42.
Empuje la puerta de la farmacia para salir de esta con aquella bolsa en mis manos.
Nunca pensé que algún día entraría a buscar cosas como lo que necesita mi novia. El lugar no estaba lejos de la casa así que fui caminando. Gracias a la tecnología y a Jinyoung, sino me hubiera pasado el día entero en esa farmacia sin saber lo que decían los productos.
Estaba llegando a la casa y vi un auto estacionado en frente de esta. Acelere más mi paso, vi la silueta de un hombre que iba hacia la puerta, y tocó.
Al saber quien era me apresure en llegar y cuando iba a tocar el timbre tomé su muñeca.
-¿Qué crees que haces?- lo empuje soltándolo y poniendome de espaldas a la puerta.
-Vengo a hablar con Kely, amigo, así que muevete - puse mis manos en los bolsillos de mi pantalón y cuando quiso pasar le bloqueé el camino con mi cuerpo, rió de lado y se echó hacia atrás.
-Kely no quiere verte, así que será mejor que te vayas- dio zancadas para volver acercarse a mí e hizo puño su mano con la tela de mi camisa entre ella- ¿Me vas a pegar?- volteé el rostro- Adelante - lo único que hizo fue empujarme soltando la camisa.
La sacudí con mi mano y volvi a la misma posición de antes.
-¿Quien carajos eres?-
-¿Yo?- me encogí de hombros- El novio de Kely- me miró de arriba abajo y rió de lado.
-Oh, ya veo, no me extraña viniendo de alguien tan poco como ella, alguien que no vale la pena, ya después hablaré con ella, suerte amigo- y aquella sonrisa asquerosa seguía en su rostro. Dio media vuelta empezando a caminar pero la bolsa en mi mano se la lancé dándole en la espalda y haciendo que se detuviera.
-Pensé que eras el cesto de la basura, disculpas - me acerqué a él- Espera no, no tengo porque decírtelas- un dolor se hizo presente en mis nudillos cuando mi puño dio contra su mejilla haciéndolo caer al suelo- Aquí el que vale una mierda, eres tú, pegarle a una mujer, eso solo lo hacen los hijos de puta, como tú - lo señalé- Y no te quiero cerca de mi mujer- recogí la bolsa y di media vuelta para ir de vuelta a la casa y me detuve al ver a mi chica en la puerta.
Miré por encima de mi hombro y apreté mis labios para luego seguir caminando e ir hacia ella.
-¿Qué haces levantada?- debió su vista de mis ojos y tomó mi mano, en donde mis nudillos estaban rojos.
-Debe de doler -apretó sus labios y volvió a mirarme- ¿Por qué lo hiciste? No vale la pena, a personas como él se le ignoran- me jaló del brazo para que entrara en la casa, me llevó con ella a la cocina.
-¿Cómo te sientes?- dejé la bolsa encima de la encimera, ella no se había dado cuenta.
-El dolor esta pasando- se acercó al refrigerador y echó varios cubitos de hielo en una bolsa- Tu mano- extendió la suya y tomé la suya atrayéndola hacia mí tomando sus labios entre los míos.
De una manera lenta y a la vez tierna, pero por la falta de ese componente químico tuvimos que separnos no sin antes morder levemente su labio.
-¿Qué tanto oíste?- pregunté y ella se separó de mí volteando mi mano para poner aquella bolsa encina del dorso de esta, hice una mueca de dolor.
-Todo- volvió a mirarme- Nunca me dormí- negó y sonrió- Te oí hablando con Junior, preguntándole en donde había una farmacia y que tenia que ayudarte con las cosas que comprarías- desvío su vista a la bolsa- Pero te diré algo mi amor, creo tener suficiente de todo lo que hay en la bolsa- me encogi de hombros.
-Ahora tienes más- volví a besarla sintiéndola sonreír encima de mis labios.
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Nunca me cansaré de besarla. Ambos estábamos encima de la cama. Como dice ella, en nuestra sección de besos.
La mitad de mi cuerpo estaba encima del suyo y escondí mi rostro en su cuello empezando a dejar besos en este. Los dedos de su mano de enredaban en mi cabello mientras me daba leves masajes en mi cabeza.
Aquel tema de ese hombre decidimos pasarlo, y fue lo mejor, no quiero atormentarla y mucho menos hacer que recuerde los momentos que pasó con él.
-¿En que piensas?- habló, haciéndome traer de vuelta a la realidad.
-¿Qué?-
-Dejaste de darme besitos- dijo con voz de niña mientras señalaba su cuello y reí.
-Pensaba en ti, cuando lo hago, todo se me olvida- me subí por completo encima de ella, sin llegar a poner todo mi peso- Te amo-
-Lo sé- dejó un beso en mi nariz - Yo también me amo- estalló en risa mientras cubría su boca.
-Eres insoportable ¿Sabías?- asintió sin dejar de reír.
-Comportate chico Poker- me señaló y volvió a reír.
-A veces pienso que deberías de esta en un psiquiátrico- tomé sus manos poniéndolas encima de su cabeza.
-Tal vez-
-Te salvas porque estas en tus días mi vida, sino te estaría empotrando en estos momentos contra la pared, y de esa linda boquita estarías gritando las palabras que más me gustan oír mientras te follaba-
-Ten cuidado, estoy segura que el que más saldrá perjudicado serás tú- levantó su cabeza para pasar su lengua por mis labios.
Joder me estaba excitando y mucho.
-¿Qué? ¿Ya?- preguntó con burla y desvío su vista a mis pantalones-Te lo dije- abrió sus piernas y abrazó mi cintura- Que lastimas que no se pueda- volvió a levantar la cabeza y besó mis labios liberando sus manos- Hay bastante agua fría en el baño- me guiño el ojo y se liberó de mi levantadose de la cama.
Salió de la cama y reí de lado haciendo mis manos puños.
Me levanté de la cama y corrí hacia el baño, tocara hacerlo solo.
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Volví a tomar de aquel té e hice una mueca de desagrado. Pica demasiado.
Después de tomarlo todo rápido tomé una rebanada de tarta de limón y lo comí para que aquel sabor se fuera de mi boca.
Volví a guardar el resto en el nevera y lavé el vaso en donde había tomado el té, di media vuelta y me detuve al ver a Taehyung entrar a la cocina con solo unos shots dejando su torso desnudo y su cabello mojado.
-No te burles- apreté mis labios mientras llevaba mís manos hacia atrás, él tomó una manzana del frutero.
-No iba a hacerlo- me acerqué a él- Quería preguntarte algo- asintió para que continuara- ¿Cómo sabías que el té de jengibre ayuda para los dolores de ovario?-
-Ah, Nana siempre me enseñó sobre las plantas medicinales, aunque el jengibre tiene diversas propiedades, es utilizado en varias cosas, en varias ocasiones lo he utilizado para cocinar-
-Oh- él me sonrió.
-¿Estas segura que no tienes dolor?-
-No, eso me ayudó muchísimo, ya recientemente tomé otro poco por si vuelve el dolor-
-Esta bien- se acercó a mí, dejando la manzana en la encimera y tomó entre sus manos mis mejillas- ¿Quieres salir? Tomar un poco de aire-
-Si, caminar un poco me haría bien- le Sonreí poniendo mis manos encima de las suyas
-Vamos- tomó mi mano y salimos en la cocina pero la puerta siendo abierta nos detuvo.
-¡Llegamos!- Taehyung y yo nos miramos y suspiramos para luego mirar a aquella otra pareja que entró a la casa.
....
Repito, quiero un novio así!!!!
(ʘ‿ʘ)
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