Dos días habían pasado desde que HyunJin lo besó, dos días en donde Felix se las ingeniaba para ignorarlo y evitarlo, dos días en los que el mayor se sintió muy mal consigo mismo.

¿A caso había hecho algo mal?.

No sabía lo que pasaba por la cabeza del rubio y eso lo estaba volviendo loco poco a poco.

Debían hablar.

HyunJin quería hablar con el ojiazul y aclarar sus sentimientos, pero si el menor simplemente no estuviera huyendo de él las cosas no serían tan difíciles.

Felix por otro lado creía que el beso simplemente fue un beso más para el mayor. Nunca antes había sentido algo por alguien como lo hace con HyunJin, antes no había tenido pareja debido a que se las personas con las que convivía lo hacían sentir inferior e insignificante.

Aburrido e infantil.

Por más que pareciera que nada le preocupaba, por las noches, en la soledad de su habitación se cuestionaba si es que era suficiente, para sus padres, para JiSung, para HyunJin.

No era como el resto de los chicos, él lo sabía y puede que sea absurda su forma de actuar con el mayor, pero tenía miedo.

Miedo de terminar con el corazón roto.

En estos momentos se escondía de HyunJin en la cafetería de la universidad, JiSung lo miraba raro, analizándolo sin decir ninguna palabra desde la primera clase que tuvieron juntos.

-¿Me vas a decir qué es lo que sucede contigo o tengo que adivinar? -preguntó el castaño dejando a un lado la galleta de chocolate que comía. Felix lo ignoró, mirando paranoico por todos lados-. Felix, me estás asustado -chasqueó sus dedos frente al rostro del rubio para tener así, por fin, su atención.

-¿Sí?

-¿Qué te sucede? -volvió a preguntar al notar la expresión confundida del más bajo -. ¿Alguien te está molestando? -preguntó entonces preocupado.

Felix negó con la cabeza varias veces, acercándose más a la mesa para cruzar sus brazos sobre ella y regargar su mentón ahí.

-Es HyunJin -dijo casi en un susurro.

-¿HyunJin? -cuestionó confundido viendo al menor con sorpresa-. ¿Qué hizo HyunJin hyung para que estés actuando así?.

-É-Él... bueno, nos, nos b-besamos -tras decir aquello escondió su rostro entre sus brazos cruzados. No quería que lo vieran sonrojado porque está consciente de que sus mejillas están más rojas que unas cerezas.

-¡¿Qué?! -el grito de JiSung lo alarmó por lo que importándole poco que lo vieran sonrojado salió de su escondite para cubrirle la boca con su mano.

-Shh... -le hizo un gesto con el dedo como para que guardase silencio. El castaño hizo un gesto con la mano como cerrándose la boca con una cremallera.

-No puede ser, ¿de verdad hicieron eso? -el castaño estaba muy sorprendido, era el mejor chisme de la historia-. ¿Cómo? ¿Cuándo pasó?.

-Pues... ¿te acuerdas de la feria del centro?, me dijiste que no ibas a poder ir porque tenías cosas que hacer -ante esto el castaño asintió varias veces.

-Sí, sí. Lo recuerdo. Prosigue -lo ánimo a seguir hablando.

-Bueno, resulta que el sábado no fuí a casa de mis padres porque viajaron a Daugu y no me quedaba de otra que quedarme en el dormitorio.

-¿Y luego?.

-Se lo conté a HyunJin y él me preguntó si no quería ir a la feria, y... -jugueteó nervioso con sus largos deditos-, como no tenía nada que hacer le dije que sí.

-Dios mío, creo que voy a desmayarme -el castaño llevó una de sus manos a su frente, sobreactuando.

-No digas tonterías -el rubio bajo la mirada con timidez.

-Ya dejemos la emoción para después. ¿Qué pasó luego?

-Fuimos a la feria, jugamos en muchos puestos, ¡hasta ganó un oso de peluche para mí! -Felix susurró lo suficientemente alto-. Subimos a la rueda de la fortuna y luego...

-¿Luego...? -levantó sus cejas expectante.

-N-Nos besamos.

JiSung tardó poco menos de cinco segundos antes de reaccionar. Felix por acto reflejo se encogió en su lugar cubriéndose los oídos con sus manos.

-¿¡Qué!?.

Las personas que estaban en sus respectivas mesas giraron en dirección a ellos, algunos confundidos por el grito del castaño y otros simplemente siguieron con sus cosas sin darles demasiada importancia. Decir que Felix estaba avergonzado era poco.

-No lo puedo creer -el castaño trató de de darse aire haciendo movimientos constantes con su mano.- ¿De verdad se besaron? ¿En la rueda de la fortuna? inquirió con sus manos ahora apoyadas sobre la mesa.

El rubio sentía sus mejillas arder por lo que antes de responder a las preguntas de su amigo le dió un largo sorbo a su jugo de naranja.

-Sí, lo hicimos.

-Que romántico...-suspiró-. ¿Eso quiere decir que ya son novios?

Felix escupió de vuelta su jugo, tosió varias veces dándose a sí mismo palmaditas en el pecho.

-¿Qué cosas dices JiSung? -le recriminó. A penas nos conocemos hace tres meses -soltó como si fuera más que obvio.

-¿Y qué? -se encogió de hombros-. No haca falta que se conozcan de toda la vida para tener sentimientos el uno por el otro -al ver que el rubio no tenía con qué defenderse volvió a hablar-. Dime una cosa Felix -al tener la atención del mencionado decidió continuar-, ¿te gusta HyunJin hyung?

Felix se hizo esa pregunta una y mil veces desde aquel día. ¿Le gusta HyunJin?

Fácilmente podía decir que sí. El mayor era muy cariñoso con él, pasaba la mayor parte del día al lado suyo por lo que su compañía se había vuelto algo especial para él, siempre lo hacía reír con sus malos chistes y le gustaba mucho su comida. Además de que HyunJin era muy atractivo.

Pero al ser nuevo en esto del amor temía por confundir sus sentimientos y que terminara perdiendo a HyunJin.

No quería que eso pasara.

-Creo... que sí -confesó jugueteando con sus delgados dedos en un intento de aliviar su nerviosismo. -Pero no quiero confundir mis sentimientos, quizás sólo sea porque me gusta su compañía, o por como me trata, quizá solo lo quiero como amigo y no como...

-Te preocupas demasiado por algo tan simple -el castaño lo interrumpió-. Dime, ¿sientes lo mismo conmigo? -le preguntó.

-Eres mi único amigo JiSung, fuiste la primera persona que me habló y estuvo conmigo todos estos días, te quiero mucho... -se detuvo brevemente cuando el castaño le respondió con un yo también te quiero sonrió para luego continuar hablando-, pero con HyunJin es diferente, y desde ese día que nos besamos no puedo dejar de pensar en él y ponerme nervioso cuando lo veo.

-Entiendo... así que estás escapando de él ¿o me equivoco? -ante la negación del ojiazul suspiró-. ¿Por qué lo haces?

-Tengo miedo.

-¿De qué te rechaze?.

- Sí -asintió.- Y-Yo no podría soportarlo puchereó abultando su labio inferior.

-Imposible -los ojos del más bajo de estatura recayeron en él- ¿Haz visto siquiera la forma en la que te mira? Te puedo apostar que HyunJin hyung está calado hasta los huesos por ti.

-No me ilusiones Sungguie...

-No lo estoy haciendo -negó-. Solo piénsalo. Solo contigo HyunJin es cariñoso y atento, ¿ya notaste lo salvaje y agresivo que es con los que lo molestan?, hasta a veces me da miedo.

Felix se mantuvo pensativo, si bien su amigo tenía razón en que HyunJin lo trataba bien nunca había visto el lado agresivo y frío del mayor. Desde un principio pudo notar que es un chico rudo y que posiblemente te voltearía la cara de un puñetazo pero Felix no creía posible que él fuera así.

Sonaba tan ilógico para él.

-Habla con él -soltó el castaño sacándolo de sus pensamientos.

-Pero...

-Es la única solución, de lo contrario estarás escapando de HyunJin hasta que te gradues, y todavía falta mucho para eso -por más que sus palabras habían sido motivo para reír el semblante serio del castaño le hizo aguantarse-. Te lo digo en serio Lee Felix. No puedes estar evitándolo todo el tiempo, habla con él y resuelve este asunto de una vez por todas. De lo contrario nunca lo sabrás.

-¿Y si me rechaza?

-No lo hará, créeme -lo miró con seriedad- Y si lo hace, pues, él se lo pierde -dijo con tono desinteresado.

-Aish -alargó el rubio alejándose solo un poco del castaño-. Harás que me ponga rojo -le recriminó apretujando sus mejillas.

-Pero si estabas rojo desde que llegaste -se burló de él.

-Idiota-bufó cruzándose de brazos haciendo que el castaño riera.

Felix río también, contagiado, tomó su jugo de naranja y a lo lejos vió a HyunJin hablando con sus amigos. Se encogió en su lugar, observando fijamente al mayor quien se mantenía con los brazos cruzados y el rostro sereno.

HyunJin le gusta, y mucho.