— ¡Joder, deja de moverte! —grito Leah a Keith en el momento que ella lo peinaba. — Saldrás en menos de 5 minutos a la cara a cara, y debes verte bien.

— Siempre me veo bien.

— Amor, hazle caso a la chica —pedí.

Keith dejó de moverse y Leah pudo seguir peinándolo.

— ¿Vendrán todos? —preguntó la chica.

— La pregunta seria, ¿vendrá Vincent? —ríe Jared a lo que la pelinegra le arroja el peine. — Calma fiera, todos sabemos que tú y el encantador maestro de lenguas enredan sus lenguas.

Hasta Keith suelta una risa por el mal chiste de Jared.

— Estupido rubio —hablo la chica con su curioso acento.

— Entonces es aquí donde me voy, te veo en la televisión amor —bese sus labios agachándome un poco.

— ¿No te quedarás? —preguntó Leah.

— No puedo quedarme a las peleas, ya no —señale la barriga.

— Nena, espera —K me detuvo. — Jared te llevará al auto.

— Grace está ahí, no me pasará nada. —intente hacer que no se parase.

— ¿Donde mierda se ha metido ese rubio? —frunció en ceño Keith en el momento que Leah salió de la habitación. — ¿Sabes? Te llevaré yo.

— Hay paparazzis, demasiados —intente evadirlo.

— No hay problema, en lo absoluto. —se levantó, haciando a un lago la camisola que tenía.

— ¿Quieres algo de cenar? Puedo llevarte comida después de esta pelea —sugiere cuando comenzamos a caminar.

— Apuesto que estaré dormirá cuando regreses —hable caminando.

— Puede ser, pero te puedo llevar algo ¿que te gustaría? —toma mi mano y abre la puerta.

— ¡Morgan! —gritaron cuando salimos del lugar.

— ¿Es cierto que ella es tu novia? ¿El bebé es tuyo? ¿Estas seguro? —preguntó un chico con su teléfono.

— ¿Papas frita? Se que las amas —me preguntó Keith ignorando a todos.

— Esta bien —me detuve frente a auto.— suerte.

Estaba por entrar cuando el me tomo por el brazo, jalandome para besarme.

  — Ahora la tengo — aun estaba algo atontada cuando me soltó.

Podría acostumbrarme a eso.

Entre a auto y Grace me recibió con una enorme sonrisa.

— No digas nada — fue lo primero que dije.

— Lo encontraste — dije encendiendo el motor— siempre supe que tu serias la primera en encontrarlo.

Grace y yo siempre tuvimos una conversación de pequeñas, que consistía en encontrarlo. Encontrar al chico que en verdad te gustara, Grace apostaba que ambas nos quedaríamos solas, con 2 gatos, un hamster y Vincent.

  Sonrei y no dije nada mas. Ella condujo la camioneta de Vincent ya que el chico se quedo en el ring donde peleara K y se regresara con ellos.

  — Estaba pensando ¿porque no regresas a la univerdidad? — me pregunto.— haz faltado casi 6 meses y los profesores te pasan a penas, debes de darle un premio a Vincent por hacer tus trabajos. 

— Lo se, lo he estado pensando pero-

— ¿Pero que? Abby, ya estas estabilizada, ya no corres ni un peligro. Es momento. Si no fueran por tus notas perfectas de los años anteriores creeme que te hubieran hechado — nos detenemos en una luz roja.— ¿Tienes miedo?

¿Lo tengo?

— Se que estos meses haz sufrido mas que cualquier persona, pero unos comentarios de mierda deben interponerse — me miro, tomo mi mano y la apreto.— Sabes que te apoyare en todo, ni te dejare sola.

Se me salio una lagrima, malditas hormonas.

  — Grace, lo se. Este lunes ire — aprete su mano de vuelta.

Un claxon hizo que saliéramos de nuestra pequeña burbuja de tranquilidad.

— ¡Esperate un minuto, joder! — grito la rubia.

El camino transcurrió calmado, Grace y su linda musica de Aerosmith.

Ella me abrio la puerta y caminamos juntas hasta la entrada de mi edifico.

 — Sigo diciendo, deberíamos darle algo de dinero  la señora Pharrell, cuida a los niños gratis — habla cuando entramos a elevador.

  — Ella ama a los niños, recuerda que quiere nietos ya — sonrei.

— Y tendrá uno pronto — sonríe Grace acariciando mi barriga.

Saque las llaves de mi bolsillo y abrí.

 Mia estaba viendo televicion mientras abrazaba a Thomas.

  — Hola — sonrei entrando.

— Termine mi tarea y la señora Pharrell nos hizo palomitas ¡Y puso una pelicula de princesas! — sonrio Ann llegando hasta mi.

— ¿Donde esta Sam? — pregunte.

— En su habitacion — respondio Mia.— ¿Como te fue?

— Excelente, ¿todo bien? — note como estaba sonrojada.

— Si, solo me moleste por una estupidez de la escuela. — se encogio de hombros.

Ann jalo a Grace hasta el sofa y la hizo ver esa pelicula de princesas. Notaba a Grace mas entretenida que Ann. Camine hasta la cocina y tome una botella de agua.

— ¿Puedo? — la señora Pharrell pregunto, asenti cuando acerco su mano a mi barriga. Mi pequeño noto la presion y arrojo un pequeño movimiento.— precioso.

Unos toques en la puerta hicieron que la señora Pharrell apartara su mano.

— Iré a abrir — dijo caminando. 

   Deje la botella de agua en una pequeña mesa y camine cerca de la señora Pharrell.

  — ¿Que se le ofrece? — pregunto ella.

Un hombre, de unos 40 o 50 apareció en mi campo de visión. Podía jurar que hay un tatuaje en su cuello, tiene una buena cantidad de barba que o hace ver un poco aterrador.

— Soy Jesse — habla.

— ¿Que se le ofrece, Jesse? — ahora pregunte yo.

— ¿No te han hablado de mi? Espera, apuesto si te digo mi apellido sabrás quien soy — sonríe de un lado.— mi nombre es Jesse Morgan.

Escucho como algo se cae en la sala.

  — ¿Papa? — pregunta una muy sorprendida Mia.

 Oh Dios. 

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ya termine de hacer mis examenes para ingreso a la universidad, pero ya que tengo tiempo libre es momento de escribir. aun no me entregan resultados, pero que sea lo que dios quiera.

besos a to2

m e l <3

¿alguna pregunta? envienme un mensaje