Esᴘᴇᴄɪᴀʟ ᴅᴇ Mᴀʀᴀᴛᴏ́ɴ:
🎉Cᴜᴍᴘʟᴇᴀɴ̃ᴏs ᴅᴇ Jᴜɴɢ Kᴏᴏᴋ🎊 (ᴘᴀʀᴛᴇ#4)

     —No, no, ¡NO! —Me senté de golpe en la cama y miraba a mi alrededor asustada, ¿Qué acababa de soñar? ¿YoonGi había revelado lo que sentía por otro hombre? ¿Por qué se sentía tan real?

     —¿Estás bien, cariño? —MinSeok se sentó en la cama y besó mi hombro que estaba al descubierto, ya que llevaba un conjunto corto de blusa con tirantes y un short.

     Había pasado una semana desde que me mudé con MinSeok y aún dudaba que fuera real, sólo habían pocas cosas en la habitación, una cama matrimonial y los vestidores estaban terminados, pero de apoco iríamos remodelando cada pedazo de la casa, hasta sentirla más nuestra.

     El sueño que había tenido parecía tan real, como si todo lo que estuviese viviendo fuera una especie de fantasía y que pronto despertaría para ver mi realidad, y a decir verdad, no creo que sea muy bonita al despertar de la gran ensoñación.

     Me sentía perdida.

     —¿Esto es un sueño? —MinSeok me sonrió y besó mi mejilla.

     —No, esto es muy real y próximamente estarás vestida de blanco, yo te estaré esperando y te veré entrar con los ojos brillosos, mientras veo como caminas hacia mí y no podré resistir las lágrimas por verte tan hermosa, y por saber que serás mi esposa hasta la eternidad —Besé su mejilla de vuelta y ambos nos dejamos caer en el colchón, para admirarlo un rato.

     Era hermoso.

     “Pero no perfecto” —Ignoré a mi loba por completo y disfruté cada una de sus caricias en mi espalda.

     —¿Qué quieres de desayunar? Iré a prepararlo antes de ir al banco.

     Al Tres reyes.

     ¿Ya había mencionado que MinSeok trabaja en un banco? Era el dueño y se habían disparado sus ganancias, literalmente se la pasaba metido allí los fines de semana, mientras iba a la universidad en la semana.

     —Tostadas con Nutella y una gran taza de café —Dije besando su mejilla y subí a su regazo para detallar sus hermosos ojos.

     —Todo lo que mi princesa quiera —Sonreí como una tonta y besé sus labios de la manera más tierna que había besado jamás.

     Bajamos a desayunar y reía sin parar, MinSeok hacía como si estuviera en un programa llamado “Derrota a Bobby Flay” y fingía que estaba contra él, haciendo nuestro desayuno aún más divertido y sólo agradecía v de haberlo conocido. Luego de una sesión de besos, caricias y una ida a la habitación para hacer cosas más que deliciosas, lo ví partir a su trabajo y yo me alisté para ir al supermercado a comprar unas cosas que me hacían falta para la cena de hoy, quería sorprender a mi prometido con una cena hecha por mí y más al nivel de restaurante caro.

     —Tú debes ser Jules —Me aferré al carro de compras y miré al chico que estaba detrás de mí, intentando alcanzar una caja de cereal con malvaviscos.

     Era un chico mayor que yo, llevaba una chaqueta de blue Jeans, una camisa blanca de botones, los cuales tres de ellos estaban desabotonados y un Jeans del mismo color de la chaqueta. Tenía el cabello largo, más arriba de los hombros y era ondulado de color negro, su piel extremadamente blanquecina y rasgos tan definidos, no me hacían dudar de su nacionalidad.

     —¿Y tu quién eres? —Él se giró y pude ver su perfilado rostro.

     —JaeBum, el hermanastro de Jeon idiota Jung Kook —Abrí la boca levemente— y sé que es un complemento estúpido por dejarte, eres hermosa y se nota que bastante inteligente —Lo miré confundida, no sabía de lo que hablaba.

     —¿Por qué lo dices?

     —No pensé que una omega tuviese la habilidad de ocultar a su loba y su olor, sólo un Alfa entrenado podría lograrlo —Él no debía ser bueno, ¿Por qué me buscaba?

     —No sé de que hablas —Me hice la desentendida.

     —Eres una Omega y no una beta, vaya sorpresa —Mis ojos cambiaron de color, mi loba sentía como su lobo tenía malas intenciones hacia nosotras.

     —Ni se te ocurra acercarte más o te mataré —Amenace y dejé que mi loba soltara un gruñido.

     —La leyenda era cierta —Dijo dejándome más que confundida, ¿Qué payaso era éste sujeto?

     —¡¿De qué demonios hablas?! —Grité llamando la atención de otras personas que pasaban por el pasillo.

     —Las Diosas Omegas existen —Me tensé al escuchar sus palabras y moví uno de mis brazos, para aferrar mi mano en una de las asas de la cartera que llevaba.

     —Mejor aléjate si no quieres que mi alfa te asesine —Sabía que MinSeok no vendría corriendo a defenderme, pero me daría un poco de ventaja.

     —¿A mí? —Soltó una carcajada— MinSeok no me da miedo —Y claro que lo iba a conocer, son de la misma jodida familia.

     —¿Có-Cómo sabes que estoy con él? —El leve tartamudeo salió sin permiso, sólo me tomó por sorpresa que alguien supiera sobre nuestra relación a demás de mi familia, mis amigos y... Jung Kook.

      —Para nadie es un secreto —Hizo una pausa viendo a su alrededor— y si haces lo que te pido sin chillar, llegarás sana y salva a tu casa —Me pedía con la mirada que confiara en él y sólo asentí siguiéndolo con el carrito, que tenía lo que había tomado de los anaqueles, para ir a pagarlos

     —¿Qué quieres de mí? —Pregunté sacando mi tarjeta de la cartera, para pagar los productos.

     —Saber que tan fuerte eres —Alcé una ceja.

     Era una dama y era licántropo, pero seguía siendo una dama, ¿Qué esperaba, que Hulk saliera a la luz y asesinara a todos? Sólo pasaba en las películas.

     —¿Por qué? —Cuestionaba dudosa cada una de sus explicaciones.

     —Te lo diré dentro del auto —Asentí y él me ayudó con mis compras.

     Salimos rápidamente del supermercado y caminamos a paso apresurado a mi auto, quité los seguros y JaeBum subió las cosas a los asientos traseros, apresurandose para subir al auto, lo imité y encendí el auto a la velocidad que podía, no tenía miedo, pero una gran preocupación crecía en mí.

     —¿Me dirás ahora? —Lo miré parando en un semáforo en rojo, no podíamos ir a mi casa y quedarnos en carretera por unas largas horas parecía ser una gran solución.

     —Un Omega te ha estado siguiendo desde que llegaste al supermercado, ¿Cómo no lo habías notado? —Cuestionó alzando una ceja, mientras giraba aún más mi cuerpo para verlo mejor a sus profundos ojos negros.

     —¿Hablas de tí? Porque si noté tu presencia —Él rodó los ojos ante mis palabras.

     —Hablo en serio, ese Omega es muy poderoso y nadie jamás en la faz de la tierra ha podido vencerlo —No pude evitar soltar una pequeña risa.

     ¿Acaso hablaba de un ser inmortal?, Porque en ese caso, debería llamar a Zeus e informarle que uno de sus tantos hermanos o hijos estaban jugando con los mortales.

     —Hablas como si fuese un Dios.

     —No lo es, pero es un mago poderoso, puede hacer todo lo que tengas en mente, a excepción de revivir a una persona, enamorar a alguien de otro alguien y quitarle sus habilidades a otros seres —Lo miré sin expresión en mi rostro, ¿Me estaba jodiendo?

     —Es una broma, ¿Cierto? —Desvié mi vista de su rostro y puse el auto en marcha.

     Había cambiado el color de semáforo justo en la parte más interesante.

     —¿Crees que si lo fuera estaría aquí protegiendote del peligro? —Negó— Estoy aquí porque aunque Jung Kook no me crea, él me importa más de lo que puede imaginar y si tú eres su felicidad, mi deber será protegerte —Lo miré el triple de confundida, ¿Ahora él iba a protegerme?

     —¿Por qué él quisiera hacerme daño? En primer lugar, yo no le he hecho nada y en segundo, estoy lista para acabar con ese patán —Ser una diosa Omega tenía sus ventajas, pero no sabía de lo que era capaz.

     —Porque Jung Kook lo mando a encarcelar por incumplimiento hacia las reglas familiares.

     Jung Kook tenía esa mala costumbre.

     —¿Y eso que tiene que ver conmigo? —Yo me había alejado de él e iba a casarme con alguien más.

     —Jeon le quitó al amor de su vida y él le quitará el suyo —Tragué saliva, ahí era donde entraba mi presencia.

     —Pero ¿Qué tan grave fue lo que hizo? —Quizás fue estúpido lo que hizo, pero sinceramente, yo no quería saberlo.

     —Jung Kook obligó a Jimin a que le borrara la memoria a su amado —Abrí los ojos como platos, sin quitar la vista del camino.

     —¿Y por casualidad sabes su nombre? —La curiosidad mató al gato, eso decían.

     —Min YoonGi —Joder, no puede ser.

     —Él es... Él es mi hermano —Tragué saliva con dificultad.

     ¿Desde cuándo a mi hermano le gustaban los magos poderosos capaz de destruir nuestra existencia? Porque iría ahora mismo a golpear su enorme cabezota.

     —Jung Kook es un idiota, ¿Cómo se le ocurre estar enamorado de la hermana del amor de su vida? —Alcé los hombros, no tenía explicación para ello.

     —¿Y yo que iba a saber?, Mi hermano y yo nos separamos hace mucho tiempo, yo vivía en Estados Unidos y él aquí en Seúl —Expliqué o eso intentaba, no podía creer lo que estaba pasando. Pensaba que ya lo había visto todo— ¿Qué debo hacer?

     —Hacerlo recordar.

Gracias por leer💕