32.
Geno sonreía preocupado, ¿Estaba haciendo bien las cosas? El choque de dientes que había hecho hace días le había incitado a volverlo hacerlo repetidamente, hasta llegar a la quinta vez, esa unión para él era especial, pero tan prohibida... que le gustaba, quien diría que estuviera haciendo eso a "espaldas" del otro, siendo siempre Reaper quien pedía los besos aunque fueran de broma y nunca los consiguiera hace muchos meses atrás, pero no podía evitarlo, ya era demasiado tarde.
Y mucho más difícil era evitarlo cuando siempre llegaba con la sorpresa no tan sorpresa de que el mayor se quedaba durmiendo en el suelo, su delicado rostro no era el mismo a que la primera vez, estaba más cansado, y la razón que supuestamente le había dicho él, era por el trabajo y los entrenamientos que había decidido hacer por algo-de-dioses-sumamente-importante.
Se mantuvo suspendido a centímetros de su rostro, sopesando si seguir haciendo las acciones de profanar su espacio, ¿Habría Reaper hecho lo mismo las veces que él se dormía? nunca se había sentido tocado, Reaper podía abrazar pero nunca cuando estaba Geno durmiendo, tenía respeto físico, pero sacarle fotos era pan de cada día.
Se arrepintió de besarle, a solo darle uno en la mejilla y recostarse a su lado para tomar una siesta.
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