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28 - Benedict Edward Hardy

Pasaron algunos meses, en realidad pasaron ocho largos meses, la gira se extendió por todo el país y debo admitir que me convertí en un gran manager. Ahora estamos volviendo a casa en un vuelo de emergencia ya que Hanna esta en el hospital, al parecer nacerá el pequeño Benedict, si decidieron ponerle Benedict Edward Hardy, me gusta que así sea y espero que el universo le de herede lo maravillosa persona que fueron de quienes heredó el nombre.

Miro a todos los hombres que están a mi alrededor y siento que al fin soy parte de la banda, estaremos un mes en casa para descansar y luego salimos en una gira mundial donde muchas localidades ya están agotadas. Por eso este descanso es bien merecido para todos nosotros.

Llegamos al departamento de Daniel y que estamos acostumbrados a estar juntos, pocas veces estamos separados, a decir verdad cuando él está sobre el escenario y yo espero en el camerino cuando estoy agotada, el trabajo de un manager es muy arduo, como comento en algún momento Ben, me transforme en una suerte de madre que normalmente los cuida.

- Me envió un mensaje mi padre – comenta mi novio saliendo del baño

- ¿Ya nació? – pregunto mientras me libero de los zapatos que aprisionan mis pies

- No, esta en una sala esperando con mucho dolor, Tom quiere prender fuego el hospital, papá está con Ligeia en la cafetería, si queres descansar quédate a dormir un raro, ya es tarde y no se cuanto se pueda demorar todo esto – me dice y niego

- Claro que no, quiero estar ahí con Hanna, no quiero perderme de conocer a mi sobrino, vamos, sabes algo de Clint? – cuestiono al final y el asiente, supongo que debe estar comprando la nafta para que Tom prenda fuego la clínica

- Esta con mi hermano – dice y asiento

Llegamos al hospital y vamos donde esta nuestra familia. En el camino le avise a mi madre que llegó rápidamente con Harvey, me alegra tanto verla feliz, mi hermana no se apareció por el hospital, esta en esa época adolecente donde no te importa nada y a decir verdad lo agradezco, porque estar aquí quejándose de lo que demora un bebe en nacer sería el colmo de la idiotez.

- ¿ como están, cuándo llegaron? – cuestiona Sussan ni bien llegamos a ellos, no respondo me sorprende no encontrar a Clin

- Hace menos de una hora – responde Dan a mi lado que impaciente pregunta lo mismo que yo me pregunto - ¿Dónde está Clint?

- Esta junto a Tom, no los dejan entrar hasta que Hanna tenga la dilatación necesaria, aparentemente el niño es muy grande y ella es pequeña – dice y Dan frunce el seño

- Pequeña? Si tiene casi treinta años

- Pequeña vaginalmente – le susurró y este abre la boca y se pone rojo como un tomate

- Entiendo, pero no quería saber tanto – dice sonriendo

- Entonces que van hacer? – pregunto poniéndome inquieta

- Van a intentar parto natural y de lo contrario una cesárea de emergencia, todo se da para que sea natural, pero el bebé es muy grande – nos dice Sussan y ambos asentimos

Después de algunas palabras compartidas para tratar de despejar la mente Daniel decide ir por algo para tomar, están pasando muchas horas y es insoportable la espera y nadie nos dice nada, aun no vemos a Clint y mucho menos a Tom, no sabemos que esperar.

- Todo va estar bien –  escucho que James le dice a Ligeia mientras ella asiente, hace dos meses Sara le otorgó la custodia a Tom para no perder la casa donde vive, ahora la niña vive junto a Thomas y Hanna en la cabaña que tienen lejos de la ciudad y todo el torbellino de Los Angeles.

- Aquí esta tu café – me dice Dan a mi lado cuando vemos llegar a un hombre con el paso rápido hasta donde estamos nosotros

- Familiares de Hanna Rogers – me levanto y respondo antes que nadie

- Soy su hermana – claro que no pensé lo que decía pero en este tiempo ambas logramos formar un vínculo intenso e increbantable, pasamos por momentos difíciles y nos enojamos muchísimo, la una con la otra, todo eso hizo que hoy aprendiéramos a entendernos y a fortalecer el vínculo.

- Bien, tu padre y cuñado están con ella – me dice y asiento mientras todos están a nuestro alrededor – el bebé se está quedando sin oxígeno y ella sufrió un desmayo, no podemos realizar un parto normal ya que ella está cansada y al ser estrecha la desgarraría, el bebé es bastante grande, vamos a realizar una cesárea de emergencia – dice y asiento, me preocupa lo de emergencia no de como tomarlo

- ¿Corren riesgos? – pregunto mientras lágrimas caen por mis ojos, siento que Dan me abraza y deja un beso en mi cabeza, veo las caras de todos los que nos rodean y están preocupados… claro que lo estan. Si algo le pasa a Hanna, Tom se muere y si algo le pasa a ese bebe ambos se mueren

- Es una cirugía mayor, siempre hay riesgos, pero vamos a tratar que todo este bien, si les sirve saberlo ella está consciente, lo estará en la cirugía solo dormiremos la mitad de su cuerpo, la mitad inferior – dice y todos asentimos

Tom

Las horas en el hospital se están haciendo eternas, la desesperación de no saber como ayudarla me agobia constantemente. Sudor corre por su frente y esta agotada, cuando intentaron realizar un parto normal sufrió muchísimo y se desmayó, ya rompió bolsa y estamos esperando al anestesiólogo para que de comienzo a la intervención, tocó sus brazos y se sienten fríos, miro a mi alrededor y no tengo nada con que cubrirla. Algunos médicos vienen ocasionalmente y revisan su abultado vientre y sus signos vitales, tiene un montón de cables en su pecho para ver el correcto funcionamiento de su corazón y otros tantos en su panza para escuchar los latidos de nuestro hijo.

- Señor, usted estará en la cesárea de la señora? – cuestiona la obstetra que atiene a Hanna

- Si, claro que si – respondo a su pregunta estúpida, parece que no se dio cuenta que casi destruyó la sala de partos cuando mi mujer perdió el conocimiento

- Bien, Acompáñame, las enfermeras ayudarán a su esposa para que el anestesiólogo pueda darle anestesia y así estar lista para la cirugía. Le comento que una de mis especialidades es ser cirujana, por eso mismo yo seré la encargará de traer al mundo a su hijo una vez esté todo dispuesto – vuelvo asentir, estoy enojado que todo demore tanto, Hanna no para de llorar del dolor, en momentos se duerme del cansancio, siento que mi familia pende de un hilo y a su vez mi hija espera afuera

- Bien – respondo seco mientras limpio la lágrimas de mis mejillas

- Solo le recuerdo que si es una persona que sufra de ataques de pánico la sala de partos no será un lugar donde se sienta seguro – acota

- Tranquila, sufro de TOC severo, si tengo alguna intrusión los mataré a todos pero no me voy a desmayar – digo serio y veo como se va sonriendo

Cuando llegan las enfermeras y el bendito anestesiólogo me “invitan” a salir para prepararme.
Al salir veo algunas enfermeras mirándome de arriba abajo – cuando le cuente a mi mujer como me miran, no le va a gustar – digo y viene una mujer que me recuerda a mi psicóloga, una enfermera supongo, intimidadora, de robusto tamaño y me sonríe con maldad  antes de abrir la boca – usted es muy lindo señor, pero aca las chicas miran que no tenga nada peligroso para la sala de cirugía que está previamente esterilizada para que cuándo su hijo nazca no llegue a él ningún virus antes de la primer vacuna que le daremos – dice y me siento un completo imbécil – lo siento – digo por primera vez en mi vida – no se preocupe, aunque viéndolo bien su esposa tiene suerte – dice mientras termina de ponerme la ropa de medico o de marido mejor dicho, suena lindo, tal vez algún día…

Pasaron algunos minutos y me invitan a entrar en la sala donde ya esta Hanna, veo esta cubierta de una tela verde y esta deja entre ver su vientre, los médicos actúan con normalidad mientras Hanna esta aterrada, cuando me acerco a ella veo que esta atada y siento que la ira me invade

- ¿Porque te ataron? – digo mientras siento que la ira me invade completamente

- La atamos porque la anestesia aplicamos no es general, su lado superior reacciona en defensa del posterior, haciendo que los nervios hagan que se mueva y así todo su cuerpo se mueva en defensa de lo que podría pasar, ocurre esto porque sus nervios están dormidos y la anestesia se aplico a través de la columna – en ese momento veo que Hanna mueve los brazos sin darse cuenta y asiento mientras el hombre sigue explicándome – cuando el médico haga la incisión necesitamos que este quieta para cortar las siete capas que separan el exterior del lugar donde se encuentra su hijo.

- Tranquilo, ya me siento mejor – me dice tratando de tranquilizarme mi chica valiente mientras esta atada en esa cama.

- Lo estoy – miento y el junto al medico que entiendo por su explicación que es el anestesiólogo

- Tranquilo, ambos son padres primerizos? – cuestiono y Hanna asiente, yo la imitó porque aunque Ligeia es carne de mi carne, o almenos así la siento. No fue lo mismo, Sara no me aviso que había nacido mi niña. Supongo que trato que sea el padre biológico quien esté con ella, l no lo se.

- Tranquilos los dos, ahora es cuestión de segundos…

Pasan minutos y escucho voces indistinta, cuando una voz femenina – bienvenido Benedict Edward Hardy al mundo – no pasaron ni segundos cuando un enfermero de neonatología se acerca a nosotros y coloca a nuestro hijo en el pecho de Hanna,

- Es hermoso – me dice besando su pequeña cabeza – hola Ben, soy mamá y el es papá – dice mientras sonríe y llora de felicidad

- Hola campeón, estoy nunca orgulloso de vos, como luchaste para llegar a este mundo, como cuidaste a mamá, ahí afuera tu hermanita espera por conocerte pequeño – susurró cuando de golpe le sacan al bebe del pecho a Hanna y se lo llevan, no espero que me digan nada y lo sigo, solo escucho la voz cansada de mi mujer

- Tom,  que esta pasando Tom que pasa con mi hijo? – cuestiona y le grito, no me interesa nadie más que ella y el
- En cuanto lo sepa te digo

Sigo caminando tras el neonatologo y nadie se interpone en nuestro camino, esto me da mala espina. Entramos en un lugar donde nadie me habla pero me miran con lastima. ¿Lastima? ¿Por qué con lastima? Me pregunto hasta que llegamos a un lugar con muchos instrumentos

- Tiene liquido amniótico en la nariz y boca, me di cuenta cuando estaba sobre el pecho de su madre, necesito sacárselo, si lo traga o aspira puede ser perjudicial – indica y asiento – ahora, es una política del hospital cortar el cordón umbilical después que el niño tenga algunos cuantos minutos de vida para que todas los anticuerpos que su madre le brindaba en su cuerpo se los siga dando un tiempo más, este es tu momento papá – me dice mientras me da unas tijeras, no me da tiempo a pensar y hago lo que me indica, corto el cordón y ellos se encargan de lo que sigue.

- ¿Y ahora? – cuestiono más tranquilo

- Ahora anda con tu mujer que debe estar en su habitación, explícale lo que paso y que se quede tranquila que tiene un hermoso y grandote hijo de 3.800 gramos y 61 centímetros, será un gran niño – dice y sonrio

Cuando salgo del lugar me sacan todo el traje que me habían puesto previamente y lo tiran en una bolsa, veo a mi suegro llorando hecho un mar de lagrimas

- Tom, que paso, hace horas que están ahí –  me dice y lo abrazo fuerte, sintiendo y dándole todo el amor que estoy sintiendo

- Felicidades abuelo, Benedict ya esta entre nosotros – le digo y su llanto se vuelve de alegría

- Gracias Tom, gracias, como esta mi hija? – cuestiona

- Muy cansada – ahora la llevan a la habitación y podemos verla un rato, aunque no se el horario de visita – le digo

- Si no me dejan ver a mi hija y a mi nieto prendo fuego la clínica – dice levantando la voz para que todos lo oigan

Daniel

Todo esto es tan lento, estoy tan nervioso, trato de mostrarme tranquilo para Ligeia que duerme en mi regazo mientras Nahir esta apoyada en mi hombro. No quisiera estar en los zapatos de mi hermano en este momento, si yo me encuentro al borde de la locura y solo soy el tío, no quiero ni pensar en como se encuentra el.

- ¡YA NACIO! – grita Clint viniendo a nosotros y Sussan se abraza a el

- ¿Como fue todo? – cuestiona Nahir que se para enseguida y Donna la toma del brazo

- Es enorme lo pude ver unos minutos en los cuneros antes que se lo lleven a Hanna, pesa casi cuatro kilos y mide poco más de sesenta centímetros – indica

- Lo hizo bien mi hermanito mayor – digo ganándome muchas malas caras y un codazo de Nahir, Clint me mira fijo y con odio, no era mi intensión recordarte que su hija y mi hermano tienen sexo, pero bueno – lo siento Clint, no te quise ofender – indicó

- No pasa nada… esta vez – me dice y deja entre ver una sonrisa disimulada

En turnos entramos a ver a la nueva familia, papá y Ligeia son los primeros, la niña salió completamente enamorada de su hermano menor. Después entró Clint y Sussan y así fueron entrando todos de a poco y más tarde se iban yendo sabiendo que todo al fin estaba en orden y estábamos tranquilos. Al fin nos toco el momento de entrar a nosotros y al fin poder conocer al pequeño Benedict

- Hola pequeño – saludo a mi sobrino que esta en brazos de su papá – ¿puedo? – cuestiono y mi hermano asiente con la cabeza mientras cuidadosamente me entrega a mi sobrino, es pequeño y tan blanco como Hanna pero el pelo es claro como el de Tom.

- Hola, lindura, soy tu tía Nahir – comenta mi chica que se acerca a mi después de abrazar a su amiga, debo admitir que me llene de ternura verla tan cariñosa con un bebé

- Es perfecto – le digo y ella asiente - ¿Queres uno? – cuestiono y ella me mira fijamente

- Si, claro que si, en algún momento seria lindo tener un pequeño saltamontes nuestro – comenta sonriendo,

- Entonces es el momento – le digo y sacó la algo de mi bolsillo – Nahir Biagini, estamos juntos hace más de dos años, sufrimos algunos tropezones, nos caímos y nos levantamos, aca junto a las personas que más amo en mi vida y junto a la persona que más voy amar en el universo junto a nuestros futuros hijos, mi sobrino – indico mirando que hombrecito en mis brazos. Ve a mi hermano recostado junto a su mujer y esta con las manos en su boca – me concederías el honor de cuidarte cuando estés cansada, de estar ahí para vos los días que no salga el sol, acompañarte con el café de la mañana y el te antes de dormir. Vos me completas en cuerpo y alma, sos el amor de mi vida y se que juntos podemos contra todo y todos, con mi familia de testigo te hago esta pregunta de lo más profundo de mi corazón y con todo mi amor… ¿Te gustaría casarte conmigo? – digo después de todo el preámbulo que invente ya que la idea era hacerlo en otro momento, pero que mejor momento que en el nacimiento del pequeño Benedict…

- Claro que si Dan, claro que si – me dice y se tira sobre mi sin aplastar al bebe que aun cargo pero sin esquivar el camino a que nuestros labios se besen enamorados.

- Felicidades!!! – escuchamos de fondo y me percato que Tom me saca a Benedict de los brazos y Nahir termina sobre mi regazo

Hanna
30 días después.

Se supone que la maternidad es puro amor, paz y alegría. Pues no, me duelen los pechos, cuando Ben toma de uno del otro sale liquido, tengo olor a vómito, no tengo tiempo de bañarme, ayudo a Ligeia con sus tareas, atiendo a nuestro hijo pero siento que me perdí en el camino, ya no tengo tiempo de arreglarme. Tom se dio cuenta que mi pelo negro no es natural, las raíces más claras se notan, no me puedo ni siquiera sacar el esmalte de las uñas.
Tom se encarga de todo lo referido a compras y de ir y venir con Ligeia del colegio, pero me siento insegura, insegura de mi misma necesito bañarme y estar una hora sin niños. Adoro a mi hijo con todo mi ser, pero creo que en mi empeño de ser una madre presente hice que fuera imposible que estuviera con alguien aparte de mi. El se adueñó de mis pechos por ser su alimento y yo cada vez siento que estoy atada a la maternidad y estoy dejando de ser yo. Supuestamente la maternidad es hermosa, o eso dicen las revistas. Pero no lo es, necesito un momento a solas para mi, un momento intimo con Tom. Hoy mi pequeño cumple un mes, no quiero ser mal interpretada, lo adoro, pero siento que en el camino me perdí a mi misma

- Hola bonita – me dice entrando por la puerta de nuestra pequeña cabaña donde los cuatro vivimos tranquilos, salvo por mis momentos de ira donde me veo revelsada y quiero irme – hoy viene Nahir junto a Dan – me tira así porque si

- Hoy? – respondo desganada – estoy cansada, de verdad no tengo mucho tiempo de preparar comida y tener a los niños dormidos y bañarme a tiempo – comento y noto lo cruel de mis palabras – no me mal intérpretes amor, yo realmente disfruto del tiempo que compartimos con Nahir y Daniel, pero aun no le encuentro la vuelta a todo, mírame, soy un asco, me da vergüenza que me vean así – digo y una lágrima correr por mi mejilla

- Es normal sos una mamá hermosa y estas aprendiendo a lidiar con todo esto – me dice y asiento, pero de igual forma no me siento preparada para esto, no ahora.

- Quiero hacer el amor – le digo pensando en los días que tenemos que estar en abstinencia

- Yo quiero hacértelo, solo faltan quince días, ahora anda a darte un baño, si podes congela algo de leche para Benedict, hoy Nahi y Dan van a cuidar a los niños mientras usted y yo señora mami ardiente vamos a tener una cita – comenta y se ilumina mi día

- Crees que Ben se va a quedar, sin mi? – cuestiono y este asiente

- Es un ratito, Cillian me ayudo a preparar algo en el taller, si nos necesitan nos llaman y venimos – comenta y asiento

Corriendo hago todo lo que me indicó, congelo algo de leche para Benedict, preparo comida par Ligeia y les dejo algunas opciones a mi amiga y su prometido para que coman lo que quieran. Decido ponerme un vestido negro, mis caderas se volvieron ingobernable después del embarazo, un vestido caído las disimula bastante, me doy una larga ducha que milagrosamente ninguno de los niños me necesito. Digo y maquillo, algo sencillo, no quiero amanecer con los ojos negros ya que no dudo que en mitad de la velada tenga que volver porque mi pequeño salvaje me reclame, sin lugar a dudas es tan Ogro como su papá en el comienzo de nuestra relación laboral.

Antes de llegar a la sala de estar paso por la habitación de la princesa de la casa,  la arropó con su frazada de princesas y acaricio su mejilla – que rentas linda noche cariño, te quiero – le susurro y ella sonríe – te quiero a ti mami – me dice, desde que su madre le dio la custodia a Tom la niña no volvió a verla, Tom en algún momento fue a su casa pero esta le dijo que no quería saber nada, que ahora Ligeia no le servía para nada y no quería volver a verla a no ser que Tom le pagará por eso. Claro que no fue capaz de contarle esto a la niña, así que solo le dijo que su madre se fue de viaje. Cuando nació Ben y todos me decían “Mami” refiriéndose a mi nuevo cartel en la vida… ella decidió un día mientras la ayudaba con sus tareas hacerme una gran pregunta.

Flashback
- Hanna, vos y papá quieren tener más hijos? – cuestiona mientras intento que aprenda a multiplicar
- No lo se, por ahora no, yo estoy feliz con Ben y con vos, tal vez mas adelante ¿tu wue opinas? – pregunto sin pensar en lo que iba a pasar
- No, no me gustaría que tengan una hija, porque sería una hija tuya y de papá y sería hermana de Ben, yo se que no soy hija de verdad de papá entonces tampoco hermana de verdad de Ben, si tienen una bebé me van a dejar de querer a mi – comenta y me deja perpleja, si Sara supiera que se está perdiendo de una maravillosa hija no tendría esas actitudes.
- No hace falta compartir la sangre para ser familia, tu eres nuestra hija mayor, te amamos y nadie nunca jamás va a ocupar tu lugar – le digo
- Ni una bebe nueva – dice
- Ni una bebe nueva – respondo de igual forma
- Ben cuando sea grande te va a decir mamá o Hanna? – pregunta y veo a Tom con nuestro pequeño en brazos en el marco de la puerta
- Espero que me diga mamá – comento y ella asiente con la cabeza
- ¿Yo puedo decirte mamá? Digo así Ben sabe que somos hermanos bien y un día le explicamos que vos me adoptaste y papá es mi papá del corazón, pero… puedo decirte mamá como te va a decir Ben – dice y no se que responder, levanto la mirada y veo a Tom serio
- Claro que si preciosa – le digo y ella suelta el aire – para mi es un placer que me llames mamá si así lo sentís – termino de decir y ella me abraza, miro de nuevo a mi hombre y me sonríe y susurra un gracias
- Gracias mamá – dice en mi oído y mi corazón se inundó de alegría
Fin Flashback

Paso por la habitación de Ben y el también está durmiendo así que me dirijo a la sala de estar donde ya esta mi cuñado con mi mejor amiga y mi amor esperándome

- Estas hermosa, que bien te sienta la maternidad y todo eso – me dice Nahir mientras viene abrazarme

- Porque no me viste hace dos horas atrás, era un desperdicio humano – susurró en su oído y ella niega sonriendo – gracias por esto, aunque no estoy muy segura se que necesito un momento lejos de los niños, te juro que los amo pero me están volviendo loca

- Hola cuñada – me saluda Dan y lo abrazo para ir luego a los brazos de mi amor

- Vamos – me dice y asiento

- Por favor, cualquier cosa llamen, Tom les dio las indicaciones? Por favor llamen cualquier duda, sea la que sea – comento y ambos asienten sonriendo. Salgo intranquila, es la primera vez desde que nació que voy a estar tan lejos de el.

Salimos de la casa y subimos al auto. Tom pone algo de música y reposa su mano en mi museo desnudo, toda la situación hace que mi abstinencia sexual se muestre a flor de piel. El acaricia inocentemente mi museo mientras yo siento una electricidad recorrer mi cuerpo.

- Llegamos – dice en un momento, no se cuanto demoro el viaje solo se que el rose de su mano con mi piel hizo que ardiera de deseo

- Rápido – comento y el me sonríe. Una vez dentro del local fe motos veo una mesa adornada con dos velas y unos platos, veo a Cillian entrar oficiando de mozo y ayudándome a sentarme en el lugar asignado, Tom hace lo mismo frente a mi cuando Cillian comienza hablar

- Sean bienvenidos esta noche, el menú del es pizza con pepearoni,  para tomar tenemos Pepsi y para el señor cerveza, de postre helado. Procedo a servir para luego dejarlos solos – comenta y asiento

Cillian Realiza lo que menciono y nos deja solos en el lugar, veo a Tom intentar comer la pizza con cuchillo y tenedor pero no puede hacerlo. Sonrió ante sus intentos hasta que decido tomsr la mía con las manos y este me imita feliz.

- Se que este mes a sido muy difícil para ti – no tienes ni idea, pienso pero no se lo digo, no quiero interrumpirlo – creo que seria bueno buscar algo de ayuda, para reducir tu carga – termina diciendo

- No quiero ser una madre ausente – confieso – mis hijos me necesitan con ellos

- Me gusta cuando te refieres a Ligeia como tu hija – dice sosteniendo mi mano con calidez y me invita a ponerme de pie para que me siente en su pierna

- Ella lo quiere así, yo me siento a gusto ante nuestra situación, pero conociendo a la madre sabes que en algún momento va aparecer reclamando dinero o incluso a la propia niña – le digo y se tensa, se que hay algo que desconozco…

- Ella firmo un documento donde indica que se desliga de la niña por la casa, solo espero que respete su decisión, yo no quería que desapareciera, solo quería que la niña creciera mejor – me indica – pero si no le daba un dinero extra mensualmente ella no pensaba hacerse cargo de mi hija – comenta apenado

- Esto es algo que no vamos a poder ocultarte toda la vida, algún día lo tiene que saber, si su madre vuelve ella decida que hace – comento y asiente

- Te amo

- Yo más le digo y siento su mano en mi museo

- Necesito estar dentro de ti – comenta – no aguanto más

- También te necesito cariño – respondo y el sonrie

Comienza a besar mi cuello con cuidado cuando de golpe se pone de pie – Ay – me quejo, aun tengo un leve dolor, más bien molestia por la cesárea de emergencia – lo siento preciosa – me dice para ponerse de pie e ir conmigo a su oficina

Tom

No estoy seguro si es el momento indicado, pero no aguanto más. Mis ansias de Hanna me están volviendo loco. Se que ella cree que esta desalineada y poco atractiva, pero dios sus caderas levemente más grande así como sus pechos enormes hacen que pierda la cabeza. Estoy seguro que pensar así de la madre de mi hijo es una locura, en realidad porque están en la etapa lactante de su vida. Estoy seguro que cuando el pequeño Benedict pase por esto me va a entender
Acaricio su cuerpo y ella tiembla en mis manos – estas hermosa – le digo y ella niega, saco su vestido lentamente y dejo besos en todo el camino que recorro, la recuesto sobre el sofá y para que esté más cómoda, saco mi camiseta de un movimiento brusco y voy directo a su entrepierna – te extrañe tanto mi amor, tengo tanta hambre de ti – le digo mientras con la punta de mi lengua me abro camino entre sus pliegues, ella al tacto ya se eriza – que hermoso recibimiento – mencionó al notar lo húmeda que está. Dejo pequeñas mordidas en su clítoris mientras escucho sus gemidos retumbar en toda la oficina escasa de mobiliario. Cuando siento que mi entrepierna va a explotar dejo mi trabajo entre sus piernas y me despojo del pantalón, cuando la veo sentada sin emitir palabra me emuja hacia ella con sus manos y queda mi miembro justo en su cara, ella lo masturba con sus manos y pasa la lengua por la punta con mucha agilidad, sentir su humedad y calor me estremeció, se que cuando la penetre tengo que hacerlo con cuidado, hace exactamente un mes sufrió una cesárea de emergencia. Pero no me voy a perder la oportunidad de fallarle la boca como corresponde – ¿te gusta? – pregunta sin darse cuenta que su lengua me está llevando al cielo – me encanta amor – susurró entre gemidos y ella de un solo movimiento introduce todo mi glande en su boca, no puedo con esto y la tomo de la cabeza, empujo para adentro tratando de no hacer que se ahogue, mis caderas empujan lo suficiente para llegar a sentir la campanita de su garganta, cuando ya no puedo más salgo por completo y me siento, la invito a ponerse sobre mi, ella lo hace y su vientre que volvió a ser plano pero aun no tiene la firmeza que antes solía tenes me muestra la pequeña cicatriz que denota lo guerrera y valiente que es al dar sin ningún temor su cuerpo entero para darle vida a nuestro hijo – Te Amo, cariño, sos hermosa y perfecta – susurró mientras ella cae lentamente sobre mi regazo dejándome cargarla hasta el fondo – estas más grande – afirma y sonrió, no se si estoy más grande o ella pequeña pero siento que es la primera vez de ambos. Comenzamos a movernos juntos, siento la transpiración recorrer mi cuerpo así como la de mi mujer, los movimientos se hacen intensos, más fuertes – te deseo tanto – me dice y me siento explotar – yo a vos preciosa – le digo y aceleró los movimientos con mis manos en su cadera, el vaivén es rápido, fuerte, nuestros cuerpos chocan en infinito placer – ya no puedo más – le digo y ella asiente indicándome que esta igual que yo. No hizo falta mucho más para llenarla de mi, los gemidos de ambos se mezclan en todo el lugar, ella se recuesta sobre mi pecho y suspira cansada cuando escuchamos el sonido de un celular.

- Tom, perdona que los moleste, pero Benedict llora y no sabemos que hacer – escucho a mi hermano del otro lado de la línea

- Es como el padre, un Ogro – dice ahora Nahir y sonrió

- Ya voy para ahí y llevo la domador de Ogros conmigo – le digo y este sonríe

- Almenos nos dejó tener un ratito solos – dice Hanna frente a mi y asiento

- Gracias – le digo mientras la veo vestirse

- Gracias porque? – cuestiona

- Por animarte a ser parte de la vida de un hombre como yo, por darme un hijo hermoso por ser mi Ariadna, mi Hanna – le digo con el corazón en la mano

- Hagamos un trato – me dice y arqueo la ceja – un trato solo tuyo y mío – indica y asiento

- Si cae uno, caemos los dos – me dice y entiendo el significado de eso, se que todas las veces que caigamos será por mi y mis demonios pero amo que sea tan fiel a sus convicciones

- Si cae uno, caemos los dos – le indico y salimos del taller volando a calmar el llanto de nuestro hijo...

                                  

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Aun falta el epilogo y dos capítulos Extra. Pero este es el final del largo recorrido que hicieron estas personas hermosas.

Gracias por leerme!!

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