Gate (overkill)
Light-city (ciudad catedral principal de Zufmuut):
Volk Pov (líder de los sacerdotes guerreros):
Volk: "¡Vamos mis valientes paladines! ¡No podemos permitir que esas bestias devoren a nuestra gente! ¡Peleen con todo! ¡Aunque nuestra diosa nos haya abandonado no podemos rendirnos!"
Paladines: "¡Si señor!"
Sacerdotes guerreros: "¡Ya oyeron a nuestro señor, nadie se rinde!"
Soldados: "¡Nadie se rinde!"
Que valientes, en serio la bastarda de nuestra diosa no merece que hombres y mujeres tan valientes y tenaces le rindan culto. Cuando las ángeles de Zufmuut nos trajeron la noticia de que nuestra diosa necesitaba apoyo para invadir el otro lado del Gate nos regocijamos, la alegría de servir directamente a nuestra diosa era lo mejor que podíamos pedir. Pero eso fue hasta que nos dijeron que debíamos dejar que los demonios nos devoren en cuerpo y alma para que se hagan mas fuertes, nos dijeron que esa era la mejor forma de servir a la diosa.
Y una mierda, en ese momento me di cuenta de que no importaba que tan fieles fuéramos a Zufmuut, esa diosa de porquería solo nos veía como peones desechables. No iba a permitir que mi gente sea devorada por los demonios, como líder de los sacerdotes guerreros he defendido el mundo terrenal en contra de esos engendros por años, prohibí la esclavitud en cualquier ciudad que adorara a Zufmuut y expulse a los semihumanos de nuestras tierras y por eso todos mis ciudadanos me adoraban, ellos sabían que yo me preocupaba mucho por mi gente y confiaban en que yo los protegería de los demonios. No podía fallarles ahora.
Dos de mis ciudades se dejaron consumir por los demonios, no podía permitir que eso le pasara al resto pero no podía hacerlo solo. Para mi fortuna un misterioso bicho metálico apareció a mi lado y me entrego un comunicador divino, con esta reliquia podía analizar a cualquier enemigo y descubrir sus puntos débiles y también aumentar mi concentración. La reliquia me permitió contactar con una diosa que se llamaba la Emperatriz, ella prometió la salvación de mi gente y un futuro mejor. No confiaba en ella para ser sinceros, pero no tenia otras opciones así que acepte su ayuda. Rápidamente organice una rebelión contra Zufmuut, ordene la ejecución de cualquiera que estuviera del lado de ella y la destrucción de sus templos. Con la ayuda de la Emperatriz y sus raros golems mis sacerdotes pudieron crear unos collares especiales, según la Emperatriz las ángeles de Zufmuut eran en realidad mas pervertidas y sumisas que las mujeres humanas ya que fueron obligadas a mantenerse puras debido a su conexión con Zufmuut mientras miraban con envidia la lujuria de los humanos y otras razas. Naturalmente estaban muy frustradas sexualmente, y nosotros nos aprovecharíamos de eso.
Al ver como destruíamos los templos de Zufmuut las ángeles nos atacaron para evitarlo, nunca sospecharon que simples mortales podrían tenderles una emboscada. Esos collares eran una maravilla, con solo lanzarlos estos iban directo al cuello de sus victimas y cortaban la conexión con Zufmuut lo que hacia que ellas perdieran su magia sagrada y recuperasen la lujuria que se les había quitado. Usamos los escudos de nuestras ciudades para encerrarlas y así capturamos a todas, ellas lucharon ferozmente pero mis tropas las derrotaron tras unas cuantas horas de batalla. No las matamos, cuando eran vencidas ellas se sometían y juraban lealtad al humano que las derroto así que varios de mis camaradas y soldados obtuvieron nuevas esposas ese día, gracias a mi fuerza y resistencia yo pude derrotar y tomar a cinco de ellas como mis esposas y después de divertirnos un rato (o sea una orgia masiva) todas se transformaron en ángeles oscuros. A pesar de no poder usar la magia sagrada ellas aun podían usar los demás elementos y eran casi inmunes a la magia en general, sus habilidades físicas también eran muy destacables.
Con estos nuevos refuerzos las ocho ciudades rebeldes se prepararon, los demonios no tardarían mucho en consumir las 2 ciudades y nos atacarían. Por suerte hemos luchado con esas cosas desde milenios, teníamos agua bendita, armas de plata bendecidas, armaduras anti-magia, magos poderosos, wyverns dorados, bengalas anti-demonios y poderosos escudos que protegían cada ciudad. El Imperio siempre quiso que luchásemos de su lado pero nosotros nunca nos haríamos aliados de un Imperio tan arrogante y corrupto, me hubiera gustado destruirlos yo mismo pero Zufmuut nos había prohibido intervenir.
La batalla fue horrible, los demonios venían en tal cantidad como si hubieran traído todo el infierno para luchar. Los pequeños imp eran como una plaga y sus números eran abrumadores, las gárgolas y wyverns poseídos inundaban el cielo como moscas y nuestras ángeles oscuras, wyverns dorados, arqueros y magos luchaban por sacarlos del espacio aéreo, las súcubos e íncubos usaban sus encantos para seducir a nuestros soldados hombres y mujeres los cuales fueron encantados para pelear contra sus antiguos aliados, sus magos corruptos bombardeaban los escudos con chaparrones de magia. Pude evitar que su superioridad numérica abrumara los escudos abriendo pequeñas brechas que los demonios intentaban atacar, pero esas aperturas estaban protegidas por mi y por los mas veteranos de cada ciudad.
Así aguantamos por días, pero al séptimo día aparecieron los titanes. Monstruos de 7 metros de alto con una fuerza absoluta, por suerte eran pocos pero si uno solo de ellos golpeaba el escudo este se rompería en un parpadeo. Por ese motivo ordene a una de mis esposas ángel que me llevara volando a las cabezas de esos monstruos, gracias a la reliquia supe que el punto débil de esos monstruos se hallaba en la nuca y pude cortarlos y derribarlos con destreza lo que aumento la moral de mis soldados. Mis sacerdotes guerreros hicieron hazañas similares en las otras ciudades y teníamos esperanza de que íbamos a sobrevivir, esperanzas que fueron aplastadas cuando vimos un gran numero de titanes acercarse a todas las ciudades incluso venían dragones de 15 metros, uno por cada ciudad. Varios ya pensaban en suicidarse para evitar que los demonios los consuman, no iba a permitirlo.
Volk: "¡No teman mis soldados! ¡Se que la situación se ve jodidamente mal! ¡Pero no estamos solos! ¡He jurado lealtad a una nueva diosa, la Emperatriz de la humanidad! ¡Gracias a ella hemos podido montar esta resistencia y nos ha prometido refuerzos! ¡Así que resistan, por favor esta vez los necesito! ¡Solos morimos pero juntos viviremos!"
Tras mi discurso mis soldados recuperan la esperanza, pero solo un poco. Al menos los pensamientos de suicidarse se han desvanecido y se preparan para el ultimo round.
Layla: "Me alegra que hayas sido tu quien me haya derrotado, a diferencia de Zufmuut tú no vez a tu gente como algo desechable se nota que ellos son muy importantes para ti. Sera un honor morir a tu lado."
Mi esposa ángel mas fuerte me da un beso y me abraza, mis otras esposas también se acercan a mi lado. Todas están preparadas para morir, pero tengo fe. Tengo fe de que la Emperatriz no nos abandonara.
Ciudad de Itálica:
Colt Formal Pov:
Malditos imperiales, por fin han encontrado la forma de arrastrar a mi y a mi gente a su estúpida guerra. Cuando se abrió el Gate mis confiables espías dentro del palacio me lo informaron rápidamente, en esa época entre en pánico ya que sabia bien que por aceptar a los semihumanos yo no era bien aceptado dentro del Imperio y podrían aprovechar esa oportunidad para obligarme a marchar a la guerra y tener una "muerte gloriosa".
Por suerte quien lideraba la invasión era ese estúpido de Zorzal, convencerlo de quedarme fue muy fácil. Le ofrecí apoyo logístico, alimentos y mucho oro; tuve que pagar mucho mas de lo que pagaría normalmente pero valió la pena. Yo podía darme ese lujo gracias a mis compañeros semihumanos, cuando se dieron cuenta de que mi territorio era un lugar seguro para ellos muchas de sus tribus vinieron a pedirme asilo y protección del Imperio. Yo acepte encantado, entre las tribus había chicas conejo, chicas gato, medusas, lamias, harpías entre otras razas; físicamente son mas fuertes que los humanos, dándoles descanso y comida adecuada podían trabajar mas tiempo y generar mas ingresos. Algo tan simple que no entiendo porque esos idiotas del Imperio no se dan cuenta, si lo implementaran ganarían mas que explotando grandes cantidades de esclavos. Incluso me ayudaron a combatir con las tribus humanas bárbaras que atacaban mi ciudad de vez en cuando, tras derrotarlos sus lideres me juraron su lealtad ante la mirada de las montañas y me dieron un par de chicas hermosas como mis sirvientas y como símbolo de amistad y lealtad. Por suerte su mentalidad era muy simple y veían al vencedor como su nuevo líder y mientras no les falte comida ni alojamiento no me traicionaran.
Aunque debo admitir que mis gustos personales también influyeron en mis decisiones, además de las chicas humanas también acepte a varias de las chicas semihumanas mas guapas de cada tribu para que trabajaran como sirvientas en mi mansión. Todas lo hicieron de forma voluntaria y pasaron por un entrenamiento estricto para también servir como guardaespaldas de mi familia, lo mejor era que no tenían problemas en darme entretenimiento nocturno cuando quería. Si, las mujeres semihumanas son las mejores (incluso dieron a luz a unos cuantos niños, las chicas los crían para que sean los futuros sirvientes de la mansión) pero tampoco descuide a mi esposa la cual me dio tres lindas hijas. Las mayores se casaron con otros nobles cercanos y actualmente administran sus territorios ya que sus maridos murieron tras la desastrosa invasión del otro lado. Mi hija menor solo tiene 5 años, con su madre enferma si yo muero mi pequeña será la que tendrá que encargarse de mi territorio. No puedo dejar que eso le pase a mi pequeña, aunque confió que mis sirvientas la protegerán no podrán hacer nada si el Imperio decide mandar a otro noble para reemplazarla.
Para evitarlo hice un trato, no me importa si la historia me recuerda como un traidor pero no permitiré que mi ciudad ni mi familia sean destruidos por la ambición del Imperio y por la estupidez de los dioses. Fueron ellos quienes abrieron el Gate en primer lugar y ahora piden a los mortales ayudarlos a resolver el problema.
Tyuule: "¡Maldito infeliz! ¡¿Como te atreves a intentar violar a esta chica?!"
Soldado: "¡Cállate inmunda semihumana! ¡Es natural que las esclavas semihumanas nos sirvan a nosotros!"
Tyuule: "¡Aquí no hay esclavas imbécil!"
Colt: "¿Que esta pasando aquí?"
Soldado: "Nada grave conde, solo intentaba pasar un buen rato con esta cachorrita pero esta coneja me interrumpió."
Colt: "Y lo hizo con buen motivo, estamos preparándonos para invadir el otro lado del Gate. No podemos perder el tiempo follando, vuelve a tu posición. Si vuelve a ocurrir le informare a la princesa Piña."
El soldado me mira molesto, no es que me importe ya que se va en un rato. El ejercito Imperial fue reforzado gracias a los dioses y se pueden ver soldados con armadura completa, magos, mosqueteros, cañones, trolls, barcos y artilugios voladores, wyverns, águilas gigantes, lobos gigantes, ogros, goblins, golems de hierro del tamaño de un ogro y otros del tamaño de gigantes por todo el lugar. Por seguridad mis tropas compuestas por humanos y semihumanos se reúnen al otro extremo de la ciudad para evitar estos incidentes. Zorzal mando aquí a su hermana Piña para comandar el ejercito y sus estúpidos soldados siempre intentan violar a todas las chicas semihumanas en su rango de visión, si no fuera porque esta misión fue dada por los mismos dioses y la princesa Piña quiere todo listo lo antes posible no podría detener a esos violadores.
Tyuule: "Gracias conde."
Colt: "No fue nada, es mi deber como noble proteger a mi gente."
Tyuule: "Lo digo en serio conde, si no hubieras aceptado a mi tribu con toda seguridad seriamos esclavas del Imperio. Es gracias a usted que tenemos una buena vida, así que nuestra lealtad estará siempre con usted."
Colt: "En serio agradezco eso, solo aguanten un poco mas."
Tyuule: "No se preocupe podemos esperar, por otro lado. ¿Cómo está Delilah? Un pajarito me contó que la preñaste hace 2 meses."
Mamina: "A mi también me embarazo el año pasado, yo ya di a luz. Saluda a tu padre y a la reina mi bolita de algodón."
Tyuule/Colt: "Hola Mamina, hola Liz."
Mi pequeña bebé conejita nos sonríe a mi y a Tyuule, ella no puede ser gobernante ni noble en el futuro pero eso no me impide quererla. Le acaricio sus orejitas y la pequeña se ríe.
Colt: "Está bien, le ordene que descanse cuando su embarazo le impida trabajar. Deberías verla, quiere que su reina escoja el nombre de su bebé."
Tyuule: "Si sobrevivimos a esto entonces lo haré con gusto."
Piña Colada: "¡Conde Formal! ¡Mis soldados se quejan de que los semihumanos los molestan y usted alienta ese comportamiento! ¡¿Que significa eso?!"
Tyuule: "¡Quizás si castraras a esos perros imperiales no tendríamos esos problemas!"
Hamilton: "¡¿Como te atreves a hablarle a la princesa en ese tono?!"
Tyuule: "¡Es la verdad!"
Mamina: "¡Cierren la boca las tres! ¡Ya hicieron llorar a mi niña!"
En efecto, la pequeña Liz se ha asustado y a empezado a llorar, las chicas se disculpan rápidamente y eso me permite explicarle la situación a la princesa. Ella se retira prometiendo evitar esos incidentes, no es tan mala es solo algo orgullosa; realmente espero que sobreviva a lo que va a pasar. Ella no tiene idea del poderoso enemigo que amenaza al Imperio y a los dioses, no quisiera ver su reacción si supiera que los ogros que protegen a mi familia son en realidad una especie llamada ogretes y que son leales a las diosas del otro lado.
En algún lugar del bosque:
Yao Pov:
Yao: "¡Despierten! ¡El dragón viene de nuevo!"
Capitán elfo oscuro: "¡Ustedes corran nosotros compraremos tiempo!"
Soldado elfo oscuro: "¡Todos vamos a morir!"
Capitán elfo oscuro: "¡Al menos hagamos que las mujeres y los niños escapen!"
Malditos dioses, nosotros solo queríamos vivir en paz en nuestro bosque sin ningún tipo de conflicto. Pero no, como castigo por no obedecer su voluntad la diosa del bosque mando un maldito dragón y otras criaturas del bosque para darnos caza.
Una de esas criaturas alcanza nuestra posición, un jabalí de tres cuernos nos ataca. Por suerte somos muy buenos con el arco, enfrentar a esa bestia cuerpo a cuerpo seria suicidio. Cojo mi arco y le doy un tiro certero en el ojo lo que lo derriba al instante, mis compañeros hacen lo mismo con las otras bestias que nos lanza Wareharun; insectos gigantes de todo tipo e incluso serpientes titánicas nos asedian. Antes de darnos cuenta estamos totalmente rodeados, parece que no podremos escapar esta vez. Maldita sea.
En el espacio - Supercarguero Clase-Infinity:
Sumire Inteligente Pov:
No estoy bien, no me puedo concentrar maldita sea. ¿Por que me siento así? ¿Qué fue lo que hice para sentirme tan mal? Día a día esto empeora, siento soledad, arrepentimiento, por suerte Cortana es realmente útil a la hora de crear estrategias pero esto me esta afectando bastante. Muchas veces me pierdo en mis pensamientos e ignoro lo que pasa a mi alrededor.
Sumire: "¡Contesta Inteligente-san, no podemos retrasar el ataque! ¡Ya es hora!"
S. Inteligente: "¡Ah, si! ¡Todas las naves, disparen a los objetivos designados a mi señal! ¡10, 9, 2, 1, AHORA!"
Sumire/S. Inteligente: "¡FUEGO!"
Supongo que tendré que solucionar mis problemas mentales luego, ya es hora de atacar. Es hora de que Falmart conozca el verdadero significado del miedo y la destrucción. Esos dioses bastardos en su arrogancia reclamaron los cielos como suyos, cuando en realidad estos son solo un obstáculo mas que la humanidad esta destinada a superar y conquistar, para luego superarlo e ir aun mas arriba.
Lector Pov:
En las ciudades asediadas por los demonios, cuando los defensores se habían resignado a morir fueron testigos de un milagro. Grandes haces de luz y varios tipos de proyectiles caían del cielo y barrían a los demonios a diestra y siniestra. Incluso los poderosos titanes eran totalmente vaporizados ante tal poder, el gran tamaño de los dragones les jugo en su contra ya que recibieron la mayor parte del impacto.
https://youtu.be/cohBFvelc6w
En respuesta a esto Zufmuut abrió grietas cerca de cada ciudad, desde estas grietas una cantidad mucho mayor de demonios eran regurgitados del infierno. La diosa al igual que los otros dioses estaba estupefacta y asustada, ninguno de ellos había pensado que el otro mundo les atacaría primero y desde un lugar que ellos no podían alcanzar. Los planes de Zufmuut se habían arruinado, solo había mandado pequeños grupos de demonios para asediar las ciudades humanas para que se hagan mas fuertes. Esos demonios se volverían sus tropas de élite, se harían invencibles si devoraban a sus ángeles traidoras y obtenían su poder; pero ahora estos demonios de élite se habían ido en un parpadeo gracias a ese ataque que vino desde encima del reino de los dioses. Ahora se había visto obligada a usar la cantidad total del ejercito demoníaco para intentar devorar de cualquier forma las ciudades y obtener las almas de los mortales.
Las emociones del sacerdote Volk eran como una montaña rusa, primero había sentido gran euforia y alegría al ver a sus poderosos enemigos ser masacrados unilateralmente. Pero luego volvió a sentir desesperación al ver las grietas y la cantidad de demonios que estas expulsaban, eso era una cantidad nunca antes vista en la historia de la humanidad. Sin embargo, sentiría esperanza y fe al ver varios portales abrirse cerca la ciudad, al mismo tiempo de que varias capsulas y dragones de metal caían del cielo. Enormes titanes de metal caían del cielo y mostraron su superioridad a sus contrapartes demoníacas, disparando tal potencia de fuego que borraron a varios ejércitos en un parpadeo.
Santa Celestine: "¡Valientes defensores! ¡No teman hemos venido a reforzaros!"
Lion El'Jhonson: "Comiencen."
Las hermanas de batalla y los Ángeles Oscuros dieron un gran grito de guerra y se lanzaron al campo de batalla con tal locura y fervor que hizo estremecer de miedo incluso a los guerreros santos y a las ángeles. Ni siquiera ellos habían visto tal fervor y determinación en toda su vida, especialmente al ver a la Santa Celestine y al primarca Lion El'Jhonson luchar. La primera parecía aun mas divina que Zufmuut y su sola presencia hacia que los demonios de bajo rango se desvanecieran en polvo, solo aquellos demonios con un poco mas de poder se le podían acercar y aun así no conseguían hacerle literalmente nada, ella eran tan rápida y diestra con la espada que cortaba en pedazos a cada demonio lo suficientemente desafortunado para estar cerca de ella. Por otro lado, el primarca Lion luchaba con tal ferocidad y habilidad que dejaría en ridículo incluso al dios Emroy, no importaba que los demonios lo superasen de mil a uno incluso sus variantes mas fuertes y aquellos con el poder de corromper las almas humanas eran como hormigas frente al león. Todos vieron estupefactos como decapitaba a los titanes como si fueran hierba, como le disparaban fuego maldito y todo tipo de maldiciones debilitadoras pero estas no hacían nada para frenar al poderoso primarca, como las súcubos mas atractivas y lujuriosas intentaban seducirlo pero ni siquiera lo hacían pestañear, incluso vieron a los demonios mayores (existencias que se decía podían destruir países en una hora) rogar por clemencia al ver que sus mejores ataques eran una mierda absoluta frente a ese monstruo.
Los subordinados de ambos no se quedaban atrás, las Hermanas Arrepentidas fueron las primeras en hacer contacto con el enemigo, sin nada de armadura y armadas solo con una gran espada-sierra y su deseo de expiar sus pecados se lanzaban con una locura religiosa total contra los demonios. Debido a su escasa vestimenta los íncubos las vieron con lujuria e intentaron usar sus encantos para conquistarlas, fatal error ya que fueron partidos a la mitad. Las Hermanas Serafines usaban sus propulsores para volar por todo el campo de batalla y limpiaban los cielos de esas abominaciones, en todas las ciudades se podía ver a las Hermanas de Batalla usar espadas-sierra, bolteres pesados y lanzallamas para purgar a los demonios. Sus Rhinos y tanques Immolator causaban bajas catastróficas a los demonios mientras sus lanzamisiles Exorcistas lanzaban cientos de misiles al son de un coro celestial. Las Hermanas Hospitalarias se abrían paso por el campo de batalla y curaban a todo aquel que lo necesitase, manteniendo la moral y la salud de su grupo.
Los Ángeles Oscuros mostraron su feroz fuerza y absoluta determinación, cada Supremo Gran Maestre daba ordenes y estrategias precisas para que sus bajos números liquiden las enormes hordas de demonios que asediaban cada ciudad. Encabezando el ataque estaban los poderosos Exterminadores y Dreadnoughts que usaban una gran cantidad de armamento pesado para borrar a sus enemigos, mientras los Bibliotecarios usaban sus poderes psíquicos para causar estragos en el ejercito demoníaco. Los demonios sentían grandes cantidades de terror con solo verlos, los mas fuertes de ellos eran golpeados con lanzas de fuego blanco que destruían sus cerebros; por otro lado los Bibliotecarios aplicaban constantemente Repugnancia Justa a sus hermanos (una habilidad que aviva las llamas del odio y que hace que los Ángeles Oscuros respondan con mayor violencia). Transportes blindados Rhinos y Land Raiders desplegaban mas unidades y añadían mucha potencia de fuego al campo de batalla, en el aire las cañoneras Stormbird y Thunderhawk saturaban el aire y la tierra con ráfagas de misiles, balas y láseres; ningún demonio de ningún tipo estaba a salvo de su furia.
Viendo todo esto, los defensores de cada ciudad se sintieron eufóricos y con la fe renovada. En un acto de fe y locura tomaron todo su armamento y abandonaron las defensas de sus ciudades para encontrarse cara a cara con el enemigo. Ahora eran servidores leales de la Emperatriz, Zufmuut podía irse a la mierda.
Ciudad de Itálica:
La princesa Piña estaba feliz, por fin se le había dado la oportunidad a su Orden de las Rosas de mostrar sus habilidades y fuerza. A ella no le agradaba para nada su hermano, desde que su padre murió por una rara enfermedad Zorzal había sido nombrado emperador y solo se había dedicado a hacer la guerra con el otro mundo. Eso no había salido muy bien y Piña estuvo preocupada, pero los mismos dioses intervinieron para ayudarles y por la falta de personal capacitado Zorzal no tuvo mas remedio que darle el mando a ella. Por una vez en su vida Piña estaba agradecida por la oportunidad y reunió rápidamente a sus tropas en la ciudad de Itálica, día tras día ella vio los refuerzos que les mandaban los dioses, monstruos indomables, armas mágicas, golems de hierro del tamaño de ogros o tan grandes como un castillo.
A ella le sorprendió ver la cantidad de semihumanos y humanos salvajes que había en la ciudad, era increíble como al conde le agradaban esos bárbaros. No era ningún secreto de que varias de las maids en su mansión tenían uno o dos hijos del conde, pero ellas no lo veían como algo malo de hecho lo consideraban un gran honor. Ninguno de esos bárbaros le era leal al Imperio, pero Colt era un noble del Imperio y por lo tanto no tenían mas opción que obedecer. Pero debía asegurarse que sus soldados no causen problemas, así que ella se reunió en el lado este de la ciudad mientras Colt reunía a sus soldados en el oeste.
https://youtu.be/3x5GWzVfHAs
Todos los pensamientos de Piña desaparecieron cuando ella noto unas estrellas en el cielo, pero era de día eso no tenia sentido. No fue hasta que las estrellas se acercaron y eliminaron a una parte de su ejercito que Piña se dio cuenta de que era un ataque, ahora Piña estaba en pánico. ¿Acaso habían ofendido a los dioses de alguna manera?
Todo el ejercito de Piña estaba en shock, nadie se esperaba un ataque en su propio territorio y mucho menos que les atacaran con estrellas. Varios cayeron de rodillas y empezaron a orar a los dioses, pero los dioses no podían ayudarles ya que ellos también estaban en pánico. Y sus problemas no acabaron ahí, unos instantes después notaron varias capsulas y pájaros de metal cayendo del cielo y varios portales abrirse cerca a la ciudad. Los generales rápidamente notaron que si bien el ataque anterior fue divino, solo había eliminado el 20% de sus fuerzas, aun tenían muchas tropas, monstruos y golems. Por lo tanto ordenaron tomar posiciones rápidamente, pero eso no iba a servir de nada.
Las capsulas cayeron y estas rebelaron a unos extraños soldados con armadura verde y otros con armadura negra, de los portales salieron grandes cantidades de hombres con telas verdes. Estos sacaron unos mosquetes raros y empezaron a acribillar a la infantería (la cual tenia armaduras con runas) acercándose a gran velocidad, al ver esto los generales ordenaron a sus monstruos, carruajes blindados y golems de metal moverse al frente para tankear el daño y disparar; pero entonces los Ciclops y tanques Abraham, Leopard y Grizzly se pusieron al frente y absorbieron los disparos como si nada. Para sorpresa y horror de los generales, los golems y carruajes blindados del enemigo podían destruir a los suyos de un solo golpe, incluso los pocos golems del tamaño de castillos que sobrevivieron al bombardeo inicial eran destruidos tras unos cuantos disparos.
Al ver que las tropas en tierra estaban siendo machacadas pensaron que tal vez podrían ganar si obtenían la superioridad aérea, por lo que ordenaron a sus magos invocar a cualquier criatura voladora que pudieran, también ordenaron a todas sus criaturas voladoras y sus poderosos barcos aéreos que atacaran al enemigo. Al ver esta amenaza los Spartans, ODST y soldados de Azur Lane empezaron a dispararles; para su sorpresa los wyverns aguantaban los impactos de las armas de calibre medio y las águilas e invocaciones venían en tal cantidad que no importaba cuantos matasen siempre habrían mas. Tras esta situación los vehículos de transporte y Warthogs empezaron a disparar sus ametralladoras para despejar el cielo, los Spartans cambiaron a armamento pesado y causaron muchas bajas, al mismo tiempo los helicópteros de ataque y Pelicans llegaron al campo de batalla y acribillaron a gran parte de la fuerza aérea enemiga y también arrasaron con gran parte de las fuerzas terrestres.
Los generales estaban desesperados, su ultima esperanza eran sus barcos voladores y girocopteros que estaban tomando posiciones para atacar. Pero esa esperanza fue borrada por los cazas F-22 y Eurofighter, los cuales dispararon muchos misiles antibuque y antiaéreos en contra de esos barcos y los derribaron en un parpadeo. Para rematar un pequeño portal apareció y de este surgieron cinco barcos voladores enemigos, al inicio no se preocuparon porque solo parecían juguetes pero al poco tiempo crecieron de tamaño hasta alcanzar un tamaño colosal; luego dispararon una gran cantidad de misiles de crucero contra las fuerzas sobrevivientes, aislándolos y evitando que huyan o reciban refuerzos. Algunos wyverns e invocaciones intentaron derribarlos pero los zepelines contaban con mucha artillería antiaérea por lo que no recibieron ni un golpe. Con su llegada empezó una masacre total, la orden que recibieron era no dejar prisioneros.
Unos momentos antes de que ocurriera esto Piña aun estaba dentro de la ciudad, ella se reunió con sus caballeros y fue directo con Colt para coordinar las defensas. Pero uno de sus caballeros noto algo extraño.
Grey: "Princesa Piña, esto no esta bien."
Bozes: "¡Claro que nada esta bien! ¡Nos atacaron con estrellas y el enemigo esta usando portales y meteoritos para traer muchos soldados! ¡Gracias capitán obvio!"
Grey: "No hablo de eso, mago usa vista lejana y muéstranos lo que pasa alrededor."
El mago invoco un ave mágica y con su magia permitió a todos ver lo que el ave veía. Con desgana Piña y los caballeros vieron la ciudad, entonces notaron algo increíble. Solo su ejercito había sido atacado, el ejercito de los semihumanos y humanos salvajes estaba totalmente intacto y no estaban haciendo ningún movimiento para ayudar al ejercito imperial. En lugar de eso vieron que le hacían espacio a tres multieyes, una especie de semihumano que parecía un humano pero tenia 7 ojos en todo su cuerpo; eran muy buenos en la magia pero sus habilidades físicas eran un asco y no tenían muchos números. Estos multieyes junto con otros miembros de su especie estaban colocados en posiciones estratégicas y usando toda su magia levantaron un enorme escudo, protegiendo a la ciudad y a su ejercito pero dejando fuera al ejercito imperial. Tras ver esto Piña se dio cuenta de lo que estaba pasando, el conde Formal los había traicionado.
Furiosa, Piña y sus caballeros fueron directo a la mansión del conde Formal para arrestarlo y obligarlo a contarles todo su plan. Al llegar vieron en la cima de la mansión a una multieyes vestida de maid, cada uno de sus ojos emitía una gran cantidad de mana para mantener el escudo. Como era la mas cercana a su posición planearon matarla para derribar el escudo, pero entonces las puertas de la mansión se abrieron y de ahí salieron el conde Formal y cinco ogros extraños.
Colt: "Lamento esto princesa Piña, pero tengo que capturarla."
Piña Colada: "¡Maldito traidor! ¡No solo traicionaste al Imperio! ¡También has traicionado a los dioses!"
Colt: "Fueron el imperio y los dioses quienes trajeron este desastre a nuestro mundo, lo mínimo que puedo hacer es evitar que ese desastre golpee mi ciudad."
Piña Colada: "¿Que te ofrecieron para traicionarnos? ¿Acaso te ofrecieron nuevas especies de semihumanas o chicas salvajes? ¿Oro? ¿Poder?"
Colt: "No, no me ofrecieron nada de eso. Solo permitirnos vivir en paz, nada mas, nada menos."
Piña Colada: "El Imperio también pudo ofrecerte eso."
Colt: "Por favor Piña, eso no te lo crees ni tu. Varios nobles quieren tomar mi puesto debido a mi compañerismo con los semihumanos y el único motivo por el que no lo hicieron es porque soborne al imbécil de tu hermano durante muchos años."
Hamilton: "¡¿Como te atreves a hablar así de la realeza?!"
Colt: "Eso no importa, el ya no es mi emperador. Ahora yo y mi ciudad servimos a las diosas del otro lado del Gate, solo ríndanse. Si lo hacen puedo hablar por ustedes y permitirles vivir."
Piña Colada: "¡El Imperio nunca caerá! ¡Todos, maten a Colt y a la multieyes! ¡Si la matamos traeremos abajo este escudo!"
Colt: "El escudo solo esta para marcar las partes que los soldados del otro mundo no deben atacar, si lo atacaran seria destruido en un segundo. Pero si quieres pelear bueno, chicos por favor noquéenlos."
Gar: "Entendido jefe, Gar y sus amigos matar y comer a todos."
Colt: "¡No! ¡No maten a nadie! ¡Solo derríbenlos!"
Gar: "Entendido jefe, Gar golpear y derribar. ¿Si morir comer?"
Colt: "Nada de comerse a nadie, luego les daré un banquete."
Gar y el resto de ogretes: "¡Si jefe!"
Piña y sus cien caballeros y un mago se prepararon para pelear con los ogretes. Ellos estaban bastante confiados, solo habían cinco enemigos y ellos habían recibido armaduras rúnicas que eran muy resistentes y aumentaban su fuerza y velocidad. Tenían espadas mágicas que podían cortar el acero como si fuera papel y su mago era un invocador que había recibido un bastón que aumentaba la cantidad y fuerza de sus invocaciones.
Gar inicio el ataque, tomo impulso y corrió a una velocidad que impresiono a los caballeros, usando su escudo para golpear derribo a 10 caballeros de un solo golpe. Luego uso su maza para derribar a los caballeros, estos intentaban cubrirse pero los ataques eran tan fuertes que un solo golpe bastaba para sacarlos volando. El mago intento invocar a varias criaturas para ayudar a sus compañeros, pero el resto de los ogretes también realizaron embestidas y uno de ellos por casualidad golpeo al mago, no lo mato gracias a que este conjuro un escudo pero quedo totalmente fuera de combate.
Piña estaba totalmente estupefacta, no podía creer que sus caballeros fueran derrotados tan fácilmente. Solo Grey había podido mantenerse al día con la fuerza y velocidad de Gar gracias a toda su experiencia, pero solo podía retener al ogrete y aun quedaban cuatro destrozando a su ejercito. Pero entonces el mago despertó e invoco a una serpiente la cual se trago al conde Formal, esto le dio esperanza a Piña. Podían usar al conde como rehén y obligar a los semihumanos a rendirse.
Pero cuando Gar vio eso corrió hasta la serpiente y noqueo a la bestia de un cabezazo, luego metió su brazo por la boca de la serpiente y extrajo al conde el cual se había desmayado.
Gar: "¡Ya te tengo jefe!"
El mago no podía creerlo, su poderosa serpiente había sido derrotada de un simple cabezazo. Intento invocar otra mas, pero Tyuule apareció detrás de el y lo noqueo de un golpe, luego derribo a los guardias de Piña y la capturo. Esto obligo a los caballeros restantes a rendirse y tirar sus armas, algunas maids procedieron a atarlos y llevarlos al calabozo. Otras tomaron al conde y lo llevaron rápidamente a recibir atención medica.
Gar: "Gracias amiga peluda."
Tyuule: "No fue nada, este exoesqueleto es una maravilla. Nunca me había sentido así de fuerte en toda mi vida."
Gar: "Regalo de la Emperatriz, muy impresionante."
Tyuule: "Si, y no parece que el ejercito imperial vaya a resistir mucho. Bueno vamos a comer."
Gar: "¡Comida!"
En el bosque:
Yao y sus compañeros habían cerrado sus ojos, todos resignándose a morir a manos de los monstruos. Pero súbitamente todos, monstruos y elfos se quedaron paralizados al sentir un leve temblor; los monstruos estaban entrando en pánico. Ellos sentían que su señora Wareharun estaba en peligro así que intentaron correr al bosque sagrado para ayudarla, pero no llegarían lejos.
Los elfos vieron aparecer de la nada a un grupo de humanos con bastones y ballestas extrañas, los cuales empezaron a disparar en contra de los monstruos y para sorpresa de los elfos oscuros los monstruos morían en un instante. El dragón al ver la masacre intento ayudar a los monstruos pero los humanos estaban preparados.
Rambo: "¡Jajajajjajaja! ¡Vamos ogretes, la cena esta lista! ¡Tráiganla!"
Ogretes: "¡Carne voladora!"
Los ogretes se posicionaron alrededor del dragón y dispararon ganchos en todo su cuerpo, los elfos oscuros pensaron que eran suicidas pero para su sorpresa el dragón estaba siendo arrastrado a tierra. Los sentinel dispararon láseres a sus alas y ayudaron a los ogretes a mantenerlo en tierra, el dragón estaba furioso. Intento disparar una gran bola de fuego, pero al abrir la boca unas flechas congelantes le dieron de lleno en el hocico; impidiendo que vuelva a arrojar fuego. Al poco tiempo algunos sentinels y ogretes se acercaron al dragón y usaron grandes motosierras para deshilachar su carne, algunos Dientes Serrados usaron sus garras metálicas para ayudar. El dragón murió tras 30 minutos de pura agonía. Incluso los elfos oscuros sintieron un poco de lastima por el.
Yao: "Gracias por su ayuda humanos."
Rambo: "No hay nada que agradecer, solo nos llevaremos esta jugosa carne y estaremos a mano."
Yao: "¿Vas a comértelo?"
Rambo: "Obvio, nunca hemos probado carne de dragón."
Yao: "¿Les molesta si les acompañamos? Tenemos magia de fuego y somos buenos cazadores, eso nos ayudara a cocinar mejor la carne."
Rambo: "¡Joder si! Yo me llamo Rambo. ¿Cómo te llamas?"
Yao: "Soy Yao, guerrera de los elfos oscuros."
Rambo: "Un gusto conocerte, ¡todos preparen la parrilla! ¡Hoy nos daremos un festín!"
https://youtu.be/mnrB8CQ4p4w
Elfos, humanos y ogretes: "¡Si!"
Yao estaba aliviada, su intento de acercarse a esos rudos humanos dio resultado. Si tenían suerte podrían hablar con sus lideres para conseguir un nuevo lugar donde vivir, si bien no podrían apoyarles militarmente solo necesitarían que una de los suyos se acostara con uno de ellos y diera a luz a un niño para crear un lazo entre las dos razas. Yao estaba segura que ni una mujer en su pueblo tendría problemas con eso, después de todo hacerlo aseguraría niños fuertes y eso garantizaría el futuro de su raza.
Mientras los elfos oscuros preparaban una exótica parrillada, los elfos normales no estaban pasándolo muy bien. A diferencia de los elfos oscuros ellos eran muy leales a la diosa del bosque, por lo que se prepararon para la invasión del otro lado. En una de sus aldeas mas grandes se reunieron miles de elfos, habían espadachines, arqueros, asesinos, jinetes de renos, jinetes de arañas, hechiceros, halcones gigantes, arañas del tamaño de dos elefantes, la misma diosa había hecho crecer treants de diferentes tamaños en su bosque y los elfos se aseguraban de alimentarlos con mana para que se fortalecieran.
Pero toda su preparación se fue a la mierda cuando fueron atacados por extraños humanos, estos eran totalmente diferentes a los humanos del imperio. Estos eran tan sigilosos que sus asesinos y exploradores no pudieron detectarlos, y también usaban unas varitas extrañas que disparaban luces que mataban a los elfos en un abrir y cerrar de ojos, algunos de ellos usaban extrañas flechas que los congelaban, quemaban y electrocutaban. Los treants intentaron atacar pero los humanos usaron un fuego pegajoso, varitas mas grandes y pelotitas explosivas para hacerlos volar en pedazos, su caballería y arañas gigantes intentaron hacer una carga para eliminar a los humanos; pero se encontraron con jinetes que usaban caballos y tigres de metal como montura. La caballería de los elfos fue totalmente diezmada por la caballería humana, los tigres de metal saltaron a lomos de las arañas y las destrozaron con sus enormes garras mientras unos golems bípedos disparaban luces y fuego a todos lados, matando a elfos y criaturas muy rápidamente.
Los jinetes de araña intentaron acercarse a los humanos entre todo el caos, pero fueron detectados por unos reptiles de metal que les dispararon al verlos cerca y también alertaron a humanos con unas lanzas extrañas que mataban con maestría a los pocos que podían acercarse. En el aire los jinetes de halcones cargaron a sus hechiceros e invocaron aves fénix para ayudarlos en el combate, pero entrarían en pánico al ser interceptados por águilas metálicas masivas; estas los desgarraron con sus picos y garras y acabaron con los fénix disparándoles bolas de trueno. Para rematar los elfos tuvieron una mala premonición, ellos sentían que el bosque sagrado estaba siendo atacado lo que significaba que su diosa no podría ayudarlos.
Aun así los lideres elfos querían seguir luchando, pero una de los suyos hizo lo mas inteligente que se le ocurrió. Alzo una bandera blanca y se acerco a los humanos.
Tuka: "¡Nos rendimos!"
Ella sintió que una bala rozo su mejilla, pero la bala no era para ella, esta bala estaba destinada a matar a un elfo que intento matarla por traidora. Al ver que su compañera no fue asesinada al rendirse muchos elfos siguieron su ejemplo, los humanos mataron a todos aquellos que no se rindieron. Siendo atada de manos Tuka solo miro con tristeza a la dirección del Gran Bosque, viendo enormes columnas de humo elevarse al aire.
En el bosque sagrado:
https://youtu.be/me8x4o2XJMo
S. Alegre: "Mi gente tuvo que sufrir por tu culpa estúpida diosa. Voy a hacer que pagues caro todo su dolor."
Wareharun escucho las palabras de la diosa enemiga, sintió su enorme sed de sangre y se estremeció de miedo, cuando se entero de los ataques desde fuera del planeta ella uso la magia del bosque para levantar un colosal escudo en el bosque sagrado. Unos instantes después su escudo fue golpeado con fuerza por misiles y láseres, pero este pudo recibir la mayor parte del castigo solo generándose 5 agujeros en el escudo.
Justo lo que estaba esperando Alegre-san, tras los 5 huecos ella hizo aterrizar a sus diablos metálicos. Estas abominaciones de metal eran absolutas maquinas de matar, con un tamaño que superaba a un palacio y enormes tentáculos y herramientas eso era mas que obvio. Pero ellos no aterrizaron para luchar, ellos necesitaban biomasa para funcionar y en ese bosque había de sobra, así que empezaron a absorber cantidades enormes de biomasa destruyendo kilómetros del bosque. Esto le causo un dolor espantoso a Wareharun ya que su cuerpo estaba ligado al bosque, era la primera vez que este era dañado y eso era solo el inicio.
S. Alegre: "Chicas, quemen este maldito bosque."
Belfast/Akagi: "Como desee señorita."
Con esta orden las chicas barco desataron todo su arsenal en contra del bosque, misiles, cañones, balas y aviones cargados con bombas de napalm golpearon los arboles y treants en varios kilómetros. Wareharun estaba en agonía, y finalmente se harto de recibir daño. Ella uso su poder divino para restaurar el bosque y ordeno a todas las criaturas del bosque que destruyeran al enemigo. Mientras los treants y bestias se juntaban los diablos metálicos comenzaron a trabajar, ellos no habían caído en esos puntos por pura casualidad. Los lugares donde estaban parados eran ricos en muchos minerales valiosos, ellos empezaron a recolectar y refinar los metales para crear un nuevo ejercito de maquinas. Mientras trabajaban hicieron bajar a los robots que tenían guardados para protegerlos en su labor, cientos de Portadores de muerte y miles de Corruptores se aprovecharon del regenerado bosque para obtener combustible y estaban mas que preparados para destruir a los enemigos de su jefa.
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