Parte 14
Vi a Joa entrar a mi habitación, se le veía emocionada, realmente emocionada por que yo haya echo caer esas barreras que nos separaban de antes.
No era que había sido repentino, fue duro asegurarme de que debía de darle otra oportunidad a Joa, porque ambos nos la merecíamos, más allá de los dolores que habíamos experimentado, de los errores que habíamos cometido, yo sabía que Joa no tenía toda la culpa.
Woosuk me había llamado hacía unos días -antes de yo decirle a Joa que teníamos que hablar- contándome que Joa se había ido de casa después de no soportar que sus padres decidieran por su vida constantemente, me contó que no se había casado con ella por amor, Joa para él era una chica guapa e increíble pero no era a la mujer que amaba, y ahí entendí que Joa había hecho todo aquello solo para no alejarse de su familia, aunque eso ya lo sabía, pero la familia es eterna y ella siempre había velado por sus padres, así que prefirió arriesgarse a dejarme a dejar a su familia atrás, y comprendí todo.
Hubiera querido ser un poco más fuerte con ella, de verdad, aunque sea un poco más fuerte, pero Joa rompía cada uno de mis esquemas a pesar de los años que había estado separado de ella, seguía siendo la mujer de mi vida y a la que quería a mi lado todo el tiempo.
La dejé acostarse a mi lado y la acurruqué entre mis brazos, encantado con la sensación de que fuera tan pequeña y delgada entre ellos, ido por la sensación de que era tan malditamente moldeable para mi.
—Bien, yo...
—Woosuk fue el que me llamó y me contó todo —dije, no nos mirábamos el uno al otro, estábamos ambos concentrados en un punto fijo del techo. Joa me acariciaba los antebrazos una y otra vez, aunque al oír mi confesión se detuvo, un claro ejemplo de que se había asombrado.
—¿Qué? Cómo...
—Woosuk me dijo que se casaron por decisión de ambas familias, y que tu al no poder soportarlo te fuiste de su casa, a vivir sola, también me dijo que le habías dicho que no habías podido olvidarme todavía —le conté, ella volvió a retomar sus caricias en mis brazos, esta vez trazando pequeñas letras o garabatos indescriptibles bastante relajantes.
—Jungkook, yo, lo siento, de verdad, me arrepiento mucho todos los días no haber sido capás de aceptar tu propuesta de casamiento ese día en mi casa, porque yo...te amo y quería casarme contigo, pero tampoco quería alejarme de mis padres, tenía miedo de alejarte pero también tenía miedo de perderlos a ellos ¿me entiendes? Pero llegó un punto en el que no soportaba que estuvieras lejos, y cada vez que leía tus mensajes me ponía tan mal, sentía un desprecio de tu parte que era doloroso y comencé a pensar que lo merecía, que merecía que me dijeras esas cosas, pero que no merecía tu sufrimiento, yo...yo solo quería estar contigo pero no podía y...
—Joa.
—Jungkook yo lo siento mucho, siento mucho si sufriste por mi culpa yo...
—Joa, por favor, ¿me dejas hablar? —insistí, ella se quedó callada por fin y yo pude hablar —No mereces el desprecio de nadie, Joa, si te envié esos mensajes era porque estaba dolido y porque soy gilipollas, pero yo te quiero, Joa, te quiero a mi lado siempre —ella elevó su vista para mirarme desde abajo —Te quiero, Lee Joa —sus ojos brillaron con mi directa declaración y sonrió de la manera más preciosa que pudo haber sonreído nunca.
—Yo también te quiero, Jeon Jungkook —y le devolví la sonrisa.
☆
Siento si esto quedó mal y no era lo que esperaban pero el dolor de cabeza me está matando.
Lxs sarangheo❤
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro