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XI. You get me mad.

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Capítulo 11.

We get down every Friday night,
Dancin' and grindin' in the pale moonlight.
grand all the prayer, feelin' alright,
She prays the rosary for my broken mind.

I sing the body electric,
I sing the body electric, baby.
I sing the body electric,
Sing the body electric,
Sing the body electric.
I'm on fire, baby, I'm on fire.

Lana del Rey - Body Electric

-Vale. Ahora me vas a explicar a qué coño viene ese rollo de soy-la-novia-de-Zayn.- me siento de golpe encima de su cama mientras me hago un moño desordenado.

Kelsey le da una calada a su cigarro, el cual le quito de las manos y sonríe.

-Bueno, es una historia larga de contar.

-Tengo tiempo.- me encojo de hombros.

-Pues todo empezó un año después de que te fueras. Yo te echaba muchísimo de menos y no podía hacer otra cosa que fumar y acordarme de ti, a cada minuto, esperando por tu salida. Tu tía me ayudaba mucho -frunzo los labios cuando habla de mi tía- pero no era suficiente. Una noche, unas semanas después de que el grupito de Rude llegara, recuerdo que las chicas del equipo de animadoras hicieron una fiesta a la que obviamente acudí. Allí conocí a Zayn -larga un suspiro- ¿sabes? Fue odio a primera mirada. Nos llevábamos fatal, pero una cosa llevó a la otra y lo acabamos haciendo en el maletero de su camioneta.- río ante la idea- Después de eso vinieron muchas discusiones y peleas, y acabamos mandándonos a la mierda. Nos la pasamos meses sin hablarnos. Yo me di cuenta de que estaba pillada de él hasta la mierda, y justo unos días después de que vinieras, me lo confesó todo, me dijo que me quería, que era la única chica con la que querría estar y que quería que fuera la madre de sus hijos. También me dio esto.- abre un cajón y de él saca una pequeña caja de terciopelo, la abre y abro los ojos con impresión cuando veo un colgante precioso con una inscripción en él 09-02 - es la fecha en la que nos conocimos. En la fiesta.

-Joder Kelsey. Yo pudriéndome en la mierda de clínica y tú viviendo la historia de amor más trágica y jodidamente bonita del mundo. Vete a la mierda.

Kelsey sonríe y en ese momento me abalanzo sobre ella para abrazarla.

Nos pasamos horas y horas hablando hasta que nos entra el sueño y caemos rendidas.

_

Viernes.

Jodida y oficialmente es viernes.

Y no sólo eso.

Es viernes por la tarde, acabamos de terminar las clases y esta noche hay fiesta. No puedo evitar una sonrisa, que intento que parezca sarcástica mientras camino junto a Kelsey por los pasillos. Cuando salimos, la música heavy de siempre me rompe los tímpanos, y Kelsey sale corriendo en dirección al moreno, que se separa del coche en el que está apoyado y la recibe en brazos mientras le da un pico. Me acerco con pinta de estar aburrida y me sitúo cerca de Niall.

-Podríamos estar así si quisieras.- me susurra el rubio al oído.

-Vete a la mierda.- le empujo malhumoradamente.

Me cruzo de brazos mientras recorro con la mirada el coche y localizo a Harry andando con gesto de superioridad hacia aquí. Pedazo de gilipollas. Esboza una sonrisa sarcástica cuando me ve y entra en el descapotable de un salto. Espero que Kelsey se de prisa, pero esta parece que tiene otros planes.

-Oye Heather, ¿quieres venir con nosotros? Los chicos nos llevan en coche.

Zayn la estrecha con dulzura y le da un beso en la coronilla.

-¿Nosotros?

-Si. Niall, Louis, Liam, Zayn, Harry, tú y yo.

Harry se vuelve hacia ella rápidamente.

-¿Cómo sabes mi nombre?- pregunta ásperamente.

-Culpable.- Zayn levanta la mano en un gesto de inocencia y Harry bufa.

-Idiota.

Zayn frunce el ceño.

-Hermano, ya hemos hablado de esto.

-Lo siento.- responde este con un deje de sarcasmo en la voz.

Zayn pone los ojos en blanco y me hace un gesto con la cabeza.

-¿Entonces vienes o no?

Miro a Harry a Kelsey y a Zayn consecutivamente y niego con la cabeza.

-No. Prefiero andar. Nos vemos esta noche Kels. Adiós Zayn.

Echo a andar por el camino de grava. Si Kelsey está intentando juntarme con ese grupito de gilipollas la lleva clara.

Llego a casa en cuestión de minutos, y no me sorprende en absoluto el olor hediondo que procede del cuarto de Roger cuando paso por su lado. De repente la puerta se abre, dejando ver al que una vez fue mi padre con una camiseta de tirantes sucia y unos calzoncillos.

-¡Heather!¡Has vuelto!

Se tambalea hacia mi y me aparto con una mueca de asco.

-Déjame en paz.

Se le escapan algunas lágrimas traicioneras y entonces, sin ejercer demasiada fuerza agarra mi mano.

-Sé que he sido un padre de mierda, pero por favor, intentaré cambiar, lo juro, ¿podrás perdonarme algún día?

Me sacudo de su agarre y doy dos pasos hacia atrás.

-Si tienes pensado cambiar empieza por limpiar la puta casa y preocuparte por las facturas.

Dicho esto le cierro la puerta en la cara y me desnudo para entrar en la ducha. Me enjabono y me depilo todo el cuerpo mientras el agua tibia cae sobre mí. Después me enjabono el pelo, que comienza a ser de un rosa pocho tirando a rubio grisáceo y pienso que tendría que comprar tinte ya.

Cuando estoy seca y sin el pelo húmedo, me maquillo lo justo y abro el cajón en busca de las bolas de los piercings, los cuales me gusta cambiar de vez en cuado. Me decanto por el blanco y saco la lengua para quitarme el metálico, cambiándolo así por el otro. Me cepillo los dientes y el pelo y me lo plancho concienzudamente. Cuando ya estoy lista, salgo del baño y entro en mi habitación.

Curiosamente los vestigios de cristal acaban de desaparecer del suelo.

Me miro al espejo satisfecha con mi aspecto. Unos shorts de tiro alto desgastados, acompañados de unas medias rotas y unas botas de semi-tacón estilo militar y una camiseta de manga corta con un dibujo bastante chulo. Entonces mi móvil empieza a sonar; es Kelsey.

-¿Si?

-Heather, baja, te estoy esperando en el coche.

Y cuelga. Cojo el móvil únicamente, ya que hoy se va a dar una de esas fiestas en las que no se vuelve a casa, las que nosotros llamamos escapadas, cada persona duerme en su coche o en la casa del anfitrión, pero como esta noche la fiesta es en un local, la mayoría de gente llevará sus coches. En el último momento recuerdo mi bote de cannabis y saco un poco de él.

Kelsey me abre la puerta del copiloto estirándose y me adentro en él.

-Guau tía, tienes que dejar de provocar tanto.- comenta mientras se enciende un cigarro.

-Concéntrate en la carretera gilipollas.

Suelta una larga carcajada y palmea mi pierna.

-Eres la mejor amiga del mundo.- comenta con cierto sarcasmo.

-Claro que lo soy.

Se limita a sonreír y a conducir hasta que llegamos al descampado que conforma el parking del local, llamado Redd.

-Esta noche tendrás el coche para ti sola.- canturrea Kelsey de camino a la entrada.

-Oh genial.- respondo contenta- Usad protección.

Kelsey rueda los ojos y ambas entramos en el local, que está hasta arriba de gente. Huele a marihuana, alcohol y sudor. Excitante. Kelsey agita la mano hacia alguien y reconozco a Zayn caminando hacia nosotras. Ambos se funden en un tierno beso y Kelsey me mira.

-Heather, iré a por unos tragos, ¿te importa?

Miro hacia ambos lados, pensando en divertirme.

-Tranquila, yo ya me iba.

Me dirige una seria mirada.

-Cuídate.

-Si, si, ya.

Y me alejo feliz entre la multitud.

_

Me río a carcajada limpia mientras le doy una calada al tercer porro de la noche. Estoy con un grupo de personas que no conozco de una mierda pero me lo estoy pasando de miedo. La chica que tengo al lado se está atragantando con el vodka y acaba por escupírselo a la tía de enfrente, que se descojona y me lanza la botella de vodka mientras suelta chillidos de felicidad. No puedo dejar de reírme y el vodka ingerido me empieza a salir por la nariz, lo que provoca más risas.

-¡Me meo joder!- chilla una histérica entre risas, y sale corriendo al baño.

No veo bien, no pienso con claridad pero me da por culo porque lo estoy pasando genial.

Entonces a lo lejos veo a Harry, besuqueándose con una rubia totalmente oxigenada, vestida con lo que parece un sujetador y una falda de tubo, subida a unos tacones de infarto. Me empiezo a reír. En ese mismo instante Harry mira hacia mi y me saca el dedo del medio, a lo que respondo lanzando un beso. Alguien empieza a gritar ¡verdad o reto! Y varias personas acuden a mi corrito, si, incluyendo a Harry y la flamante rubia.

La gente ríe con las pruebas y las verdades que cuentan los demás y finalmente la botella vacía de vodka me señala.

-Heather, ¿verdad o reto?

Trato de contestar con claridad, pero sólo me salen risas.

-Creo que ha dicho verdad.- comenta una chica a mi lado entre risas también. Me giro hacia ella y la abrazo.

-Gracias. No sabía que decir.

Vuelve a reír y entonces me preguntan.

-¿Tu primera vez fue con...?

Me quedo pensado unos instantes sonriendo, no sé si contárselo o no y justo cuando me decido por contárselo y abro la boca para contestar, la rubia que se aferra al brazo de un Harry borracho contesta.

-¿Te crees que se va a acordar después de con la de tíos que debe haberse acostado?

Emito un sonoro humm... Tras unas carcajadas por parte de los demás y entonces no dudo cuando agarro la botella y se la rompo a la rubia en la cabeza. Me levanto entre tambaleos y empiezo a caminar, empujando a todos.

-¡Oye!

Distingo la voz de Harry perfectamente, pero no me giro y entonces se coloca enfrente mío.

-Gilipollas.- su voz está cargada por la ira.- eres una subnormal, una gilipollas y una z...

Le doy un pico rápido y me alejo de él rápidamente entre risas.

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