – trataba de reconfortar a su hermano.
-Cómo lo sabes? Ni siquiera lo conoces – lo retaba.
-Bu…bueno – hablaba inseguro de responder con la verdad, aunque había hablado con su hermano la vez que se sintió mal por Seokjin pero estaba seguro que Tae ya debió olvidar su nombre, además sólo le había mostrado su foto una vez.
-¿Lo conoces?-
-Lo fui a recoger al aeropuerto, así que sí- mentía campalmente.
-Bah eso no me ayuda – bufaba levantándose de la cama – bueno a mal paso darle prisa, me daré un baño en un momento estaré abajo – decía dirigiéndose al baño totalmente desganado.
Namjoon salió de la habitación del menor bastante preocupado por toda la situación.
Llegó antes el cuarto de huéspedes dónde se encontraba Jin. Golpeó levemente la puerta.
-Seokjin Hyung, el almuerzo está servido, baja en cuanto estés listo... Toda la familia está esperando – hablaba tan rápido que no sabía si el otro lo habría entendido.
- Está bien, gracias Hyung - se escuchaba al otro lado de la puerta-
Tae al fin salía de su cuarto, deseando no haber tardado demasiado pues no estaba de ánimos para recibir más riñas de sus padres.
Bajando las escaleras rápidamente, se dirigía al comedor central, realmente todos se encontraban ahí, sus padres su hermano y una persona que estaba de espaldas a él, suponiendo que era el susodicho.
-Tae! Al fin bajas, por favor toma asiento, sólo faltabas tú para empezar el almuerzo – decía su padre haciendo rodar sus ojos.
-No tenían por qué esperarme, debieron empezar sin mí, la comida se enfría – respondió seco llegando a su lugar ganándose una mirada furiosa de ambos padres.
-Por favor disculpe a mi hijo, él no se ha sentido muy bien estos días- excusaba a su impertinente hijo ante el invitado mientras Tae bufaba obviamente enojado.
-Tae él es Kim Seokjin, será el que te ayudará en la ceremonia de mañana –
Al escuchar el nombre Tae rápidamente levantaba la mirada, para encontrarse con la mirada del hombre frente a él. No pudo entender lo que sintió en cuanto sus ojos se conectaron con esos ojos negros que parecían escrutar su alma. Sintiendo una sensación extraña en todo su ser, que por más que quisiera no podía apartar la mirada.
-Mucho gusto – decía Jin con una voz muy dulce.
-I…igualmente- lograba responder Tae sintiéndose lo peor porque su voz se había escuchado demasiada entrecortada y apenas audible.
-El es muy tímido sepa entender- explicaba su padre haciendo que Tae bajara la mirada totalmente sonrojado, en otras circunstancias habría callado a su padre pero esta vez extrañamente no podía, simplemente no había esas ganas de contradecirlo porque realmente se sentía muy tímido ante esa mirada.
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Holas acá les dejo otro capítulo 😏
Espero les esté gustando 🙈
Gracias por su apoyo, ya saben que sus 🌟 y comentarios alimentan mi inspiración 😌 💜
Bye 😘
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