Ya era un nuevo día para nuestros amigos. Ya algunas se habían calmado y estaba más descansados.

Claro, la situación en Haven aún no termina. Y eso es algo que puede ser molesto lata algunos. Pero era un avance.

Pero estaban reunidos en la sala de la casa donde estaban hospedados, por algo mucho más importante que solo tener que pasar el tiempo de calidad.

-¿Raven te dijo lo que sabe de ti? – la incredulidad de Qrow era palpable.

No era sorpresa para nadie de la enemistad que hay entre los hermanos por modo de pensar, ideas y demás. Eso sí, estaba seguro de que las cosas no estaban yendo bien para ellos como hermanos.

-Se puede decir que sí. – Vent estaba sentado en el sillón individual de la casa.

Ahora mismo, todos los presentes eran sus novias, todos sus amigos, Qrow, Óscar, la familia Arc... y para mucha sorpresa, también estaban Aile y la familia Belladona.

-¿Seguro de querer hacer que ellos sepan lo que estás por decir? – Fue la pregunta de Ruby al muchacho. – Es personal para ti.

-Confío en todos aquí. Eso no debe de ser sorpresa para nadie. Es mi manera de decir que yo no guardo secretos.

Era su manera de decir que no estaba de acuerdo con el método de Ozpin y Qrow. Era sutil, pero claro. No sólo ello, se veía que esperaban a alguien más.

-Un paso más.

-No soy una anciana Yang. Solo aún me duelen las piernas.

Todos pasaron a ver las escaleras, notando como Yang ayudaba a Raven a caminar. Pero la pelinegra parecía sufrir con cada paso. Sus heridas aún no sanaban del todo.

Vent se puso en pie y ayudó a Raven a dar los últimos pasos. Algo que Yang vio con una sonrisa. La ayudaron a sentarse y...

-¿Raven?

-Kali... que sorpresa verte.

La sorpresa de ver que las dos se conocían, era clara.

-¿Se conocen?

-Oh sí, lo hacemos muy bien. Ha pasado tiempo desde que nos hemos visto. – Raven miró a la Faunus. – Ya decía que la Faunus gata de aquí se me hacía familiar. Solo que no lo enlace por el apellido.

-Lo dice la que se casó con el tipo que decía odiar. Al menos yo soy clara en mis gustos. – fue la respuesta seca de Kali a la ex bandida.

La tensión era alta, hasta que...

-Perra.

-Arrastrada.

-¡Urgida!

-¡Lo dice la que tiene gusto por el BSDM!

-¡Conchuda!

-¡Basta! – Fue el grito de Juniper al ver a esas dos querer matarse. – Por favor. Somos mujeres adultas, seamos civilizadas. Dejemos de lado las riñas del pasado y...

-Lo dice la salvaje musculosa en su juventud que solo sabía arreglar todo a golpes.

-Si. No te metas gorila rubia.

Las palabras de Raven y Kali hicieron que la rubia tenga una enorme vena en la frente.

Digamos que el caos se desató...

-¡Voy a matar a estas perras! ¡Suéltame Nicholas!

-¡Déjamelas! ¡Haré que vean su lugar estas dos arrastradas! ¡Déjame Ghira!

-¡Aun estando en este estado puedo con ustedes, zorras! ¡No me toques Qrow!

Se pudo ver cómo los mencionados trataban de evitar que las mujeres se lancen contra las otras... esto no estaba bien.

-... Si no fuera porque tengo miedo, diría que esto es gracioso. – Óscar veía todo a una buena distancia.

-¡Amén a eso! – Nora había construido un fuerte con Gris y Lie. Aunque no era gracioso...

Los hijos de las mujeres se tapaban la cara al ver que estaba pasando. ¿Qué estaba...?

-... ¿Puede alguien decirme que pasa? – Weiss sentí que su cabeza estaba sufriendo.

-... Digamos que mamá siempre nos contó que tenía una clara rivalidad con dos mujeres. Qué se varias veces en su juventud... que siempre peleaban y que... - Milli no sabía que decir.

-Espera... ¿Fue con ellas con quiénes destruiste un distrito entero mamá? – Fue lo que Celeste dijo, a lo que todos se quedaron en shock al no saber ese detalle.

-¡Fue culpa de ellas por restregarme sus figuras en la cara cuando yo sufría por mi apariencia!

-¡Ja, lo dice la que debía de usar manga larga para ocultar los brazos que tenía! – Raven se burló de la rubia, quien ya estaba a punto de liberarse.

-¡Al final yo soy la que tuvo mejor vida sexual que ustedes dos! ¡Ya deben de estar empolvadas ahí abajo! – Al oír eso Raven se estaba parando para matar a la rubia, sus ojos soltando energía.

-¡Ahora si vas a ver...! – Kali ya estaba casi libre de su esposo.

Esto era penoso. Tres mujeres adultas que estaban tratando de matarse las unas a las otras por cosas de su juventud. No sabían si reír o llorar.

-... Veré el lado bueno. Mi madre no está aquí... - Weiss intuía que sería peor por una razón.

Vent no sabía que cara poner. Toda la tensión del momento se fue. Esto no le puede estar pasando. Y eso que estaba seguro de que las cosas iban a seguir así un tiempo a menos que haga algo.

-Silencio... - ver que eso no estaba ayudando. - ¡SILENCIO!

El grito que dio bastó para que todos lo pasen a ver. Hasta las mujeres habían dejado de discutir.

-Por favor. Compórtense como mujeres maduras. Ya luego se pueden matar... pero esto es importante.

Las tres se vieron a las caras y de mala gana asintieron, se sentaron en sus sitios de nuevo. Pero igual estaban molestas.

-Y así se controla el ganado. – Ilia dijo eso para aligerar el ambiente, ganándose la mala mirada de las mujeres. - ¡Eeep!

La Faunus se escondió tras Jaune, para usarlo de escudo de ser necesario. Algo que no le gustó al muchacho.

-... Creo que podemos volver a lo que importa. – Ren jamás pensó que así sería el inicio de esta reunión. - ¿Qué es lo que estabas por decir Vent?

-Oh sí. – Hasta él se había olvidado. – Tiene que ver con lo que Raven me comentó. Pero para eso, creo que es justo que sepan de mi vida aquí y lo que descubrí.

-Vent. – Aile miró a su amigo con dolor. - ¿Seguro? Esos días no eran los mejores para ti. Eran...

-Lo sé. Pero merecen saberlo. Si es que quieren entender. – la chica no pudo refutarle nada.

Ese simple intercambio entre ellos solo hacia que las cosas no vayan con un buen pie inicial. Y eso era mucho que decir en esta en esta situación.

Vent inició su relato. Primero diciendo lo que la matriarca del orfanato le dijo de su día de llegada a ese lugar. Que fue Summer quien lo dejó ahí y lo que hizo. Él trató que recibió en ese lugar. Además de que como era antes...

La sorpresa de ver que antes era inexpresivo y violentó en sus días de niñez temprana, era clara para los que lo conocían ya un tiempo. Pero eso creció más al saber que Summer siempre veló por él desde el día uno.

Y que fue el reencuentro entre ellos, lo que llevó a que Vent sea quién es ahora. Dado que el cuidado en el orfanato no era el mejor. Y eso molestó a la mayoría. Yang murmuró algo de tirar ese lugar abajo en venganza.

-No hay que molestarse. Ese lugar fue de los primeros en caer en el ataque inicial en Mistral. – Si bien le alegra que algunos se preocupen por él, no es el momento de que piensen en eso. – Lo que diré ahora, tiene que ver con lo que Raven dijo.

Comentó lo que Raven le comentó días atrás. De los Megaman y lo que era la carga genética de los antiguos. Así como los dos medios para ser un Megaman. El artificial y el natural.

Y eso sorprendió a todos. Dado que según la información que Summer tenía, todo ser vivo en este mundo tenía aún carga genética de los antiguos en su ADN. Pero era Vent el que tenía una carga que se salía de lo que uno puede considerar normal. Eso era algo que no entendían.

-¿De qué carga genética se habla?

-Para que lo pongan simple. Su carga genética sería imposible dado que en la cantidad de generaciones que hay entre la era del mito a la actual, aún faltan cómo 10 generaciones para que eso pase... y si es que las condiciones se cumplen. Eso ya es un azar que raya lo absurdo. – Fueron las palabras de Raven ante la pregunta de Blake.

Nadie sabía que decir ante esas palabras. Nadie.

-Eso quiere decir que de los Megaman, solo Vent es un natural al poder. – Las palabras de Pyrrha salieron con algo de molestia. – Por supuesto.

-Es lo que Summer sabía. No sé que estaba pensando ella en esa cabeza suya. Esa mujer estaba 10 pasos delante de cualquiera. Y me atrevo a decir, que quizás... ella sabía de Albert. Y por eso se alejó de Mistral.

-Eso tiene sentido. – Fue lo que Qrow dijo, aún era raro verlo estar de acuerdo con su hermana. – Summer siempre mantenía las distancias con cualquier contacto con Haven... en especial Mistral.

-Pensar que muchas cosas han pasado en este lado del mundo. – Ghira soltó un suspiro. - ¿está bien que nos hayan dicho esto?

-Es lo correcto – Vent habló primero. – No puede haber confianza si hay secretos y eso es lo que menos que haya con los presentes. – El Megaman miró a todos. – Por alguna razón estamos reunidos aquí y hemos cruzado caminos. Me atrevo a decir, que es hora de que dejemos de lado el secretismo que hemos tenido.

-¿Deseas decirle al mundo de la amenaza que hay? – Jaune miró a Vent, quien negó con la cabeza.

-No... queramos o no, la gente no se creería esto. Solo cuando pase algo, es que lo creerán. Así es la gente. Por lo que debemos estar listos para la lucha. Y dar todo de nosotros.

-Entonces sería bueno que... hagamos aliados o contactos en otros lados. – Fue la sugerencia de Jade. – Así estaremos listos para algo más grande. Claro, sin gritar a medio mundo la verdad... aun.

La sugerencia de la chica le gustó al Megaman azul, quien sonrió. La muchacha se sonrojo y desvió la mirada. Algo que todos notaron.

-¡No otra! – Fue el pensamiento del equipo RWBY, hartas de que eso pase.

Aunque se veía la clara molestia en Neo y Aile frunció el ceño. Pensar que su amigo tendría tal encanto con las chicas... aunque siempre lo supo desde que eran niños.

Volviendo a lo que importa...

-¿Podemos hacer algo más? – Magenta miró a los demás, notando que cada uno estaba en sus pensamientos.

-... Debemos de asegurar las reliquias. – Fue lo que Oscar dijo, en la voz de Ozpin. – Solo así, podremos evitar que caiga en malas manos.

-¿Salem? – Fue la pregunta de Ruby.

-De quien sea... Eso de por sí, es muy poderoso. No debe de estar en las manos erradas. Sus poderes pueden ser fatales en las manos de nuestros enemigos. – Era verdad.

Parece que Ozpin no estaba aun dispuesto a decir algo. Pero era un avance. Parece que pasos de bebé, son necesarios para el hombre. Quien ha vivido más que todos ellos juntos.

-Hay que ir a Atlas. Y el mejor camino es Argus. – Blake dio la sugerencia. – Además...

-Está ahí los laboratorios de Albert. – Fueron las palabras de Pyrrha. – Neo y yo nos hicimos de esa información. No fue sencillo, pero parece que Albert tenía laboratorios en toda la zona.

Y eso era algo que llamaba mucho la atención. Demasiado. ¿estará escondido en uno de ellos?

-... Pero Argus es grande. Sería difícil. Y por lo que nos dijeron, esa información esta encriptada. – Weiss sabe que algo así, no será sencillo de superar.

-Pueden ir con Saphron. – Nicholas dio la sugerencia. – La esposa de mi hija es una experta en esos temas. Ella puede ayudarlos. Y viven las dos en Argus.

-Ese sería un buen avance. – Uno que no pueden perder dadas las circunstancias. – ¿Cuándo podremos partir?

-Una semana. – Eso no le gustó a Vent. Es mucho tiempo. – Hay que dejar las cosas claras en Haven y por lo tanto en Mistral. Lo lamento chico... Puede que no le tengas aprecio a esta ciudad, pero esta gente no merece sufrir por la codicia de sus líderes.

-... No. Claro que no. – El Megaman se rascó la nuca. – Pero vayamos a hacer algo más. No es que quiera quedarme sin hacer nada.

-¿Hacer qué...? – Fue la pregunta de Weiss. - ¿Pasear?

-Digo... No he tenido nunca la oportunidad ver mucho de la ciudad donde supuestamente me críe. Además que quiero hacer algo diferente para variar. No pelear por ahora.

Y eso era algo que muchos podían seguir. Es más, el descanso no les vendría mal. Vaya que no...

-Creo que.. podemos darnos el lujo de descansar estos días que vienen. ¿Les parece? – Qrow dijo eso con un tono cansado, que denotaba que no estaba del todo feliz con lo acordado. Pero no dijo nada.

Y así, todos acordaron el tener días libres... para variar.

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-Muy bien Jade. Confiesa.

-¿Qué cosa?

Ella y Magenta estaban viendo como el resto de sus hermanas hacían compras en una tienda de ropa en el pueblo. No solo ello, parece que estaban discutiendo algo.

-No te hagas la bruta, que no se te da. – Jade se mostró ofendida. – Te gusta Vent. Es lo más obvio.

-... ¿Lo es? – La chica se puso algo azul. - ¿¡Crees que él...!?

-Nah. Por lo que vi, es denso. Aun con 4 chicas a su lado. – Mags sonrió divertida. – Anda, dime...

-¿No era que te gustaba...?

-Pues si, pero primero vamos contigo. Ya quizás yo intente algo luego. – la menor de las dos sonrió sin importancia. – Vamos, cuenta.

Jade soltó un suspiro. Si algo sabe de su hermana menor, es lo insistente que es ese sentido. El de tener que hablar de chicos y demás. Por algo tiene 19. Y eso es algo que hace que sea susceptible a este tipo de situación que de por sí, no le gusta estar metida. Ella jamás fue de hacer este tipo de cosas.

-.. Vale. Admito que me siento algo atraída a él...

-¿Algo? – Odiaba la sonrisa burlona de su hermana.

-¡OK, mucho! ¿¡Que quieres de mi mujer!?

-Que seas honesta. – Mags le dio una palmada en el hombro a su hermana. – Digo, es más que notorio la atracción que sientes ante él. Todos lo ven. Hasta mamá.

-Oh no... - SI su madre sabe de esto, estaba más que muerta. Y eso no era bueno para ella... - ¿En serio lo sabe?

-Sip... Hasta ya parece hacer planes. Dado que por lo que hemos visto, Vent parece atraer mujeres sin problema. ¿Ves como lo ve Aile? Quién lo diría. Además, está esa chica Neo.

Era obvio que eso fuera notado. No era sorpresa para nadie que Aile miraba a Vent de una manera muy interesante. Una que, de verdad, te hace ver lo mucho que esa chica parece sentir. Y aun estando comprometida, esa mirada no se perdía por lo que oyeron.

Jade soltó un suspiro. NO puede estarle pasando esto. ¿Por qué el chico que es lo que ha estado buscando años es un imán de mujeres? Debe de ser una mala broma. Eso es lo que cree.

-Por cierto... casi lo olvido. - ¿Qué casi olvida...? Por favor, que sea algo que sea algo útil. – Fue sutil, pero creo que Vent nota que eres una chica.

-... Según mi vagina... si.

-¡No seas descarada! ¡Hablo en el sentido que te ha notado! ¿¡De donde más sacas esa sonrisa que te dio!?

Jade parpadeó varias veces. ¿en serio? Suprimió la sonrisa en su cara, dado que no se desea dar falsas esperanzas. Es más, no puede obviar que hay más contras que pros.

-No creo que pase algo. Ya tiene mucho con lo que le pasa.

-Vamos Jade. ¿En serio? ¿Qué pasó con la chica que estaba siempre decidida a hacerse con un novio? – Mags la miró no creyendo lo que oyó. - ¡Le coqueteaste bien lo viste!

-¡Y ahí yace el asunto! ¡Mala primera impresión! ¡Y sabe de mis aventuras! Creerá que soy una facilona.

Mags no supo que decir ante lo dicho por su hermana. Si, había olvidado que Jade tenía sus esqueletos en el closet en relación a lo que se refiere a sus citas. Aún recuerda las maldiciones que soltaba cuando volvía en las mañanas, diciendo cosas de que lo hizo de nuevo. Y se deprimía todo un día.

-... Vamos hermana. No es para tanto. – Jade la miró con una ceja alzada. - ¡No lo es! Mira... - Jade tomó aire. – Es obvio que... puedes tener experiencia en un rubro que... es fuerte. No lo niego. Pero él no pensará menos de ti por eso. Si hasta se ve que aprecia a esa ex criminal... ¿Crees que no lo hará contigo? Date una oportunidad.

-... ¿De verdad lo crees?

Era raro ver a la más rudas de sus hermanas de esa manera, pero Mags asintió varias veces. Dado que cree que de esa manera... puede llegar a un lado. Y no solo eso, quiere que su hermana sea feliz.

-Yo digo que lo intentes.

-Igual aquí.

-¡AH! ¿¡De donde salieron!? – Gris y Li se encogieron de hombros. - ¿¡Y nadie les dijo nada de oír charla ajena!?

-Como si tú no hicieras lo mismo. – Cele se ajustó los lentes. – Y Mags tiene razón... no te acostumbres. – la menor infló las mejillas. – Creo que no debes de dejar que lo que pasó, te afecte Jade. Puede ser tu oportunidad. Digo... ¿No ves a esas 4?

Jade desvió la mirada. ¿Puede meterse en algo así...? ¿Vale el riesgo?

-Creo que a mamá no le molestaría tener a Vent en la familia. – Milli sonrió algo burlona al oír ello. – Es más, es lindo.

-... ¿Milli? – las 5 hermanas la vieron con sorpresa.

-¿Qué? Saben que me gustan los chicos algo menores. Y él ya me vio desnuda. Eso es un plus.

-¿¡Que cosa!? – fue el grito de las demás, a la ve que Jade tenía un tic en el ojo... Agh... grandioso....

-... Hay que admitir que es cierto...

-Y que parece ser muy bueno... Así que...

Las gemelas se vieron y parecían hacer planes, cosa que no le gusto a Jade, a lo que Magenta murmuró algo de que quizás deba pensar como acercarse a él cuando pueda.

Sin duda las hermanas tienen ideas claras.

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-Con que este es el orfanato...

-O lo que queda de él...

Ilia asintió a las palabras de Aile, quien miraba el lugar donde había crecido 10 años de su vida. La castaña no parecía triste por lo que pasó con este lugar. Es más, parece indiferente.

-... ¿Nada de nostalgia?

-Nada. Era de esperarse. Odiaba este lugar... yo veía el como trataban a Vent.

-¿En serio tan mal?

Ilia no era capaz de pensar que sea así. Pero por lo que ha visto, ella ha sido ignorante a varias cosas. Al fin y al cabo, sus problemas pueden ser nada ante de los demás. Vaya que era extraño pensar eso en estos momentos.

-Si... - Aile soltó un suspiro. – Vent se metía en muchas peleas, solo porque los demás lo molestaban mucho. Muchos lo llamaban violento, pero trataba de defenderse en un lugar que era hostil con él.

-Wow... Es mucho que se debe de procesar. Sin contar que es un mal barrio. – Aile rio al oír ello. – Pero es un buen escondite. Ahora veo porque esa mujer lo dejó aquí.

-... ¿Está mal pensar que detesto que lo haya dejado aquí en vez de llevárselo?

La pregunta de Aile la sorprendió un poco...

-No... Pero era para tenerlo a salvo.

-Si... a salvo.

-¿La resientes? - Aile meditó su respuesta. Ella...

-... Desde siempre. – Ilia se sorprendió. - ¿Sabes quién le sacó la primera sonrisa a Vent? Ella... ¿Quién lo hizo más abierto a sus emociones? Ella... ¿Quién le dio esa filosofía por la que él vive y por la que se arriesga? Ella... Esa mujer Summer... ¡La detesto!

La Faunus se sorprendió al ver la cara de Aile. Llena de resentimiento... Como si hubiera querido decir eso hace años.

-... Por eso no hablas mucho de Summer frente a Vent.

-Siempre... Siempre vi lo mucho que Vent la quería. Estaba celosa de no haber sido yo la que lo hizo cambiar. Y lo intenté... siempre pude ver algo en Vent que el resto no. Y me molestaban por ello...

-Aile...

-Y... llegó ella. Lo vi... feliz. Y no me molestó... pero luego vino más y más... él pasaba más tiempo con ella. Y aun cuando dejo de venir, era todo lo que Vent tenía en la cabeza. Aun cuando pasábamos juntos, pensaba en Summer. Lo que ella diría o haría. ¿Crees que no sentía celos?

Ilia captó esa mirada. Era la misma que ella tenía por Blake antes. Era la misma.... Y eso hacía que la entienda.

-... ¿Tras todo este tiempo Aile?

La castaña tragó saliva y...

-Siempre. – Dijo la verdad que quiso hundir en su alma. – Por eso me costaba tener novio. Por eso cuando supe que él estaba no con una, sino con varias chicas... me desesperé. Acepté casarme solo para dejar de pensar en esto. En este sentimiento que no me llevará a ningún lado. Solo al dolor...

-¿Y quien dice que no te lleva a ningún lado? – Ilia dijo eso con sinceridad. - ¿Lo has intentado para decir ello?

-Yo...

-Solo asumes eso. Vent no es mago o lee la mente. Para su mente, tú solo lo ves como su amigo de la infancia. Jamás como algo más. Debes de ser directa y decirle las cosas.

-... Me va rechazar... Estuve a punto de casarme...

-Si piensas así... jamás llegarás a un lado...

-¿Por qué tantos deseos de que haga esto Ilia? – la pregunta de Aile era buena.

-.... Porque sé lo que es sentir algo y no hacer nada por el miedo. – Ilia recordó esos días... las oportunidades que pudo tener. – Al final lo hice, pero era tarde. Ella ya está con alguien más que ama mucho y lo veo en su mirada. Es para toda la vida... Que solo me queda aceptar y desearle lo mejor. Porque sé que está con una buena persona.

-... Ilia.... Tú...

-No digo que las cosas saldrán bien Aile. Pero no puedes vivir pensando en supuestos. Yo lo hice. Y me arrepiento. No cometas mi error.

Las palabras de la Faunus quedaron en la mente de la chica, quien prefirió callar. Quizás era lo mejor hacerlo.

-... Lo intentaré.

Aile sabe que quizás falle. Quizás sea ella la única que aún siente algo entre los dos. Pero no por eso, es que se va a rendir. Y eso era lo que hacía que las cosas sean aún más interesantes.

-Sabes. Eso fue algo bueno que le has dicho. Al fin aprendiendo de los errores para cambiar a algo mejor. Bien ahí Ilia. Al fin mudando de piel.

Si bien la analogía era algo molestar, Ilia le daba la razón al Modelo A. Era momento de cambiar y de ser mejor. Y ella daría esos pasos sin dudarlo... ya no era la de antes. Ya no.

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De regreso a lo que sería sin duda alguna el otro lado de la moneda, podemos ver el como el equipo JNPR y Neo están tratando de entender que pasa, mientras que los padres de Jaune parecen estar en una ligera discusión en medio de lo que sería la compra de unos víveres.

-Te lo digo de esta manera Nicholas. Me molestan y te juro que...

-¿Deseas destruir Mistral? Acabamos de evitar que el lugar se venga abajo. – Fue lo que el hombre le pregunto a su esposa. Ella bufó molesta. Esto era el colmo.

Los jóvenes veían eso con una clara expresión de no saber que decir. Y Neo sólo hizo gestos con las manos, para que la entiendan.

-Y en eso te doy la razón. – Nora asintió. – Hey, las clases de Vent están pagando.

-Aun no puedo creer que estés aprendiendo lenguaje de signos. – Ren no puede negar su clara sorpresa en esto. – Pero es verdad. ¿Qué creen que debamos de comprar?

-Algo para el frío. Argus es la zona del continente que más se acerca a Astral. Por lo que el frío será una constante. – Pyrrha se cruzó de brazos. – Pensar que volvería a casa.

-Tú eres de Argus, ¿verdad? – fueron las palabras de Jaune a la chica, quien asintió sin dudarlo dos veces. - ¿Qué se siente saber que irás a casa?

-La verdad. Es raro. No pensé volver tan pronto iniciado esto. Si, le hablé a mi madre de lo que estaba pasando en parte y de mi decisión... pero nada más. – Pyrrha alzó la mirada para ver el cielo. – Creo que se sorprenderá de verme.

-¿Crees que nos reciba en tu casa?

-Sera cosa de preguntar. – Nora asintió. – Lamento como he estado estos días. Es solo que...

-Entendemos Pyrrha. No debes...

-No Ren. No lo entienden. – La chica sonó firme y mortificada. – No saben lo que es ver a alguien hacer lo que tú tanto te esfuerzas, mejor y sin dificultad. Siempre le he tenido unos celos sanos a Vent... pensé que eso también me ayudaría a mejorar y lo hace. Pero paso que doy, él da dos o tres. Es frustrante.

El resto de jóvenes quedó en silencio. Porque era verdad, no lo hacían. Siempre fueron conscientes de que a pesar de todo. Pyrrha se enorgullece de sus habilidades. De lo que ha logrado a pulso. Con sudor y sangre. Su entrenamiento. Pero hoy... hoy estaba mostrando con claridad un aspecto humano que jamás pensaron ver en ella. La envidia hacia otros.

Si, era claro el talento de Vent. Muy claro. Tanto, que hasta ellos le tienen envidia por lo que es capaz de hacer. Y eso que puede ser peor, al menos eso es lo que creen. Y eso que han tratado de no pensar en ello.

Pyrrha por su lado, estaba segura de que ha decepcionado a sus amigos. Ella siempre se ha mostrado imbatible. La que no mostraba a nadie lo que era un ápice de esas emociones que muchos consideran dañinas o negativas. Y así era como las cosas siempre han sido.

Pero hoy no, ya no podía seguir así. Le era imposible hacerlo. Y quizás era decepcionante mostrarlo.

-Pues al fin dejas de lado tu deseo de ser perfecta Pyrrha. – Nora dijo ello con una sonrisa. – En serio, desde el día uno ha sido cansado.

-¿Eh? – Fue la respuesta de Pyrrha, a lo que Ren soltó una ligera risa.

-Es natural que te sientas así Pyrrha. No eres un robot. Es más, eres quizás la que más derecho tiene de mostrar sus emociones tras todo lo que hemos pasado. Contenerte es malo.

-¿No están...?

-¿Decepcionados? Para nada. Es reconfortante ver qué al fin muestras lo que sientes Pyrrha. Te guardas mucho lo que sientes porque aún tienes algo del estigma de la chica invencible a tus espaldas.

A las palabras de Jaune, hasta Neo hizo unos gestos, como diciendo que no se ponga a pensar en estupideces y que entienda que ella es tan imperfecta como los demás.

Pyrrha vio a sus amigos y novio. Sonrió aliviada. Quizás en su mente, pensó otro escenario menos este. Era verdad... quizás era momento de dejar algunas cosas atrás. No será fácil, pero ya debe de ser hora de ello.

-Es como dicen Pyrrha. Eres tan humana como el resto. Puedes ser una Megaman, pero no olvides quien eres al final. Eso es parte de crecer también en medio del camino que has elegido.

Le daba la razón al Modelo Z. Es verdad. Quizás ya sea hora de que... deje tratar de ser perfecta cuando no lo es. Quizás... ya deba de ser solo Pyrrha.

-Gracias... a todos. – Dijo eso con sinceridad. – Quizás debamos de seguir viendo que comprar. Les digo, Argus es frío.

Era lo mejor. Aunque tal vez tengan que hacer que Juniper se le bajen los humos.

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-...Te odio...

-El sentimiento es mutuo.

-Por favor no peleen.

-Estoy de acuerdo con el grandote. No queremos estar en medio de su discusión.

Las dos mujeres miraron a Qrow, quien se tensó al ver esas miradas. Quizás lo mejor sería que se quede callado. Si, quizás sería mejor así.

Y quizás, así era como un adulto debería de entender que meterse en una pelea entre mujeres jamás sale bien.

Qrow no entendía su suerte... estaba empujando a Raven en una silla de ruedas, la mujer siendo la que estaba molesta de que esta sea la única manera en que puede salir. Pero todo esto fue insistencia de Vent.

-No veo el caso de esto. No quiero salir a ningún lado.

-Tú siempre la anti social...

-Púdrete Kali. – Los dos varones no dijeron nada. – Ese chico...

Kali miró a Raven, de seguro entendiendo sus pensamientos. Optó por hacer algo que jamás en su juventud pensó hacer... y menos con Raven. Su más odiada némesis.

-Ustedes dos... vayan a comprarnos algo de comer. Quiero hablar con Raven de algunas cosas.

-Ahm... no creo que sea una buena idea...

-Estoy de acuerdo con Qrow. La ciudad está en pie aún... - Kali le gruñó a su esposo de tal manera que el Faunus puma se tensó. – Como digas querida.

-¿Qué? ¿en serio? ¡No me jales, eres un pisado! – Fue lo que se oyó de Qrow a la distancia.

-... Lo voy a desplumar...

-Únete al club. – Fue lo que Raven dijo, mientras que Kali empujaba la silla de ruedas. – Sabes, pensé que estarías buscando unas escaleras para tirarme por estas, dado que no puedo caminar.

-Oh, créeme. Estoy tentada. Pero estoy siendo la mejor persona de las dos. Así que hay cosas que no puedo hacer.

-Jo. Kali la que no dudaba en ir a bares y ser el alma de la fiesta, haciendo esto. Quien lo diría.

Kali se sonrojo. Antes de conocer a Ghira había sido algo aventada en sus cosas de juventud. Y había hecho viajes fuera de Menagerie más de una vez contra sus padres. Fue en esos viajes que conoció a Raven y a Juniper... decir que destruyeron la ciudad donde se conocieron era decir poco. Aún está vetada de ahí...

-Eso fue hace años.

-Hmph. – Raven rodó los ojos. - ¿de qué deseas hablar?

-¿Es verdad? Qué trataste de matar a Vent.

Raven sintió el cambio en la voz de Kali. Era un tono más frío y que bordeaba lo que ella llamaría, lo sombrío. Los ojos de la mujer denotaban que no le mienta. La pupila rasgada, como la de un gato, le dio un escalofrío.

Optando por ser sincera, Raven asintió sin decir nada más.

Lo que vino después, fue a Kali tomando la cara de la mujer con su mano y verla con rabia. Una que Raven jamás había visto.

-¿Por qué? Y tu respuesta puede hacer que no quedes lisiada de por vida. – Era como una tigresa, defendiendo a su cachorro.

-¿Tanto te importa...?

-¡Me importa! – Kali le habló con firmeza. – He callado lo que sabía de ti hacia tu hija cuando la vi, porque no quería llenarla de mis prejuicios. Qué hice que ni la conocía o la reconocía el día que la vi en Menaregie. Lo mismo va con Summer... - Raven desvió la mirada. Ella también... - Pero esto no te lo paso Raven. Ese chico me importa... más de lo que puedes imaginar. Así que dime... ¿por qué lo deseabas matar? ¡Dime!

-¡Tenía miedo, ¿Ok?! – fue la respuesta de Raven, quitándose la mano de Kali de la cara. - ¿¡Sabes lo que es vivir sabiendo lo que Summer me dijo!? ¡De que existe alguien en este mundo con el poder de hacer lo que sea! Ese chico ya lo está demostrando. En menos de dos años es más fuerte que cualquier Cazador que ves por ahí. Y sigue siendo más fuerte. ¿Qué crees que pase en un año o dos? Será imparable... nada lo detendrá. Y me asusté... más al ver la oscuridad que estaba en sus ojos.

-Summer nos lo encomendó Raven. Nos encomendó al muchacho. – Kali le dijo lo que estaba olvidando. – Fue a pelear, sabiendo que lo dejaba en buenas manos si es que... - No pudo terminar la frase. – Puede que no nos lleváramos bien, pero creí que...

-Jamás fui tan buena en las emociones Kali. Tú lo sabes. – Raven desvió la mirada. – Al menos no soy Willow, ella se ha cerrado del mundo entero.

-Con un esposo como el que tiene... aunque no quita que la golpeare cuando la vea. – Kali soltó un suspiro. – Imaginaste esto... nuestras hijas en un equipo. Cuando la mayor parte del tiempo, las cuatro peleábamos por tonterías.

-Je. Summer solo nos seguía el juego. Ella siempre esperaba esas vacaciones de termino, para reunirnos las cuatro. O en cada oportunidad. – Raven sonrió por la nostalgia. – Si las cosas hubieran sido diferentes....

-Lo sé. Willow aún tenía que traer a la pequeña Winter en nuestras reuniones, dado que su padre es un... tú te fuiste y yo tuve que seguir con mis deberes en Menagerie. Summer se quedó sola... sola... - Kali trató de emular palabra, pero las emociones le ganaban. – No sabes lo difícil que fue ver a su hija.

-Lo sé...

-Es como su madre.... Y me duele haber tenido que ocultarle las cosas. Pero era lo que Summer nos prometió hacer. Y aún ahora, lo hacemos. Porque sabemos que no están listas para la verdad... de que Summer se fue a pelear para poder evitar lo que estamos pasando. Evitar esta batalla entre Megaman... nos lo dijo a las 4... aún recuerdo cuando ella...

Raven asintió... lo recuerda. Siente que fue hace años. Pero fue un poco raro... Fue con cada una de sus amigas, hablando del bebé, siendo ella la última por lo que había hecho. Era un poco injusto.

-... ¿Qué te dijo a ti? – Fue la pregunta de Raven.

Y Kali se limpió las lágrimas.

-... La verdad.

Flashaback

Era un día tranquilo en Menagerie. Kali soltaba un suspiro mientras que compraba las cosas de la cena. Al menos un descanso de la energía de Blake... esa niña si que tiene energía.

Pasó a ver el barco que estaba aquí desde el día de ayer. Víveres y productos. Al menos su esposo había logrado hacer ese tratado. Y el día de hoy, el barco se iba en la noche.

-Gracias por su compra.

Fue lo que el Faunus mercader dijo, a lo que ella asintió con una sonrisa. Cogió sus cosas y caminó en dirección a su casa. Notando la gran cantidad de gente que había. Y eso era peculiar... más inmigrantes. A este ritmo, no habrá más espacio.

Soltó un suspiro, esto no será sencillo...

-Siempre suspiras cuando estás pensativa. No has cambiado en estos años Kali.

Esa voz. Ella se giró para ver a su derecha y bajo las sombras de los árboles, vio la figura encapuchada de alguien. Abrió los ojos con sorpresa y...

-¿Summer? – la mujer alzó la mirada y sus ojos plata eran visibles. - ¡Summer!

La Faunus fue con la mujer y la abrazó, sacando una risa a esta última. El abrazo duró unos segundos y...

-¿Cómo es que...?

-Permiso general de los reinos. Y sé cómo pasar desapercibida. – Summer dijo ello con una clara sonrisa. - ¿Cómo has estado Kali?

-¿Yo? Tú eres la que anda desaparecida Summer. Oí de lo que pasó con Raven y ... Juro que si la veo.

-Ya hablé con ella. Y sé sus razones. Es la Raven que conocemos. Pero la verdad, es que me parece que exagera en sus decisiones como siempre. Pero al menos está bien.

-Reconfortante... pero no quita que la golpeare.

Summer rodó los ojos. Pasó a ver a un lado y...

-Vi a tu hija. Será una belleza como tú en unos años.

-Me halagas. Sino mal recuerdo, la hija de Raven también tiene su edad.

-7. Y mi hija tiene 5. Es... raro ver lo que ha pasado en estos años. – Summer soltó un suspiro. - ¿Podemos hablar?

-Claro. Mi casa...

-No. No deseo que nadie sepa de esto. Y no me quedaré mucho tiempo, el barco zarpa en unas horas y yo me voy con él. Lamento no haber avisado, pero debía de confirmar algo aquí. Y como está a salvo, me puedo ir.

-¿Summer? – Kali notó la mirada de su amiga. – Por aquí.

La Faunus pidió que la mujer la siga. Caminaron por en medio de la espesura de la jungla, hasta estar lejos de todos. Cerró los ojos, sus orejas no captaban sonido. Estaban solas.

-¿Qué pasa?

-Esto puede ser increíble... - Summer se quitó la capucha, mostrando su rostro en su totalidad. – Pero debes de creerme.

Kali no creyó lo que Summer le dijo... ¿Estaba diciendo que...?

-Dices que... ¿Estás segura?

-Kali. Sabes que sólo a ti, Willow, Juniper y Raven les confiaría esto. Son mis amigas. A pesar de que a tres de ustedes las he visto con menos frecuencia. Pero confío en ustedes y esto es....vital. En caso me pase algo.

-No digas eso.

-Soy realista. – fueron las palabras de Summer. – Raven y Juniper ya saben esto que te he dicho. Iré a donde está Willow... merece saber las cosas, a pesar de su matrimonio tan desastroso que tiene.

-... ¿Segura que no puedes...?

-Debo de hacer esto Kali. Lo que sabemos del mundo, es mentira. Lo que... lo que sabemos es algo que no existe. Todo ha sido manipulado y debo saber quién lo ha hecho. Esta es mi misión... mi manera de cambiar el mundo.

-Pero... tus hijas. Si te pasa algo...

-... Estarán bien. Lo sé. – Summer sonrió triste. – Si un día las ves, no les digas que me conoces.

-¿¡Qué!? ¿¡Por qué!?

-Porque deseo que te conozcan a ti por cuenta propia y no por ser mi amiga. Y haz lo mismo con él, si es que un día lo ves. Tal vez acabe aquí al ser parte Faunus... no lo sé. Siento que este lugar será importante para él también.

-Summer... ¿Por qué me pides que niegue que te conozco? Somos amigas...

-Porque si me pasa algo. Lo mejor es que desaparezca de la memoria de la mayoría. Qué menos sepan de mí... es lo mejor. No sabes todo lo que sé Kali. Sólo te he dicho a ti y las demás la punta del Iceberg.

Kali no supo que decir. ¿En serio había más? Ella sólo...

-... Ok. Ok. Haré eso. Si veo un día al muchacho, velare por él. Como me lo pides...

-Oh Kali. Sé que lo amarás bien lo conozcas. Tal como yo lo hago. – Summer sonrió al ver algo de escepticismo en su cara. – Quizás quieras que se case con tu hija.

-A Ghira le daría algo... - ambas rieron. – pero, ¿No era que lo dejabas para tus hijas?

-Meh. Quien sabe que puede pasar. – Kali rodó los ojos. – Júramelo Kali. Por favor...

-Lo juro Summer. – Fue lo que la mujer dijo a su amiga. – Pero júrame que harás todo lo posible por volver Summer. No creo que poder soportar el saber que perdí a una amiga.

-... Sabes que lo intentaré. Es más, por lo que voy... es peor que lo que Ozpin trata de afrontar. Y aunque él tenga las mejores intenciones, no confío en él. Y eso se lo ha ganado a pulso...

Kali sabe que Summer y Raven servían bajo las órdenes de Ozpin, el director de Beacon en una batalla importante secreta. Ella no sabe mucho, sólo lo básico de algo del destino del mundo. Pero que su modo de operar fuera una de las razones por la que Raven se fuera y por la que Summer hacia todo esto en secreto.

-... Hasta que nos veamos de nuevo Kali.

-Igualmente Summer.

Se despidieron con un abrazo. No sabían lo que les deparaba después.

Fin Flashaback.

Kali termino de recordar ese momento. Era difícil pensar en su amiga.

-Summer sabía más. Pero que lo haya callado. Debió de ser por algo. Para no decirle a nadie. Ni a nosotras, sus amigas...

-Es por algo. Lo que sé de Vent, es porque así me lo dijo ella. Y que lo cuidemos... ella sabía que tú lo tratarías mejor que yo o Willow, la pobre tiene mucho en la cabeza.

-No es excusa Raven. Nada de esto lo es. Tú actitud, lo de Willow... hasta Juniper salió de las filas de batalla. No volví a salir de Menagerie desde ese día... Perder a Summer fue... como si hubiéramos perdido lo mejor de este mundo. Y cuando vi a Vent... ver lo mucho que se acerca a Summer en carácter e ideología. Temo que acabe como ella. Temo que mi hija... nuestras hijas, sufran por una decisión suya. Porque lo sabes, ¿No?

Raven se quedó en silencio...

-Lo sé. Pensará mejor él... que el mundo entero. La vida de uno, por la de miles. Noble y estúpido. Como Summer.

Y Kali no le pido dar la contraria. Era esa clase de personas, los primeros en pelear... y los primeros en morir.

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Y aquí estaba, viendo cómo las chicas estaban viendo ropas para lo que sería el viaje a Argus. ¿Cómo se metió en esto?

-Pudo ser peor. Al menos no te piden que cargues todo. Solo unas cuantas bolsas...

No era algo alentador Modelo X. Pero le daba la razón. No le era algo cómodo todo esto, a pesar de que pudo ser mucho peor. Mucho...

-Vent. – la voz de Weiss lo sacó de sus pensamientos. – Necesito una opinión de mi novio.

-¿Ok...? ¿Qué pasa? – Weiss alzó su pierna derecha con una media larga que parece ser para el frío. – Ahm...

-¿Se me ve bien? Anda, mira de cerca.

El muchacho tragó saliva. Sabía que Weiss tenía buenas piernas, dado que puede verse que las usaba para su movilidad y demás. Pero el verlas tan de cerca... y las medias las acentuaba muy bien. Qué de verdad, estaba tentado a... tocarlas.

-Ah Ah. No se toca... no en público. – La voz de Weiss lo sacó de su estado, notando que había alzado las manos para tocar lo que tenía en la cara. – Pero gracias por darme tu opinión. Tu cara dice todo.

Ella se sacó la media de modo sensual, haciendo que Vent se pellizque. Esto no está bien... ¡no está bien!

-Amor. Una ayuda aquí. – Era la voz de Yang.

Fue donde se encontraba y... notó que estaba frente a un vestidor.

-Ahm... ¿Yang?

-Ayúdame con esto. Se atoró y no lo puedo sacar. – la chica sacó su cabeza. – Y eso que escogí la talla más grande, pero igual me queda chico.

-¿Qué cosa...? Ay mamá... - Yang se giró para mostrar su espalda, denotando que solo llevaba un sostén en la parte de arriba. -... ¿Y te queda chico...?

-Creo que me crecieron los pechos. Por eso no uso sostén. Pero por el frío quería usar uno... - ¿¡Qué no lleva qué!? – Anda, sólo quita el broche.

Vent se quedó viendo la espalda de la rubia. Vaya que se veía bien... alzó la mano y quitó la restricción en el pecho de ella.

-Ah~. Gracias Vent. Me apretaba mucho. – Esto no era bueno.

-De nada... - Ella le dio un guiño antes de regresar al vestidor. - ¿Qué les pasa...?

-No puedes ser tan denso... - Blake lo miró con una ceja alzada, ella había llegado con Ruby. Quien tenía unas medias nuevas para el viaje. – Ellas tratan de aprovechar el tiempo que hay, y compensar el que... bueno...

-Eras un ciego insensible.

-¿¡Insensible!?

-No negó lo de ciego. – Fue lo que Ruby le susurró a Blake, quien rio un poco. – Pero es la verdad Vent, ellas solo quieren que las mires.

-Pues lo hago. Pero no me ayuda a mí. ¿Saben lo que tengo que soportar?

-Oh. ¿Qué cosa? Ilumínanos.

La sonrisa de Blake le dio cosa. Sabe que si dice algo, estaba muerto. Más al notar el como la Faunus parecía disfrutar de su desgracia.

-... No lo diré. Eso es secreto.

-Jejeje. No ayudas a tu causa Vent. – Lo sabe, pero no tiene mejor argumento.

No puede decirles las imágenes que se le vienen a la cabeza... y que por culpa de ellas, debe de soltar tensión cada mañana en la ducha para no ser molestado.

-Yo por mi lado, me probaré este sacó para el frío. Quien sabe que puede pasar. – Blake se dio media vuelta para poder ir a un vestidor, no sin antes pasar su mano por la cara de su novio, haciendo que él la vea pasar a su costado con un pronunciado movimiento de caderas.

... Lo van a matar. Eso es lo que estaba pasando. Lo van a matar... y no era bueno.

-Jajaja. Cielos Vent, no es nada nuevo que hagamos eso.

-Lo es si es un ataque por los cuatro puntos cardinales.

-... ¿En serio esa es la mejor analogía que se te pudo ocurrir? – Ruby lo miró de manera neutra.

-... Si, no fue la mejor. Pero no importa. Ustedes son un peligro para mi salud.

-¿No.... No te gusta que mostremos nuestro amor? – Ruby puso una mirada triste, que lo hizo tensarse. – A pesar de que te amo mucho... veo que no te importa....

-Nononono. ¡No es eso! ¡Es que las cuatro son tan bellas que no me ayuda Ruby! ¡Me gusta que me abracen!

-¡Genial, lo haremos más seguido entonces! - ... las lágrimas se fueron... ¡fue engañado! – Iré a probarme esto. Te veo en un rato.

Ella le dio un beso en los labios rápido, para ir a su lugar. A la vez que el muchacho se quedó quieto...

-Fui engañado con el truco más viejo del libro...

-Si. No puedes negar que es buena en la manipulación a tu persona... o eres muy crédulo. – Vaya ayuda.

Pasó a ver los que estaban presentes, frunció el ceño...

-¿¡Qué!? ¿¡Acaso jamás han visto a un chico ser dominado por los ojos de su novia!? ¡Lance la primera piedra el libre de culpa!

No hubo nada más que decir... Aunque sabe que estaba perdido. Esto no estaba siendo relajante.

...

Ya fuera de la tienda, el equipo RWBY y Vent estaban caminando de regreso a lo que sería la casa donde pasan el tiempo para poder... bueno, ya saben, descansar.

-Al menos no es tanta ropa. – Le debe de ver el lado bueno de las cosas.

-Son sólo cosas menores. Dado que hacemos, el viajar ligero es lo mejor. -Blake sonrió al ver su expresión de alivio. – Ya en Argus nos haremos de ropa de verdad.

-¿¡Qué!?

-Está jugando Vent. Cielos, aún eres algo crédulo. – Yang rio al ver su puchero. – Por cierto, linda bufanda Weiss.

-Gracias. Creo que me será útil en Argus. Por cierto, Vent... ¿En serio eso es todo lo que necesitas? Digo... puedes de hacerte de un poco más de...

-Tranquila Weiss, me basta y sobra. – el Megaman no estaba molesto con algunas cosas. Por lo que para él, esto no era la gran cosa. – Mejor pensemos en lo que haremos una vez lleguemos a Argus.

-A mí me preocupa más lo que la Reliquia puede hacer. Digo, ¿Para que la desearía tanto Salem? – la pregunta de Ruby era más que buena.

Y ese era el misterio. Sumado a que se deben de preocupar de los planes de Salem... deben de centrarse en lo de Albert. Vaya manera de pasar una vida...

-Puede que esto no tenga que ver al caso... pero al menos estando juntos peleando. – Blake dijo ello al entender que... - A pesar de todo lo que hemos pasado, hemos superado las situaciones que hemos vivido y... no hemos dejado a nadie de lado.

-Es verdad. – Weiss sonrió al entender que... - Si estoy metida en esto, me alegro que sea con ustedes. No lo quiero de otra manera.

-Oh. Me conmueves Weissy. – Yang esquivó un golpe de la peliblanca. – aunque les doy la razón. Antes este era solo un equipo más en Beacon. Pero ahora somos más.

-Una familia. Y hemos crecido desde ese día. – Ruby sabe que ya no es la misma de hace un año. Lo que han visto, hecho y experimentado... Ya no es la misma niña que empezó esto con un sueño... ahora es una meta. – y también conocimos a quien nos ha ayudado más que nadie.

Vent se sorprendió al ver a las cuatro lo pasaron ver. Es más, se puede sentir que hay más en esas palabras. Y él no puede negar lo contrario. No puede negar que esto era algo que puede ser difícil. Quien sabe que le depara el futuro...

Pero sabía que afrontarlo al lado de ellas, era suficiente. Quizás aún no pueda decirlo en palabras lo mucho que les importa. Un día lo hará. Y ellas lo sabían.

Si estaba con ellas, con el resto... puede hacerlo. Puede afrontar lo que sea que el destino le mande.