Jungkook había llegado justo para el tiempo de receso, se topó con Yugyeom en la entrada de lo que habría sido su tercera clase del día.

—H-hola— saludó el castaño, Yugyeom frunció su ceño.  —H-había salido al baño.

El peliazul lo miró de pies a cabeza.

—Está bien.

Yugyeom buscó su mano y la entrelazó con la suya, Jungkook quedó paralizado al principio, pero luego caminó junto al pelinegro para no obstruir el pasillo.

El castaño miró su mano con la de Yugyeom, algo como eso no había pasado en mucho tiempo. 

Inconscientemente, Jungkook miró el pecho de Yugyeom de reojo, su novio llevaba la otra mitad del collar que le había dado cuando empezaron a salir.

El castaño tragó saliva, Yugyeom se estaba comportando raro con él. Ni siquiera tomaba su mano con fuerza.

En cuanto llegaron a la cafetería, Yugyeom tomó una mesa en la esquina y ambos se sentaron ahí. El peliazul cruzó sus manos sobre la mesa mientras miraba todo a su alrededor. Jungkook carraspeó antes de hablar

—N-no te di tu abrazo de la mañana.— habló Jungkook, muy nervioso. —¿M-me extrañaste?

Yugyeom suspiró, luego asintió.

—Jungkook.

—D-dime.— las manos de Jungkook sudaron.

—Perdóname si soy una mierda contigo. No sé como puedes soportarme, pero gracias por estar conmigo a pesar de todo.— Yugyeom le sonrió, colocando una mano en su pierna.

Los ojos de Jungkook se aguaron.

—Sé que no te lo he dicho en mucho tiempo, tal vez ya lo sabes pero, te amo. Te aprecio mucho.

El corazón de Jungkook latió con fuerza, Yugyeom jamás había usado un tono tan suave y para nada grosero con él.

—Por cierto, feliz ocho meses. Cancelé a nuestros clientes de hoy para que pudiéramos salir a hacer algo. ¿te parece?

Jungkook no estaba entendiendo nada, se sentía muy confundido.

—No bromees Yugyeom...

—¡Hablo enserio! Mi hermoso Jungkook se merece lo mejor por ser un buen novio.— acarició su mejilla.

Jungkook todavía no le creía, sentía que veía al Yugyeom de hace ocho meses atrás. Con esa hermosa sonrisa hacia él y esa amabilidad que lo enamoró.

Ahora Jungkook se sentía terrible, se había dejado llevar por todas las cosas que estaba pasando con Yoongi. Había engañado a su novio.

Había buscado atención en otra parte en vez de luchar por su relación.

Jungkook mordió sus labios y se acercó con timidez a Yugyeom.

—G-gracias. Te amo.— dijo el castaño, recostándose sobre su hombro mientras pensaba en como le explicaría a Yoongi lo que estaba ocurriendo.

Ahora se sentía peor porque el pelinegro parecía amarlo de verdad y lo estaba ilusionando.

Jungkook estaba en aprietos.

Ambos comieron juntos, cosa que hizo sentirse raro a Jungkook ya que durante todos esos minutos, Yugyeom no paraba de acariciar el cabello en su nuca.

A Jungkook le irritó un poco aquello, pero no lo reprendió. Tenía que aprovechar del Yugyeom amable y cariñoso mientras pudiera.

Mientras caminaban a su próxima clase, Jungkook sintió la mano de su novio sudar. El castaño miró a Yugyeom con el ceño fruncido mientras se dirigían al casillero del peliazul.

—¿Estás bien? Te veo algo pálido.— habló Jungkook preocupado.

—Préstame tu celular.— dijo mientras sacaba sus libros.

Jungkook tragó saliva, nada en el respondía. Fingió no haber escuchado.

—¿Qué?

—Dame tu celular.— susurró Yugyeom un poco más fuerte.

Las manos de Jungkook temblaron con fuerza cuando se dirigieron al bolsillo de su mochila para sacarlo, varias lagrimas cayeron de su rostro. Ahora si estaba muerto.

Yugyeom lo tomó y lo tiró al suelo para luego pisarlo, llamando la atención de algunos que pasaban por ahí.

Jungkook frunció su ceño.

—¡Yugyeom!

—Te compro otro.— el peliazul tomó sus mejillas y besó sus labios, luego tomó su mano para caminar con él hasta su próxima clase.

Jungkook no dejaba de mirar hacia atrás. Queriendo saber que ocurría con Yugyeom. Estaba siendo muy cariñoso con él y le había roto el celular.

Nada de lo que hacia, tenia sentido para él.

—¿Yugyeommie, te sientes bien?— preguntó el castaño cuando llegaron a clases y tomaron asientos.

Yugyeom le asintió con una sonrisa.

—Te amo.

Jungkook le sonrió tímido y apartó su mirada. Le era inevitable pensar en ello, pero ahora el castaño no tenia idea de como hacer para comunicarse con Yoongi.

Verse en persona ahora era peligroso y para nada conveniente. Jungkook estaba recuperando su relación por suerte y no iba a desperdiciar esa oportunidad.

La clase de matemáticas había empezado con el profesor dándoles unas leves explicaciones para luego mandar a sus estudiantes a realizar practicas. Usualmente, Jungkook sería el primero en completar esa asignación hasta con tiempo de sobra, pero le era difícil concentrarse.

El ambiente se sentía pesado, como si algo fuera a ocurrir en cualquier momento. Yugyeom y el profesor de matemáticas no dejaban de mirarse y eso inquietaba aun más a Jungkook.

—Q-que haces— susurró Jungkook hacia Yugyeom cuando vio que este metió su mano en su mochila, sin sacarla.

De repente varios golpes bruscos a la puerta sonaron y varios agentes de la policía entraron con armas, asustando a toda la clase, incluyendo a Jungkook. Rápidamente todos se echaron al suelo.

Yugyeom sacó el arma de su mochila y apuntó hacia Yoongi cuando este apareció entre los policías.

Jungkook sollozó, agachando su cabeza. ¿por qué Yoongi tenia el mismo chaleco que usaba su madre en su trabajo?

—Baja la maldita pistola Yugyeom, solo te aumentas años en la cárcel.— habló el pelinegro.

El peliazul miró a Yoongi con rabia y soltó la pistola poco a poco, dejándola sobre su escritorio.

—Eso es. Yugyeom, quedas arrestado por prostitución hacia tu pareja sentimental...

Jungkook sollozó más fuerte, cubriendo sus labios con sus manos. Mirando a Yoongi con rabia mientras escuchaba a sus compañeros susurrar cosas a sus espaldas.

—Y señor Wong, queda arrestado por pedofilia. Llévenselos.— continuó Yoongi.

—¡No se pueden llevar a Yugyeom!— Jungkook alzó su voz mientras trataba de apartar a los policías que se llevaban a su novio  —¡Es inocente!

Yoongi solo se limitó a mirar a Jungkook, luego salió del aula.

El castaño quedó devastado, se estaban llevando su novio a la cárcel por su culpa, por haber confiado en Yoongi.

Quien ahora resultaba ser un agente, como su madre.

Entonces Jungkook se sintió peor todavía cuando cayó en cuenta de que todo lo que Yoongi había dicho y hecho, era  falso y solo quería aprovecharse de él para sacar información de Yugyeom.

Jamás lo amó, todo fue falso.

Jungkook no era especial. Solo era un tonto por no haberle hecho caso a su novio.

2/2