—¿Qué dices?... —Senku ladeó la cabeza, claramente sin entenderla.

Kohaku suspiró, regañándose a sí misma por haber hablado de más, y eso como si no hubiera tenido suficiente ese día con los regaños de Ruri...

—¡Kohaku! —había reñido su hermana mayor en cuanto terminó de contarle, sentadas ambas a la orilla del río con sus pies en el agua—. No puedes dejar que te gane la tentación, una señorita nunca debe...

—Sí, sí, ya lo sé, Turquoise me lo ha repetido hasta el cansancio —Bufó, antes de inflar las mejillas con frustración—, pero es más fácil decirlo que hacerlo... —Se sonrojó un poco.

—Ay, hermanita... —Ruri frotó su hombro cariñosamente—. Sé que es tentador, yo misma he estado teniendo mis problemas con Chrome...

—Ew, no quiero saber eso. —Se estremeció con disgusto y Ruri rio.

—Mira, el caso es que tu boda está cerca, y una vez se casen, Senku será el rey y ya no tendremos por qué tener miedo, puede ser... puede ser que incluso puedas decirle la verdad. —La miró emocionada.

—¿Qué? No, de ninguna manera, me va a odiar. —Negó con la cabeza.

—Kohaku, es obvio que te ama, no le importara que no seas la princesa primogénita, además de que en Akari si hay varias hijas se permite que el rey escoja a cualquier esposo de cualquier hija para ser el nuevo soberano, así que sigue siendo legítimo, más porque tú no estás desheredada, más bien oculta, si papá te hubiera desheredado tendría que haber hecho un documento oficial y anunciarlo a todo el reino, pero nadie sabia de ti.

—¿Y qué pasa si me descubre?... —La miró con miedo.

—Pues... puede pasar cualquier cosa que el rey diga. —Ruri suspiró—. Él tiene la última palabra en todo, y no sé cómo podría reaccionar papá... pero sé que Senku te ama, una vez sea el rey, ÉL tendrá la palabra absoluta en todo, y estarás a salvo, estoy segura. —Sonrió.

—Yo no estoy muy segura de eso... —Kohaku hizo una mueca, apartando la mirada.

—Mira, el punto es que no puedes arriesgarte. —Ruri tomó su mano con ojos preocupados—. Si los descubren en una situación indebida, papá podría disolver el compromiso y perderías al hombre que ya has llegado a amar. Y si descubren que te deshonró, pues... lo matarían.

—¡¿M-matarlo?!

—Bueno, eres la princesa menor, técnicamente le correspondería castración con cuchillo oxidado y suelen dejarlos desangrarse hasta morir según recuerdo...

—¡¿QUÉ?! —Se horrorizó.

—Pero como piensan que eres la primogénita, le tocaría decapitación pública...

—¡No pueden matarlo solo por algo así! ¡Senku es brillante y le traerá prosperidad a toda la isla y hasta al mundo, encuentra medicinas y cura a las personas y se preocupa por la gente necesitada y... y...! —Ruri rio y frotó su mano cariñosamente al ver sus lagrimitas asomarse.

—Descuida, no pasará, pero necesito que tengas en mente las posibles consecuencias de tus posibles acciones, y me tienes que prometer que te vas a controlar. —La miró severamente—. Además, tampoco creas que aprobaría que hagas algo como eso, eres muy jovencita aún. —Hizo un puchero—. Si tuviera a Senku-san en frente, le exigiría que más le vale que cuide bien de ti y sepa controlarse también. —Cruzó los brazos con rostro solemne y ahora fue Kohaku la que soltó una risita.

Justo en ese momento fue que Chrome llegó a avisarles que Senku estaba allí y Ruri dijo que sería una buena ocasión para decirle la verdad y darle su advertencia, pero Kohaku negó de inmediato y le pidió a su hermana irse por otro camino en el caballo de Chrome, no les dio tiempo a protestar y corrió hasta él.

Y allí estaba ahora, con Senku mirándola con pura confusión después de que ella no pudiera contener la lengua y dijera algo que le pesaba mucho en el pecho.

En verdad se sentía tentada a decirle la verdad, pero... no podía. ¿Y si la odiaba? A él no le gustaba que le mintiera, ya se lo había dejado claro, se volvió tan frío y distante cuando pensó que le mintió sobre Chrome... no quería volver a eso.

Las cosas estaban bien así, solo quería... que todo pudiera permanecer de esta forma.

—Oye... ¿estás bien? —preguntó Senku, ya comenzando a preocuparse por su silencio.

Tomó aire y asintió, luchando por calmarse y concentrarse en darle una respuesta que le pareciera más satisfactoria.

—Senku... yo... No estoy molesta por lo que pasó entre nosotros —le aseguró mirándolo a los ojos—. Más bien estoy preocupada, porque no quisiera que lleguemos demasiado lejos y arruinemos las cosas antes de la boda. —Apartó la mirada—. En serio lamento haberte abofeteado, pero...

—Tenemos que ponernos un límite, sí —él continuó cuando ella se quedó en silencio—. Estuve consultando las leyes de Akari, y te aseguro que no me apetece morir así. —Rio un poco.

—Yo tampoco quiero que te pase esa cosa horrible del cuchillo oxidado. —Se estremeció.

—Ah, eso es en caso de una princesa menor, según me informaron. —Alzó una ceja y ella se tensó, apartando la mirada—. Aunque la decapitación tampoco es un paseo de rosas.

"Si nos descubren decapitación es lo que le pasará a Chrome y a Senku lo otro... mejor que no lo sepan", pensó, dedicándole una sonrisa nerviosa.

—B-bien, el punto es que no nos descubran... pero tampoco deberíamos tentar demasiado a la suerte —dijo Kohaku con más seriedad.

—Sí, tienes razón. Yo me comprometo aquí y ahora a esperar a la boda. —Hizo una reverencia y ella asintió, antes de tomar los bordes de su falda y corresponder el gesto.

—Yo también, me comprometo. Ahora... —Miró en la dirección en la que había venido, alcanzando a ver con su gran vista las pisadas del caballo de Chrome alejándose y ni rastros de Chrome y Ruri, señal de que tomaron su consejo de irse. Bien—. Ahora... deberíamos volver al palacio antes de que noten que no estamos ninguno de los dos...

—Bien, aunque tú dijiste estar enferma y yo pasó largas horas encerrado en el laboratorio y mis amigos me cubrirán, técnicamente podríamos estar aquí todo el día... solos... —Apenas dijo eso, ambos se tensaron, intercambiaron miradas y asintieron—. Sí, mejor no.

—Ajá, sí, mala idea. —Kohaku rio tensamente—. Voy a ir por mi vestido y nos vamos de regreso al palacio.

—¿Y la hija de tus tíos está aquí? —preguntó Senku con curiosidad, siguiéndola.

—N-no, le dije a Chrome que la llevará a casa, no quiero que mis tíos se preocupen. —Tosió incómodamente.

—Ya veo. —Por suerte, Senku no pareció muy interesado y no hizo más preguntas.

Al llegar al lugar donde su vestido colgaba de una rama, Kohaku notó que había varios peces coloridos nadando por la orilla de las aguas cristalinas y sonrió con nostalgia al pensar en los días en los que pescaba allí con Jasper.

—Algún día tengo que traerte aquí y pescar algo para cocinar a las brasas, estos peces son deliciosos. —Le comentó con emoción mientras se acercaba a la orilla, dejando que su vestido se secara un poco más ya que todavía debía seguir húmedo por su mala costumbre de siempre meterse sin siquiera arremangarlo, ser regañada por Ruri y luego quitárselo.

—¿La princesa cocinando para mí? Qué gran honor. —Senku rio entre dientes, rascando su oído con el meñique.

—¡Ja, ya deberías saber que yo no soy muy delicada que se diga! —Le dio un leve codazo, pero aparentemente su definición de "leve" no estaba del todo correcto, porque envió a Senku de cara directo al río—. ¡Oh, lo siento! —se disculpó, pero no pudo evitar reírse al verlo levantarse escupiendo desesperadamente.

Sin embargo, cuando él intentó dar un paso, se resbaló por estar con sus zapatos en ese suelo lodoso y cayó más atrás, donde había algo de corriente que lo arrastró un poco.

—¡Oh-oh! —Corrió a buscarlo, sin importarle empaparse hasta la cintura.

Él se puso de pie solo, pero Kohaku estuvo rápidamente allí para que no volviera a perder el equilibrio, notando entonces su cabello caído y pegado al rostro, y su respiración agitada por haber aguantado la respiración.

Cuando sus ojos se encontraron con los suyos, él alzó una ceja al verla con el rostro completamente sonrojado y anhelante.

—T-te ves bastante guapo ahora... —susurró sin poder evitarlo.

Él gruñó por lo bajo.

—No estás ayudando a nuestra promesa de controlarnos, princesa —masculló con voz ronca, antes de quitarse el saco y la camisa, quedando desnudo de la cintura para arriba, cosa que la hizo jadear.

—¡¿Q-qué haces?!

—Quitarme la ropa mojada antes de enfermarme, puede que el día esté agradable, pero no es verano, y soy absurdamente susceptible a resfriarme. —Caminó a la orilla con cuidado y se despejó de las botas y el pantalón, quedando en paños menores también.

Kohaku intentó quitarle la vista de encima... pero no lo logró, y se quedó mirando descaradamente su piel expuesta, viendo que, para ser tan delgado, tenía algo de musculo, aunque no es que hubiera visto a muchos hombres sin camisa, solo a Jasper y Chrome cuando iban a nadar en verano, pero Senku le gustaba y la hizo sentir incómoda y nerviosa, pero aun así no pudo quitarle la vista de encima.

Lo notó verla de reojo y de repente le lanzó una sonrisa burlona mientras tomaba un puñado de su cabello para empujarlo fuera de su rostro y poder mirarla mejor con sus ojos escarlata refulgiendo con picardía.

—Princesa, sé que odias que te diga leona, pero ahora mismo pareces toda una depredadora lista para cazar a su presa. —Rio con voz baja y seductora, haciendo que los colores se le subieran al rostro una vez más.

—¡Si fuera a cazarte sería para cortarte la maldita lengua, escoria! —Le arrojó una gran oleada de agua.

Él rio con burla.

—Hay cosas más interesante que puede hacer con mi lengua, alteza.

—¡Agh, te mataré! —Corrió hacia él y lo empujó hacia el agua otra vez, odiándolo más mientras él más se reía.

En otro empujón, de repente él la tomó de la muñeca y la hizo caer al agua también, encima de él casi en la orilla, por lo que aún tirado en el agua apoyado sobre sus codos la mitad de su torso y su cabeza sobresalía, mostrándole su sonrisa arrogante que le daba ganas de borrar de un golpe... o un beso...

Apretó la mandíbula, intentando controlar ese impulso idiota que la recorría.

—Sabes, princesa... que tengamos que controlarnos para que no me maten frente a todo el reino no quiere decir que no puedas besarme... mientras nadie nos vea. —Sonrió con los ojos oscurecidos y ella lo miró boquiabierta, antes de lanzarse a besarlo con ganas.

El agua fría no sirvió de mucho para bajar la temperatura de sus cuerpos, pero Senku eventualmente recordó que no quería morir y decidió apartarla, riendo levemente.

—Me alegra habernos reconciliado, princesa, pero en serio deberíamos volver.

—S-sí, tienes razón... —Se pusieron de pie, pero vieron que ahora las ropas de él continuaban húmedas, lo que hizo que Senku chasqueara la lengua con molestia mientras las acomodaba mejor extendidas al sol en otra rama.

—Bueno, debería secarse rápido... por mientras, ¿qué tal practicar el baile?

—Ja, de acuerdo, aunque has mejorado mucho. —Sonrió alegremente mientras terminaba de colocarse su vestido.

La puso algo nerviosa tener que bailar mientras él estaba... con tanta piel expuesta, pero se dio una bofetada mental para controlarse y simplemente tomó su mano y su hombro intentando no pensar en su cuerpo cálido presionando contra la tela de su vestido.

Mientras bailaban, finalmente perdió la vergüenza luego de varios minutos y por fin Kohaku recostó la cabeza en su hombro, sintiendo inmensamente feliz y agradecida de nuevamente haber arreglado las cosas con él.

Era tan fácil hablar con él, hacer que la comprendiera incluso aunque había muchas cosas que no podía decirle y cosas que obviamente lo confundían, pero era tan comprensivo... ¿acaso era por lo mucho que deseaba la corona? Incluso así, a ella le daba igual, mientras pudiera ser su esposa.

Al principio había estado motivada solo por la felicidad de Chrome y Ruri, pero ahora ella también quería su propia felicidad, y sabía que solo con Senku podría ser feliz... ¿alguna vez conocería a un ser humano tan brillante y maravilloso como él? Sabía que no, y quería aprovechar esta oportunidad que le dio la vida para estar a su lado siempre...

Por eso no podía decirle la verdad, no iba a arriesgarse a perderlo, lo amaba demasiado...

Después de un rato practicando, finalmente la ropa de Senku se secó y decidieron volver al palacio por fin.

Llegaron a tiempo para almorzar juntos las delicias que los chefs preparaban para ellos, y luego por recomendación de los sirvientes fueron a pasear al jardín, donde ya habían algunos brotes de flores Sakura floreciendo en los árboles.

—Es bueno que trajeran estas cosas de Japón, son un buen espectáculo para los turistas, podré atraer más interés a Akari —comentó Senku, siempre con su mente en el futuro y el avance de la humanidad.

Kohaku rio suavemente, encantada con él.

—Realmente serás un gran rey... mi rey. —Sonrió sinceramente, su sonrisa volviéndose algo maliciosa al ver cierto tinte de rosa en su rostro—. ¡Ja! ¿Acaso te avergoncé? Pero qué sorpresa, eso debe ser todo un logro digno para los libros de historia.

—Muy graciosa, leona. —Rascó su oído con fastidio—. Si tuviera que anotar las veces que te he hecho avergonzarte a ti podría escribir diez libros.

—¡N-no exageres!

—No lo hago, soy sincero. —Sonrió descaradamente y ella le dio otro codazo "suave" que lo lanzó de cara a un arbusto—. ¡Ups, lo siento!

Lo ayudó a levantarse, los dos riendo.

Desconocido para Senku y Kohaku, sus risas habían atraído la mirada del actual general de Akari, Mozu, que sigilosamente los observó desde detrás de un árbol, notando como la pareja se tomaba de la mano para que ella lo ayudara a levantarse, notando como se quedaban viendo a los ojos y notando la inmediata consecuencia de eso: un profundo y apasionado beso que lo tuvo apretando los puños con rabia.

Ishigami Senku había usurpado su lugar como el futuro rey, pero creyó que quizás iba a terminar disgustando a la princesa con su actitud tan excéntrica y la unión se rompería, pero ahora ¿resulta que la princesa se enamoró de él?

Bien, Mozu ya estaba harto de esperar con los brazos cruzados, de todos modos. Era hora de tomar acción.

Continuará...

Holaaa :D

Gracias a mi querida Caro por comisonar este cap! nwn

Espero les haya gustado owo

Yo les advertí que se venía drama, no me hago responsable de ilusiones rotas más adelante(? uwu

Nos leemos pronto, mis queridos~ yo aquí me despido!~ ;D/

CELESTE kaomy fueraaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!