Capítulo 1: La misericordia de Dios
|| A V I S O ||
* Al ser un fanfic tendrá ciertos cambios en la historia, obviamente se tratará de beneficiar a todos los personajes; por su comprensión, gracias.
---La sombra de las cruces Parte 1--
Años atrás...
Termine de pasarle la benda por la cabeza Luke, a pesar de nuestro esfuerzo por escapar desapercibidos, las leyes de Marley ahora nos perseguirían
0 para siempre. Si bien, en ese entonces Luke y yo jamás imaginamos el error (y milagro) que se produjo cuando llegamos a Shiganshina.
Famelicos y con heridas, logramos pasar desapercibidos entre la gente; el caos formado por titanes a los cuales nos iban a condenar, fue de apoyo para evitar ser registrados o cuestionados. Alcanzamos a entrar en uno de los barcos por fortuna, llanto, horror, sufrimiento y pena, era lo que más había en ese sitio.
-Lamento tanto todo esto.-me susurró Luke-No esperaba que fuera así. -el me miró las rodillas raspadas-Maldición...
Me bajo la falda y miró a Luke del rostro, tiene una cicatriz que le atraviesa la ceja izquierda.
-Ninguno de los dos lo sabía.-me limitó a decirle
Ambos llevamos la gabardina sobre nuestras cabezas, su cabello es plateado y sus ojos azul celeste, para tener 14 años es más alto que yo por dos cabezas. Al contrario de el, tengo el cabello rojizo y mis ojos son color miel, bastantes llamativos como los llamó la mujer de la subasta.
-¿Crees que nos busquen, aquí?-susurró casi como para mí
Los ojos de Luke se ensombrecen, sabrá Dios como fue que me encontró. Sabrá el, como fue que sabía de este lugar.
-. El ataque fue hoy, tienen cosas más importantes que fijarse en si una sustituta y ... bueno, algo como yo...-murmuró
-Luke-le llamó y su mirada cambia-Estamos bien ahora.
Me mira por unos segundos, se limita asentir lentamente.
-Solo te protegere a ti, Leah.-jura-¿Confías en mi?
Cuando conocí a Luke, creí que era un chico solitario, pero la segunda vez que lo vi, supe porque lo tenían apartado de todos.
Las sustitutas eran mujeres, la mayoría más fuertes que los hombres, aquellos que nacían con los dones los volvían enuncos, otros los usaban como consortes para la Electriz en Marley, los sobrantes eran enviados a la sala de investigación militar. Todo esto, tras un examen a todos, por igual.
Pero, Lookwod Krandest no tenía documentos, no había nada de él. Por más que quise saber, las mujeres que prestaban atención a las sustitutas, cambiaban de tema o se ponían muy nerviosas. Hasta que lo experimente.
A mis ojos Luke era el joven más fuerte, no habían hecho nada mejor, que poner a un niño como zona de experimentos y que el fuera verdugo, sin comprender el bien o el mal. Hasta que nos vimos, a mi me llevaban al mismo salón de disciplina al que lo llevaron a el cuando se negó a seguir con los análisis, al siguiente día sería vendida a alguien de la aristocracia o del banco, incluso a la misma Electriz.
Me había salvado y el decía que yo a él también, que algún lazo nos unía, pero, que debía esperar para saberlo. Que todavía no estaba lista y que necesitaba confiar en el.
El centro de retención fue nuestra prisión y tortura, llegar a Shiganshina, no lo se.
-¡... Los mataré a todos!-sentenció alguien a cierta distancia de nosotros
Luke me acomodó el gorro y me obligó a sentarme a su lado. Vague mi vista entre los presentes hasta encontrar la voz del niño. Lloraba de una forma desgarradora y su dolor se reflejaba en la impotencia.
-Eren...-susurró un chico rubio a su lado, desconcertado
"Eren" convulsionó en sollozos, trague saliva tratando de deshacer el nudo que se me había formado en la garganta. Era culpa de Marley, era culpa... ¿De nosotros?
La mano de Luke sobre la mía me sacó de mis pensamientos, este observaba frente a el sin un punto fijo, me dio un apretón.
《Estaremos bien》
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