Descubriendo Límites
Al llegar a la oficina, Pyrrha ve al profesor Ozpin, que está sentado detrás de su escritorio. Él le ofreció que se acerque, algo que ella acepta. Al hacerlo, sintió de nuevo ese sentimiento, miró de reojo lo que estaba cerca de las manos del hombre y... no lo pudo ver bien, dada la iluminación. Los últimos rayos del crepúsculo entraban por las ventanas decoradas con relojes.
-Bueno, no es de extrañar que te hayan elegido para pasar a la ronda final del torneo. Tu actuación fue ejemplar. – Ozpin optó por iniciar la conversación, a lo que Pyrrha, logrando separar su mirada del objeto.
-Gracias, profesor Ozpin, pero nunca hubiera llegado tan lejos sin mis compañeros de equipo. - ella lo dijo con humildad, ya que eso es lo que cree.
-Personalmente, creo que es al revés. – Qrow dijo eso desde su lugar apoyado en una columna en la parte trasera de la habitación, con los brazos cruzados.
Pyrrha lo miró, estuvo a punto de preguntar quien era, además de que le molesto mucho el comentario, pero...
-No sabes nada del trabajo de equipo o creer en los que están a tu lado. No deberías hablar.
Pyrrha dio un salto en su lugar... Eso... eso fue...
-¿Ocurre algo?
-No... No... - Pyrrha negó con la cabeza a la pregunta del director, devolvió su mirada a... - Lo siento, pero no creo que nos hayan presentado.
-Soy Qrow. – Se sentía la hostilidad en sus palabras.
-Qrow es un colega mío de confianza. – Ozpin le dijo lo que pasaba, pero...
-Claro. Si él es de confianza, entonces yo tengo cuerpo. – Pyrrha desvió la mirada al objeto y... - Si me oyes, no digas nada. Deja que crean que solo los oyes a ellos.
Pyrrha no sabía porque, pero... confiaba en la voz. Como si fuera el recuerdo de algo lejano. Era una sensación muy rara.
-Profesor, si no le importa que le pregunte, ¿por qué me ha llamado aquí? – Actuó como si nada, ya que... por algo la llamaron.
-Por supuesto. – Ozpin le siguió sonriendo. - Por favor tomó asiento. - cuando ella lo hizo, él se llevó los dedos a los labios, echándose hacia atrás con indiferencia. - ¿Cuál es tu cuento de hadas favorito?
-¿Perdón, que...? – ella no entendió la pregunta.
-Cuentos de hadas, historias de tu infancia. Seguramente debes recordar algunos de ellos. – Lo hacía, pero...
-Dile. Sigue el juego. Hace rato que también deseo saber de que hablan, puede que esto nos ayude. – De nuevo la voz, pero... es verdad. Una pregunta, es una pregunta. Sonrió con nostalgia y...
-Bueno, está La historia de los dos hermanos, El mar poco profundo, La chica de la torre ... – en eso, Ozpin se inclinó hacia adelante.
-¿Qué pasa con La Historia de las estaciones? – ahí se sintió algo... de interés.
-¡Pues claro! – Pyrrha hizo memoria y empezó el relato, tal como lo recuerda. - Un anciano insensible, que se niega a salir de su casa, recibe la visita de cuatro hermanas viajeras. La primera comprende su carácter recluso y lo insta a utilizar su tiempo en soledad para reflexionar y meditar. La segunda le trae frutas y flores, cuidando sus cultivos y revitalizando su jardín. La tercera calienta el corazón del hombre, convenciéndolo de salir y abrazar el mundo que lo rodea. Y la cuarta y última hermana le ruega que mire todo lo que tiene y esté agradecida. A cambio de su amabilidad, el hombre otorgó a las doncellas poderes increíbles para que puedan continuar ayudando a otros en todo el mundo. Aceptan gentilmente y prometen compartir sus dones con la gente de Remnant hasta el final de los días. Invierno, primavera, verano y otoño; las cuatro doncellas. A mi madre le encanta esa historia.
Ozpin miró a Qrow, quien no dijo nada. El Biometal seguía en silencio, como esperando el momento.
-¿Me creerías si te dijera que ha existido desde que era niño? – Esa pregunta...
-Jajaja. No es tan viejo, profesor. – Pyrrha lo tomó con humor, pero ver el cambio de actitud del Director, la hizo ver que esto era más serio de lo que pensó.
-Bueno, ¿me creerías si te dijera que es verdad?
-... No lo estoy entendiendo.
-¿Qué pasaría si te dijera que existen cuatro doncellas en este mundo, que podrían ejercer un poder tan tremendo, sin Dust? – Pyrrha meditó la pregunta...
-... ¿Cómo un Megaman? – ese fue el primer ejemplo que se le vino.
-¿Megaman...? ¿Cómo sabes de eso...?
-No... No algo tan... poderoso. Admito que lo que hemos visto de Vent y sus habilidades, que siguen creciendo, no tienen ese poder suyo. Me refiero a algo más... fantasioso. Magia. – Pyrrha se mostró confundida.
-Sí. La primera vez que lo escuché es bastante loco. – Qrow estaba de acuerdo, que era una revelación, algo loca.
Pyrrha miró a ambos hombres, tratando de saber que decir. Pero nada salió de su boca... era como si...
-No digas nada. Haz que crean que has asimilado todo. – SI, eso era lo mejor.
-Te decimos esto, Pyrrha Nikos, porque creemos que eres el siguiente en la fila para recibir los poderes de Fall Maiden. – Pyrrha no creía lo que le decía... eso es...
En ese momento, las puertas del ascensor se abrieron y ve salir a Glynda Goodwitch y al general James Ironwood.... Y a un hombre que ella no conocía... No, espera... Es Serpent Caim, el... presidente de Slyther Incorporation, la empresa de seguridad que...
-Lo siento, llegamos tarde. – Ironwood se acomodó la corbata, Glynda se acomodó los lentes y Serpent solo se arregló el cabello.
-Que es... Esto es... - Pyrrha se puso de pie y miró a Ozpin con seriedad. - ¿Quiénes son...?
-Sabes quiénes somos. Seguimos siendo los mismos profesores y directores que conoció cuando llegó a Beacon. – Glynda se le acercó, para sonar más calmada, pero a la vez, que no se asuste.
-Entiendo como te sientes chica. Yo recién me he unido a este grupo. Pero te aseguro que queremos lo mejor para ti.
-No pierdas la cabeza. Deja que te expliquen. Puede que no esté de acuerdo en cómo sus métodos, pero puedes confiar en ellos... - Eso quiere creer. – Pero te recomiendo que guardes lo que dices frente... a ese sujeto. El más grande... hay algo raro en él...
Ella miró de reojo a Serpent, quien trataba de mostrarse... así como Glynda, como un amigo. para ella. Pyrrha tomó aire...
-Puedes pensar que este es como un trabajo a medio tiempo. – Qrow le dijo eso con burla.
-Somos los protectores de este mundo. – Ironwood se lo dijo con finalidad y...
-Necesitamos tu ayuda, Pyrrha. – Ozpin le dijo lo que ella no esperó. - ¿Puedes dejar que te expliquemos que es?
Pyrrha miró a todos en silencio y... asintió. Eso hizo que Ozpin se ponga de pie y camine hacia donde estaba una de las libreras. Todos desviaron sus miradas para ver lo que era el compartimiento secreto, un ascensor. Pyrrha no creía lo que veía... ella....
-Ahora. Están distraídos, llévame contigo.
Y eso hizo, Pyrrha movió la mano con toda su habilidad y tomó el Metal y lo guardó al lado donde estaba su escudo, para que nadie lo vea. Dio unos pasos, al ver que... todos ya la veían de nuevo.
-¿Puedes seguirnos? – La pregunta, no era eso...
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Se podía ver a Pyrrha, nerviosa, en el ascensor con el grupo de "protectores". Miraba a Ozpin y Glynda como si los viera por primera vez mientras un pitido constante señala cada piso que pasan... ¿Qué tan profundo era este lugar? Más aun...
-¿Qué eres...? – Hizo la pregunta mental a lo que ella tenía escondido.
-... Mucha información no es buena para ti. Espera a que te digan que quieren y lo hablamos. ¿Te parece?
Lo hacía... al menos este metal estaba siendo más... suave, con lo que estaba pasando.
-¿A dónde estamos yendo? – preguntó ella, con algo de reserva.
-La bóveda. Debajo de la escuela. – Oh, genial...
El ascensor continuó su viaje hacia abajo a través del túnel vertical de luces verde oscuro hasta que abrió sus puertas y los pasajeros salieron, siendo Pyrrha la última en salir mientras absorbía la vista del gran pasillo escasamente iluminado por el que ahora la conducen. Glynda la esperó detrás de los demás.
-Estoy segura de que debes tener preguntas. – trató de hablar con un tono tranquilo y suave, como el de una madre.
-... Una o dos... Es solo que... - Ella miró el lugar. - Todavía no lo entiendo. Dijeron que yo era el siguiente en la fila para recibir el poder de la Maiden. ¿Qué quieren decir con eso? Y... - Pyrrha susurró lo último. - ¿Tiene que ver con... esos Grimms?
-No... es aparte. – Ella respondió primero, la última pregunta. - Las Maiden han existido durante miles de años. Pero al igual que en la naturaleza, las estaciones cambian. No hay dos veranos iguales. Cuando una Maiden muere, su poder abandona su cuerpo y busca un nuevo anfitrión, asegurando que las estaciones nunca se pierdan y que ningún individuo pueda aferrarse a ese poder para siempre.
-Y... Entonces, ¿cómo elige el poder a su próximo anfitrión?
-A través de una serie de reglas estúpidas y complicadas. – Dijo Qrow, mirando sobre su hombro.
-Qrow. – Glynda no estaba para sus tonterías.
-Hey, no te enojes porque tengo razón. – él alzó los brazos, como diciendo que no era mentira. Pero la mujer volvió con Pyrrha, siendo delicada en explicar que pasaba.
-Al principio, lo único seguro era que los poderes se pasaban específicamente a las mujeres jóvenes. Pero a medida que pasaba el tiempo, se descubrió que el proceso de selección era mucho más ...íntimo.
-¿Íntimo...?
-Como lo entendemos ahora, cuando una Maiden muere, la que está en sus pensamientos finales es la primera candidata a heredar su poder.
-A menos que sea un hombre o una vieja bruja. Entonces el poder va a alguien al azar, y nuestro trabajo se vuelve mucho más difícil. – Qrow complementó lo que Glynda dijo, pero... ¿En serio así se pasa el poder?
-Es un modo raro de darle a uno poder. Si las cosas salen mal, este iría a una mujer mala... - le debe de dar la razón. – De todos modos, algo está obligándolos a moverse, es muy abrupto que te den toda esta información, viendo que eres muy joven. – Es verdad.
-¿Por qué me cuentan todo esto ahora? ¿Por qué no esperar hasta graduarme?
-Honestamente, se nos acabó el tiempo. No sé si te habrás dado cuenta, pero las cosas se están poniendo mucho más aterradoras en el mundo. Las tensiones son altas. Los Grimm se están volviendo más fuertes, más frecuentes. Y no pasará mucho más tiempo antes de que la paz que tanto hemos estado disfrutando se vaya por la ventana. – Qrow lo dijo con... algo de frialdad.
-¿Esta hablando de una guerra?
-No una entre naciones. – Ironwood la calmó en ese ámbito.
-Pero es como Qrow dice, la cantidad de Grimms ha crecido los últimos años. Tanto, que los esfuerzos para detenerlos son cada vez más... difíciles. – Serpent le hizo esa aclaración. Una que... no le gustó.
-Mira niña... Podemos proporcionarte los detalles una vez que sepamos que estás con nosotros. Por ahora, todo lo que necesitas saber es que una de las Maidens ha sido atacada. Y por primera vez en la historia, le robaron parte de su poder.
Antes que ella pueda preguntar de que rayos estaban hablando, se escucha un zumbido de electricidad cuando el grupo llegó a su destino al final del pasillo: una gran máquina con pantallas iluminadas conectadas a dos cápsulas rectangulares, una de las cuales está en posición vertical para mostrar a través de la ventana de vidrio a una joven vestida con ropa minimalista. ropa con una cicatriz de quemadura en el ojo izquierdo y en la cara.
-Ella es... - Pyrrha dio unos pasos al frente.
-La actual Fall Maiden, Amber. – Ozpin lo dijo con un tono triste.
-... Esta viva...
-Pero no por mucho. Debes de sentirlo... algo la está matando. – Es verdad... hasta ella lo puede sentir...
-Por ahora. Estamos utilizando tecnología Atlas de última generación para mantenerla estable. Pero hay mucho sobre esta situación que no tiene precedentes. – El general le dijo la verdad de la situación.
-... ¿A que se refiere...?
-Bueno, no sabemos qué pasará si ... cuando ella fallezca. – no era una duda, era una realidad, se habían rendido a salvar a esta chica.
-Ya no saben que hacer. Perdieron la esperanza de salvarla, ahora están... No...
-¿Qué? ¿No pasará su poder a la próxima Maiden? – Pyrrha no sabía si era por el metal que estaba con ella, pero se siente capaz de hablar sin dudar.
-Que bueno, has estas oyendo lo que pasa. – Qrow sonrió al ver que no era tonta.
-En circunstancias normales, sí. Pero esta es una situación delicada. No es raro que los últimos pensamientos del asesinado sean los de su atacante. – Ironwood miró a Amber. - Y para empeorar las cosas, nadie había visto antes el poder dividido de esta manera. Por lo que sabemos, buscará su otra mitad.
-EL poder buscara por naturaleza estar completo. Así que... Las posibilidades, son altas. – Serpent le dio a ella, lo que faltaba para que una hilos.
-Su agresor... El agresor tiene la mitad que robó...
-Y eso no sería un buen augurio para ninguno de nosotros. – Qrow le dijo lo que era... más que obvio, que no se pierda.
Pyrrha agacha la cabeza pensativa, luego de repente se adelanta y coloca una mano sobre el vaso de la cápsula de Amber. Se sintió molesta por alguna razón, esto era grande... Mucho...
-Si todo esto es cierto, ¿¡por qué mantenerlo en secreto!? Si esta chica es tan importante ... si realmente estamos al borde de la guerra, ¿por qué no decírselo a todo el mundo?
-Debes entender... que las leyendas nacen de algo de verdad. – Serpent le hablo con calma. - ¿De donde crees que nacieron esos cuentos?
-¿Qué...?
-Es como nuestro amigo dice ¿Cómo crees que comienzan las leyendas y los cuentos de hadas? Incluso los más locos vienen de alguna parte. – Qrow bebió de su frasco.
-Nuestro grupo fue fundado para proteger tanto a la humanidad como a las Maidens. Los hambrientos de poder las cazaban con la esperanza de heredar su fuerza.
-Y como puedes imaginar, los que tuvieron éxito no fueron exactamente el tipo de personas que te gustaría que tuvieran un poder inimaginable.
Lo que Qrow y Ironwood, le dijeron... era cierto. Si es un poder raro, como un Megaman, de seguro debe de ser terrible. No se quiere imaginar a una persona con algo así en sus manos.
-Y tengo entendido, esta hermandad decidió quitar a las Maidens del ojo público, permitiendo que su existencia se desvaneciera en una leyenda. – Serpent la hizo ver... el final. El inició de las leyendas.
-Las cosas que le estamos diciendo van en contra de cientos de años de historia humana, religión. – Glynda quería que entienda el peso de lo que estaba escuchando.
-Nadie querría creernos. Causaría un alboroto. – Ironwood tenía razón, sería una locura. – El tema de los Megaman, ya tiene a todos en alboroto, pero no es algo tan grande, ya que pasó a una escala pequeña... y tanto Ozpin como yo, lo hemos logrado minimizar. Creen que es algo de tecnología nueva...
-Así es... pero esto, decir que las leyendas son reales, sería caótico. Y todos sabemos lo que eso significaría, que vendría a arañar los muros de nuestro Reino.
-Si hago esto... ayudaría a la humanidad, ¿No? – Pyrrha entendía que querían... Pero...
-No creo que entiendas niña. Mira a la chica que está ahí, está muriendo. No sabe nada de lo que pasa... Es más, no sabe de ti. ¿Crees que tendrás el poder con las reglas de siempre?
-Si bien me alegra ver la convicción que tienes... - Ozpin dio unos pasos al frente. - Me temo que no es tan simple. Dada la condición de Amber, no podrás heredar su poder de forma natural. Sin embargo, el general Ironwood cree que tiene una solución.
-Durante los últimos años, Atlas ha estado estudiando Aura desde un punto de vista más científico; cómo funciona, de qué está hecho, cómo se puede utilizar. Hemos logrado ... avances significativos. Y creemos que hemos encontrado una forma de capturarlo.
-Captúralo y mételo en otra cosa... En tu caso... - Qrow señaló a Pyrrha, que se horrorizó...
-... No... ¿¡Quieren usar su vida y meterla en mí!? ¡Está mal! Eso... - Pyrrha sintió que se iba a hiperventilar.
-El sentimiento es mutuo. – Glynda se acercó a ella. – Pero estamos en una situación desesperada.
-A veces, es todo lo que queda... Hacer algo drástico, para poder cambiar las cosas. – Serpent también la quiso calmar. Pero...
-La van a matar, para darme sus poderes...
-No podemos transferirte el poder de Amber, pero podemos darte a qué están destinados esos poderes. – El general, le dio la pieza final...
-... Su aura.
-Su vida ... se entrelazaría con la tuya. La pregunta es...
-¿Qué te va a hacer eso? – Ozpin asintió a las palabras de Qrow.
-Significa... que dejaría de ser yo... ¿Eso me quiere decir? – Pyrrha entendió lo riesgoso de todo.
-Tiene una decisión importante ante usted, Srta. Nikos. No hay garantía de que esta transferencia funcione. Y no se sabe si serás la misma persona si lo hace. Le aconsejo que se tome un tiempo en este asunto. Pero comprenda que antes de que termine el Festival Vytal, necesitaremos su respuesta. – Ozpin le dio el ultimátum... Ella...
Pyrrha no respondió, sino que coloca su mano sobre el cristal que separa a la doncella de su posible reemplazo, al ver su expresión asustada reflejada en el rostro lleno de cicatrices de la niña moribunda, antes de alejarse de este destino repentino mientras Ozpin da una advertencia final.
-El asaltante que atacó a Fall Maiden ha hecho su primer movimiento. Y no se sabe cuándo será su próximo movimiento. – y con eso, la chica... solo pidió irse... no quería seguir ahí. No más...
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Ya afuera de la oficina, Pyrrha agradeció a Glynda la compañía hasta este punto y emprendió marcha... a donde sea. No sabe ni donde ir... ella...
-No debes de esperar que sean ellos los que elijan tu destino. – Es cierto, se había olvidado.
-¿Qué eres...? – Pyrrha miró a los lados, era de noche y... sacó el metal de su escondite. - ¿Por qué te oigo?
-Simple... Porque eres mi elegida. O por ahora, una candidata. Soy el Biometal Modelo Z. Un gusto.
-¿¡Eres...!? – Un objeto como el de Vent... es... - ¿Eres como el Modelo X?
-Modelo X. Es... familiar. Es... como oír el nombre de un viejo amigo. – Pyrrha sintió como el Modelo Z, hablo con un tono de calma, pero a la vez... - De todos modos. ¿Deseas hablar de lo que has visto? De paso, me puedes decir, que me perdí...
-Si... Ahm... ¿Seguro que no deseas volver? Se darán cuenta de que...
-Esa mujer notó lo que hiciste. ¿Por qué crees que te acompaño? Estoy seguro que debió de tener un plan. No sé... parece que cree algo diferente.
Pyrrha caminó con el objeto en su mano, en un punto donde, sabe que... nadie pasa por estos lares a estas horas. Muy bien...
-Así que... eso es lo que ha pasado. Grimmroids... Modelo V. Son términos que son familiares al mismo tiempo. Es extraño.
-¿NO recuerdas nada?
-No... Todo lo que tengo en claro, es mi misión. Pelear contra el que use el Modelo V y proteger el mundo, de lo que sea que lo amenace. Eso es lo que único que sé. Pero a la vez, tengo una duda que jamás pensé tener... ¿Qué es lo que soy? NO lo sé... Quizás el tiempo me dé la respuesta.
-Al menos tienes una meta clara... Yo... Yo no sé que hacer. – Pyrrha se sentó en una banca, con el Modelo Z en sus manos. – Sé que... soy importante para los planes de ellos, que si no me hago con el poder de la Fall Maiden...
-Pero no es lo que quieres, ¿No?
-... No... Pero... siento que puede ser mi destino. Yo...
-... ¿Quieres que el resto elija tu destino? – EL Modelo Z empezó a flotar y voló para verla a la cara. - ¿Qué es el destino para ti?
-... Una meta... el final de todo...
-Y si es así... ¿Cómo quieres vivir ese destino? ¿Deseas que todo el mundo te vea como solo ellos lo hicieron? ¿Un símbolo de poder solo por tus habilidades, más no por quien eres? Sin ofender, pero no te veo como alguien capaz de soportar esa carga. Más bien, como alguien que hará las cosas, para defender lo que cree. Pelear por quienes cree. ¿No?
-... ¿Cómo...?
-Los ojos... pueden decir mucho, Pyrrha. – Su nombre... lo decía con un tono, que le hacía sentir que trababa... con su padre, con familia. – La decisión es tuya. Pero... no pienses en lo que el mundo quiere, piensa en lo que tú deseas. Ya que... eso es lo que importa. ¿Deseas dejar ser quien eres para tener un poder que no es tuyo? ¿Deseas cargar con el peso de algo que no entiendes? ¿Desear... dejar de creer en ti? Esas son preguntas que debes de responderte a ti misma. Eso es lo que te hará ver, que si bien tienes el derecho de elegir tu vida, también debes de ver las cosas de otro modo.
-... Y si digo no...
-Puede que tengan que buscar a alguien más. O el poder se pierda. Pero entre nos, dudo que el poder de una Maiden, supere el de un Megaman. – Ella soltó una risa. – Así que... hay un Megaman... Modelo X. Siento que es una era interesante para vivir ahora.
-... ¿Te quedarás conmigo?
-No tengo otro lugar. Menos alguien con quien hablar. De ser posible, quiero estar en un perfil bajo por ahora.
-... ¿Qué hay de... esto? El nexo...
-No hay nexo. Puedes oírme, pero no puedes usar mis poderes. Tienes muchas ideas en la cabeza, que nublan el juicio. Si no crees por lo que peleas, no puedo ayudarte.
-Creer... Pensé que sería más sencillo.
-Creer en una persona, una idea o una causa, no es fácil. Eso es lo que hace a ustedes, los humanos, capaces de crecer... porque pueden cambiar. Eso sí, si eliges el poder de la Maiden, iré a buscar otro candidato. Dudo que sea lo que sea ese poder, vaya con un Biometal.
Al oír ello, Pyrrha sintió... un peso diferente. Como si... ella tomó al Modelo Z en sus manos y lo miró. Había algo en este trozo de metal, que era diferente a lo que ella había visto en el pasado. Soltó un suspiro y caminó de regreso a su habitación, con el Biometal con ella.
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-... Que sea lo que el mundo decida, es mejor para ella.
Glynda había visto como Pyrrha había tomado el Biometal y se lo llevó... Quiso decir algo, pero era capaz de ver, como ella... ella se centraba en eso, para poder calmarse cuando le dijeron todo lo que necesitaba. Y eso la hizo pensar, que de seguro ella era...
Si era así, si su destino es ser como Vent, ella no era nadie para ir contra este. Dijo que la acompañaría a la salida, solo para poder hacer la finta de que ella guardaba el Biometal. Algo que todos se tragaron... Ozpin no preguntó nada, solo dijo que le pareció bien. Que había olvidado hacer ello.
Pero ella sabe la verdad... debió de notarlo. Él... ahora esta dejando que Pyrrha Nikos, elija. ¿Qué poder desea portar? ¿Uno que en si no es de ella y que puede cambiar quien es para siempre? ¿O uno que parece verla como digna y que la dejara ser quien es, así como crecer de una manera... increíble?
A veces, este hombre pone pruebas muy complicadas.
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AL día siguiente, las preparaciones para lo que era el baile, llegaron de una manera que nadie jamás podía imaginar.
¿Qué era ese baile?
Pues, era un evento formal que se acordó realizar, para que los miembros de equipos que llagaron a las rondas finales, los 8 equipos que han avanzado, son solo una parte de lo que es lo importante en este baile.
Si, también van los miembros VIP, la gente de dinero, importante. Algo que todos quieren vivir, ya saben, conexiones, redes de contacto, etc. Uno mataría por una oportunidad así. Pero no es algo que se dé, así como así. No señor. Al final... lo que importa, es el baile. Al menos eso es lo que se desea creer. Al menos...
Estamos en lo que es la zona de Vale, un día libre para todo el que ha participado en el torneo, con Vent, en el hospital, con una cara de pocos amigos, recordando lo que tuvo que pasar ayer.
-... Vamos, no es para tanto. – Ruby trato de subirle el ánimo a su novio, pero...
-... Una punción lumbar, duele. – El chico aun sentía el hincón del día de ayer.
-Es por una buena causa. Es cierto, ese examen solo se puede realizar con sangre que tiene contacto directo con el cerebro. – Puso su mano en el hombro de su... su... Casi novio, la verdad no sabe ni como catalogar su relación.
El Megaman soltó un suspiro. Alabado sea que Glynda le dio seguro para hacerse esta clase de exámenes. Ayer se hizo de todo... exámenes de sangre, orina... ver si puede tener descendencia. Todo... Dado que nunca ha podido hacer algo así en el pasado, ya que no tenía ni dinero, ni seguro.
Ambas chicas estaban algo ansiosas. Si lo que creen es verdad, puede que...
-Paciente Vent Lucilum. – la enfermera lo llamó. – El doctor le dirá sus resultados. Sígame por favor... y sus acompañantes también.
Oh, eso era interesante. ¿Por qué pidió que ellas también vayan con él? Debe de ser algo extra. Si, eso debe de ser.
Una vez la enfermera les dijo que pasen...
-Mucho gusto. Soy el Doctor House. – un hombre, con una pierna mecánica, por como puede ver, le dio la mano, con su file en el escritorio. – Siéntese. Usted y sus acompañantes.
-Ahm... - Blake se sentó y... - No sabemos porque nos llamaron.
-Si... Solo vinimos para acompañarlo, no somos... familia, ni nada. – Ruby completó la información, pero la sonrisa del doctor decía algo...
-En efecto. Es... por curiosidades que hallamos en su examen, joven Lucilum. Nada malo o alarmante, quite esa cara. – Verlk soltó un suspiro. – Bien... Iremos primero con... rayos X. – el doctor sacó las tomas y... - Por lo que hemos analizado, no tiene apéndices extra, más allá de los de un humano común, lo que hace ver que en el lado externo, su herencia humana es... la que predomina. Pero... Yendo al lado de los ojos y oídos, podemos ver... - Mostró la imagen del análisis... - Que posee las corneas y pupilas de un Faunus del tipo que ve en la oscuridad. Y sus oídos... bueno, que no oiga más agudo, debe de ser porque carece de orejas extra, pero su oído si es superior al de un humano.
-... Si, eso ya lo tenía claro...
-Ahora. Vamos por el examen de sangre. Todo bien... Niveles estables en todos los campos. Quizás algo alto en la zona que... se relaciona a las alergias. ¿Estornuda con el polen?
-¿Cómo...?
-Eso explica todo. Pero no es nada fuera de lo normal. Su examen de orina está bien, niveles normales. Su examen de esperma. – el doctor sonrió al ver el sonrojo de los tres, más de las chicas. – Hemos hecho el análisis y... No hay problema. Se case con una humana o una Faunus, tendrá hijos.
Vent soltó un suspiro. La idea de tener hijos era algo lejana, pero al menos... sabe que es posible.
-Ahora, el examen que nos importa... y por el que lo tuvimos que amarrar a la mesa... - El doctor lo vio con molestia, Vent sonrió con pena y las chicas lo vieron con una cara de sorpresa. – El Examen de LIRA.
-¿LIRA? – Ruby hizo la pregunta, al ver que no sabía de que hablaban.
-Es... una prueba que se le hace a un Faunus al llegar a cierta edad, normalmente a los 18, si es que estos tienen problemas de atracción. Sea que tienen la mala maña de tener parejas indefinidas o ni una en años. LIRA, es el acrónimo de Limitantes de Impulso de Reproducción Animal.
-Es un término racista.
-No lo niego señorita. Pero es lo más cercano que podemos usar, ya que el nombre original era peor. Y lo relacionamos con... algunos comportamientos de los animales que conocemos. – Blake le tuvo que dar la razón. – Ahora... Mire esto...
Los tres miraron el resultado, donde aparecía... una barra de colores, los extremos eran rojos, pero habían otros colores, verde, amarillo, una parte negra... donde un punto blanco estaba en el medio... la zona negra.
-... Eso es...
-Un resultado que... muchos no esperan ver en una vida. – El doctor sonrió. – Ven los extremos rojos... Ese es el resultado, si un Faunus tiene varias parejas, pero no es fiel a ni una... es decir.
-Solo placer.
-Correcto. – Blake asintió al captar. – la zona amarilla, es donde cae, alguien que no desea parejas o nada sexual. Ambos casos, son diagnósticos clínicos... raros, pero que uno de cada 1000 Faunus, puede padecer. Tratables, de por vida. Pero su caso... Cae en la zona neutra.
-¿Qué significa...? – Ruby prestó atención...
-... Que por naturaleza, usted carece de los limitadores de cantidad. Es decir, puede estar atraído a más de una persona, pero solamente si siente algo fuerte. A su vez, será leal a esa persona o personas, no buscando solo placer. O el deseo de la reproducción.
-A ver... en resumen y sin términos clínicos, que me estoy mareando... - Vent rogó que sea claro.
-Que usted, por más gracioso que le parezca, puede estar atraído a más de una persona... mujeres en su caso. Pero a su vez, las respetara y tratara con respeto, como si fueran parejas únicas. Es un caso fascinante, raro... Por eso pedí que vinieran ellas... supongo que... por algo se quiso hacer este examen. – Vent se apenó un poco... - Bueno... para simplificar, no hay tratamiento para su caso. Es... raro. Las medicinas son para bajar o subir el nivel de LIRA en casos extremos. El de usted es medio... si le damos un tipo, puede... acabar peor.
-... Ósea... debo vivir con el riesgo de... tener más de una pareja, a pesar de que puedo estar en una relación...
-Si... Mi recomendación, sea sincero con su pareja y hable de esto. Para que lleguen a un acuerdo. – Vent asintió, sabiendo que... - Y le recomiendo esto. – le escribió algo en una prescripción. – Es una vitamina para los músculos, hemos notado que... estos están algo desgastados. ¿Hace mucho ejercicio?
-... Puede decirse que sí. – Vent se puso de pie, así como las chicas. – Gracias Doctor.
-NO hay de que... Quisiera poder hablar con ellas, un minuto. No es nada grave, pero... siento que desean preguntar algo.
Las chicas asintieron, algo que Vent vio como... extraño. Pero no dijo nada, asintió y fue a la zona de la farmacia para poder, hacerse de la medicina. Y una vez él se fue...
-... Esto es algo que solo deseo tratar con ustedes, que supongo son sus parejas.
-... Si...
-Puede decirlo así...
Tanto Ruby como Blake se avergonzaron....
-Si bien es cierto que... su caso es raro. Podemos ver que es un uno reciente, algo externo lo afecto para que eso pase. Una estimulación... No sabemos de que pudo ser. Pero a su vez, eso está afectando su cuerpo de una manera... peculiar.
-¿Es malo? – Ruby sonó preocupada, solo para que...
-No... eso es lo raro. Sea lo que le pasa, estimula su metabolismo a un nuevo nivel. Lo que le hicimos ayer, debió dejarlo adolorido unas horas, pero se puso de pie en minutos. Y cuando vimos su historial, notamos que las heridas que tuvo, dejaron cicatrices poco visibles.
-Espere... no... Vimos las cicatrices que tiene... Eran marcadas....
-Pues no... cuando ayer le hicimos el examen lumbar, las cicatrices parecían ser muy viejas. – Blake parpadeó varias veces. – Si, es algo que cuesta creer, dado que no tiene Aura. Pero su cuerpo... es diferente. Sana a una velocidad anormal para una persona común, además de que... se recupera rápido. Por eso, quiero que lo vigilen, si hay algún cambio negativo, deseo que lo informen.
-... La medicina que le dio es...
-Le servirá. Se nota que sus músculos parecen estar trabajando el doble, como que se están adaptando a algo fuerte en su entorno.
Las chicas sabían que... puede que eso signifique una cosa, el poder Megaman que él tiene. ¿Estará haciendo algo extra para él en su cuerpo?
Ambas solo le dieron las gracias al doctor por sus palabras, así como que estarán alertas a lo que sea. Salieron a reunirse con el muchacho, que tenía la botella de vitaminas en la mano.
-Es un robo... Aun con el seguro, estas vitaminas son caras. – Vent apareció al lado de ellas, quienes sonrieron al verlo con esa cara. – Bueno, espero que con esto... las cosas se hayan aclarado... Ni yo me lo creo todo lo que ha pasado....
Ambas sonrieron algo... complicadas, si... Era difícil de creer.
-Bueno, eso demuestra que debes culpar a tu herencia. – Blake sonrió algo más calmada, eso lo había calmado mucho.
-Y que si haces algo indebido, tengo todo el derecho de molestarme. – Ruby dio una sonrisa dulce, pero algo se escondía ahí.
-... Claro... - Vent respondió algo... tenso. Esa mirada. Es como la de Summer, si era así... Estaba bien hundido. – Bueno. Asunto zanjado. No más de este tema, hasta luego del baile... que vemos nuestra situación.
Ambas asintieron y los tres siguieron su camino hacia Vale, ya que la ciudad estaba en plena fiesta, como siempre. Ver a la gente bailar, solo hizo que los que se vieron en el tema del baile, se apenen. Dios, será algo digno de recordar para futuras generaciones.
-Oh... ¿Creen que en la fiesta, se deba de bailar? – Ruby hizo la pregunta. – No soy buena.
-Si es así, haremos algo tranquilo. O podemos estar a un lado. Ya sabes... - Vent trató de calmarla... - Pero si, ni yo sé que haremos ahí... ¿Por qué quieren que vaya el Megaman Modelo X? No soy un payaso...
-Desean tener contacto con quien tiene un poder que nadie conoce. Tengo entendido que los medios, creen que es una nueva armadura con alta tecnología.
-Sip... pero están bien lejos de la verdad. Jejeje. – Ruby rio divertido. – A todo esto... ¿Hay novedades con el Modelo X?
-... No. Aparte de que le gusta meterse en mi vida amorosa.
-Hey.
-Ha estado como siempre. – Ambas sonrieron al ver que tomaba con humor todo. Al menos... - Pero... me preocupa de todos modos... tanta paz.
Tanto Ruby como Blake lo vieron con duda. ¿A que se refiere? Ellas pensaban que era algo bueno.
-¿Crees que deba haber caos en la ciudad?
-No... Yo... Sé que a principios del año, hubo mucha actividad de criminales. White Fang... pero todo se ha detenido. No hay nada... y esta clase de festividades deberían ser una oportunidad para ellos.
Ahora que lo piensan, tiene sentido. Mucho. Ambas notaban la fiesta y no había... ese peligro de un robo o algo así, ya que... si bien había seguridad, mucha... era como si se hubieran esfumado. Todos...
-... White Fang debe seguir dolido por lo que pasó. Ni que hablar de Adam. Oí que lo transfirieron a una sede en Vale, para llevarlo a Atlas. – Blake ya se imaginó el destino de su ex novio.
Vent vio ello y puso una mano en el hombro de ella, ya que en un momento, él fue importante para ella. Ruby tomó la mano de su amiga, diciendo que estaba bien.
-De todas maneras... hoy quiero sobrevivir al baile... - Vent miró su Scroll y... - Faltan aun unas horas.
-Si, pero debo de llevar a Ruby para que se prepare. Y yo también.
-¿Irás? – ambos le preguntaron a la Faunus, quien rodó los ojos.
-No quiero estar en una habitación con Weiss y Yang, solas. Ni loca. Esas dos están de mal de humor.
-Oh si... - Ruby se desanimó. – Trate de explicar la situación, pero no me hicieron caso. De Weiss, quizás tenga que ver lo que pasó. Digo, su compañera fue herida. – Blake no quiso romper la ilusión... no puede... - Pero Yang... está así desde hace días.
-... Eso es lo que Blake me dijo. Que esta toda... seria.
-Con el ceño fruncido. Así. – Ruby hizo la mejor imitación que pudo. Que les sacó una risa a ambos. – No quiero verla así. Le he preguntado, le he rogado... hasta le hice la mirada de cachorro triste.
-¿La qué...?
-Ya lo sabrás. Eres su novio, así que la usara contigo. – Ruby le dio los cinco por lo bajo a Blake.
-Si.
... Siente que está en aprietos futuros. Muchos. Pero las chicas lo tomaron con humor. Al final... Blake sabia que solo Yang puede superar esto, ya que... ella es la que debe de aceptar lo que pasa en su cabeza y corazón.
Ya con todo eso claro...
-Bueno Ruby, ¿Lista para prepararte para el baile?
-... Si. Lo estoy.
Ruby le sonrió a Blake, quien asintió. Vent notaba como esas dos interactuaban. Lo que pasó, parece algo muy lejano. Parece que se habían hecho a una idea clara de como llevar esto. A su vez, sentía que su mente ya estaba siendo clara con lo que debe de hacer. Pero en el fondo, sentía que faltaba algo más en esa imagen. ¿Qué podía ser?
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En la habitación del equipo RWBY, se puede ver como Yang esta lanzando una pelota al techo y la atrapa con la mano. Sin duda era que la acción la calmaba mucho. Pero...
-¿Puedes dejar eso? Trato de leer. – Weiss desde su escritorio, le llamo la atención.
-Meh... - Ella siguió con lo suyo. - ¿Qué haces?
-Trato... de adelantar temas para el próximo año. Eso trato.
-Aburrido. – Yang atrapó la pelota. – No puedo creerlo, sabes...
-¿Que? – Weiss siguió con lo suyo.
-Ruby... perdonando y aceptando la excusa esa... De Limitadores o lo que sea...
-LIRA. ¿Te molestaría leer un poco en vez de no hacer nada o leer de motos? – Weiss se giró, harta.
-Claro... Es el tema de Ruby... y de Blake. Lo que ellas hagan, no es nuestro asunto.
-Si... es verdad. De todos modos, no es como si eso cambiara algo. – la chica meditó y...- ¿Qué crees que haya sido el resultado?
-Oh Dios... ¡No tú también!
-¿Qué cosa? Solo es una pregunta...
-¡Eso! Esa... expresión. – Yang alzó las manos, harta. – Desde que te salvó, has estado así por Vent. ¿Qué? El cliché te pega mucho.
-¿¡Cómo te atreves a pensar así!? ¡No es eso...! – Weiss quiso decir que pensaba que era más.. lo del bosque, lo del lago. - ¿¡Y que hay de ti!?
-¿¡Ah!?
-Desde hace días, estas con ese humor de perro... Sin ofender Zwei, la cosa más linda.
-*Woof* - el corgi solo respondió desde su lugar en la cama de Ruby.
-Mi humor está bien Ice Queen, no pasa nada....
-¿Así? Pues dime la última broma que has hecho. – el silencio fue respuesta suficiente. - ¡Ahí está! ¡Ni una! ¡Estas toda... deprimida o algo!
-¡No estoy deprimida! – Yang atrapó la pelota y se sentó con una clara molestia. – Que tú creas eso, es otra cosa...
-Ay sí... Casi me estás haciendo creer que lo dijo Blake es cierto.
-...¿Qué has dicho?
-Que estas así, desde que Ruby le pidió la cita a Vent. ¿Qué? ¿Te molesta que tu hermana si se hizo de una cita? ¿O querías ir con él? – la burla de Weiss, pasó a sorpresa al ver la cara de Yang. – Oye... - Ver como apretaba los dientes, pero sus ojos mostraban que eso si le dolió... -Yang, yo no... - Pero la pelota que casi le da en la cara, solo la hizo reaccionar de otra manera. - ¿¡Que mierda te pasa!?
-¡Cállate Weiss! ¡Tú no hables! ¡De seguro no quieres ir al baile, porque sabes que todos dirán que la gran Weiss Schnee se quedó sin novio para la gran fiesta, como debes cuidar las apariencias!
-¿¡Como...!? – Ahora si se sintió ofendida.
-Oh. Quizás sea porque no tiene el valor de decirle al chico que le gusta, que vaya con ella. ¿Por qué? ¡Porque su compañera está yendo con esa persona!
Yang supo que habló de más... lo supo en el momento que vio la expresión de dolor de Weiss. Todo fue tan fuerte, que quiso pedir perdón... pero su orgullo peso más. Tanto que, no dijo nada... Weiss tomó la pelota que pasó a su lado y se la lanzó a Yang en la cara, lo que la hizo....
-¿¡Que carajos...!?
-¡Púdrete Yang! – Weiss soltó un sollozo. - ¡Púdrete tú y tu mal humor! ¡Quédate con este, pero no se lo lances a la gente! ¡Más cuando sabes que duele!
-¿¡Así!? ¡Pues metete tus comentarios hacia mí, por donde no los pueda ver Ice Queen!
-¡Bien! – Weiss se limpió las lágrimas, tomó a Zwei, que estaba temblando por los gritos, se fue a la puerta, la abrió y... - ¡Quédate con tu humor aquí! ¡Me largo!
-¡Lárgate, no te necesito! ¡Ni a ti ni a esas dos!
-¡Bien! ¡Espero que con ese humor tuyo Yang te quedes así, sola! ¿¡Me oíste!? ¡SOLA! – Weiss cerró la puerta con fuerza, que pareció hacer temblar el edificio.
-¡Y así quiero estar! – Yang dio un último grito, pero al ver que no había nadie... vio la pelota que cayó a su lado y... - ¡AAAAAAAAAAAAH! - La tiró a la pared, haciendo que esta rebote con fuerza, mientras que ella se echaba y se tapaba la cara... - Así quiero estar...
Lo único que se oyó en ese silencio, fueron los sollozos de la chica...
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Ya fuera del complejo habitacional, Weiss camino y camino, hasta llegar una parte de la Academia, sabe puede estar sola. La zona de los jardines, que justo está detrás y tiene un banco que la puede ayudar a... mostrarse tranquila.
Ella logró sentarse y... oyó los sonidos que Zwei le daba, como diciendo que no llore. Pero era tarde... ella, Weiss Schnee, lloraba. Porque era cierto. Lo era... no quería ir, porque... Ruby estaba yendo con Vent. Estaba molesta... porque Blake logró lo que ella quiso, pero por apariencias, dejó pasar. Le daba igual que hablen de ella si terminó con Neptune. Era un idiota que sigue coqueteando, sin respetar ese tiempo que hay entre las relaciones al acabar.
Lloraba, porque al final de todo, nunca... nunca podía actuar en relación a lo que sentía, cuando debe. Tiene que pasar por un mal momento, algo que le duela o le mueva el piso, para hacerlo. Debe caer con tal fuerza, para ella darse cuenta de las cosas y...
-... Sabes Zwei, siento que... quizás pienso mucho las cosas... el que dirán... que pierdo oportunidad en todo.
El cachorro dio un ladrido triste. No sabe que pasaba, pero ella si. Ella sabe que... Perdió oportunidades por ego, decisiones... malos prejuicios. Quizás...
-¿Weiss...? – esa voz...
Ella alzó la voz y se dio con la sorpresa de ver al chico que había ocasionado todo el embrollo. Uno que no le concernía, pero lo tomó tan personal que...
-Vent... ¿Qué estas...?
-Estaba... ahm... - Ella notó las flores que estaban en sus manos y... - No le digas a nadie que saque unas flores del jardín... me gaste casi todo el dinero en el terno que usare hoy. Que no tengo más hasta mañana...
Ella no pudo evitar que se veía tierno, nervioso... Pero a la vez...
-¿Para Ruby...? – vio la flor roja...
-... Y Blake. – Mostró la purpura. – Digo, si bien Ruby es mi cita... Blake nos está acompañando, así que...
Y eso la hizo pensar que... no lo entendía. ¿Qué le llamaba la atención de este chico? Lo miraba... físicamente, estaba sobre el promedio, pero no es... como esos actores o como los que son cazadores. Casi es como si fuera una regla, que para ser cazador, debes de ser guapo o bella. Sus ojos verdes eran lo más llamativo de él, más allá... nada. Quizás... era esa emoción tan pura que sale de ellos. Si... debe de ser ello. Aun recuerda cuando la salvó...
La preocupación, el alivio... todo en una mirada. Y quizás, eso fue lo que la hizo... sentirse así. Quizás, solo era eso... algo nacido del momento. Pero...
-¿Por qué lloras?
-... Yang es una idiota. Discutí con ella.
-Oh... - Si, eso... es incómodo. – Supongo que fue buena idea que Ruby y Blake fueran a otro lado a prepararse. Al parecer el humor de Yang no es bueno....
-Es terrible. – Ella al verlo parado, se hizo un espacio y le indicó que se siente, limpiándose las lágrimas. – Nunca la había visto así.
-... Debe de estar pasando algo que la molesta. ¿Saben que puede ser?
-No... y eso... me enfurece. Yang puede ser la sociable y demás, pero cuando pasa algo muy personal, como que se cierra. No quiere decir nada...
-Quizás hay que esperar a que quiera...
-O que explote y lo suelte todo. Lo que pase primero. Conste, que no quiero verla ahora... ni en unas horas. Me dijo algo que me dolió mucho. Y no, no deseo hablarlo. – NO contigo, ya que trata de ti, eso pensó.
-Oh... - El silencio que los envolvió era... - Weiss yo...
-Siento como reaccione... ayer... - Ella se le adelantó. – Es solo que... la sorpresa, lo de Ruby... Lo siento, no quise tratarte mal. Y lo que Ruby dijo, de que tenías el LIRA bajo...
-Oh... eso... Si, resultó ser verdad. – Weiss se sorprendió al oírlo. – al parecer, carezco lo que debería por ser parte humano. Muchas cosas que no entendí, pero... lo que pasó, al menos ya sé que es...
-Ósea... ¿Te gusta Ruby y Blake? – Weiss le preguntó incrédula. – Wow... Y yo que pensaba que eso solo pasaba en los libros eróticos de Blake.
-... Me sigo preguntando que son esos libros...
-No los leas. – Ok, debe de evitar que se envenene la mente con esas porquerías. – En fin... me alegro por ti... Supongo que también estabas asustado.
-Si... ni que decir que no quería herir a Ruby y Blake... al menos con esto ya sé como progresar las cosas.
Weiss notó en su mirada, que estaba decidido a una cosa... ella...
-Entonces... suerte. – No supo porque, pero las palabras salieron pesadas...
-Gracias Weiss... - la sonrisa que él le dio, solo la hizo querer... - Bueno, debo de ir viendo lo del terno y... si quieres un lugar donde pasar la noche hasta que termine la velada, puedes usar mi habitación. Te paso el código por Scroll.
-No debes de...
-Insisto. Seguro no quieres tratar con Yang...
-... OK... Solo por eso...
-Hecho... - Vent se puso de pie. – Me voy. Oh... ten.
Ella alzó la mano, Zwei vio que era... una flor... el perro ladró. Pero ella se sorprendió al ver lo blanca que era, diferente a las que... lleva en mano.
-... Vi esa blanca y pensé en llevarla. No sé... me recordó a ti... Espero que lo aprecies como un gesto de... buena amistad. Ya sabes, por lo que pasó ayer y... No quería que siguiéramos así...
-... Vent... yo... - No supo que decir. Ella había recibido miles de flores, caras y exóticas... pero... era el gesto lo que la dejó muda. – Gracias...
El muchacho asintió con una sonrisa, se dio media vuelta tras despedirse de nuevo... dejando a Weiss con la flor y Zwei en sus manos. Ella escuchó el Scroll, el código de seguro. Pero ni lo miró, ya que siguió viendo el cielo... no sabiendo que hacer...
-... Que haré... - Quería... quería estar más cerca de él. La banca ahora la sentía... vacía.
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Por otro lado...
-Oh, bien Pandora. Debo de admitir que el trabajo es excelente. – Prometheus felicitó a su hermana, quien asintió.
-Todas las ubicaciones que necesitamos, las estoy ya poniendo en control con la base de datos. Una vez ocurra el plan... todo iniciara. En su debido lapso de tiempo. Una vez pase, hay que mandar a los... que serán sus guardianes.
-Excelente. – Prometheus miró la computadora que ella seguía jaqueando. – Es más, veo que... notaron a la muñeca de Atlas. Veamos como la usan...
-Si... Y han puesto que la rubia del equipo RWBY, pelee con su... subordinado. Parece que quieren sacar al equipo ese por alguna razón.
-Interesante. – se veían ya las peleas decididas. – Oh... quieren que la muñeca pelee con... interesante. Según vimos, la Semblance de ella... es mortal para la muñeca esa. Veamos que sale.
-Si... Espero que todo esto... facilite el plan.
-Lo hará hermana... lo hará.
Ambos siguieron con su trabajo. Con lo que estaba pasando ahora, la fiesta, todo estaba... en el mejor momento posible para hacer sus movidas.
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