El ruido metálico de los engranajes de giro que se encuentran sobre la oficina del director era lo único que se oía, con el propio profesor Ozpin caminando de regreso a su escritorio y sirviéndose un trago de su tetera mientras observaba el sistema de ruleta del Vytal Festival Tournament decidiendo el próximo partido.

-Espero que la Señorita Nikos nos dé pronto su respuesta.

Ozpin no era tonto, sabía que el día que Pyrrha vino a la oficina, ella notó el Biometal que él dejó en la mesa de modo que sea visible para ella. Quería ver si pasaba algo y cuando notó como de modo constante ella miraba al objeto cuando pensaba lo que quería decir u oía cosas que parecían una locura. Lo que le hizo pensar que... quizás ella era la que ese Metal esperaba. Lo que ella...

Si bien siguió con el plan de mostrarle a ella a Amber y decirle lo necesario, en el fondo, también ideo lo que sería esto. Que la chica elija su destino, ya que no lo veía bien el como la estaba forzando a elegir. Sabe que estaba mal lo que estaba haciendo, poner tal carga en ella, pero... es necesario.

Al final, el director solo tuvo la alternativa de esperar que camino elige ella. Siente que... puede que sea lo mejor.

-Ya muchos errores, de seguro debo aprender a dejar de pensar que todo estará bajo mis planes. – Ozpin bebió de la taza. – Si todo sale de la mejor manera, espero que el joven Vent sea capaz de soportar lo que se viene.

En ello, oyó del proyector que tenía frente a él...

-Muy bien, ¡ahora es el momento de comenzar el proceso de aleatorización para nuestra próxima pelea! – Oyó a Port decir ello con energía, al menos lo de ayer no está afectando a nadie.

-Parece que nuestro primer contendiente es ... ¡Penny Polendina, de Atlas! Y su oponente será ... ¡Pyrrha Nikos, de Beacon! – Así es Oobleck.

Ozpin se sentó detrás de su escritorio y tomó un sorbo de su taza mientras iba a mirar la pelea "aleatoria" que se está a punto de llevar acabo. Veamos que elige la chica.

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En la arena del Coliseo, se veía como Pyrrha estaba acomodando sus armas en su lugar. Se le veía mucho mejor que antes, era algo notorio. Además de que...

-Céntrate en la pelea. Luego fantaseas con tu novio. – Se sonrojó un poco por lo que el Modelo Z le dijo. – A todo esto, ¿Por qué me trajiste contigo?

-... No lo sé. Me siento más segura contigo a mi lado, es todo. – El Modelo Z no dijo nada, solo quedó en un silencio cómodo. – Y... No lo sé, siento que es necesario.

-¡Sa-lu-dos! – Pyrrha alzó la mirada, para notar que Penny la estaba saludando con energía. - ¡Pyrrha Nikos! ¡Es un honor conocerte finalmente!

-Oh... Pues... igualmente. – Lo primero era respetar a tu oponente, algo que le enseñaron sus padres.... Su padre... - Tengamos un buen combate.

-¡Por supuesto! ¡Esto va a ser muy divertido! – Vaya que estaba llena de energía.

Pyrrha sonrió un poco, soltando un suspiro y mostrando la seriedad que la caracteriza en pelea, sus armas Miló y Akoúo̱ ya en la mano. Es más, tras el escudo estaba el Modelo Z, que estaba listo para lo que sea.

-Hmmm. Esto es... - El Biometal sintió algo raro... esta energía...

Y Oobleck daba la cuenta regresiva...

-1... - mientras que el general James Ironwood se sentaba tranquilamente a observar la pelea, como si supiera que nada puede salir mal. – 2... - Mientras que Nora Valkyrie y Lie Ren animan a su compañera de equipo mientras Jaune Arc solo observa todo con una sonrisa. – 3... - Emerald Sustrai se inclina hacia adelante con una mirada intensa. - ¡INICIEN!

De repente, Penny se halla rodeada por su arma, Floating Array, haciendo un gesto con las espadas a su orden antes de lanzar una andanada de ellas hacia Pyrrha, quien corre hacia ellos y salta o desvía cada hoja apuntada. Las espadas vuelan por el aire hasta que se dan la vuelta y regresan a la pelea.

Solo que en ello, Pyrrha sintió un pitido en su mente.... ¿¡Que demo...!?

-¡Tratan de alterar tus sentidos! - ¿¡Que dijo!? - ¡Tratan de hacerte lo que a esa chica, quieren hacer que creas algo más! – la pelea... deben de parar....

Pero los ataques de Penny con la espada siguieron, la pelirroja salto hacia un lado, logrando evitar que casi le de la espada.

-¡Espera, debemos de parar!

-¿Eh? ¿Por qué? La pelea recién empezó. Es más, no podemos hacerlo. Órdenes son órdenes. ¿no?

Penny reinició el ataque, solo para que Pyrrha trate de pensar en como hacer que la oiga. ¿¡Que le queda por hacer!?

Mientras tanto, el Modelo Z sentía algo raro en la chica esa. Esos movimientos, esa energía... ¿Será posible...?

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Mientras todo eso estaba pasando, Ruby Rose todavía está mirando a Mercury Black de pie, que sonríe con aire de suficiencia ante la confusión de la chica más joven, al menos no ha notado que activó la señal de ayuda de su Scroll.

-Mercury, ¿qué estás haciendo? ¡Estabas herido! Por qué ... -entrecierra los ojos con sospecha al notar que... - ¿Qué está pasando? - Mercury no respondió, todavía sonriendo con malicia. Bien. Si no me vas a decir ... - ella intentó moverse alrededor de él, pero él le bloquea el camino, luego lo vuelve a hacer cuando ella se hace a un lado. – Agh... ¿¡Que es lo que planeas!?

-Nada. La verdad, todo salió a pedir de boca gracias a la idiota de tu hermana.

-... ¿Qué te rompa la cara y algunos dientes es parte del plan que tienes? – No pudo evitar soltar eso, ya que se veía que el chico no tenía unos dientes... daba algo de risa.

Claro, Mercury no lo vio con mucha gracia, es más... parece que ella tocó fibra sensible. De todas maneras, ella tiene que hacer algo.

-Tal vez no pueda hacer pagar a tu hermana lo que me hizo... pero tú, eres otra historia.

Y vaya momento para haber venido sin su arma. Demonios... debió de traerla... claro, no pensó que esto pasaría jamás. Mercury avanzó, bloqueando el camino de Ruby con los brazos extendidos, restringiendo sus movimientos sin importar hacia dónde se mueva. Presa del pánico, hace una mueca y gira hacia adelante, convirtiéndose en una mancha roja y pétalos que se disparan hacia Mercury, solo para que el chico la patee dos veces a mitad de carrera con Talaria y la derribe al suelo.

-¡Agh!

-No te sirve de nada niña. Este espacio cerrado es lo peor para ti.

-Ngh.... – Ruby se puso de pie, lista para tratar de seguir huyendo, pero a la vez, cuidando que su Scroll no se rompa. Espera...

...

En otro lado, en medio de los pasillos del interior del Coliseo, el resto del equipo RWBY estaba buscando a su líder, ya que en verdad estaban preocupadas. Tanto que... Weiss miraba el Scroll para poder saber la intensidad de la señal y si se acercaban o no.

-A este paso jamás hallaremos a Ruby. – Yang se estaba preocupando. - ¿¡Quien construyó este lugar!? ¡Es un maldito laberinto!

Blake por su lado, miraba los pasillos y cerró los ojos. Centró sus sentidos en sus oídos, el doble que tiene, es muy útil. Sus amigas vieron como sus orejas felinas se movieron, como captando sonidos que un humano no. La Faunus abrió los ojos y...

-¡Por aquí! – Parece que sabe donde ir.

Las demás la siguieron, Yang aun con Crescent Rose en su espalda, para su hermana, no tardó ni un segundo en ir tras su compañera, Weiss por su lado.

-¿¡Como lo sabes!? – hizo la pregunta mientras corrían.

-El Eco... el sonido que queda o las ondas de una pelea o algo similar, además de que... eso es sospechoso en un pasillo donde no debe de pasar nada. – Era un buen argumento.

Weiss miró su Scroll, la señal se hace más fuerte. ¡Están más cerca!

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Por su lado, Vent logró llegar a la zona donde sabe, que puede llegar a la Arena. Zwei ladró, como diciendo que estaban cerca, pero...

-¡Alto ahí! – Oh por favor.... Notó como los soldados que protegen la zona, lo apuntaban con sus armas. - ¡Estas bajo arresto por la infracción de las leyes del Festival!

-¡No entienden! ¡Algo malo está por pasar, deben de dejarme detener la pelea! – Trató de razonar con ellos, pero...

-¡Quieto! – Ugh... son igual de tercos que el general por el que trabajan.

El Megaman Modelo X solo se impulsó hacia ellos, sin importar que estaban apuntando con sus armas hacia su persona. En una fracción de segundos, los desarmó y los dejó en el suelo, esperando que lo perdonen por lo que acaba de hacer, pero que es necesario. La vida de alguien está en juego.

Sin perder más tiempo, Vent siguió corriendo hacia el centro de la Arena...

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En medio de su pelea, habiendo devuelto el escudo a su espalda, Pyrrha gira la jabalina para bloquear cada golpe de espada de Penny, dejando caer su arma cuando necesita dar un salto mortal después de ser golpeada por un corte, solo para devolvérsela magnéticamente a la mano mientras Penny prepara otra ola de cuchillas.

-¡Es impresionante! ¡Qué gran exhibición de la señorita Polendina!

-¿Qué ese profesor no sabe que más decir? Pyrrha, tranquilízate. Trata de desarmarla. No la lastimes.

-Lo estoy intentando. – Pyrrha vio una espada ir hacia ella. – Pero no me está haciendo caso.

Pyrrha salta sobre una espada que iba hacia ella, balanceándose hacia Penny, solo para que el asalto se detenga por una colección de cuchillas, aunque ella salta lejos del corte de represalia cuando Penny también retrocede. Ella trataba de defenderse de la multitud de espadas con la longitud de su arma, pero se ve obligada a retroceder independientemente, lo que hace que Pyrrha enrolle el escudo desde la espalda hasta el brazo con su polaridad.

-¡Escucha Pyrrha, si ves algo fuera de lo normal, dime y te diré lo que yo veo! Es lo único que te puede salvar de lo que sea que te quieran hacer ver.

Lo sabe... lo sabe. Pyrrha se puso en guardia. Mirando hacia abajo para ver la energía negra de su Semblance doblar las armas en sus manos de manera antinatural por una fracción de segundo. Eso... Eso no era normal...

Ver como las espadas iban de nuevo hacia ella, Pyrrha alzó a Akuo y bloqueó las espadas de nuevo. Pero el ataque siguió y siguió... Pyrrha giró salvajemente mientras desviaba y esquiva cada espada, hasta que se acerca lo suficiente a Penny para lanzar algunos cortes con la lanza, enviándola volando hacia atrás mientras Pyrrha aparta las espadas de ayudar a su portador.

-Woah, eso es genial. ¡Se ve porque eres la campeona! – Penny se mostraba divertida por lo que estaba pasando.

Penny se detiene y hace una nueva serie de movimientos, las armas se doblan hasta que está rodeada por varios rifles láser, algunos de los cuales abren fuego contra la campeona que se acerca.

-Rifles...

-Lo son...

Pyrrha evita las explosiones y luchar contra las espadas restantes con su espada hasta que se desliza en posición para cargar contra Penny y golpearla. Pyrrha se endereza con una sonrisa victoriosa que desaparece en el mareo, justo cuando ve a Penny dispararse hacia adelante, las armas disparando detrás de ella como un jetpack para que pueda saltar en el aire y luego caer como un meteoro energizado sobre su oponente.

-Es lo que veo...

-Si... esta chica... Si lo que sospecho es correcto, Pyrrha... No uses tu Semblance a todo poder...

¿A que se refiere? Pyrrha se puso de pie y no esperó que una espada derribe su escudo y luego otra haga lo mismo con su espada. Ella trata de recuperar este último con su magnetismo, pero tiene que usar el poder para enviar una espada voladora al lado de Penny. Desaparece detrás de Penny, solo para que ella sonríe y levanta los brazos mientras varios aparecen por encima de ella, con el objetivo de atacar.

-¡Pyrrha toma la espada, deja el escudo! – en el escudo, el Modelo Z le recomendó la acción. - ¡Aún puedo ayudarte desde aquí! ¡Céntrate!

Ella asintió, alzó la mano y trajo su espada hacia ella con su Semblance, la tomó y se puso en guardia. Al mimo, con Emerald, ela todavía entrecerrando los ojos en la arena, el sonido agudo de la Semblace de Emerald se escucha cuando las ocho espadas de Penny se duplicaron, luego se triplicaron, multiplicándose en un matorral irreal de espadas.

Al ver esto, Pyrrha retrocede vacilante, tanto en la realidad donde las ocho espadas están listas para avanzar como en el mundo alucinado, donde la nube de armas se espesa para bloquear incluso a las multitudes a su alrededor.

-... Hay miles de espadas...

-¡Solo hay ocho en la realidad, Pyrrha! ¡Rápido, debes tenerme en tu mano, puedo ayudarte a ver las reales de las falsas!

... Estaba siendo engañada. Se giró hacia su escudo y... al ver a una de las espadas ir contra ella, no sabiendo como defenderse, Pyrrha solo puso el arma al frente, logrando esquivar el ataque que vio como miles, estaba asustada, pero oía como la voz del Modelo Z le decía que era uno. Que uno viene a la izquierda, bloquear. Al frente...

Pero cada ataque de esas espadas, estaba dañando a Akuo. La pelirroja veía como el arma se rajaba, esas espadas eran muy fuertes, tanto que su arma no... No va...

-¡Pyrrha, rayo a tu izquierda!

La voz la sacó de su preocupación, cambió al modo jabalina y lanzó su arma al rayo para que esta la salve, pero lo que pasó... la hizo sentir que perdió algo de ella. El rayo fue tan fuerte, que Akuo se partió a la mitad... su leal arma, había sido dañada a un punto que no la puede usar más en esta pelea... quizás la deba de rehacer... El arma de...

La sorpresa de ello, llegó a los ojos del equipo JNPR, que no entendían que estaba pasando por la cabeza de Pyrrha, quien se quedó viendo el lugar donde su arma cayó muy dañada. Ella... siempre había cuidado esa arma con tal cariño, que...

-¡Es solo un arma, el valor de esta jamás se compara al recuerdo de tu padre, Pyrrha! – la voz del Modelo Z la sacó de su estado de shock, logrando que ella se mueva. Pero que reciba un corte en el brazo. - ¡Rápido!

Sin pensarlo dos veces, solo confiando en la voz del Modelo Z y no en sus sentidos, la chica corrió hacia donde estaba su escudo, tratando de modo desesperado llegar a este. Debe de tenerlo en sus manos... Es lo único que la puede salvar.

AL mismo tiempo, Emerald no entendía que estaba pasando... ¿Por qué esta actuando de un modo distinto al que habían previsto? ¿Qué hay en ese escudo que le importa más que seguir la pelea y usar su Semblance?

-... Esto no es parte del plan. – Y sabe que a Cinder, eso no le va a gustar.

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De vuelta en los pasillos, Ruby intenta bloquear una patada de Mercury con sus brazos, pero recibe de lleno el ataque en la cara, maldita bota. A continuación, él dispara un tiro, pero ella logra agacharse y luego apenas falla en ser golpeada por su patada hacia abajo y salta sobre su pierna, pasando en espiral a su lado, esta vez avanzando mucho más por el pasillo. Pero Mercury la atrapó de la caperuza, haciendo que ella caiga al suelo.

-¡No vas a ir a ningún lado, no hasta que tu amiga robot sea chatarra!

Ver la malicia en los ojos de Mercury, solo la hizo pensar que era nada parecido al chico que pensó era su amigo con Emerald. ¿Acaso ella estaba metida en esto? Se puso de pie, tratando de pensar en una salida posible, solo para sentir que no la iba a hallar. No sin un arma.

-No importa lo que hagas... No irás a ningún lado.

-¿Eso crees? – Esa voz...

Atrás de Mercury, Yang apareció con el puño alzado, su Semblance lista y le dio un golpe en toda la cara al muchacho, que lo mandó al otro lado del pasillo. La rubia soltó un suspiro, eso estaba mejor...

-¿¡Yang!? – Ruby se sorprendió de ver a su hermana aquí. - ¿Cómo...?

-¡Luego, por aquí! – Weiss la hizo recordar y Blake hizo un gesto con la mano.

La líder asintió y corrió tras su equipo, dejando a Mercury en el suelo, quien estaba maldiciendo el no haber notado nada. Pero era tarde, ellas no pueden evitar lo que está por pasar. Soltó una risa, sabiendo que lo que se iba a venir, será intenso...

Aunque el fastidio en su boca, lo hizo escupir, solo para notar que... había escupido otro diente...

-Maldita puta pechugona... ya me las pagará.

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En medio de los pasillos, Yang le dio a Ruby su arma, quien no entendía aun como es que pasaba todo esto. Blake le dijo lo que Vent creía, pero ella sentía que era muy de acuerdo a lo que vio. A que Emerald, estaba aquí... Si lo que piensan es verdad. Entonces...

-¡Penny está en problemas! ¡La Semblance de Pyrrha es dañina para ella! Ella... ¡Penny es un robot!

El resto vio a Ruby con sorpresa, pero la verdad era que no lo estaban tanto. Es decir, han visto Grimms parlantes, metales que le dan armaduras a personas... Si, un robot es lo de menos sorprendente en este punto de sus vidas.

-¿¡Y Vent!?

-Fue a detener la pelea. Parece que siente que todo se centra en ello. Y parece que es cierto.... – Ruby asintió a las palabras de su hermana, aunque...

-... ¿Qué hizo para que ahora se hayan reconciliado? – Miró a su hermana con sospecha, más al ver el rojo en la cara de Yang... - Yang...

-¡Luego! ¡Debemos salvar a Penny!

Ngh, es verdad. Ya luego pedirá explicaciones. Tanto ella como Blake sienten que esto será el pan de cada día. Vent, aunque no lo quería, era todo lo que esperas de un héroe.

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De vuelta en la arena, se puede ver como Pyrrha esquivaba cada uno de los ataques de Penny, logrando avanzar poco a poco, hasta casi llegar con su escudo, pero al ver como este era clavado al suelo por una de las espadas de la chica, solo hizo que Pyrrha note que el Modelo Z estaba fuera del compartimiento del escudo donde había estado. Saltó hacia él y lo tome con su mano, logrando esquivar las espadas y rodando un poco.

Al estar con el Bimetal, ella sintió como las ilusiones se estaban disipando, podía ver cuales eran reales. Ella extendió sus brazos y envió una onda de choque magnetizada, haciendo que cada hoja sea enviada tambaleándose hacia Penny, quien también se ve afectada involuntariamente por el ataque de la Semblance agarrándose el pecho con dolor.

-¡No, Pyrrha! ¡Tus ataques con la Semblance la dañan!

-¿¡Como!? – Pyrrha miró al objeto en su mano, no notando como todos la veían con rareza.

-¡Es un robot, tu poder es peligroso para ella!

Esa revelación, hizo que Pyrrha dude de que hacer. Sabía que no puede atacar con sus poderes, ya que... la mataría. Pero ver como las espadas, las reales iban hacia ella, la hizo dudar... no sabe que hacer para...

-¡Pyrrha! – Esa voz... - ¡Usa tu Semblance, yo evitaré que la pase algo!

Ella se giró para ver a Vent correr hacia la Arena, ante la sorpresa de todos. Pero la pelirroja afiló la mirada, lanzó otra onda de choque magnetizada, solo que esta vez, el Megaman Modelo X, como la última vez, se lanzó a la arena pasando la seguridad de la barrera y saltó hacia Penny, abrazándola para que la onda no la afecte del todo, ante la sorpresa de la chica.

Y cuando todo acabó, Pyrrha logrando desviar las espadas a su persona, ella miró como Vent y Penny cayeron al suelo. No le importó el abucheo de las personas por la interrupción de la pelea, solo quería ver si su amigo estaba bien.

-¡Vent! ¿¡Estas bien...!?

-Si... - el Megaman se sobó la cabeza. – Al menos logre disminuir la onda de choque con mi cuerpo, pero que raro se siente. – En eso, recordó que... - ¡Penny, ¿Estas bien?!

-S-Si... - ambos vieron con sorpresa, como la chica... - Pe-Pero...

No solo ellos, sino todo el mundo era capaz de ver lo que había pasado con Penny. Las cuerdas atadas a sus propias armas se habían puesto alrededor de su brazo izquierdo, que se arrugaron por la fuerza con la facilidad de una lata de aluminio. Eso basto para que algo del torso de la chica se abra, mostrando circuitos y que la piel que la cubre, era falsa, escondiendo lo que era el metal que la componía. A un lado de ella, estaba su brazo izquierdo, desmembrado, pero chispas salían de la parte que los había del cuerpo, así como de ella. La chica mostraba que su sistema de visión estaba afectado, ya que uno de sus ojos se mostraba apagado. Ella alzó la vista con miedo, esperando ver miedo en la cara de esos dos... pero no la recibió... Pero si notó la sorpresa en todos en el estadio.

-¡Penny! – La chica giró la cabeza, para ver que el equipo RWBY llegaba a escena, Ruby miraba a su amiga. – Oh Dios...

-Yo.. Yo no... - Penny no sabía que decir, todo el mundo sabe que ella...

Si bien trataron por su lado, de cortar la comunicación, esto no pasó. Era como si nada del sistema control de la Arena, reaccionara. En eso una voz familiar resuena en todo el Coliseo y el resto del mundo observando estos eventos. Vent puso su mano en el hombro de Penny, alzando la vista con Pyrrha con el Modelo Z en su mano derecha.

-Esto no es una tragedia. Esto no fue un accidente. Esto es lo que sucede cuando entregas tu confianza, tu seguridad, tus hijos, a hombres que dicen ser nuestros guardianes. – varios miembros de la audiencia parecían inquietos, mientras que Jaune se ve boquiabierto en estado de shock, por lo que estaba pasando. - Pero no son, en realidad, nada más. Que hombres. Los directores de nuestras academias ejercen más poder que la mayoría de los ejércitos, y uno fue lo suficientemente audaz como para controlar a ambos.

-Vent... esa voz... es la de... - El Modelo X tiene razón... si Mercury y Emerald estaban en esto... Significa que esa mujer Cinder y... Mint...

-Se aferran a este poder en nombre de la paz, y sin embargo, ¿qué tenemos aquí? El intento de una nación de crear un ejército sintético, desgarrado sin piedad por el alumno estrella de otra. ¿Qué necesidad tendría Atlas de un soldado disfrazado de niña inocente? No creo que los Grimm puedan notar la diferencia.

Penny se mostró aterrorizada, su mano derecha buscó la de Vent, quien le dio el apoyo que debe de querer. Demonios, esa mujer... Pyrrha miró lo que la quisieron obligar a hacer, apretó los dientes al sentir que casi la usan para algo tan horrible. Su culpa, se tornó en determinación, al saber que... esto era imperdonable.

-Quizás Ozpin sintió que derrotar a Atlas en el Torneo ayudaría a la gente a olvidar su colosal fracaso para proteger a Vale cuando los Grimm invadieron sus calles. O tal vez este fue su mensaje al dictador tiránico que ha ocupado un reino desprevenido con las fuerzas armadas. Honestamente, no tengo la menor idea de quién tiene razón y quién está equivocado. Pero sé que la paz es frágil y los líderes de nuestros reinos llevan a cabo sus negocios con guantes de hierro.

El equipo RWBY vio con rabia lo que ella decía. Estaba diciendo eso solo para fomentar el miedo, la incertidumbre entre las personas que estaban viendo todo. Ese miedo solo...

-Como alguien que proviene de Mistral, puedo asegurarles que la situación allí es ... igualmente indeseable. Nuestros reinos están al borde de la guerra, pero nosotros, los ciudadanos, nos quedamos en la oscuridad.

Mientras más decía ello, más podía sentirse la negatividad. El festín de los Grimms, esto era malo, ya que estaban logrando entrar a la ciudad. Vent tomo a Penny en sus brazos para sacarla de ahí, mientras que Pyrrha al ver lo que pasaba, tomó una decisión. Poco a poco, se empezó a retirar los trozos de la armadura que siempre llevó...

-Entonces les pregunto: cuando se disparan los primeros tiros ... ¿en quién creen que pueden confiar? – y con eso, la comunicación se cortó.

Y el caos se extendió en menos de un segundo, ya que el sonido de la alarma de ataque, sonó...

-Alerta. Ataque entrante de Grimm. Nivel de amenaza: nueve. Busque refugio de una manera tranquila y ordenada.

Dicho esto, un Gigante Nevermore apareció encima del campo de fuerza abovedado de la arena, dando una serie de chillidos ensordecedores mientras arañaba y picoteaba la defensa con su pico, logrando penetrarla con poco esfuerzo. Ya que su cabeza ya estaba dentro del lugar...

-¿¡Como hizo eso tan rápido!?

-El sistema de seguridad... ¡Lo quitaron! – Weiss no lo creía, Blake quiso maldecir.

El equipo RWBY corrió donde estaban esos tres, así como el equipo JNPR, así como algunos estudiantes se quedaron en medio para ver que estaba pasando. Esto era un caos, todo el estadio había estallado en un ataque de pánico horrible.

Lo que se vino luego, fue ver al Nevermore abrirse paso en la barrera del Coliseo, su cuerpo ya casi entero.

-¡Hay que luchar! – Nora se preparó para lo que sea, pero...

-¡La gente debe de evacuar la zona, ayuden en ello! – Vent se giró y le pasó a Penny a Yang, quien sintió el peso de la chica. – Yo me haré cargo de los Grimms que aparezcan.

-¡No puedes con tantos solo! – Ruby quería que viera que era una locura, pero en eso...

-No lo estará... - Pyrrha se había quitado su armadura. Solo quedaban en ella sus pantalones, el bra deportivo que usaba y los guantes. – Yo... Ya sé que hacer...

-¿Pyrrha? – Jaune vio como ella se llevaba las manos a la cabeza. La tiara que siempre llevaba, se la quitó. Como si ya no fuera una necesidad para ella. - ¿Qué estas...?

Mientras el Nevermore ya estaba casi dentro, Pyrrha tiró la tiara al suelo. Abrió los ojos y se mostró decidida.

-... Si, siempre creí que mi deber es proteger a la gente. Pero... ahora veo que ser una Cazadora no es el único medio para luchar por lo que creo. No... Hay miles de maneras... pero yo elegiré ese destino... en el que yo creo.

Si bien sus palabras eran... inspiradoras, no era el momento para...

-Eso era lo que deseaba oír. – Vent y el Modelo X reaccionaron a esa voz, vieron con asombro, no más que los demás, como el objeto que Pyrrha tenía en la mano, flotaba y se ponía frente a ella. – Nadie más puede elegir tu destino, lucha por lo que crees... y si deseas mi poder, te lo daré.

-¿¡Un Biometal!? – Weiss reconoció el objeto, diferente al Modelo X, pero... - ¿¡Acaso eres...!?

-... Si... Dame tu poder...

-Entonces, ¡Peleemos juntos por lo que crees, Pyrrha Nikos! – La gema del Modelo Z brilló.

-¡Vamos, Modelo Z! – Pyrrha tomo al Biometal con su mano derecha, ante la mirada de todos los que se habían quedado a ver que pasaba, así como el Nevermore que ya estaba dentro y se lanzó hacia ellos. - ¡Megamerge!

-¡Biolink Established! M.E.G.A. System Online!

Con eso, el destello rojo que la envolvió, solo los cegó al mismo tiempo que el Neveremore se lanzaba al ataque, pero en un segundo, se vio cortado de manera vertical, a la mitad. Su cuerpo cayó antes de que siquiera se acerque a ellos.

Se vio como la persona que había hecho ello, estaba con una armadura principalmente roja similar a la del Modelo X; sin embargo, el diseño del casco era diferente. El casco es un poco más grande y más estilizado, además de mostrar una gema verde en forma de un triángulo invertido. Lo más llamativo, era el largo cabello que salía del casco... se vio que era rojo un segundo, pero se tornó más rubio, dejando solo unos mechones de su color original. Además de que llevaba una espada de doble filo con diseño triangular, con un mango de color blanco puro...

El nuevo Megaman vio al Nevermore caer a sus pies y desaparecer, ella giró y se vio con la cara de sorpresa de todos... hasta los que vieron todo aun desde las lejanías.

-Pyrrha... eres... - Jaune miró a la chica con... con asombro, incredulidad.

-... Megaman Modelo Z. – Pyrrha sonrió un poco, al sentir que este poder... - Gracias Modelo Z, por todo...

-No las des aun, hay mucho que hacer.

Y era así, ella se giró, al ver que más Grimms llegaban, pero estos fueron destruidas por el X-Buster del Modelo X, que estaba al lado de la chica.

-Con esto no pueden decir que no pudo... - Miró al resto y... - Vayan. Dejen que nos hagamos cargo. Los veremos luego.

Sin que puedan decir nada ante lo dicho, los jóvenes tomaron a Penny y dejaron a los dos Megaman en la arena, pidiendo que se cuiden. Ambos solo alzaron armas, listos para lo que sea.

-... Es raro... Es como...

-Si... ¿Lo hubiéramos hecho antes?

Ambos Megaman se vieron las caras y sonrieron. Si la nostalgia... era rara, pero era bienvenida. Tanto que...

-¿Cómo los viejos tiempos... Modelo Z? – El Modelo X recordó a su amigo...

-Hasta el final, Modelo X. – Y el Modelo Z recordó a su leal compañero.

-¡Que sepan del poder de los Megaman! – Ambos Biometales sabían que esto lo iba a cambiar, que el mundo... sepa quienes son.

-¡Vent Lucilum, Megaman Azul, Modelo X! – el chico cargó energía en su Buster.

-¡Pyrrha Nikos, Megaman Roja, Modelo Z! – la chica agitó la espada, lista para atacar.

-¡Al ataque!

Ambos Megaman se lanzaron hacia los Grimms que estaban en la arena, así como los que estaban tratando de entrar. ¿Desean crear caos? ¡Lo harán sobre ellos!

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En la oficina del director, Ozpin estaba agarrando su bastón con fuerza, mirando cómo la ciudad es atacada con una expresión horrorizada. No podía creerlo, pasó lo que temió y todo se salió de las manos...

Oyó como Qrow y Glynda llegaban a la oficina, la expresión de ambos era un reflejo de la suya. El caso presente, era algo que hasta él...

-Oz...

-¡Vayan a la ciudad! – Ozpin alzó la voz, impidiendo que Qrow continúe.

-Pero... No podemos...

-¡AHORA! – no era una petición, era una orden. - ¡La gente está en riesgo, protéjanla! ¡YA!

Qrow y Glynda intercambiaron una mirada antes de regresar por donde vinieron. Mientras tanto, para la nada información de ellos, Mountain Glenn estaba casi en silencio, ya que todos los monstruos que acechan la zona, desde Beowolves hasta Boarbatusks, Ursai y Nevermores, e incluso Goliath pesados con grandes ojos rojos se precipitan hacia adelante.

Ozpin sentía que esto era una pesadilla, años de protección, de tener este lugar a salvo... destruidos en menos de un minuto. ¿Qué hizo mal? ¿Acaso se confió tanto que estaba pagando el precio de esa confianza? ¿Acaso hizo mal en no tratar de pelear más para tener control del Festival?

La llamada de James, no ayudó en su humor.... Una chica robot. Un arma disfrazada en la forma de una chica. ¿¡Que estaba pensando!? ¿¡Jugar con el hecho de querer ser un Dios!? Le dio emociones a la chica... le dio emociones a un arma. ¿¡Que destino tan cruel deseaba darle a la pobre chica que estaba ahora destrozada por la verdad que ahora todo el mundo, sabe que no es humana!? Que en si no debía de existir en el mundo.

-Ozpin, la chica ... ¡Yo puedo explicarlo!

¿Explicar que cosa? ¿Acaso quiere que crea que lo hizo por una buena razón, pero que no dijo nada? ¿Es eso? James deseaba hacer las cosas, pero sus métodos tan extremos, su modo de ver las cosas... era algo que él jamás va a aceptar. No luego de esto...

Tomó aire y trato de calmarse...

-Trajiste tu ejército a mi Reino, James. Diciendo que lo deseas usar para proteger a la gente, ¿No? ¡Úsalo!

Cortó la llamada, no esperando la respuesta. Solamente poniéndose a ver lo que estaba pasando. Si esto sigue así, no hay duda alguna de que el ataque es por Amber. La quieren... quieren el poder. Lo que solo le hace pensar, que...

-Debo de ir a la bóveda. Sea lo que haya elegido la Señorita Nikos, debemos proteger a Amber.

AL mismo tiempo, trató de conectarse con Serpent, logrando ello al instante.

-¡Ozpin, la seguridad de mi compañía está deteniendo a los Grimms que están logrando entrar, pero no bastará para poder ayudarlos en Beacon o el Coliseo! – Eso es malo, pensaba que...

-Haz lo que puedas en las zonas de los bordes Serpent. Lo que necesitamos, es tener todas las fuerzas posibles en acción y minimizar los ataques posibles. ¡Haz todo lo que puedas!

-Lo haré. Defenderé con todo mi poder la ciudad. Solo ten cuidado Ozpin.

La llamada terminó, el director de Beacon camino hacia el ascensor. No había tiempo que perder.

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James Ironwood jamás se había sentido tan perdido en palabras. Lo que pasó con Penny, lo que estaba pasando. Vio como Pyrrha Nikos estaba usando una armadura similar a la de ese chico, solo que roja y en vez de un cañón, usaba una espada de energía.

Con que esa es la elección de la chica... Sabiendo que debe de hacer, La preocupación de Ironwood se convierte en determinación. Su flota de barcos está siendo atacada por Nevermores aún más gigantes, aunque con un efecto mínimo. Los soldados adentro se apresuran a ingresar comandos dentro del puente alrededor de su oficial al mando.

Las naves eran un punto de defensa vital para la ciudad en estos momentos. Si pierden esa zona, sería un caos.

Lo que nadie podía imaginar, es que dentro de una de las naves... esta destruida, las computadoras se encienden y los hombres caen mientras un par de botas altas caminan a través de la destrucción. Vestido con un uniforme de Atlas y sosteniendo tanto las armas Hush como Melodic Cudgel con un sombrero de plumas en la parte superior, Neopolitan abrió la puerta de una celda de alguien de aspecto familiar con una sonrisa maliciosa.

-Ya era hora... - El hombre sonreía a más no poder.

La persona que Neo salvó tenía los ojos inclinados de color verde oscuro y el pelo largo, anaranjado y brillante, con un flequillo largo que le cubría el ojo derecho. El delineador de ojos negro trazó su ojo izquierdo visible. Vestía un traje blanco con forro rojo con pantalones largos negros y zapatos negros. Sus accesorios incluían una pequeña bufanda gris, guantes negros con mangas abrochadas y un bombín negro con una pequeña pluma metida en su banda roja.

Este hombre, era el criminal Roman Torchwick, quien había seguido al pie de la letra, el plan de CInder. Dejarse atrapar, para luego moverse en el interior de la nave central, donde había estado aprisionado. Que idiotas...

Pasando a la escena de afuera, se puede ver a las aeronaves, donde la nave más lejana se vuelve repentinamente hacia sus aliados y dispara varios láseres rojos brillantes al motor de la más cercana. La nave en llamas choca contra otro en una serie de explosiones y los envía a ambos hacia las aguas. El poder aéreo, había cambiado de nuevo.

-¡SI! ¡jajajajaja! ¡es genial estar de vuelta Neo! ¿¡No lo crees!?

El hombre miró a la mujer que era su mano derecha, ella le sonrió como pudo, solo para ponerse algo triste. Ella miraba la destrucción que se estaba generando en la zona y no pudo evitar ponerse a pensar, si él estará bien. Si él llega a descubrir lo que hizo...

La opresión que sintió en el pecho, la hizo apretar los dientes. ¿Por qué le importa? Él... él ya no es importante. Ya no lo verá más. Menos tras todo esto.

-¿Qué pasa Neo? Normalmente estarías alabando mis habilidades.

La chica no dijo nada. La verdad, no estaba de humor. Solo sonrió como pudo y nada más. Siguió viendo lo que estaba pasando. El caos que estaba cayendo sobre Vale...

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Finalmente, en las plataformas de aterrizaje del acantilado de Beacon, llegan tres Bullheads, el del medio abre su escotilla para revelar a varios miembros del White Fang, que seguían leales a Adam y su causa, pero estos se mostraban diferentes. Como si... algo más los alimentara. Como si fueran solo las marionetas de algo más...

Otro Bullhead abrió su puerta, esta vez con varias criaturas de Grimm adentro. Una Ursa gruñendo salta de él y aterriza en los terrenos de la Academia. La escena de presagio se oscurece cuando el rugido de la Osa hace eco, dejando solo los ojos rojos ardientes del monstruo, hasta que ellos también desaparecen.

El ataque estaba extendiéndose... Beacon estaba siendo invadida por todos los frentes. No había manera de detenerlos. Nada...

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La pelea en la Arena no se detenía. Ambos Megaman estaban destruyendo todo lo que estaba yendo hacia ellos, la combinación de disparos y de cortes con la espada, estaban logrando detener el avance de los enemigos. Los Grimms, tanto que en verdad habían disminuido el número de estos.

-Son eternos...

-Esto no tiene sentido. – Pyrrha miró a Vent con duda. - ¿Qué puede generar que ataquen así a la Academia? ¿Qué hay?

Pyrrha dudó un segundo, antes de cortar a un Griffon con su espada, por la mitad, mientras que Vent estaba atacando al Nevermore encima de ellos, con un Storm Tornado.

-La hay... - la Megaman Modelo Z miró a su amigo. – Hay un motivo. Y sé donde deben de estar yendo para tomarlo. ¡Quizás esto es por ella!

-¿A qué te refieres? – La chica oyó al Modelo X, al ser una Megaman, puede oír a otro Biometal. - ¿Qué puede ser tan importante para crear este caos?

-Una de las Maidens que se mencionan en los cuentos. Eso es lo que tienen aquí. Un mal plan en mi opinión. Se pusieron el blanco a la cabeza. – El modelo Z, respondió con sarcasmo.

¿Una Maiden? ¿La de los cuentos que Summer le solía leer de niño? Es una locura... pero con lo que ha visto y vivido estas semanas, se lo cree todo. El Megaman Azul lanzó varios Spin Wheels a los Beowulf que fueron hacia ellos, matándolos de un golpe.

-¿¡Que hacemos entonces!? – Esa era la pregunta.

-... Ir a la bóveda. Donde la tienen... Pero si lo hacemos...

La chica vio con duda, lo que estaba pasando. Abandonar el lugar, el estadio... Eso puede ser riesgoso para todos. ¡Aún no se termina la evacuación!

-Lo mejor sería que se vayan, jóvenes. – el profesor Port llegó con su hacha en mano. – Dejen esto en nuestras manos.

-¿Qué...? No habla en serio...

-Muy serio. – Vent miró a Oobleck, quien estaba seguro de que esto era lo más cercano que se puede estar de un apocalipsis Grimm. – Lo mejor es que vayan y salgan a ayudar con la evacuación.

-No. – Pyrrha se negó. – Nosotros ahora mismo somos las mejores opciones para acabar con estos Grimms a toda velocidad con estos poderes. Dejen esto a nosotros.

-Señorita Nikos, estoy seguro que desea ayudar, pero...

-Señor Port... No soy su estudiante. – Vent interrumpió al profesor. – Pero sé que hablo por los civiles, que la presencia de las personas que deben de protegerlos, será mejor que la de nosotros...

Ambos adultos vieron a los dos Megaman, azul y rojo, ambos determinados a luchar. Una porque era lo que había decidido hacer, el otro por es lo que prometió.

-... Bien. Pero deben de contarnos su hazaña, ambos.

Ambos asintieron con una sonrisa a las palabras del profesor Port, quien se fue con su amigo de trabajo, a las salidas, a ayudar en la evacuación. Los Megaman vieron como los Grimm se seguían llegando. Eran eternos...

-¿Cómo crees que les esté yendo en la evacuación? – hizo la pregunta el Megaman Modelo X, al mismo tiempo que lanzaba varias Lightning Webs, para detener el avance enemigo.

A esa duda, Pyrrha llamó a quien sabe le va a contestar sin dudarlo un segundo... que conveniente es este casco.

-¡Jaune, ¿Cómo va la evacuación?!

-¡Ya casi hemos ayudado con la evacuación de la mitad, pero no es fácil con todos esos Neveremores en el aire! ¡Las naves de Atlas no están ayudando como se debe!

La Megaman Roja no sabía que decir. Vent se metió en la comunicación, usando su casco para la llamada.

-¡Jaune, hagan lo que hagan, tienen que salir de aquí! ¡La gente abajo necesita más ayuda que nosotros! ¡No se deben de preocupar! – el Megaman Azul, solo pidió que sigan sin ellos.

-¿¡Qué!? – El grito de Ruby se oyó en medio de la charla. - ¿¡Quieres que los dejemos solos!?

-Hemos mandado a los profesores a que ayuden en la evacuación. No creo que salgamos de aquí en un buen rato. – Vent dijo ello, mientras veía como Pyrrha cortaba a la mitad a 4 Griffons. – Tomen todos los Buses y váyanse.

-¿¡Y como van a bajar!?

-Nos las arreglaremos Jaune. En el peor caso, saltamos. – Vent la vio como si estuviera loca. – Deben de saber que bromeo...

-¿¡Están locos!? ¡Vent Lucilum, si saltas de este Coliseo, te juro que no te besaré por un mes!

El Megaman Azul miró a la Megaman Roja, quien sonrió apenada por la sugerencia, no pensó que se lo tomaría a pecho. Ugh. Lo que le faltaba...

-Nos las arreglaremos. Suerte... - Antes que ellos puedan decir algo más, cortó la comunicación, sabiendo que es lo mejor. – Dejando de lado que me has dado problemas...

-¡Lo siento!

-¿Qué es lo que pasa? Ozpin debió decirte algo. – Pyrrha no dijo nada. – Tenemos harto tiempo antes de acabar con estas cosas. Creo que puedes decirme todo, mientras peleamos.

La Megaman Modelo Z solo alzó el sable, al mismo tiempo que el Megaman Modelo X, empezó a cargar energía en el Buster.

-... Eso creo.

Ambos se lanzaron hacia los Grimms que los estaban rodeando.

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Por otro lado, se puede ver como la batalla en la ciudad estaba haciendo que los planes de todos los que estaban metidos en esto, se muevan como se deba. Desde los techos, Pandora y Prometheus ven las muertes y demás que los Grimms generan.

-Oh. Eso debió doler. – él sonrió al ver el caos. – Esto es lo que en verdad hace que esto valga la pena. De todos modos, ¿No piensas ir aun Adam?

-No... - el faunus estaba viendo todo con una expresión neutral. – Solo quiero esperar el momento donde él haga acto de aparición.

-¿Solo te interesa el Modelo X? – Pandora lo miró con duda. - ¿Tanto deseas la venganza?

-... Es todo lo que me interesa ahora. Destruir a todo... hasta lo que esa mujer desea. Usaré todo, para ello... destruirlo todo. Que el mundo, sea cero...

Prometheus ve que este tipo ya quemó fusible. Dios... Solo asintió y junto con Pandora, siguieron viendo el caos que se estaba generando allá abajo. Donde el mundo, ya había perdido la esperanza de que esta batalla se pueda ganar.